Bueno, ya es hora se decía a si mismo el moreno mientras que en sus brazos llevaba los presentes que más tarde entregaría.
¡Escóndanse ahí vienen! Gritaba un emocionado chico mientras que se comía una hamburguesa.
Todos dentro de la habitación, ésta se encontraba oscura, no había un solo ruido en lo que se sentía el crujir de la puerta principal dejando así pasar a un par de chicos.
Nii-chan, todo está oscuro, prende la luz tengo miedo diciendo esto mientras se colgaba del brazo del mayor Era Marzo 17, el tan esperado día de su cumpleaños.
~Flash Back~ Hace dos semanas atrás dentro de un gran salón se encontraban casi todos los países discutiendo acerca de uno de los temas más importantes que pudiesen tratar.
Yo puedo hacer el pastel, después de todo son muy bueno con las manos decía sugerente y con un tono de picardía el francés.
Si Ita-chan se entera de que tú hiciste su pastel de seguro que no querrá comerlo sentenciaba un alegre castaño mientras que jugaba con un tomate entre sus manos.
Yo digo que Ita-chan tan sólo de tener un pastel estaría muy feliz, es tan lindo~ pronunciaba una chica con estrellitas en sus ojos al imaginar a los gemelos emocionados compartiendo su amor fraternal.
Definan bien, que yo no sé a quien se refieren aru~ reclamaba el chino por no entender de que hablaban
Yo tampoco entiendo decía el ruso con su tierno tono de voz mejor será que eliminemos a uno para así ya no confundirnos esto con un tono de voz intimidante, aunque apenas perceptible, a excepción del chino que se encontraba a su lado, ahora con su rostro embargado de miedo.
Bueno, el señor Roma debe estar refiriéndose a Romano, y la señorita Hungría debe estar hablando de Veneciano explicaba un tierno chico en lo que jugaba con un pequeño cachorro
¿Y desde cuándo? Exclamaba el pianista
¿Desde cuándo que cosa Austria?
¿Cómo que qué cosa? no te hagas el tonto España, desde cuando que le dices Ita-chan a esa cosa diciendo esto mientras señalaba a Antonio
Él no es una cosa, él puede ser muy lindo cuando se lo propone
¿Y acaso se lo ha propuesto alguna vez? Contestaba la chica nada satisfecha ante tal inútil respuesta
Ya basta, mejor no nos salgamos del tema señalaba el inglés mientras intentaba poner algo de orden Aunque todos sabemos que Francia es un pervertido y que Romano le tiene miedo, es el mejor en cuanto a lo que pastelería se refiere (claro que después de mi por supuesto), así que no queda de otra
¿Quién se hará cargo de la decoración aru~?
De eso puedo encargarme yo, pero necesitaré ayuda, Su, hagámoslo juntos, ¿si? Indicaba Finlandia observando como el rubor se expandía por el rostro de su “esposo” cuando éste observaba a Francia que le explicaba con gestos en como iba el doble sentido de esas tan dulces e inocentes palabras dadas por su “esposa”, mientras que asentía. Polonia y Lituania también nos podrían ayudar ¿ne?, claro si no les molesta
Nosotros también queremos ayudar indicaba una pequeña niña levantándose de su lugar y alzando a la vez la mano de su “hermano”
Está bien Liechtenstein, siempre y cuando Suiza también acepte
Que va, ¿qué haremos?
Oni-chan y si hacemos esos dibujos tan lindos que tu… antes de pronunciar la última palabra la voz de la pequeña fue omitida por la mano de su hermano que agachaba la mirada para ocultar el rubor, nadie podía enterarse especialmente Austria de lo dulce que podía llegar a ser.
Bien, en eso queda, ¿quién los distraerá? Interrogaba el chico de las grandes cejas
¡Yo lo haré!, después de todo soy un Heroe, los llevaré a Disneyland, de seguro que Feliciano arrastra a Romano por ir allá, siempre y cuando sus amiguitos señalando al alemán y al japonés se mantengan al margen y lo eviten cuanto puedan.
