Entraron al centro comercial donde la gente rebosaba sonrisas y miraba distraidamente los aparadores, sus deseos creciendo por obtener mas de lo que podian cargar. Aoi lo seguia de cercas, mirandolo de reojo y resgistrandola direccion en la cual se dirigian ,queriendo adivinar la tienda a la cual entrarian, pero Uruha se detuvo al pie de unas escaleras automaticas, girandose para darle la cara. “Ire solo. Te veo aquí.”
“No, ire contigo.”
“No ire solo.” Uruha repitio firmemente y cortante al subir las escaleras dejando Aoi mirando detrás de su espalda, molesto. Penso en seguirle pero si no queria empeorar las cosas seria mejor andarse por ahí y esperar por el.
La tienda tenia la misma fachada. No parecia haber cambiado mucho. Aunque los rostros que miro caminando por la tienda eran completamente extranos , seria la unica notable diferencia. El lugar lo ahogo con la horrible nostalgia de estar reviviendo un dejavu.
“Te gustaria probartelo?”
“Te gustaria probartelo?”
Uruha voltio de inmediato al escuchar una fusion de dos voces; una extrana y otra familiar. Pero solo encontro un rostro nuevo, muy joven , extendiendo una camiseta frente a el.
El pelirrojo sacudio su cabeza y se atrevio a preguntarle. “Mikaru… aun trabaja aquí?”
“Mikaru?” El muchacho de hebras claras repitio, pensativo.”No..solo Hitsugi, Kyo” y apunto a los demas rostros igual de jóvenes que andaban por ahí atendiendo a clientes animosamente. “Shou, Nao y Hiroto.”
Uruha regreso su vista al joven delgado con ojos de gato. “Hitsugi donde esta?”
“Salio. Hay algo en el cual te pueda ayudar yo?” Lo miro con sus ojos pardos.
Igual y podria buscar a Kyo aunque conociendo su carácter no sabria como pudiera reaccionar a su desaparición por un ano entero. Y mas cuando se trataba del mas allegado a Mikaru.“Kyo?”
“Se encuentra en el almacen., puedo saber quien lo busca?”
“Un viejo… amigo; Uruha.”
El muchacho asintio y se marcho en direccion de la parte trasera de la tienda. Uruha tomo los momentos de espera para observar alrededor de la tienda. Una parte de el anoro regresar el tiempo y revivir momentos que el mismo disfruto a lado de Hitsugi. Kyo. y Mikaru.
Mikaru…en su propia confusion no sabia que pensar sobre lo reciente. Tal vez pudiera estar metiendose a su casa al enterarse de su regreso…pero sus prontas desapariciones…no…realmente no sabia…o tal vez no queria entenderlo…Los nervios le invadieron , comenzando a morderse el labio. Queria verlo..queria asegurarse que estaba bien…que habia seguido con su vida como el lo habia hecho. Aunque culpablemente. Le diria la verdad ahora?
El joven salio y le senalo que viniera a la parte trasera. Uruha camino hacia atrás mirando nerviosamente por la tienda. “Kyo me dejo saber que pasaras.”
“Gracias.” Le dijo al adentrarse al almacen algo chico ke guardaba toda la ropa de la tienda, accesorios, manikis, y un espejo donde pudo apreciarse por unos segundos antes de que por detrás de el apareciera Kyo ..para nada contento al verlo. Fueron segundos donde pudo apreciar los cambios de Kyo , ahora güero y con el cabello mas corto, ligeramente despeinado pero se enfoco mas en su rostro donde la rigidez de ello y sus ojos que parecian penetrarlo con odio lo puso nevioso.
“Se que…” Uruha dijo dudando en sus palabras. “…es bastante tiempo”
Kyo caminaba hacia el. Sin mostrar cambios en sus rostro.
