Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sin él... por NightRuu

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

.

Quise poner una canción en el fic, Crucify my Love. Es verdaderamente triste, y al ser fanática de X Japan, siento que describe bastante bien la situación.

Anoche estaba escuchando esta canción, y las palabras y las imágenes comenzaron a surgir en mi mente.
Tomé papel y lápiz, y comencé a escribir...

Espero que les guste, y les toque el corazón, como a mí me sucedió...

Amo sus reviews, por favor déjenme alguno ;__;

 

 Caminaba lentamente.

 

Como siempre, el camino parecía no acabar.

Ruki no podía distinguir su final.

 

La lluvia caía sin compasión sobre él. Tenía frío, temblaba. Su cabello y su ropa, absolutamente empapados, acompañaban aquel ramo de rosas igual de mojado.

 

Otra vez el cielo estaba gris…

 

Caminaba.

Sentía que estaba llegando. Pero aún no veía el final.

 

Intentaba contenerlo, siempre, como cada noche. Pero no… el llanto, el dolor punzante en el pecho, volvían a hundirlo.

 

Las lágrimas, confundidas con las interminables gotas de lluvia, rozaban sus labios, los que apenas se entreabrían para dejar libre su lamento.

 

El sonido de cada gota impactar contra el suelo era más audible que su efímero canto.

 

-“Crucifica mi amor, si mi amor es ciego…”-

 

Continuaba el camino.

Sus piernas casi parecían ceder.

 

-“Crucifica mi amor, si eso me libera…”-

 

Divisó, a lo lejos, el final del sendero.

 

-“Nunca sabes, nunca confíes… en que el amor debería ver un color…”-

 

Se detuvo. Al fin, había llegado.

Casi sin fuerzas para mantenerse en pie, se arrodilló sobre el pasto mojado.

 

-“Crucifica mi amor, si esa debe ser la manera…”-

 

Sus manos, temblorosas, colocaron las rosas sobre el pequeño espacio delante suyo.

Se hallaba allí una vez más, con el corazón desgarrado, con el cuerpo inmóvil, y su alma… su alma se había ido junto con él…

 

Arrodillado como estaba, y con fuerzas apenas para dirigir la vista hacia delante, leyó, como cada vez, el epitafio.

 

“A quien vivirá por siempre en cada recuerdo y en cada canción…

 A quien iluminó nuestras vidas…

 A quien hoy sentimos aún aquí, con nosotros…

Hasta Siempre…”

 

Inclinó su torso hacia delante, abrazándose a sí mismo.

Lloraba, como siempre que lo recordaba, como desde aquella noche, lloraba desesperadamente… desgarradoramente.

¿Cómo podía caber tanta tristeza, tanto dolor, tanta agonía en un ser?

 

-Rei…ta…- Su voz, entrecortada, su lamento, era casi inaudible.

 

Con dificultad alzó su brazo, lo llevó hacia la lápida.

Con la punta de sus dedos, apenas, rozó su nombre.

Su brazo cedió.

 

Varias horas pasaron; su llanto desesperado, su angustia, su agonía, parecían haberse calmado sólo un poco. Mas aún su cuerpo temblaba.

 

Bajo un paraguas, distinguió una silueta bastante conocida por él a una corta distancia.

 

Le habló con tristeza.

-Ruki… el cementerio ya cerró hace más de una hora…- Uruha permaneció de pie donde estaba. Sabía perfectamente que Ruki lo afrontaba como podía, y él no podía hacer nada.
Después de todo, ellos tres habían estado juntos desde pequeños, y a pesar de ello, sabía también que el dolor por el que estaba pasando era, seguramente, mucho peor que el suyo. Ruki lo amaba.

 

No quería alejarse… no quería dejarlo solo… no quería quedarse solo…

Permaneció varios minutos sin ejercer movimiento alguno, como esperando que una poca fuerza viniese a él de forma sobrenatural.

 

Intentó levantarse.

Pero muy pronto sus piernas flaquearon, provocando que cayera al suelo.

 

Uruha se acercó y lo ayudó. Pasó el brazo de él por su cuello, poniéndolo de pie.

Podía sentir el cuerpo tembloroso del menor.

Sentía lo infernal que era estar vivo para su amigo.

Pero no podía hacer nada…

 

De pie, pero con ayuda, volvió su vista una vez más hacia aquella tumba.

La observó, decorada con aquellas rosas empapadas.

 

Dejó escapar unas pocas palabras, indetectables para Uruha, antes de comenzar a caminar hacia la salida del lugar.

Su mente repetía aquellas palabras, como un destino grabado en su existencia: -Hasta pronto…- .

 

Después de todo, regresaría.

Volvería a colocar un ramo de rosas sobre su tumba…

Volvería a recorrer el mismo sendero interminable, una y otra vez…

Volvería a llorar, a temblar, a agonizar…

 

Ese era su destino… el que le había tocado soportar…

Sin él…

 

 

 

 

Notas finales:

.

 

Muchas gracias por leer, de verdad. Subo estos fics por ustedes. Me dan cada vez más ánimos...

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).