No te preocupes USA-san, nosotros no haremos nada, ¿cierto Ludwig-san? Más como una orden que una petición
Claro Kiku, si tú lo dices (siento que es mejor no llevarle la contraria, a veces Japón puede dar mucho miedo)
Bueno manos a la obra, los demás encárguense de los víveres y de todo lo que haga falta
~Fin Flash Back~
Suéltame Veneciano, que sino lo haces no puedo encender la luz
Una vez suelto del agarre de su hermano, y al momento de encender la luz se escuchó un gran ¡¡SORPRESA!!
Uwa~ gritó Romano en cuanto vió a toda la gente salir de sus escondites
¡Nii-chan!, mira mira, todos están aquí
¿T…to…todos? La voz de Lovino temblaba, temía que ese todos significara TODOS, dio vuelta la sala con sus ojos esperando no encontrarse con esa mirada azulada ¡¡¡Fr…Francia!!!, España idiota protégeme!
Todos los presentes se quedaron observando como el una vez tan altanero Lovino se escondía entre los brazos de España que no había tardado un minuto en responder al llamado de su lindo Ita-chan
Así que a esto se refería Antonio al decir que era lindo sussurraba más para ella misma que para alguien más la doncella Hungría, que ante tal escena no desaprovecho nada sacando de entre sus ropas una cámara que guardaría tan preciosos momentos que luego podría ver para gritar y ruborizarse con todas sus fuerzas como más de algunas muchas veces lo habría hecho con su colección de fotos, doujinshis y mangas de temática Yaoi (n. de A.: Hungría me encantaría poder ser tu y tener tales fotografías …kyaaa!)
¡¡Alemania, Alemania!! Yo pensé que te habías olvidado haciendo un pequeño gesto infantil acompañando sus palabras (n. de A.: Ita-chan eres adorable)
Para nada Italia-kun, todos estuvimos preparando esto hace mucho tiempo, especialmente Ludwig-san Alemania, ¿es eso cierto?... gracias abrazando a Alemania dicho sea de paso
No tienes por que, agradece también a los demás, todos ayudaron mucho en esto.
Nii-chan, mira que lindo está todo.
Ita-chan no molestes a Romano, no ves que está muy bien entre los brazos de España pronunciaba la joven doncella de una manera algo divertida, por lo que todo el grupo se lleno de risas, esto hasta escuchar un fuerte sonido.
¡¡España idiota, por tu culpa todos se ríen de mi!! alterado y sonrojado a más no poder sosteniendo la mano en alto luego de darle una bofetada a España, Romano intentaba ocultar su vergüenza entre su “enojo”, que más bien no era otra cosa que más vergüenza, si bien el quería mucho a Antonio, no podía dejar que los demás, y menos que el mismo español se diera cuenta que dependía completamente de él.
Vamos, vamos Ita-chan~, que todos quieren saludarte, deja ese enojo… pronunciaba el francés muy cerca del oído del pobre Lovino, mientras que el brazo del rubio rodeaba la delgada cintura del italiano, el cual sólo sintió un escalofrío recorrerle completamente antes de caer desvanecido al piso que conste que yo no hice nada
¡Ita-chan!, vaya que eres tonto Francia, sabes como se pone Lovino con sólo verte agachándose recogió el cuerpo de Romano que se hallaba en el piso, pasando los brazos de éste por su cuello lo levantó cual princesa (n. de A: que lindura!!!) no se preocupen, esto pasa frecuentemente, lo llevaré a su habitación a que descanse un poco, en un rato bajaremos, disfruten de la fiesta
Una vez subido el primer escalón la preocupación de los presentes se calmó gracias a las palabras de España, el cual mostraba en su rostro que esa era una situación habitual. Sacando más fotografías aprovechando el momento, una increíble idea pasó por la mente de Hungría.
España, quieres que te ayude, o prefieres que te deje sólo con tu ~Ita-chan~ ya a mitad de la escalera España subió rápidamente los últimos escalones, haciendo más que obvia su respuesta a Hungría, la cual sonrió de lado al ver que sus suposiciones hacia España e Italia eran ciertas jujuju, ahora sólo debo buscar la manera de juntarlos, pero por ahora será mejor que suba, esto no me lo quiero perder
Nee-chan ¿qué dices? No te entendí.
No importa Ita-chan, sólo hablaba sola (a veces agradezco que seas tan distraido)