“Vengo a preguntar algo sobre… Mikaru-”
Un sorpresivo golpe vino sobre su mejilla y labio, volteando su cara, probando la sangre que se desparramaba dentro de su boca. Antes de que pudiera reaccionar bien a ello, un par de manos lo agarraban de su sudadera , cerca de sus hombros, acercandolo al rostro enfurecido del güero quien apretaba los dientes al hablar.
“No sabes cuantas ganas tenia de verte hijo de perra” remarco cada palabra terminando con un siseo por sus dientes. “Te debi haber partido la madre antes de que desaparecieras maldito cobarde de mierda!” Lo volvio a golpear y aunque Uruha intento soltarse a las fuerzas, Kyo se prensaba de el con mas fuerza.
“Puto Cinico!” El pelirrojo no entendia porke tanta rabia hacia el. Podria justificar cierto enojo, y talvez un golpe debido al rompimiento de Mikaru y el y sobre su falta de presencia por el largo tiempo sin mas aviso pero la manera como lo agarraba, lo insultaba, las intenciones de seguirle maltratando, no lo entendia bien. Un golpe mas a su rostro provoco que cayera al suelo. Sin un segundo de poder reaccionar, Kyo lo agarro por su cabello haciendo que levantara a la fuerza, frunciendo al dolor de ello, y fue arrojado contra una pared donde su frente pego con, inmediatamente nublando su vista. Alcanso a ver puntos negros y un puno aproximandose de nuevo a su rostro donde alzo el brazo para defenderse . Kyo se aprovecho de su abdomen expuesto y dirigio su puno con mas fuerza ahí, sofocando al pelirrojo al doblarse y volver a caer al suelo, tosiendo, sus labios haciendo muecas de dolor , intentando agarrar aire para recobrarse del golpe pero Kyo solo lo empeoro, pateandolo por las costillas sin piedad. “
Kyo!” Uruha pudo gritarle apretando sus ojos con fuerza, frunciendo el rostro al agudo dolor que lo sofocaba.
“Eres un puto imbecil de dos caras que no merece su puta existencia! Deberia cortarte para que sientas el dolor que sintio el, hijo de puta!” Uruha escucho un clic y levanto su vista apenas para ver el objeto filoso que Kyo arrimaba a su cara al ponerse en cuclillas a un lado de el.
“No…no entiendo…” Uruha apenas podia hablar al continuar sin aire. “ke …te pasa??”
“Callate!”Kyo lo agarro por el cuello y lo estrello contra la pared. “Como puedes decir eso después de todo lo que ocasionaste?! Maldito cinico de mierda!” Uruha respiraba por sus labios debido a la sangre que llenaba su nariz y ese temor al ver a Kyo a los ojos, podia leer de ellos algo mas. Se llenaban de agua esos posos negros que lo miraban con odio. “No mereces tu puta existencia maldito imbecil!” Lo sacudio violentamente y Uruha se agarro de sus manos para intentar soltarse de el pero se detuvo en seco cuando escucho lo siguiente, su misma vida pudo haber detenido su curso en ese momento. “Por ti el se mato!!”
Ni los golpes a seguir que ya ardian en su rostro pudo hacerlo reaccionar de aquello.
“Kyo! basta!” grito alguien detrás del güero. Pero para Kyo parecia no bastarle ver el rostro sangrado de Uruha quien intentaba enfocar su vista en el, y acerco la navaja a su cuello, la filosa orilla apretaba contra su piel. “Deberia degollarte y dejarte sangrar hasta ke mueras por ello” Las lagrimas comensaban a deslisar por el rostro de Kyo, sus ojos encegandose mas y mas en su rabia ,angustia….odio.
“Kyo basta!” volvia a gritarle esa voz de kien al fin pudo ver Uruha le pertenecia a Hitsugi quien se detuvo pasos de ellos al notar la amenaza de Kyo sobre el. “Kyo! Detente! Ke haces?!”
