Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

POR QUE, YA ES HORA por Kaede S

[Reviews - 143]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Los personajes no me pertenecen son propiedad de la serie Kyou Kara Maoh!

Muchas gracias por leer la historia, se los agradezcó mucho, aquí esta la actualización espero que les agrade, gracias por dejar review es muy agradable leerlos y contestarlos, los dejo para que lean.

Los rayos del sol hicieron que despertara, estaba sobre el pecho de su hermano, abrazándose mutuamente, recordó el acontecimiento de la noche anterior, se habían besado y no le había molestado, Konrad era tan tierno en ese momento, una pequeña caricia que fue incrementando a medida de que los minutos pasaban, no supo como ni cuando perdió la razón y se dejó llevar por esa boca, sus problemas habían desaparecido de su mente, sólo estaba consciente de la presión que ejercían sobre sus labios, cuando su lengua ingreso a su boca más que asustarse se preguntó cuando había permitido el paso, pero todo era tan placentero que lo dejo pasar, cuando sus pulmones le pidieron oxígeno se separo de Konrad, su respiración estaba agitada, podía sentir las mejillas sonrojadas y un cosquilleo en sus labios, su hermano aún estaba encima, le miraba dulce y expectantemente. 

-¿Te gusto? –no podía contestarle, o más bien no quería, no estaba seguro de que eso estuviera bien, y maldición claro que le había gustado. 

-No –Mentía, Konrad sabía que mentía, lo importante es que sabía que a su pequeño hermano no le era indiferente. 

-Vamos a dormir, ya es tarde.

 Y así lo habían hecho, en la misma posición antes del beso él encima del pecho de Konrad, abrazo un poco más fuerte a su hermano, le debía tanto, cerro los ojos con la intención de continuar su sueño cuando escucho la puerta abrirse, pero no se levanto, al contrario, cerro los ojos y se pego más a ese cuerpo. 

-KONRAD, KONRAD, DEPRISA LEVANTATE, SU MAJESTAD QUIERE QUE BUSQIEMOS AL PEQUEÑO LORD MOCOSO Y… 

Gunter se quedó sin habla al observar la escena de la cama, era algo tan irreal y hermoso que no tuvo palabras para incordiar semejante escena, con sumo cuidado salio de la habitación, la sorpresa invadiendo sus sentidos, su pobre Maoh sufriendo por él, y ese mocoso en brazos de otro hombre, desde que ese niño llego al palacio, sintió que le arrebato algo importante, sus hermanos querían a ese mocoso demasiado, a pesar de cómo trataba a Konrad este siempre lo protegían, incluso más que Gwendal, y eso no estaba bien, por que a medida que pasaba el tiempo el chico se había vuelto insoportable, una cosa más que agradecerle al rey había sido el cambio que había logrado en ese mocoso, ahora ya no era así, su egoísmo desapareció casi por completo, su impulsividad paso a segundo plano, su imprudencia dio el paso que la separaba del valor, había cambiado demasiado, incluso esa arrogancia y ese mal carácter cambiaron para bien de todos, maldición cualquiera caía embelesado por el chico, incluido él, reconocía todos los pros del muchacho pero ese pequeño rencor que le tenía por dejarlo en segundo plano de todos sus conocidos seguía haciendo mella, pero esperaba que saliera bien de este, por que era un paso muy importante para la superación personal. 

Con paso lento llego a donde el Maoh le esperaba, ansioso de empezar la búsqueda por su prometido.

-Su majestad, ya encontré al pequeño Lord mocoso. 

-Te he dicho que no le digas así 

-Es la costumbre, ofrezco una disculpa por el comentario. 

-Está bien, ¿dónde está? 

-Parece que paso la noche en el cuarto de uno de sus hermanos –Yuuri palideció al escucharlo. 

-¿De quién? 

-Pues de Konrad, ¿de quién sino Shibuya?, que lástima a mí no me hubiera molestado compartir cama con él, que pena que no me haya pedido asilo. 

-Murata, no estoy de humor para bromas. 

