Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Underneath my SKIN por Camui Alexa

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Underneath my SKIN.

 

Escuchó los tres golpes en la puerta, tal como lo esperaba.

– ¡Está abierto! – exclamó, sin dignarse a levantarse del sillón doble tapizado en piel sobre el que estaba tirado, su cabeza descansando en uno de los brazos del sillón y sus rodillas sobre el otro.

Sugizo hizo una entrada enérgica que dejaba ver todo lo que era, así como su exaltado estado de ánimo. Clavó sus ojos en Miyavi, quien se dedicó a devolverle la mirada y esbozar una de esas sonrisas suyas que le hacían lucir como un niño perverso demasiado crecido.

Tras comprobar que el ex guitarrista de Luna Sea no diría nada, por fin habló:

– ¿Por qué no vienes aquí? – se mordió el labio con cierta comicidad, pero la mano que reptaba hacia arriba por su muslo dejaba bien claro que no estaba bromeando.

– Eso quisieras – su tono era mordaz, pero se giró para asegurar la puerta de la suite.

– ¿No es lo que quieres tú también? – su mano subió por su cadera hasta la pretina de sus pantalones, donde sus dedos deshicieron la hebilla de su cinturón y el primer botón de la bragueta. Su sonrisa aún era una sensual burla.

– Lo que quiero es hablar contigo. ¿Qué carajos te pasa?

Miyavi sabía lo furioso que estaba su compañero, pero se limitó a reír, revolverse un poco y tomar otra pose en el sillón, tan burlona como sugerente.

– No sé de qué hablas.

– De lo que pasó hace un rato – señaló hacia la puerta.

– No es para tanto.

– ¡Justo empiezo a llevarme bien con Gackt después de años de una hostilidad bastante abierta y casi provocas que me pelee con él!

– Tampoco era para que se pusiera así.

– ¡Tiraste su preciada guitarra eléctrica desde arriba del templete! Esta ha sido la última vez que te defiendo, ¿sabes? Si la máquina de la Venus se ha estropeado, Gackt querrá matarte y juro que no voy a impedírselo.

El joven se encogió de hombros e incorporándose en el sillón, tomó un caramelo de fresa de la mesita de centro.

– ¿Recuerdas lo que dijo Yoshiki? Provoca a Gackt y conocerás el infierno…

– O el cielo, dependiendo del sentido de la provocación – agregó con malicia mientras sus dientes deshacían ruidosamente el caramelo en un sinnúmero de cristales color rubí.

– Haz lo que quieras. Pero si lo que Yoshiki dijo es cierto, ni tus dos metros de estatura te mantendrán con vida.

– No fue tan grave. ¿Es que nadie tiene sentido del humor?

– No le encuentro lo gracioso. Al tipo no le gusta que se metan con sus cosas.

– ¡Qué curioso! No se quejó cuando lo manoseé en el ensayo – rió –. Por cierto, Sugi chan, deberías hacerlo alguna vez. ¡Gakuto senpai sí que se mantiene en forma!

– ¿Es que eres idiota, o qué? ¡Y pensar que Yoshiki dijo que eras un profesional! ¿Qué estaba pensando cuando te invitó a formar parte del grupo?

– Tal vez lo mismo que tú cuando te metiste en mi cama – declaró con la misma sonrisa –. ¿Qué estabas pensando tú cuando te acostaste conmigo, Sugi chan?

– ¡Que sería divertido! Pero empiezas a ser exasperante. Para empezar, eres demasiado obvio pegándoteme todo el tiempo. No íbamos a dejar que todo el equipo se diera cuenta, ¿lo recuerdas?

– Ah, es cierto. Lo había olvidado – y desviando de él su mirada por primera vez, enterró su meñique en su nariz.

Sugizo apretó los puños.

– Creo que lo dejaremos – dijo en el mismo tono golpeado que había usado todo el rato –. Eres bueno en la cama, pero prefiero no tener nada qué ver contigo cuando destruyas el estudio, Gackt te golpee, Yoshiki te grite y el resto del equipo no te soporte más.

