Susan Black Presenta:
“Amor Desamparado”
Capitulo 14:
Las cosas en la casa de los Wood al parecer amanecieron tensas, Gillian estaba molesto con Nat por lo ocurrido la noche anterior, así que para mostrarle su enojo le dio un frío hola y no le hablo más, Nat comprendió y no insistió más. Niklas también por su parte estaba enojado con Gian, por lo cual, no se hablaron mucho ni se miraron durante el desayuno, pero lo que más sorprendía a Nat era la actitud de Julius, este le miraba fijamente de vez en cuando, pero nunca decía nada ni mencionaba algo, lo que ponía a Nat en una difícil posición.
- Yo me encargo de lavar la loza-Anuncio Nat mientras comenzaba a recoger las tazas de la mesa.
- Yo la secare-Se ofreció Julius. Cosa extraña, porque siempre que Gillian lavaba la loza, este o Niklas se ofrecían para secarla, pero si lo hacia Nat estos se olvidaban de hacerlo y le dejaban solo.
- Bueno, ya me tengo que ir-Anuncio Gian.- Nos vemos, Gillian-Se despidió.
- Si. Mándale saludos a tu hermana-Contesto el castaño.
- Claro-
- Te acompaño afuera-Dijo Niklas.
- De acuerdo-Acepto el moreno sonriéndole.
- ¿Gillian te menciono que me pelee con Dylan?-Pregunto Julius.
- No. ¿Qué te hizo esta vez?-Pregunto Nat interesado, para ver si podía ser de ayuda a su pequeño alumno, que era como un hermanito menor para el.
- Ya veo. Pero tu debes saberlo, ¿no? ¿La razón por la cual me pelee con Dylan?-
- No. No lo se. ¿Acaso ustedes no salieron juntos ayer?-
- Sip y ayer fui a su casa-Dijo Julius mirando a Nat directamente a los ojos, este dejo caer al suelo el plato que lavaba al escucharlo.
- ¿Qué?-
- ¡Lo sabia! ¡Tu tenias que saberlo también, era obvio!-
- Yo…Julius…yo…no se que decir-
- Eres igual de traidor que Dylan. Espera a que Gillian lo sepa y te sacara de su vida en un abrir y serrar de ojos-
- Espera…no se lo digas…-
- ¿Por qué?-
- Porque lo amo y no quiero hacerle daño-
- ¿Ocultarle a la persona que amas algo tan importante es acaso una forma de amar?-
- Si no lo entiendes ponte en nuestro lugar…-
- ¡No me pidas cosas imposibles!-
- ¿Qué esta sucediendo?-Pregunto Gillian extrañado. Julius y Nat se miraron sin decir nada, lo que molesto a Gillian.- ¿Qué esta sucediendo pregunte?-
- Nada. Solo le contaba a Nat que me pelee con Dylan-Respondió Julius y dejando el paño para secar la loza sobre el mueble y se marcho de la cocina sin decir nada mas.
- Julius fue a ver a Dylan a su casa y después volvió peleado con él. No me dijo la razón de la pelea, ¿a ti te lo dijo?-
- No-Respondió Nat y continuo con lo que estaba haciendo. Para su asombro, Gillian se puso a secarle la loza, aunque no dijo nada y Nat tampoco.
- Dylan por favor, tienes que comer algo-Dijo Ann preocupada.
- ¡Cállate! No comeré, no tengo hambre. Déjame solo-Contesto Dylan al otro lado de la puerta, la cual desde que el niño se había encerrado en la habitación no se había vuelto a abrir, ni siquiera para comer.
- Dylan-Sollozo la mujer.
- Si quieres que salga de esta habitación busca a mi padre. Quiero conocer a mi padre-Exigió el chico desde el otro lado de la habitación.
- Hijo…-Musito Ann triste.
- ¿Nada aun?-Pregunto John preocupado.
- No-
- Lo siento. Es mi culpa-Se disculpo el hombre.
- No. Esto iba a pasar tarde o temprano-Contesto Ann.
- Quizás debas buscarlo, ¿no? Después de todo es su padre-Sugirió el hombre.
- Pero si lo hago puede que me quite a Dylan-Lloro la mujer.
- Tranquila, yo estaré a tu lado-Contesto el castaño y abrazo a Ann.
- ¿Liel?-Se extraño Nat cuando en el sillón, su bella hermana mayor se encontraba tomando un vaso de agua. Gillian lo había llamado diciéndole que bajara porque le buscaban, aunque no le quiso decir quien era.
- Quería verte, ¿acaso interrumpo?-Gruño la mujer frunciendo el ceño.
