EXPERIMENTO.
• Capitulo 1: escape!!!...
Sasunaru…
Muy adentro del bosque un gran edificio con una seguridad casi impenetrable, la oscuridad y el silencio se adueña de todo a su alrededor hasta esos momentos.
De un momento a otro aquel impenetrable silencio se rompió con un fuerte sonido de una alarma dentro y fuera del edificio alertando a todos los presentes tanto guardias como prisioneros, mientras los primeros gritaban al unisonó y alertando a los demás que se encontraban hay…
- Se han escapado, 4 chicos no están en sus habitaciones…. Gritaban tan fuete como seles era posible recorriendo los pasillos de aquel lugar que parecía mas un hospital que un cárcel.
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Entre los pasillos de mármol blanco se recorría un fuerte olor a alcohol que para el joven peliblanco y de lentes que los rondaba a esa hora ya era bastante normal sentir semejante cantidad de alcohol desviando su camino asía un pasillo donde el mármol comenzaba a ser de un color negro y rojizo para después detenerse ante unas grandes puertas de madera color negro que le daban un aspecto algo siniestro, al tocar la puerta se pudo escuchar una voz penetrante y maligna que dejaba corto a todo aspecto lúgubre del pasillo, al abrirla sus ojos se toparon con los de un pelinegro de piel pálida y con un aspecto que asemejaba mas al de una serpiente que a la de un humano que se encontraba elegante mente sentado detrás de un fino escritorio de madera del mismo color que las puertas y paredes, así camino para adentrarse hacia donde se encontraba aquel hombre, que inmediata mente alzo la mirada para fijarse en aquel chico que ingreso a su despacho y con aquella vos de inframundo decidió hablar.
- As conseguido lo que te he encargado? Kabuto… pregunto posando su barbilla en la mano derecha. A lo que el joven presente solo asintió con la cabeza. – ya veo y ya los encontraron…? – esta vez estiro el brazo para tomar las carpetas que aquel chico le entregaba en las manos – deben de estar escondidos por ay como siempre lo asen esos 4 críos realmente creen que pueden escapar de mi laboratorio...jajá… - dijo con burla pero le intrigo un poco que su acompañante este tan serio halo que sin esperar un segundo más pregunto – y los han encontrado? – dijo secamente esperando una respuesta aprobativa que nunca llego.
Kabuto se encontraba tenso aquel hombre, es verdad que lo admiraba y pensaba que lo seguiría hasta el fin del mundo pero al mismo tiempo no podía evitar temerle tanto, trago un poco de saliva al escuchar las palabras del mayor secas y cortantes sabia que esperaba una buena noticia perro ¿cómo dar algo que no hay?, armado de valor suspiro y decidió cortar con este sufrimiento sin importar las consecuencias…
- Oroshimaru-sama… dijo con una vos algo quedita como un susurro – al parecer los prisioneros de las habitaciones 4 y 7 han salido del edificio, también han violado la seguridad y tal parece que se han entrado ala bosque… barias patrullas han ido tras ellos pero ninguna ha regresado con buenos resultados.- termino de decir sin siquiera mirar al mayor que se encontraba frente a el tenia tanto miedo que era mejor no mirarlo a los ojos sabiendo que podía perder la vida si lo hacía.
Un enorme ruido se escucho en aquella desolada habitación al parecer el mayor avía azotado su puño contra aquel escritorio para apagar un poco aquella rabia que lo consumía por dentro.
- Es que esos mocosos no pueden dar algo más que no sean problemas!!!!
Fue el enorme grito que se escucho en la habitación después de eso solo un incomodo silencio por parte de los dos.
*****
En la oscuridad del bosque solo se escuchaba algunos pasos y se lograba ver algunas linternas buscando algo o a alguien
- No, no se encuentran por este lugar será mejor regresar y dar el informe a oroshimaru –sama. dijo el hombre que tenía en la mano una linterna alejándose del lugar junto con los demás hombres uniformados.