– ¿Quién te va a calentar la cama ahora?

– Me las arreglaré. Conseguiré otro juguete. Uno que no cause tantos problemas como tú.

– ¿De verdad? ¿Y quién será? ¿Yoshiki? Tendrás que llamar a su secretaria y apartar una cita en su agenda cada vez que quieras tirártelo. ¿O será Gackt? Tal vez te deje ayudarle mientras tiene sexo telefónico con el bajista de L'Arc~en~Ciel. ¿O acaso no escuchaste cuando le pedía a Yoshiki que lo mantuviera en secreto? Creo que Gackt y Yoshiki están sordos, porque sus gritos se oían por todo el corredor a pesar de que tenían cerrada la puerta de la oficina. ¿O tal vez será alguien más del staff? Eso suponiendo que encuentres a alguien que hable suficiente japonés o entienda tu inglés.

Sugizo soltó una risa sarcástica.

– No vas a dejar de buscarme – aseguró el joven guitarrista.

– ¿Eso crees?

– Lo sé – dijo poniéndose en pie y extendiendo su metro noventa y cuatro frente a Sugizo, esbozando una sonrisa torcida –. Y sé que te gusta jugar con cosas grandes, senpai.

– Eres demasiado inmaduro…

– Y también soy irresistiblemente adorable. Miyavi da kara [UF1] – remató con un gesto entre sensual y juguetón.

– ¿Es que no puedes tomarte nada en serio?

– Ah, sí que puedo.

– ¿Entonces por qué no dejas de comportarte como si tuvieras el cerebro de un niño de tres años con retraso mental?

– Creía que alguien como tú debía saberlo – dijo mientras la sonrisa en su rostro perdía la alegría y sus ojos se encendían con algo parecido a la furia –. Creía que sabrías cómo es… saber que nadie te toma en cuenta realmente, cómo las personas en el trabajo sólo quieren que hagas tu parte, los amigos sólo quieren presumir que tienen algo que ver con tu nombre, y para el resto de las personas sólo eres una fantasía sexual o dedos sobre las cuerdas de una guitarra. En realidad… a nadie le importas en realidad… no cuando no estás tocando o posando – hizo una larga pausa –. Pensé que sabrías que todo eso se hace un poco más soportable cuando todos alrededor están sonriendo, cuando tú mismo te ríes del mundo que ya ni siquiera se molesta en reírse de ti.

Sugizo lo sabía. Recordaba bien lo que era ser considerado un guitarrista y un payaso y nada más; sobre todo ahora, que la sonrisa del joven músico frente a él se había tornado una mueca agria, cuyo dolor era acentuado por el torcido aro negro que le atravesaba el labio. Extendió una mano para tocar su mejilla, y Miyavi cerró los ojos. Sugizo agradeció esto, pues sentía que, de no haberlo hecho, el joven pronto derramaría la primera lágrima, y no creía poder soportar eso.

– Mañana – su voz sonó grave, serena y lejana en sus oídos, como si no le perteneciera –, vas a disculparte con Gackt por tirar su guitarra, vas a demostrarles a todos por qué Yoshiki te quiere en la banda aunque seas un crío, vas a seguir riendo para los demás, vas a seguir haciendo reír a todos y…

– ¿Y? – animó. En su voz se adivinaba el nudo que apretaba su garganta.

– Y me contarás lo que piensas y lo que sientes… sin tener que sonreír para mí.

– ¿Sólo mañana?

– Sí. Porque ahora, sólo quiero hacerte el amor.

 

~Owari~


 [UF1]Frase de doble sentido: “Porque soy Miyavi” o “porque soy elegante”.

Notas finales: Con cariño para Ogawa Saya, Jinsei y Aiko chan.

Taipei, Septiembre de 2008

 

Salut!

Este es mi primer fic terminado en mi nuevo hogar en Taipei City, pero espero que no sea el último, y que mis musas decidan regresar de sus vacaciones y me dejen avanzar con las historias que tengo empezadas.

 

Dulces lunas y hasta siempre!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).