Susan Black Presenta:
"Amor Desamparado"
Capitulo 1:
Ella dijo antes de abandonarnos: "Ustedes son iguales a su padre, que desastre de hijos que tendré..." y entonces desapareció.
Yo no la culpo, el recuerdo de nuestro padre la dañaba y yo era su recuerdo viviente, nuestro padre nos abandono por irse con su amante poco antes de que nuestra propia madre nos abandonara también. Desde entonces yo, como el hijo mayor, he tenido que trabajar para mantener a mis hermanos menores, en total somos tres hijos y solo yo era mayor de edad. Deje de estudiar en la universidad y me dedique a trabajar en varios trabajos por turno. En un principio nadie se dio cuenta de que nos habían abandonado, usualmente mentíamos con que nuestros padres se habían ido de viaje, pero no falto la persona que lo descubrió y casi me puso en aprietos, pues temí que me quitaran a mis hermanos, pero un fiscal evito que lo hicieran porque yo era mayor de edad y podía tener la tutela de ellos.
Después de que se descubriera la verdad entre los vecinos y otras personas conocidas también se enteraran, comúnmente me topaba con personas que me conocían y que me miraban con lastima murmurando: "pobre chico, tan joven y tener que trabajar para mantener a sus hermanos, dejando de estudiar por ellos...su vida se hecho a perder...que mala madre tienen..."
Sin embargo, creo que fue para mejor que tanto mi padre como nuestra madre nos abandonaran, pues le conocí a él, la única persona que fue capaz de decirme que me admiraba, a mi, un chico normal que amaba tanto a sus hermanos como para querer protegerlos al costo que fuese...yo, Gillian Wood, soy el chico más afortunado que pisa la tierra porque una persona maravillosa se ha enamorado de mi.
- ¡Profesor, profesor!- Llamaron un grupo de niñas acercándose corriendo hacia un alto hombre de traje y delantal blanco que supervisaba los pasillo a la hora del recreo.
Este profesor, llamado Natanael Whyte, tenía el cabello rubio, lizo y corto y sus ojos eran azules, y tenia tan solo 24 años. Había terminado de hacer su práctica en el colegio en cual ahora trabajaba y ejercía en esos momentos como profesor jefe de un curso de 7º grado.
- ¿Qué sucede, niñas?-Pregunto.
- Profesor, Julius esta peleando otra vez-Dijeron las niñas algo agitadas.
- Ese niño...-Musito el profesor cansado y siguió a las niñas hacia el lugar donde se suponía que se encontraba el niño peleando y claro, tal y como las niñas habían dicho, el pequeño de cabellos castaños estaba encima de otro niño aporreándolo a golpes.
Se acerco rápidamente y lo agarro fácilmente de las axilas, el niño era bastante liviano para ser un niño de 12 años. Julius siguió pataleando para poder pegarle al otro niño que se hallaba aun en el suelo y sangrando, por lo cual, se lo hecho al hombro y con su mano libre ayudo a levantarse al otro niño y los llevo a la inspectora, donde después de regañarlos mandaron al más golpeado a la enfermería mientras seguían regañando al que había comenzado la pelea, supuestamente.
- Natanael-Llamo el director antes de que el profesor saliera de la oficina.
- ¿Si?-
- Quiero que vayas a hablar con los tutores de estos niños, como su profesor jefe ese es uno de tus deberes para con tus alumnos-Ordeno el director.
- Si, señor-Acepto Natanael y salio de la oficina llevando consigo al niño problema.- ¿Por qué te peleaste está vez, Julius?-Pregunto Natanael mientras caminaban por un pasillo.
El niño llamado Julius Wood, tenía los cabellos castaños, cortos y lisos y sus ojos eran de color miel. Normalmente era un niño tranquilo y obediente, pero sin amigos, sin embargo, cuando le provocas... Uff! Atente a las consecuencias.
- Dylan comenzó. No fue mi culpa-Se defendió Julius.
- Se que tú y Dylan no se llevan bien, pero vamos debe haber una forma de que superen sus diferencias-
- No es mi culpa-Insistió el chico amurrado. Natanael sonrío divertido.
- Se la situación en tu casa, así que tendré que hablar con tu hermano mayor-
- ¡No!-Exclamo de repente el niño.
. ¿Por qué no?-
- Porque el vuelve de su trabajo cansado y no es justo que le molestemos por mi culpa-
- No se trata si es justo o no. Es mi deber como tu profesor jefe y es mi trabajo, así que debo cumplirlo quieras o no. Además si no quieres que molestemos a tu hermano deberías portarte bien en la escuela y no causarle problemas como estos-Contesto Natanael seriamente.
- ¡Pero no es mi culpa! Es ese tonto de Dylan que no me deja en paz-Sollozo el niño.
- Tan solo deberías ignorarlo, entonces. Ahora vuelve a tu salón y no sigas armando más alboroto-
- Está bien-Acepto Julius resignado.
- Después de clases te acompañare a tu casa, así que no huyas-Dijo Nat.
- Siii-Contesto el niño alejándose mientras arrastraba los pies.
Fin del capitulo.