Fuji llego con diez minutos de retraso gracias a Oshitari que en verdad hubiera sido como media hora pero las habilidades de Fuji al volante eran de elogiarse, entro directamente en el edificio esperando que los organizadores no fueran a pensar que era una falta de profesionalismo el que el artista llegara tarde sin embargo nadie parecía capaz de enfadarse con el encantador artista; dio su pequeño discurso en el que agradecía que estuvieran presentes y esperaba que disfrutaran de las imágenes, cuando hubo terminado se interno entre la multitud evitando hablar con sus amigos pues todavía se sentía molesto y no quería desquitar su enfado en alguno de sus invitados, por lo que lo mejor era que se tranquilizara primero y después socializar.
-Te estás ocultando –dijo Tezuka a espaldas de Fuji.
-Se te está haciendo costumbre eso de espantar a la gente –reclamo Fuji dando un respingo.
-No se presenta todos los días el verte con la guardia baja –contesto Tezuka tomando un poco de vino –¿por qué te ocultas?
-Nada importante –murmuro Fuji tomando una copa de la bandeja de un camarero.
-Debe de ser importante para que quieras tomar –dijo Tezuka quitándole la copa a Fuji.
-¿Qué haces? –reclamo Fuji al ver que el chico de lentes le daba su copa a un camarero.
-Tú no puedes tomar, se te sube muy rápido –dijo Tezuka mirándolo con seriedad –mejor toma el jugo de uva que siempre pides.
-Me siento como un infante –se quejo Fuji haciendo puchero –¿por qué no vino Ego-sama?
-Por la misma razón por la que Oshitari tampoco ha venido –contesto Tezuka.
-¿Pelearon? –pregunto Fuji un tanto curioso.
-Un pequeño desacuerdo –dijo Tezuka acomodando sus lentes.
-Igual en mi caso –comento Fuji queriéndole quitar la copa a Tezuka.
-Ya te dije que no, así que no insistas –dijo Tezuka levantando la copa fuera del alcance del castaño.
-Odio que hagas eso –dijo Fuji parado de puntitas.
-Debió ser una fuerte discusión para que insistas en tomar –opino Tezuka aun con la copa en lo alto.
-Yo… no se qué está pasando –susurro Fuji rindiéndose en su intento de alcanzar la copa de Tezuka.
Tezuka se llevo al castaño lejos de todo el barullo y la multitud de gente que quería hablar con el fotógrafo pues este se encontraba mal a pesar de querer disimularlo, pidió para el castaño su jugo de uva que le gustaba al tensai para que tomara algo, el chico de lentes sabía que Fuji no quería molestar a sus amigos con sus problemas pero tenía que desahogarse y creía que el castaño le tenía la confianza suficiente así que fueron a la bodega donde había obras guardadas de otros artistas, el tensai se sentó sobre una caja y se llevo las manos al rostro.
-¿Qué pasa? –pregunto Tezuka ofreciéndole la copa con jugo.
-No, no lo sé… tal vez exagero las cosas –dijo Fuji tomando un poco de jugo.
-Olvido la exposición, ¿cierto?
-Yo se que está muy ocupado y que es demandante la carrera de medicina, yo me ocupo de todo –comenzó Fuji a desahogarse –no me molesta en serio, pero solo le pido un poco de atención, hoy pensó que había olvidado que habíamos quedado para cenar, y cuando le dije que era mi exposición se atrevió a sugerir que no viniera.
-Solo está algo distraído –trato Tezuka de excusar a Oshitari.
Pero el tensai negó con la cabeza pues aun no había sacado todo lo que tenía por dentro y necesitaba sacar ese veneno que lo estaba recorriendo.
-La gota que derramo el vaso fue cuando pregunto si había ido a la tintorería por su traje, ni siquiera sabía que había mandado un traje a la tintorería, estuve toda la semana hablando y preparando las cosas de mi exposición y por lo que veo no me prestó la mas mínima atención.
