Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Solo eso. por ParkAnna

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Entré en la pulcra habitación y te encontré echado en la cama. Me acerqué a ti con pasos inseguros y me senté a tu lado. Te encontrabas dormido, pero aun así una tierna sonrisa se dibujaba en tu rostro, el cual ahora se encontraba más pálido que de costumbre.


No podía creer que todo esto estaba ocurriendo. Desde que recibí aquella llamada me sentí como en un mal sueño, un sueño en el que te irías para siempre y ya no te vería más.


Me odié por haberte gritado ese día en el ensayo porque habías resbalado y habíamos caído los dos al suelo; pero me odié aun más por no haberte dicho antes lo que desde hace tiempo venía sintiendo.

Pasé mi mano por tu rostro, únicamente rosándolo, pues temía que la fina porcelana con la que estaba hecho se quebrase. No sé cuánto tiempo me quedé sentando a tu lado observando como tu pecho subía y bajaba debido a tu respiración, pero me gustaba saber que estabas mejor, que estaba contigo, y que ya nada malo podía pasar.
Una lágrima rebelde se deslizó por mi rostro, había tenido ganas de llorar desde que ocurrió todo, pero me sentí en la obligación de no hacerlo, sabía que los demás miembros estaban igual de tristes, hasta peor que yo, así que me guardé las lágrimas para otra ocasión y les di fuerza. Pero ahora que estaba solo me sentí libre de llorar todo lo que quería, y casi inmediatamente una lágrima le dio pase a muchas más. Bajé el rostro y puse mis manos en el, detestaba no haber podido hacer algo al respecto, me sentía totalmente impotente, no había podido ayudar a la persona que más amaba, no había podido ayudarte.

-Hyung, si sigues llorando se te hincharan los ojos y te verás feo.- levanté la mirada y te vi dirigiéndome esa sonrisa que siempre me dirigías. Me sentí tan feliz de escuchar tu voz nuevamente, esa voz con la que a más de una fan habías conquistado, esa voz que desde un principio me hipnotizó.


-Es todo tu culpa, ¿sabes?- te respondí haciendo un puchero mientras me limpiaba las lágrimas con la manga de mi chaqueta. Posaste tu mano en mi cabeza y revolviste mi cabello como siempre solías hacerlo- siento haber llorado como un bebe.- te sonreí pero estaba vez tú no sonreíste. Tu mano se posó en mi mejilla y acariciaste suavemente mi rostro.


-Esta bien, hyung, me hace feliz saber que te preocupas por mí.
Mi corazón se aceleró casi de inmediato, el ambiente había cambiado de un momento a otro. Un molesto silencio se había apoderado de la habitación, donde solo se escuchaba el pitar del electrocardiógrafo.

Bajé la mirada y quedé observando mis manos sobre mi pierna, estaba seguro que no imaginabas lo incómodo que resultaba todo eso para mí. Me sorprendió por completo cuando con tu mano cogiste mi mentón y me obligaste a verte de nuevo.


-Pero… más que saber que te preocupas por mí, me gusta verte sonreír. Prométeme que nunca más lloraras por mí, eres mi hyung y realmente no me gusta verte así por mi culpa.


“...Eres mi hyung.”


Esas palabras se estrellaron contra mí con fuerza. Era cierto, solo era eso, su hyung, y también era cierto que eso era todo lo que llegaría a ser. Sentí unas incontrolables ganas de llorar y un nudo se formó en mi garganta. A duras penas logré asentir con la cabeza y salí de la habitación con la escusa de que debías descansar.

Me quedé parado afuera de tu habitación; todavía no te había dicho lo que sentía por ti pero ya había sido rechazado. Me lleve la mano a la boca para no llorar, pero fue en vano, rompí la promesa que hace segundos antes te había hecho...

Lloré por ti una vez más.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).