-Pues deberías, no imagino al idiota que te dijo que era una estupenda estrategia de ‘que nadie diga nada de su habitación para que venga a mí’, si esa no es una broma entonces esto sí, lo único que se logro fue enviarlo a los brazos de su hermano. 

-MURATA, dime que ‘enviarlo a sus brazos’ es de modo literal, por favor. 

-Claro que sí, estoy seguro de que es por que la cama es muy estrecha para dos personas, así que eso explica el por que estaba encima del pecho de su hermano, no es nada importante, majestad –pudo percibir la mirada de diversión en los ojos de Murata, al voltear a ver a Yuuri comprendió que se le había ido la lengua. 

-En el… fue una pésima idea ¿verdad? 

-Eso parece –contesto el Gran Sabio -¿Quién fue el autor de semejante estupidez? 

-Yo –respondió el rey –se supone que todo sería habría salido bien, que el me daría otra oportunidad, según lo había planeado todo, Wolfram llegaría al mediodía, se quedaría asombrado al ver la decoración del salón, sonreiría al vernos a todos, se dirigiría a mi para preguntar la razón de mi llamado, lo sostendría tiernamente por su cintura, nos miraríamos profundamente y al fin podría empezar el beso, sé que quizá no fuera tan sencillos de lograr, por que necesitaba una explicación pero no esperaba que saliera de está manera y todo por tu culpa y la de Konrad. 

-¿Qué tenemos que ver nosotros? 

-Todo iba bien, Wolfram entraba tan exquisitamente, con ese andar elegante, pero sus ojos vagaron, creí, por la emoción de ver de nuevo a su familia, pero se detuvo unos segundos más en el rostro de Konrad y el tuyo, pero al ver la mirada que ustedes le enviaban algo dentro exploto, lo único que quería era que me viera a mí, sólo a mí. Ahora sé que estuvo mal, y luego cuando le quiero explicar la situación aparece Shinou diciendo cosas estúpidas, metiéndole ideas en la cabeza, y para colmo decirle que tengo sueños… tú sabes, y si no imagínatelo, no creo que te tardes demasiado, como decía, diciéndole que tiene opciones y lo que es peor es verdad, y mi confianza desapareció y al percatarme de ello, no sé, me desesperé, me desesperé mucho, demasiado, que terminé haciendo eso –exhalo –soy un idiota. 

-Basta de charla y explicaciones absurdas, ¿qué vas a hacer? –Shinou apareció frente a él -¿te vas a quedar como estúpido hablando de cosas sin sentido o vas a hacer algo para recuperarlo? Momento, tienes un plan para recuperarlo ¿verdad? 

-Wolfram no es un artefacto que pierdes o ganas, que ahora no piensa mucho en mí es diferente, pero ya verás lograré que piense en mí como solía hacerlo.

-Antes no sabías lo que Von Bielefeld pensaba, y mira ahora eres un experto. 

-Deja las burlas, si ya acabaste, ayúdenme a pensar en algo para recuperarlo. 

-Bien, en primer lugar no armes un escándalo por esto, controla los celos, dales unas tres horas y sal a buscarlo, discúlpate por tu actuación de ayer, dile que no fue tu intensión, toda le perorata que nos dijiste pero resumida, y por no comunicarle lo de su habitación, cuéntale tu plan no se enojará se molestara pero no se enojará, quizá hasta lo encuentre cómico, no te le acerques ni lo beses por la fuerza, invítale a algún sitio lejos del palacio, deben estar solos tú y él, nadie más, diviértanse, platiquen, ten calma, mucha calma, y si llega, sólo si llega la oportunidad róbale un casto beso. 

-Que excelente plan, gracias Shinou, ahora debo investigar en donde se lleva acabo un festival o donde hay un lugar bonito para pasar el rato, con su permiso –el Maoh salió del salón junto con Gunter, dejando sólo al Gran Sabio y al Maoh original 

-Ese plan me suena. 

-Claro, es lo que hizo Konrad cuando visitó por primera vez a Wolfram. 