“De nada sirve intentar detenerme Hitsugi. Le jure a Mikaru que mataria a este maldito hijo de perra el dia que lo volviera a ver.” Siseo entre dientes, inclinando un poco el objeto para que la punta de la navaja pudiera perforarle un poco. Uruha fruncio a esto, cerrando sus ojos brevemente, casi al borde de la ansiedad.
“Kyo! No cometas una estupidez! Calmate, hay otras maneras de arreglar las cosas-“
“Ke kosas?!”Se podia escuchar el crujir de dientes de Kyo al apretar su kijada , acercando mas su rostro a Uruha kien lo miraba fijamente de vuelta.“si el ya esta muerto! Nada lo traera de vuelta!!”
‘’Por ti el se mato!’’
“Tienes… que estar… mintiendo…” Uruha podia decirse estar en estado de shock cuando no comprendes bien tu realidad, no la kieres comprender, cuando sabes que tal vez tuviste culpa en ello y te niegas aceptarlo tratando de justificarte, tratando de despertar de un mal sueno..si, esto tenia ke ser un mal sueno. El miedo ke sentia era hacia el dolor emocional donde el fisico no importaba , y perdia la nocion del tiempo al recobrar vivas imágenes del ultimo dia ke vio ese rostro de kien buscaba…
“No te iras de aquí hasta que las cosas se resuelvan entre los dos!” Mikaru le gritaba al cerrar de nuevo su maleta para que no continuara empacando.
“Mikaru entiende, tu y yo ya no podemos estar juntos! Ya no siento lo mismo por ti!” Le decia de vuelta Uruha irritado, volviendo abrir la maleta para continuar empacando.
“No te dejare irte con el! Porque ese es tu plan largarte y encontrarte con el en kanagawa!”
“De que hablas??” Uruha evadio su mirada al ir por lo que faltaba de sus cosas a empacar.
“Te perdono tu infidelidad, solo kedate conmigo!”
“Dejate de estupideces, no hay alguien mas.” Uruha hiba y venia con mas cosas para echar en su maleta.
“Entonces como justificas que me hayas dejado de kerer de un dia para otro??”Mikaru le reprochaba con u voz a casi kebrar. “ Ami no me haces estupido Uruha yo se ke hay alguien mas!”
“Ke no lo hay!” Uruha avento lo ultimo a su maleta girandose para enfrentarse a Mikaru. “ Solo acepta ke las cosas entre tu y yo ya no son iguales! Has tu vida con otra persona!”
“Lo dices tan facil…cuando ya te has kedado con la mayor parte de mi ser…” Mikaru apretaba los labios, sus lagrimas deslisaban por su rostro ruborizado. “No me hagas esto…no puedo estar sin ti…entiendelo!”
Uruha desesperaba al escucharlo insistir tanto, al escucharlo llorar, el escucharlo rogar. Mentirle se volvia tan doloroso.
Mikaru lo siguió con su mirada y al verlo tratar de ignorarle al casi terminar de empacar se acerco a la cama y agarro la pesada maleta y la avento al piso regando todo su contenido por ello.
“Mikaru! Ke chingados haces?!”
“Evitando ke te vayas y razones!”
“Basta ya! Basta!”
“No!” El rostro de Mikaru habia cambiado y tornaba rojo del coraje que intentaba reprimir. “Tu no te vas! Mirame a los ojos y jurame que este viaje es de trabajo!”
Le dijo al agarrarlo de la camisa y acercarselo para ke pudiera mirarlo directamente.
Uruha se kito las manos de encima y se fue al suelo al kerer rejuntar todo de nuevo. “No tengo porke jurarte nada! Si no me crees es tu problema!”
Mikaru se agacho para agarrarlo de nuevo de la camisa y kerer levantarlo pero Uruha se sacudio de el. “Dejame!”
Mikaru volvo a intentarlo esta vez mas brusco logrando ponerlo de pie a la fuerza. “Mirame cuando te digo!” le grito entre dientes sacudiendolo “Porke tienes ke ser tan cobarde y no enfrentarme sobre ello eh?! Yo fui un mujeriego! se cuando alguien engana a otra persona puedo olermelas a una milla! Porke me lo sigues negando?!”
