CAPITULO 1: Llamando tú atención
Otra vez su hermana habia decidido por el, esa noche tendria que salir con ella y con el isoportable de su novio, a quien mas de una vez lo habia descubierto mirandolo lacivamente.
Como si eso fuera poco, su prometida estaria ahí, seguramente con su cara de niña buena, pero el muy bien sabia de las cosas que podia hacer. Demasiado facil e insulsa para llamar su atención mas de una noche.
Pero por culpa de sus hormonas y aburrimiento, esa noche le costaba ahora no poder separarla de su lado. Una mujer realmente insoportable.
Ahora se veia asi mismo, en su auto conduciendo hacia el antro que habian elegido para la "reunion" de esa noche. Una reunion de la que escaparia en cuanto las copas afectaron todos los sentidos de sus acompañantes y estos no pudieran darse cuenta de su ausencia.
Que suerte habia tenido Tatsuha para safarse del compromiso, seguramente estaria con esos amigos insoportables de los que no dejaba de hablar y el se sentia afortunado por no conocerlos, con su hermana era mas que suficiente.
Y alli estaba ahora, parado frente a su volvo, esperando a que aparecieran esos tres, que aparte de haberlo obligado a ir ahora los tenia que esperar. Su humor estaba a cada segundo peor, esa noche necesitaria descargar sus frustaciones. Ante la idea, una mueca similar a una sonrisa se dibujo en su rostro.
Varia miradas se clavaban en el en ese momento, frente a hombres y mujeres el siempre destacaba.
Esa noche habia elegido un pantalon señido al cuerpo, que resaltaba su esbelta figura, una camisa blanca de seda, que mostraba una importante parte de su pecho, y su inseparable saco negro. Su cabello se encontraba aun mojado, y las hebras doradas caian desprolijamente por su rostro. Si era posible, esa noche se veia extaciantemente mas hermoso que de costumbre.
Y ahora entre la multitud podia distinguir las caras de las tres personas con las que compartiria buena parte de la noche aunque mal le pese.
- Hola Eiri, no sabes cuanto eh esperado para verte... hace mucho que no salimos juntos - dijo Tohma con su eterna sonrisa que desquiciaba los nervios de Yuki.
- Hermano!!.. pense que no vendrias... siempre eres de evitar estas reuniones y pense que esta no seria la escepcion - Mika se acerco y abrazo a su hermano, cosa que en cierta forma no le agradaba...nunca le gustaron las demostraciones de cariño, las muestras de debilidad no eran para el, el tiempo le habia enseñado que el bajar las barreras solo cuasaba dolor.
- Hola..- fue su seca respuesta, ellos sabian que no queria estar ahi, y el no se molestaria en demostrar lo contrario, ya lo conocian y no tendrian porque sorprenderse.
- Holo Eiri, extrañaba verte!... hace meses que no contestas mis llamadas - y ahi estaba ella, no podia evitar las nauseas al solo mirarla, su sonrisa era igual o peor a la de Thoma... Esa seria una noche realmente pesada.
- Bueno chicos... que les parece si vamos entrando?? - dijo Tohma
- Si es verdad, aqui afuera nos estamos helando y a parte perderemos la resevacion...- Mika tomo a su novio y lo arrastro hacia la entrada del boliche.
Yuki no pudo evitar mirar a su derecha, ya que alguien lo tomaba del brazo sin su permiso. El no era propiedad de nadie y no empezaria esa noche - o eso era lo que el pensaba-
- Sueltame... y entremos... - queria acabar con eso lo mas rapido que pudiera, y si eso significaba emborrachar a la joven y regalarla al primero que pasara por enfrente no escatimaria en gastos.
- mmm.... bueno esta bien, pero intenta fingir solo por esta noche....- ella entendia como eran las cosas, pero tampoco cederia tan facilmente a la decision de Yuki. Y a el le molestaba, esa mujer no tenia orgullo y hasta parecia gustarle que la trataran como tapete.
Ya en el boliche el ruido de la muchedumbre le facilitaba mucho las cosas, de esa forma no tendria que escucharlos o simular siquiera que lo hacia.
Se encontraban en el segundo piso, en las famosas mesas reservadas para clientes importantes como Thoma, no podia negar que el lugar estaba bastante bien y desde su lugar podia apreciar las figuras que bailaban en la pista de abajo.
Mientras tomaban sus tragos y sus acompañantes hablaban de cosas que realmente no escuchaba, una cabellera rosa en la pista llamo su atencion.
Podia verlo bailar sensualmente en medio de un grupo de unos cuantos muchachos, sus caderas se movian al compaz de la musica y sus manos recorrian su cuerpo con maestria.