- No. Solo estaba adelantando trabajo-Contesto el joven bastante tenso.
- Lo siento. Me retiro-Anuncio Gillian.
- No. Espera chico-Lo detuvo Liel.
- ¿Si?-
- Quiero disculparme por mi actitud de ayer. Estaba muy enojada y no tuve compasión en entrar en una casa ajena sin presentarme. Me llamo Leliel Whyte y soy la hermana mayor de Natanael-Se presento la mujer estirando su mano hacia Gillian.
- Gusto en conocerla. Mi nombre es Gillian Wood y soy el dueño de esta casa-
- Ya veo. Eres bastante guapo. ¿Tienes novia, Gillian?-Pregunto Liel mientras agarraba a Gillian por el mentón, alzando su rostro.
- No-Contesto Gillian mirándola fijamente a los ojos. La mujer agarro a Gillian por la cintura como si un chico agarrase a una chica, lo que extraño un poco a Gillian.
- Quizás podríamos llevarnos bien si logras satisfacerme en la cama-Susurro Liel sonriendo mientras Gillian enrojecía como un tomate.
- ¡Liel!-Gruño Nat enfadado y separo a su amado de la víbora de su hermana.
- Bueno, no vine aquí para conseguirme novio, si no, que vine por ti-
- ¿Eh? ¿Por mi? Yo no he hecho nada malo-
- No se trata de eso, idiota-
- Entonces, ¿qué es?-
- Ayer…yo…te escuche hablar con mamá-Dijo la mujer y enrojeció de vergüenza. Nat también enrojeció al escucharla y Gillian que aun estaba presente y mirando aquella escena se pregunto que habría pasado.
- A…yo…-Comenzó Nat, pero fue interrumpido por ella.
- Se que he sido injusta contigo y lo siento. No eras lo que quería y no fue tu culpa el haber nacido chico-Se disculpo la mujer.
- Liel…-
- Por eso, desde hoy he decidido que te tratare mejor o por lo menos haré el esfuerzo-
- Está bien. El que hagas esto me hace muy feliz-Contesto Nat sonriente.
- Si…bueno…mmm…ya me tengo que ir… ¡Ah! Por cierto, tengo un mensaje para ti-Liel se acerco a Nat y agarrándolo del cuello, lo beso a vista y paciencia de Gillian, que tanto como Nat se sorprendió ante la acción de la mujer.- Mat, te envía saludos-Añadió y despidiéndose educadamente se marcho de la casa. Nat se toco los labios no pensando en el beso, si no, en la persona que había mencionado Liel. Si bien le había visto en el aniversario de su madre, no había tenido mucho tiempo para hablar con él y además él se había tenido que marchar antes para atender una emergencia.
- ¿Mat? ¿Quién es Mat?-Pregunto Gillian intrigado. Nat no respondió por lo cual se molesto.- Además, ¿por qué ustedes tienen la mala manía de besarse? Son hermanos y los hermanos no hacen eso-Añadió.
- Ya ves. Mi familia es bastante extraña-Sonrió Nat.
El timbre sonó por segunda vez en aquella casa y Gillian fue a atender encontrándose con su tío tras la puerta.
- Buenos días, hijo-Saludo Leonard.
- Hola, tío-Sonrió Gillian. Leonard entro en la casa y al ingresar al living se topo con Nat, el cual aun estaba parado donde su hermana le había dejado. Al verlo, Leonard frunció el ceño, pues ese joven le era un completo desconocido y sabía perfectamente que Gillian no lo conocía mucho más que él. Por desgracia no había tenido tiempo de investigarlo, pero ya lo haría.- ¿Quiere algo? ¿Un café?-Pregunto.
- Si. Un café estaría bien-Le sonrió el hombre amablemente.
- Bien. Póngase cómodo, esta en su casa-
- Está bien-Contesto.
- Buenos días-Sonrió Nat.
- Buenas-Contesto Leonard escuetamente.
- Con permiso-Dijo Nat y camino hacia la salida del living.
- ¡Ah! ¡Nat! Avísales a los chicos que tío Leo ya esta aquí-Exclamo Gillian desde la cocina.
- Si. Por cierto estaré en mi habitación por si me necesitas-Contesto Nat.
- OK-
Nat pasó por las habitaciones de los otros dos Wood para avisarles de la llegada de su tío. Julius al salir de su habitación le quedo mirando fijamente.
- Se lo diré a tío Leo-Dijo el niño y bajo las escaleras.
- ¿Qué? ¿Piensa decirle a tío Leo que tenemos a un gay que acosa a Gillian en nuestra propia casa?-Pregunto Niklas interesado.