Uruha no respondio solo lo miraba irritado. “Que hice mal para perderte de esta manera Uruha??” Trato de resistir sus demas lagrimas. “Ke hice mal?!”
Uruha se trago su propio nudo en la garganta y se postro frio para poder terminar con esto antes de ke cayera a sus pies y se arrepintiera. “Simplemente ya no es lo mismo.Ya no siento nada por ti, asi ke dejame ir.” Se safo de su agarre y bajo a terminar de rejuntar todo metiendolo de regreso a la maleta.
“No te creo…tu me amas.”
Uruha cerro la maleta y busco por su cuarto por alguna cosa ke pudiera olvidar, evitando a toda costa su mirada.
“Escuchame! Tu me amas!” Mikaru lo agarro del brazo. “Kedate!”
“Ya Mikaru! Ya!” uruha volvia a soltarse caminando hacia la puerta. Pero Mikaru se la blokeo.
“No! Entiende ke si te vas…yo no podria seguir adelante…”
“Estaras bien sin mi.”
“No, ni tu estaras bien sin mi!”
“Dejame ir Mikaru!” La voz de Uruha comenzaba a kebrar.
“Pasado manana cumplimos un ano…no hagas esto ahora.” Le dijo Mikaru bajando el tono de su voz.
Uruha trago saliva para no ahogarse en su propia desesperación.
“Tengo todo un dia planeado para nosotros dos. Hiba a ser sorpresa lo de la nieve. Y en la noche iriamos a comer a ese resturant donde todo comenzo. Recuerdas?” Mikaru lo agarro del rostro. “Recuerdas como eramos al principio? Pareciamos no tener otra cosa ke hacer mas ke kerernos, apendiendo a vivir con la respiración del otro.” Mikaru cubrio los labios de Uruha con los suyos, besandolo suavemente yUruha pudo sentir lagrimas tocar su rostro deslizando como si fuera el ke las llorara. Uruha dejo caer la maleta y le respondio no solo el beso , si no las caricias ke surgieron enseguida. Mikaru lo besaba , lo acariciaba como queriendo conquistarlo de regreso al ser tan suave y delicado con el , sus manos rogando porke esa piel bajo ellas no dejara de ser, sus labios pidiendole a su corazon ke no dejara de amarlo. Se lo fue llevando a la recamara donde terminarian sus almas desnudas y desprotegidas vulnerables a la fria luz de la proxima manana….
En los brazos de Morfeo dejo a Mikaru al levantarse de la cama , vestirse con el menos ruido posible, agarrando su maleta no sin antes voltear a ver a la persona ke dejaba a tras, por un momento se vio regresando a su lado para recostarse en sus brazos y continuar durmiendo y sonar lo ke vivian ellos dos. Pero desvio la mirada tomo aire y marcho fuera de ahí antes de ke se arrepintiera.
Las veces ke lo vio en su departamento, los mensajes, todo habia pensado que Mikaru se habia dado cuenta de su regreso. Pero las desapariciones, las raras sensaciones ke sentia al estar cerca de el, era a lo ke no keria entenderle el porke.
“Por ti el se mato!”
En verdad estaba… muerto??
Por mi culpa?
La navaja fue haciendo camino por su cuello , pecho bajando por todo su abdomen. “El hubiera sido feliz conmigo…”Kyo dijo casi ausente haciendo presion sobre la punta de la navaja. “el hubiera seguido vivo…”
“Dejalo Kyo! No vale la pena!” Hitsugi le insistia desesperado.
“Si solo no te hubiera conocido…” Uruha dio un grito ahogado al sentir la punta atravesarle, algunas lagrimas dibujando delgados hilos al caer por su mejilla desde las eskinas de sus ojos. “Si solo no hubieras existido” murmuro lo ultimo y estaba por enterrarle la navaja completa cuando se escucho una voz familiar sacudiendo a los tres.