Mientras que en aquella cueva que aparecer estaba deshabitada un joven de tez morena, cabello castaño oscuro y largo hasta el hombro, unos ojos negros que tenía una extraña cicatriz sobre la nariz de unos 14 años de edad se asomaba para saber si todavía quedaba algún guardia que los pudiese ver.
- Iruka-niichan... ya no, nos están persiguiendo? – pregunto un hermosos rubio de tés morena y ojos tan azules como el mismo cielo de unos 7 años de edad que también tenía unas marcas en la cara a diferencia del mayor este tenía tres rasgaduras en cada lado de las mejillas.
- Shhh- un jovencito de cabello rojizo, piel blanca y unos hermosos ojos aguamarina pero con unas marcas que parecían ojeras, de la misma edad que el rubio, le mando a callar- naruto nos pueden escuchar.. – hablo quedito a amigo y hermano.
- Lo siento garra-niichan- se disculpo el joven rubio cuando de repente el cuarto chico que les acompañaba grito.
- Haa!!! No encuentro a akamaru!!!- un muchacho de la misma edad que el rubio y el pelirrojo, de cabellos castaño y ojos negros que al igual que los otros tres se diferenciaban en el rostro unas marcas, estas eran como pequeños triángulos acostados de un color purpura claro, a cada lado de sus mejillas.
- Kiba!! Shhh... lo encontraremos pero no grites que si nos encuentran, nos volverán a encerar en esos laboratorios…- le regaño con vos baja el chico pelirrojo.
- Ya, ya... cálmense todos por favor los guardias se han ido será mejor seguir un rato asta estar bastante lejos, les prometo que no volveremos a ese lugar…- les decía el casta.
Caminaron sigilosamente entre los arbustos intentando pasar desapercibidos de alguna cámara o guardia que se encuentre en aquel lugar, hasta que de repente un sonido alerto a todos, entre una arbolara había alguien o algo, todos se tensaron al pensar que habían sido descubiertos. Cuando del arbusto se asomo una cabecita blanca y peluda con unas orejas largas color marón.
- Akamaru!!! – kiba grito muy alegre al ver a su mascota nuevamente.
- Shhhhhh!!! – fue lo único que escucho salir de la boca de sus tres acompañantes.
- Lo siento… - se disculpo el joven castaño abrasando a su querida mascota.
Caminaron mas hasta llegar a una cascada que detrás tenía una cueva deshabitada, donde el mayor de los 4 decidió que era un buen lugar para descansar, esa noche rea larga pero no más de las que había vivido en aquel horrible lugar, miro a aquellos adorables niños, siempre le había gustado tratar con niños, antes de ser secuestrado y expuesto a aquellos experimentos, todo su mundo había sido derrumbado y sus ganas de vivir se habían esfumado hasta que conoció a aquel niño de cabello rubio, hiperactivo al igual que kiba de impaciente y el ultimo, aquel serio niño que cualquiera que lo trababa por lo bajo creería que es más maduro que un adulto, pero cuando estaba junto a aquellos dos escandalosos, se despertaba el niño que dormía dentro de él, esos tres se convirtieron en su luz y esperanza para seguir adelante y les había prometido protegerlos y sacarlos de aquel lugar.
- Cuando duermen son mas lindos de lo normal… pero aquel experimento… aun no entiendo muy bien que era.. solo recuerdo a ese monstro decir algunas cosas…
**** Flash back ****
- Orochimaru-sama, aquellos tres niños ya están bajo tratamiento – decía un joven de cabello plata y de lente.
- Si, tendremos que esperar, el tratamiento comenzara a ser efecto hasta los 15 años… pero el numero 333, iruka-kun a él solo le falta un año…
- Si orochimaru-sama, el chico ya casi está listo, será un perfecto doncel.
**** Fin flash back ****
El chico un poco cansado empezó a cerrar los ojos, pensando en aquel recuerdo…
- Que es un doncel?....- eso es lo único que rondaba en su mente.
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