- No acoso a Gillian. Además no soy el único gay aquí-Contesto Nat.
- ¡Cállate!-Gruño Niklas y bajo las escaleras molesto. Nat suspiro, realmente se hacia difícil vivir bajo en mismo techo con ellos y su consuelo solo era Gillian, pero si fuese odiado por este seria su fin.
- Entonces, ¿cuál es tu decisión?-Pregunto Leonard.
- Aceptare su ayuda. Dejare de trabajar y retomare mis estudios-Respondió Gillian serio.
- Bien dicho…-Sonrió Leonard complacido.
- Sin embargo, Nat se queda en esta casa. Él es una persona muy preciada para mí y no permitiré que se aleje de mí-Agrego Gillian.
- Está bien. Tú haz tomado ya tu propia decisión. Solo espero que no te arrepientas después-
- No lo haré-Respondió Gillian decidido.
- Tío Leo, tengo que decirle algo-Dijo Julius en voz baja.
- Claro, hijo-Sonrió el hombre.
- En privado-Pidió el niño en un susurro.
- Está bien-
Leonard los acompaño a almorzar y antes de irse, Julius le acompaño fuera de la casa con la atenta mirada de Nat.
- ¿Y bien, hijo? ¿De qué querías hablarme?-Curioseó Leonard.
- Se donde se encuentra mi padre-Dijo el niño mirándolo fijamente.
- ¿Qué? ¿Cuándo lo supiste?-Se asombro Leonard.
- Ayer. Esta en la casa de un compañero de clase y su amante es la madre de él-
- Ya veo. ¿Tienes la dirección? Porque iré ahora mismo si me la das-
- Tome-Dijo Julius entregándole una hoja de cuaderno doblada.
- ¿Solo tú lo sabes?-
- Mi profesor también lo sabe-
- ¿Y no se lo ha dicho a Gillian?-Gruño Leonard.
- No-
- ¿Piensas decírselo? ¿O quieres que les diga yo a tus hermanos?-
- Puede hacerlo usted. No quiero ser el responsable de hacer sufrir a Gillian-
- Entiendo. No te preocupes. Cuídate-Contesto el hombre.
- Usted igual-Se despidió el niño mas tranquilo.
Minutos más tardes…
- Cariño, te buscan…-Dijo Ann algo preocupada. John frunció el ceño extrañado.
- ¿A mi? ¿Quién?-
- Tu hermano-
- ¡¿Leo?!-Exclamo John entre emocionado y extrañado. Salio rápidamente hacia el living con Ann tras él. Leonard se paro del sillón en el cual estaba sentado al verle aparecer y cuando John se le acerco, Leonard le aventó un puñetazo que llego a derribar a John, Ann grito ante ello y John se sentó en el suelo algo sorprendido.
- ¡¿Cómo te atreviste a abandonar a tus hijos?! ¡Me decepcionaste completamente! ¡Eres de lo peor! ¡No pienso ser el hermano de un maldito como tú! ¡Haz desaparecido de mi vida!-
- Leonard…-Susurro John herido.
- ¡Jamás te perdonare!-Grito Leo y sin decir más se marcho de la casa dando un portazo.
- ¿Te encuentras bien?-
- Si. Aunque golpea fuerte-Contesto John sobándose la mandíbula.
- Lo siento tanto-
- No es solo tu culpa. Es la culpa de ambos-
- ¿Qué haré con Dylan? Es capaz de echarse a morir encerrado en esa habitación. Tengo tanto miedo de que se haga daño-
- ¿Llamaste al psicólogo?-
- Si. Dijo que vendría hoy mismo. Pero se como es Dylan y ese hombre no podrá hacerlo cambiar de parecer. Solo Julius lo haría. Pero le odia-
- Estaba un poco sorprendido cuando tu hijo le hablo de esa manera a Julius…él fue tan apasionado…realmente lo ama y se como se debe estar sintiendo…creo sinceramente que deberías contactarte con su padre, porque de Julius no obtendrás nada-
- Es lo que temo-Susurro la mujer.
Gillian espero a que sus dos hermanos se fueran a la cama, para poder ir a ver a Nat, aunque claro primero confirmo que ambos chicos estuvieran profundamente dormidos, porque tenia un objetivo claro y no permitiría ni ser interrumpido ni que Nat se le escapara, después de todo, Nat le pertenecía.