“Basta Kyo” dijo calmadamente la voz cerca del guero y Uruha pudo verlo claramente en sus rodillas con su cabello largo castano que pasaba sus hombros algunas hebras cubriendo parte de su rostro, palido, dibujado por una sutil sonrisa en juego de un par de ojos de irises bancas y pupilas dilatadas negras, mirandolo directamente , penetrandolo con una mirada muy intensa causando ke comenzara a temblar. Vio como deslizo una mano por todo el brazo de Kyo hasta acorralar la mano ke sostenia la navaja. “Ya lo asustaste lo suficiente” continuo diciendo su pasiva voz con un tono divertido.
“Mikaru..” susurro Kyo totalmente palido e ido, alejando lentamente la navaja , bajando su brazo hasta dejarla caer al suelo. “Calma Kyo…Hitsugi podrias acercarte?”
Hitsugi no se movia, solo miraba con ojos engrandados la figura de Mikaru kien giro su rostro a verlo. “Ven , acercate, Kyo te necesita”
Hitsugi tomo unos pasos adelante inseguro en acercarse pero enseguida escucho a Kyo desatarse en llanto al doblarse, enterrando su rostro en sus manos kebradas por los golpes y acudio a el de inmediato para abrazarlo e intentar calmarlo. Mikaru gateo hasta Uruha acercandose demasiado a su rostro, donde su mejilla fue acariciada por el aunke solo sintio un coskilleo leve al no poder sentir de completo su mano.
“Te espero en casa” le sonrio el castano y lo beso brevemente, un beso ke desato una profunda tristeza sobre Uruha. Cuando abrio sus ojos el ya no estaba.
“Tu…es la primera vez?” le pregunto Hitsugi, su voz temblando al hablar.
Uruha se enderezaba con dolor y sacudio su cabeza al darle la cara y verlo aun sosteniendo a Kyo en su casi histeria. “Por eso vine…keria saber k estaba ocurriendo…”
“Casi un ano ..donde estabas??”
“Kanagawa…entrenando un equipo.” Uruha se puso de pie al fin, recargandose un momento contra la pared.
“Al parecer el kiere algo contigo”
“Es difícil creerlo muerto..” era tan difícil decirlo ke se comenzaba ahogar por la angustia ke acogía su pecho. “Ke le sucedió…?”
“Kyo lo encontro en su depa la noche previa a san valentin-“
“Callate Hitsugi! Callate!” Kyo se enderezaba, su rostro rojo e hinchado en lagrimas. “No le des el gusto de saberlo! No kiero recordarlo…no kiero…” Su voz choco con sus lagrimas..kebrandosele volviendo a un lamentoso llorar.
“Vete Uruha..no vuelvas por aca….ya has hecho el suficiente dano…” Le dijo Hitsugi con la voz apagada y sin mirarlo.
Uruha se trago las amargas lagrimas y como pudo camino fuera del almacen. Se puso los lentes de sol y intento cubrirse el rostro como pudo, aunke su sudadera manchada de su sangre no ayudaba en lo absoluto. Le costaba respirar al sentir ese agudo dolor en las costillas. La caminata se volvio eterna al dirigirse al bano mas cercano con docenas de ojos sobre el al pasarlo. Casi se avento a las puertas del bano , jorobandose un poco al caminar agarrandose sus costados al acercarse al lavabo donde se kito los lentes de sol y lavo su cara con cuidado. Su nariz no parecia estar kebrada aunke la sangre no daba senal de ceder. Se levanto la sudadera viendo la pekena cortada de la navaja donde habia salido sangre demas. El impacto de todo no lo dejaba , haciendolo sentir sumamente extrano, agitado, angustiado. Queria que todo fuera mentira …queria que todo esto fuera un mal sueno. Queria despertar ya!
Queria despertar ya….
