Disclaimer: Naruto es propiedad de Sasuke. Pero todos los personajes le pertenecen a Masashi Kishimoto. Yo solamente los uso para mis historias que escribo en momentos de ocio/delirio y sin fines lucrativos.
DOUSHITE KIMI WO SUKI NI NATTE SHIMATTAN DAROU?
Capítulo 2
"Estrella fugaz"
Comienzo a caminar, pensando en regresar a mi casa, pero ¿para qué? Nadie me espera ahí, además es media noche y se me ha pasado el sueño. Dirijo mis pasos al parque que queda cerca de aquí, quiero recostarme en el pasto un tiempo y sentir la frescura del viento soplando mi cara, acariciando mis cabellos.
Pese a la tristeza que siento, la noche de hoy es preciosa.
Por fin llego y busco aquel lugar que tanto me gusta, donde los árboles forman el perímetro de un círculo, dejando en medio un espacio solo con flores y pasto, además de una preciosa vista del cielo; esa es una de las razones por las que siempre que me siento así, vengo aquí a despejarme. Sin nadie más que yo y mis pensamientos.
De repente miro el cielo embelesado. Su belleza nunca había sido tanta, y si lo había sido antes, no tuve oportunidad de admirarlo de ésta forma. Las estrellas forman un sendero iluminando éste oscuro cielo. Aún recuerdo como en éste lugar, mi koi me confesó sus sentimientos. Sonreí. Y yo no pude decirle que no, al ver esa esperanza en sus ojos, en esos momentos, yo era su meta, él estar conmigo era su meta...
Flash Back.
Llevábamos cerca de dos horas los dos ahí, mirando ese cielo precioso. Tú me habías dicho que tenías que llevarme a un lugar hermoso. Y no te equivocabas. Pese a que yo ya lo conocía, fingí sorpresa para no arruinar tu ilusión, no tendría corazón para hacerle eso a alguien. -Naruto-kun- me llamaste, inmediatamente fijé mi mirada en la tuya, con una sonrisa para brindarte confianza.
El momento había llegado.
Comenzaste a jugar con tus dedos, justo como lo hace Hinata-chan, me hizo un poco de gracia tu gesto de nerviosismo -Dime- solté eso para animarla a decirme lo que tuviese que dcirme -Pues verás... yo... tú... es que...- y seguía tartamudeando más y más sin dejar en paz sus dedos, además se comenzaba a sonrojar -Puedes decirme lo que quieras- le dije con una sonrisa, que, al parece solamente consiguió sonrojarla más -Pues tú... ¡Tú me gustas Naruto-kun!- exclamó por fin.
No me esperaba esas palabras.
Toda colorada me miraste con esperanza en los ojos -'No puedo romperle el corazón'- pensé, dado que yo me encontraba en una situación similar, solo que yo no era tan valiente como para expresar mis sentimientos -Pues... eres muy bonita, pero, realmente yo te quiero como una amiga...- bajaste tu mirada, y pude notar como algunas lágrimas corrían por tu rostro -... Pero...- dirijiste tu mirada a mí -... podemos intentarlo, si tú quieres- tu rostro triste inmediatame cambió a uno con una enorme sonrisa -¡Naruto!- y sin más te colgaste de mi cuello, estabas arriba de mí -Oh, gomen- dijiste toda sonrojada levantándote -No te preocupes- te dije riendo -Bueno, entonces ¿somos kois?- me preguntaste nerviosa -Sí, Sakura-koi-
Fin del Flash Back
Pero, aunque fuésemos kois, yo nunca te he demostrado que la quiero más que a cualquiera de mis amigas, es más, nunca la he besado por iniciativa propia, ella siempre junta nuestros labios, pero no pasa de un roce, dado que ella sabe lo que siento, y me ha dicho que lo respeta, pero que me dé una oportunidad de intentarlo, de intentar quererla.
Así se fue medio año, y sigo en el mismo estado.
Enamorado de él.
Pero él, al igual que yo, tiene una persona consigo, por lo que solamente la posibilidad que tanto anhelo existe...
Pero en mi mente...
... Como una bella ilusión que me gustaría que se volviese realidad.
-Imposible- mascullé. Devolví mi atención al cielo, pese a que lo estaba viendo, no lo estaba observando como tanto me gustaba hacerlo.
De repente, mis ojos percibieron un centello, y no estaba soñando, era... era una estrella fugaz.
Justo como en los cuentos que solía leerme mi madre, Kushina.
Lo pensé un momento, no perdía nada intentando, ¿verdad? Así que cerrpe mis ojos y con una gran esperanza en el corazón, pedí un deseo...
... Imposible que se hiciera realidad... ¿o no?...
... Pero era bonito estar ilusionado.
Continuará...