- Por Dios Shu!! que nos esta mirando todo el mundo.- Hiro estaba acostumbrado a las escenas que protagonizaba su mejor amigo, pero aun asi esperaba que algun dia sentara cabeza o por lo menos que sea un poco menos llamativo en sus salidas.
-Vamos Hiro estamos aqui para divertirnos no?...despues de todo ya sabes que son pocas las veces que podemos salir.- dijo su amigo pelirosa con su ya conocida carita de ángel a la que Hiro, aun conociendolo practicamente desde el dia que nacieron no se podia resistir.
-A mi me encanta la forma en que bailas Shu..dejame hacerlo contigo.- Sakuma se hacerco a espaldas de su amigo y tomandolo por la cintura comenzaron a moverse juntos, sacando mas de un suspiro a todos aquellos que los miraban.
- Estos dos no tiene solucion.- Tatsuha se hacerco al grupo con las bebidas que habia ido a buscar a la barra, encontrandose con el expectaculo que mantenia a todos con la mirada fija en sus amigos.
Lo que Shuichi decia no era mentira, desde que comenzaron su segundo año en la facultad las salidas no eran muchas. Agradecia vivir con Hiro ya que este le ayudaba bastante para que estubiera al dia en sus estudios, por que a pesar de no tener dificultad alguna en las materias y que sus notas sean una de las mejores de su clase, no le costaba mucho encontrar algo mas interesante que hacer en la casa a la hora de estudiar.
Pero ese fin de semana estaban libres, ya habian rendido todos los primeros parciales y podian darse el gusto de salir a bailar, enborracharse o mejor aun conseguir una chica o chico bonito con el cual pasar el resto de la noche.
De verdad la sexualidad de sus parejas momentanias no les importaba en lo mas minimo, solo planeaban divertirse y terminar la noche en la cama con alguien, de todas formas a la mañana siguiente continuarian con sus vidas, atarse a otro no estaba en los planes de ninguno de los cuatro amigos.
-Shu aca esta el tequila que me pediste.-
-Gracias Tat...ya me estaba acalorando bastante tener tan pegado a Ryuchi.- el pelirosa se suelta de los brazos de su amigo Sakuma y se acaerca al pelinegro para sacarle el pequeño vaso.
-No te emborraches demasiado Suichi que no pienso pasar toda la noche contigo en el baño.- le dijo Hiro a su amigo que de verdad nunca supo el significado de la palabra "limites"
- Esta bien Hiro, no tengo planeado desplomarme en la pista cuando recien esta empezando lo bueno jejeje.-Shu se tomo su trago de un sorbo y se hacerco donde Tatsuh y Ryuchi ahora bailaban, arrastrando a Hiro con él.
El grupo llamaba la atencion de todos, los chicos se veian siempre muy bien, pero en la noche eran verdaderos felinos, agraciados por completo por la naturaleza y con movimientos tales que no permitian mirar hacia otro lado, a todos aquellos que los rodeaban.
Shuichi vestia una camisa negra ajustada al cuerpo, marcando claramente su bien formado torso, y su ajustado pantalon que se aderia a su cuerpo como una segunda piel, dejando nada a la imaginacion.
Era un espectaculo digno de admirar, su cabello alborotado permitia ver claramente sus orbes amatistas que diariamente eran cubiertas por su flequillo, su piel brillaba por el sudor producido por el intenso calor del antro y los movimientos realizados unos minutos antes, sus labios entreabiertos por la respiracion ajitada, causaban estragos entre los presentes.
Los cuatro chicos bailaban en un circulo formado por sus llamativos cuerpos, siendo consientes de que todas las miradas estaban sobre ellos.
- Creo que estamos llamando mucho la atencion ...no les parece?- Hiro sabia que esa era la forma con la que conseguian el y sus amigos atraer a sus parejas ocacionales, pero a veces sentia que se exponian demasiado, como si estubieran a la venta o algo asi.
-Claro que llamamos la atencieon...esa se supone que es la idea.- Ryuchi pasaba sus manos lascibamente por el cuerpo de Tatshua, mientras Shuichi ya se encontraba hablando con una bella morocha a un costado de sus amigos.
La media hora siguiente los encontro a los cuatro muchachos ya acompañados.
Shu habia dejado a la morocha, por una pelirroja aun mas bonita, Ryuchi estaba contra la pared dandole respiracion boca a boca a un jovencito rubio que no superaba los 18 años, Hiro tomaba un trago con dos chicas que vestian practicamente nada de ropa y Tatsuha al lado de Ryuchi, jugueteaba bajo la blusa de una nada inocente jovencita.
Los chicos sabian como divertirse y de eso no habia dudas, estaban disfrutando al maximo de la noche.A diferencia de un rubio que estaba cerca del colapso nervioso.
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