Los chicos salen a la calle y son recibidos por una lluvia de gritos histéricos y de flashes. Bill se intenta concentrar en firmar autógrafos a pesar del dolor de cabeza, pero la sola visión de las fans le ánima mucho y consigue estar a la altura.
Gustav no le quita la vista de encima y Bill le sonríe para hacerle saber que todo va bien. Algo a su derecha le llama la atención y se vuelve para ver que es, pillando a su hermano dando dos besos a una chica muy guapa que no puede evitar cogerle el cuello con las manos mientras él le retira un mechón de pelo.
En este momento Bill siente una arcada y pone mala cara. Gustav se da cuenta y cogiéndole del brazo se lo lleva al autobús.
-Será mejor que te subas a acostar, no deberías haberte quedado. Ya aviso yo a los demás.
Bill se dirige al piso de arriba del autobús donde se encuentran las camas y se echa en la suya sin descalzarse. En cuanto su cabeza toca la almohada nota como todo le empieza a dar vueltas. Cierra los ojos intentando no tratar de pensar en lo que le ha puesto así pero no puede evitarlo.
"¿Qué es lo que me pasa? ¿Acaso tengo celos de una chica, de que Tom le haya retirado el pelo como hace unos minutos me lo hacía a mí?".
Nota que alguien se ha sentado en su cama, y sin abrir los ojos sabe que es su hermano.
-¿Te encuentras mejor ahora que te has echado?-le pregunta preocupado.
Bill asiente con la cabeza, no abre los ojos porque teme que descubra que está mintiendo. Nota que se levanta y al rato una toalla mojada en agua fría es aplicada a su frente. También nota como le descalza y le tapa con una manta.
-Tú descansa ahora, intenta dormir. Si me necesitas piensa en mí, sabes que te oiré.
Y se inclina para darle un beso en la mejilla, dejándole en un mar de pensamientos agravado ahora por las sensaciones que el beso ha despertado.
Cierra los ojos con más fuerza concentrándose en dormir nada más, con una mano en el lugar en el que su hermano le ha besado.
-¿Se encuentra mejor?-le pregunta Gustav.
-Creo que sí, ahora va a dormir un poco. Será mejor que cenemos sin él, no creo que le apetezca nada ahora.
Los chicos se ponen a cenar comentando lo bien que ha ido el concierto. Cuando acaban cada uno decide relajarse a su manera. Gustav se pone al ordenador a contestar cartas de su familia, Georg coge un libro y Tom se pone a jugar a la play.
Cuando ya han pasado casi 2 horas Georg cierra el libro y decide irse a dormir.
-¿Le hechas un vistazo a Bill? iba a subir en un momento pero si ya lo haces tú te lo agradezco-le pide Tom sin dejar de jugar.
-OK-le contesta Georg bostezando.
Sube las escaleras frotándose los ojos y al llegar arriba se asoma a la cama de Bill. Está profundamente dormido. No puede evitar sonreír.
"Qué tranquilo se le ve durmiendo, y luego la guerra que da en el escenario. No me extraña que caiga enfermo del cansancio tan a menudo".
Se acuesta en la cama de enfrente que es la suya y enseguida se queda dormido.
Bill se despierta de repente con gran dificultad para respirar. Nota que es como si se estuviera ahogando.
"Necesito aire fresco"-piensa nerviosos.
Intenta levantarse, pero nota qua la cabeza se le va y se tiene que volver a acostar. Lo intenta otra vez pasado unos segundos y logra sentarse en la cama. Con gran esfuerzo comienza a calzarse y cuando lo logra esta demasiado agotado para levantarse sólo.
"¡Tom, ayúdame!"-piensa con fuerza.
En el piso de abajo Tom sigue jugando con la play cuando siente que Bill le llama. Tira el mando a un lado y sale corriendo.
-¿Qué te ha dado?-le pregunta Gustav cuando pasa por su lado, pero no recibe respuesta.
Al llegar arriba se encuentra a Bill sentado en la cama con la cabeza en las manos.
-¿Qué te pasa? ¿Te sientes peor?-le pregunta arrodillándose a su lado.
-¡Has venido! No pensé que me oyeras-dice aliviado.
-Sabes que siempre te oiré, aunque me encuentre al otro lado del mundo.¿Necesitas algo?
-Un poco de aire fresco. ¿Podemos parar un poco y salir?
-Claro, hablaré con el conductor.
Le ayuda a levantarse y pasa un brazo por su cintura para ayudarle a caminar, notando que su hermano deja caer todo su peso en él.
"Espero que no se desmaye".
Al llegar abajo le ayuda a sentarse al lado de Gustav y va a hablar con el conductor.
Bill recuesta la cabeza en la mesa y cierra los ojos. Cuando Tom vuelve se sienta enfrente de él.
-En 10 minutos paramos en una gasolinera. ¿Podrás aguantar sólo un poco más?-le pregunta preocupado.
Bill abre los ojos y se le queda mirando fijamente.
"Lo haré si tú me ayudas".
Tom le coge con fuerza una mano.
"Nota mi fuerza, eso te ayudará a sentirte mejor".
Cuando el autobús para Bill se levanta y va hacia la puerta dando tumbos, la abre y sale a la fría noche.
-Bill, espera. No has cogido la chaqueta.
Tom sale tras él llevando una chaqueta.
Pero Bill parece no oírle. Está concentrado en respirar, dentro parecía que se ahogaba y no le llegaba el aire.
Tom se encuentra a unos pasos tras él, por si se cae.
Todo ocurre muy deprisa. Bill está bien y al momento se dobla en dos por la arcada que golpea su estómago.
"¡Tom!"-es lo único que puede pensar antes de ponerse a vomitar.
Pero Tom le ha oído y al momento está a su lado, sujetándole con un brazo la cintura y con una mano la frente para que el pelo no le moleste. Nota como las arcadas sacuden el cuerpo de su hermano con violencia.
Cuando pasan unos minutos que parecen horas Bill deja de vomitar, ya no hay nada que echar de su estómago ya vacío.
Tom retrocede con él unos pasos todavía sin soltarle.
-¿Te sientes un poco mejor?-le pregunta apartando más el pelo de su sudada cara.
Bill asiente con la cabeza cerrando los ojos. El cuerpo le tiembla a causa del frío y ni puede hablar. Tom le hace apoyar la cabeza en su hombro y le acompaña al interior del autobús.
“No me dejes ahora, Tom. Te necesito tanto"
"Nunca te abandonaré. Aguanta que ya llegamos. Enseguida te pondrás bien".
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