Mikaru…no puede estar muerto…
Apreto su kijada. Queria gritar pero no se dio el gusto de hacerlo….
Afuera del centro comercial estaba Aoi , fumando, kien al verlo solto de inmediato el cigarro y apresuro a el exigiendole por el responsable de esos golpes. Uruha nego decirselo varias veces queriendo solo irse de alli. Keria ke lo entendiera pero no lo hacia.
“Si no me dices ahora mismo kien fue, lo buscare yo mismo por todo el pinchi centro comercial aunke tenga ke madrearme a todos!!”
”Callate!” Intento kitarle las llaves del bolsillo. “Me llevaras tu a casa o llamo un taxi?!”
“Dame las llaves! Solo dime kien te hizo esto chingada madre! Fue tu ex verdad?!”
“Callate ya! No te metas en lo ke no te importa! No lo entiendes!? Eh?! Deja de estarme jodiendo! Estoy harto! No entiendes nada! No entiendes nada!!” Uruha habia explotado cayendo por igual en la histeria sorprendiendo a Aoi.
“Uruha!” El pelinegro lo observaba sumamente preocupado por su estado. “Calmate!”
“Callate!” Uruha caminaba locamente por el lugar del estacionamiento. “Me calmo cuando se me pegue la pinchi gana!”
“Esta bien, esta bien” Le dijo Aoi bajando el tono,atento a sus movimientos.
“No esta bien! Nada esta bien! Todo esta jodidamente mal!” Uruha volvia a gritar moviendo los brazos agitadamente, su rostro herido cambiando de color al enojarse de sobremanera, sus venas saltando al estres que el mismo se proporcionaba.
Aoi al ver esto decidio callar contra su voluntad dejando ke Uruha continuara hasta irse calmando.
“No lo entiendes…” Uruha repitio una y otra vez.
“Me das las llaves ya?” Le pregunto Aoi acercandosele poco a poco.
Uruha le avento las llaves. “Haz lo ke kieras después de dejarme en casa…haz lo ke kieras.”
“Ke kieres decir con eso? Ke sucedió Uruha?”
“Ke haz lo ke se te de la gana a mi no me importa ya!” El pelirrojo le daba la espalda para recargarse a un auto al sentir sus heridas molestarle demas.
“Yo ke te hice?”
“Todo!” Uruha recargo su frente en su brazo. “Todo…hiciste todo…llevame a casa ya”
Aoi se molesto tanto, marchando hacia su auto sin nisikera voltear a ver si uruha le seguia, kien enseguida se dio cuenta y agacho su cabeza, comenzando a ir tras de el con el dolor reclamandole a cada paso; su mente un enredo y su corazon un delirio.
Todo el camino fue silencio hasta llegar al depa. Uruha se bajo con tanto dolor ke gimio a ello, pero aun asi Aoi no le ayudo kien continuaba mirando fuera de su ventana con el motor encendido. En cuanto cerro la puerta del auto Aoi arranco a toda velocidad desapareciendo en la primer eskina al dar vuelta por ella rechinando llanta. Uruha regreso la mirada al frente mirando su depa.
…si supieras la verdad…
Camino hacia el edificio –transicion- camino fuera del tren hacia la plataforma al llegar a Kanagawa. Su rostro era serio , su mirada pensativa con algo de tristeza tal vez era su conciencia. Su mirada se encontro con la de un pelinegro que se fue acercando con una sonrisa amplia y extendio los brazos al acercarse mas a el para abrazarlo fuerte. “Te extrane mucho!”
“Ya estoy aquí…Aoi.”
Abrio la puerta de su departamento y al adentrarse escucho un tararear viniendo de su recamara. Fue a ella despacio, la luz de dia iluminando fuertemente el pasillo y la recamara. Al entrar a su recamara, encontro a Mikaru sobre su cama sentado de espaldas a la puerta. responsable de ese tono ke tarareaba el mismo. Giro su rostro de la ventana a el y sonrio. “Okaeri~”