- ¿Puedo pasar?-Pregunto Gillian tocando a la puerta de la habitación de Nat recibiendo una respuesta afirmativa de parte de este. Entro dentro del cuarto y serrando la puerta se apoyo en ella para luego alzar la vista y mirar a un muy concentrado Nat sentado en su escritorio dándole la espalda. Al parecer revisaba trabajos de sus alumnos.
- ¿Ya terminaste de hablar con tu tío?-
- Si. Le dije que aceptaría su ayuda. Que seguiría estudiando y dejaría de trabajar…-
- ¡Eso es genial!-Sonrió Nat volviéndose en su silla de computador para ver a Gillian, este se sorprendió cuando vio que llevaba anteojos de lectura, lo que lo hacia verse bastante atractivo e interesante. Gillian se acerco a Nat y puso ambas manos en los posa brazos de la silla provocando que sus rostros quedaran a corta distancia el uno del otro.
- A cambio de que te quedaras aquí a mi lado-Musito Gillian mirando a Nat directamente a los ojos.
- Gillian…-Susurro Nat sorprendido.- No tenias que sacrificar tu futuro por mi…-Añadió.
- Shh…con mi vida yo hago lo que quiero-Contesto Gillian colocando su dedo índice sobre los labios de Nat, acallándolo.
Nat miro a Gillian algo asombrado por la tentadora acción del muchacho. Fue, entonces, cuando los labios de Gillian se unieron con los algo desesperados labios de Nat que ansiaban el tacto de Gillian mas que nada en esos momentos. La tímida lengua de Gillian se abrió paso dentro de la boca de Nat mientras las manos de este se metían entre la ropa del castaño haciendo contacto con la tibia piel del menor.
- Ahh…Nat…-Gimió Gillian abrazándose al cuello de Nat, se encontraba sentado sobre las piernas del rubio gimiendo sin reparos.
- Espera…Gillian…-
- No. Esta vez no te dejare escabullirte, Nat-
- Pero Gillian, aun es temprano-
- No me importa. Eres mío y haré contigo lo que se me plazca-Contesto Gillian mirando a Nat con ardiente deseo. Pero fue aquello ultimo lo que hizo que Nat perdiera el control de si mismo y tomando a Gillian lo llevo hacia la cama donde se dejo caer sobre él para prácticamente comérselo vivo.
Al día siguiente Nat se levanto muy temprano para prepararle desayuno a su amado que aun yacía en su cama antes de marcharse a la escuela, esperando poder ver a Dylan en ella.
- ¿Dónde esta Gillian?-Pregunto Niklas mirando a Nat con el ceño fruncido.
- Durmiendo en su habitación-Respondió Nat dando un respingo ante la pregunta.
- Ya veo. Ahora que no tiene que trabajar esta descansando, ¿no? Eso es bueno-Comento Niklas.
- Sip-Contesto Nat nervioso.
- ¿Y Gillian?-Pregunto Julius apareciéndose en la cocina.
- Durmiendo-Respondió Niklas.
- ¿Todavía?-Se extraño el niño.
- Si-Contesto Nat, pero el niño hizo como si no lo hubiese escuchado. Nat sirvió el desayuno a Niklas y Julius para luego subir con una bandeja con desayuno para Gillian, pero al contrario de lo que había dicho, no entro a la habitación de Gillian, si no, a la suya. Encontrando en ella a un bello durmiente recostado en la cama, dejo la bandeja sobre su escritorio y se dispuso a despertar a su amado.
- Nat…-Ronroneo Gillian al despertarse y encontrarse con el rostro de Nat viéndole fijamente.
- ¿Cómo te sientes?-
- Me duele un poco…tú sabes donde-Respondió Gillian haciendo que Nat se sonrojara.
- Realmente lo siento, pero me tengo que ir a trabajar-
- Está bien. No te preocupes por mí-
- Bueno, mejor bajo-Susurro Nat que besando a Gillian se despidió de este para bajar, tomar su desayuno y así irse junto a Julius.
Continuará…
Wiggieland:
¡Comentarios, quejas y opiniones de los personajes!
Leonard: No me termina de agradar ese niño.
Susan Black: Tranquilo, pronto te agradara.
Leonard: Lo dudo.
Gillian: ¡Susan! ¡¿Por qué todos tienen que besar a mi Nat?! ¡No es justo, él solo tiene que besarme a mí! ¡Di algo, Nat!
Nat: Susan, ¿por qué te saltaste la parte interesante? Bueno, yo lo digo por las lectoras…
Niklas: ¡Nat, pervertido!
Nat: ¡No lo soy!
Susan Black: Espero que les haya gustado este capi y lamento muchísimo la tardanza, contra la falta de inspiración no puedo luchar…me disculpo de todo corazón.