-¡Ah! Que poca consideración. 

-Cállate que fue más o menos lo que tú hiciste. 

-Pero lo mío si fue planeado. 

-No recuerdo haber planeado los besos que le has dado. 

-¿Celoso? 

-Muérete, otra vez –Shinou desapareció, dejándolo completamente sólo. 

-Tenías razón, esto va a ser divertido –el Gran Sabio también salió de la habitación, Anissinia salía de su escondite en ese momento. 

-Deberían de revisar las habitaciones antes de soltar cosas importantes, hombres.  

 

 

Después de semejante grito Konrad se despertó de manera lenta al sentir el calor de Wolfram, sólo pudo ver un destello morado antes de que la puerta se cerrara por completo, segundos después Wolfram se levantaba de su pecho, así que para evitar su huída presiono más  fuerte su cintura. 

-No pensaba irme –Al sentir la presión volteo a verlo con esos preciosos ojos. 

-Lo siento, la presión. 

-¿Qué presión? 

-No olvídalo.  

-Está bien. Bueno ya que desperté vamos a prepararnos para el desayuno. 

-Me gustaría más quedarnos así. 

-No, no, hay que presentarnos al desayuno, ¿qué pensarán de que no llegue?, estoy aquí en representación a las tierras Bielefeld. 

-Lo sé. 

-Entonces para arriba. 

Se levanto despacio, las manos de su hermano no se movían de su cintura, pero tampoco lo tenían prisionero, si se movía rápido iban a acabar en otro lugar, pasado el peligro le sonrío y se fue al baño. 

Cuando termino de cambiarse, salio, no le agradaba la idea de usar el mismo traje pero dada la situación no habría más remedio que hacerlo, un silbido lo saco de sus pensamientos. Konrad lo contemplaba desde la cama. 

-Realmente te ves hermoso con ese traje, tu tío sabe como vestirte y te ves más hermoso cuando te sonrojas. 

-Ya, entra al baño, no podemos llegar tarde, ¿qué pensaran de nosotros? 

-Voy, voy, no te molestes –Konrad se levanto, se acerco a él y le dio un pequeño beso, después se siguió al baño. 

Una sonrisa se formo en sus labios, parecían esposos. 

-…. … … 

Maldita sea, ¿qué pensamientos eran esos?, maldición, ¿eso parecían?, ¿qué pensaría Yuuri cuando los viera llegar juntos?, ¿cómo actuaría?, estaba molesto con Yuuri pero eso era demasiado, la única manera sería pedirle a Konrad que llegará después de él, momento, él era libre de llegar con quisiera su hermano, su madre o hasta con el Gran Sabio, además si Gunter le había dicho a Yuuri lo de la mañana ya no había razón para ocultarlo, NO, eso no estaba bien, él no era así, primero lo primero, llegaría al gran comedor antes que el rey, dependiendo de su reacción, esperaba saber responder. Konrad salió del baño en ese momento sin camisa, se sonrojo, no estaba acostumbrado a ver a su hermano así, empezó a entretenerse con las cosas en el cuarto, sonrió al ver una de sus espadas de madera, así que aquí era donde estaba, cuando tenía quince años quería guardar todas las espadas con las que había jugado, pues ya había ganado el derecho de usar una de verdad, pero por más que busco no la encontró, ahora sabía porque. 

-Ya podemos irnos, no queremos que piensen cosas que no son. 

-Así es. Vámonos. 

Se acercó a la puerta dispuesto a salir, cuando Konrad lo sujeto por la cintura le dio la vuelta y le beso, no como anoche, solo había sido un beso casto. 

-Andando. Ya es tarde. 

Konrad salió delante de él, no tenía tiempo para eso, necesitaba llegar antes que Yuuri, soltó el aire que hasta ahora se daba cuenta estaba reprimiendo y siguió a su hermano. Tenía que conseguir habitación ya.

Notas finales:

Espero que les agrade, es un poco pronto la actualización, pero no voy a poder conectarme en la noche así que las opciones eran ahora o mañana, nos vemos después.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).