-Fuji, solo ha de estar algo cansado es todo –excuso Tezuka sentándose al lado del tensai.
-Tal vez pero a veces creo que da todo por sentado, en lo de la casa en lo que respecta a mí, creo que está muy seguro de que le perdonare todo –recrimino Fuji con pesar.
-Esas cosas suceden en todas las parejas, tienen que trabajar en su relación dejar las cosas en claro y ponerse limites, tú no puedes hacerlo todo –dijo Tezuka.
-¿Eso haces con Ego-sama? –pregunto Fuji afligido.
-Keigo… bueno es un poco… digamos que es harina de otro costal –trato Tezuka de explicar, llevándose la mano al cabello –es algo especial en esas cuestiones.
-Deberías aplicar tus propios consejos –sugirió Fuji riendo suavemente.
-Al menos te hice sonreír –comento Tezuka mirando a Fuji –bueno tienes a una multitud de gente que clama por tu presencia, ¿listo para volver?
-Por supuesto y gracias –dijo Fuji levantándose.
-No tienes nada que agradecer –dijo Tezuka.
Volvieron a la galería donde por fin Fuji desplego sus habilidades sociales y platico con medio mundo, sus amigos lo felicitaron pues su nueva colección era magnifica y los periodistas que se encontraban también lo elogiaron, la fama de Fuji Syusuke empezaba a correr como la pólvora pues además su extraordinario talento su agente era la estrella del tenis Tezuka Kunimitsu que ya sonaba en las grandes esferas del deporte; entonces el chico de lentes noto que el tensai se veía algo acalorado y sonrojado además de que parecía que se tropezaba con extremada facilidad algo que no era común en el castaño, se acerco a Fuji y este al voltear a verlo casi se cae al suelo de no ser por que Tezuka lo detuvo tomándolo de la cintura.
-¿Estas borracho? –pregunto Tezuka.
-Nop creó… hip… me la he pasado tomando… jugo de uva, sip eso –respondió Fuji riendo.
-En algún momento debiste de tomar algo de vino –dijo Tezuka sosteniendo a Fuji.
-¿Qué le pasa a Fujiko? –pregunto Eiji acercándose.
-Esta algo mareado –contesto Tezuka pasando el brazo de Fuji por sus hombros –creo que lo mejor es que lo lleve a su casa.
-¿Necesitas ayuda? –pregunto Eiji preocupado.
-No, estaremos bien no te preocupes, solo que Oishi se lleve mi auto –pidió Tezuka sacando las llaves de su auto.
-Claro, no hay problema –dijo Eiji recibiendo las llaves –cuídalo y que no le pase nada.
Se llevo a cuestas al tensai que ya de plano no podía caminar bien, lo subió al auto como si fuera un costal de papas y se dirigió al apartamento del tensai, durante el camino trato de comunicarse con Oshitari pero este no contestaba el teléfono aquello le extraño pues según le había dicho Fuji el otro tensai estaba demasiado cansado como para salir pero tal vez después de la discusión que había tenido con el castaño había optado por salir a distraerse; Tezuka tomo del saco las llaves del tensai para entrar en el apartamento al ver que nadie atendía la puerta después de tocar el timbre en varias ocasiones.
-Bien échate aquí –dijo Tezuka dejando al tensai sobre uno de los sillones.
-¿Dónde está Yuushi? –pregunto Fuji medio consciente.
-Al parecer no está en casa –contesto Tezuka quitándole los zapatos al fotógrafo.
-Ya tengo otro motivo para torturarlo… al fin estrenare el látigo de mi armario –dijo Fuji con una sonrisa sádica.
-Yo que Oshitari no regresaría entonces –opino Tezuka quitándole el saco.
-Le va a gustar… siempre termina gustándole… a ti también te gustaría –aseguro Fuji.
-Mejor no digo nada, voy a hacerte un café –dijo Tezuka dirigiéndose a la cocina.
En pocos minutos ya tenía listo el café bien cargado de Fuji, estaba por llegar a la sala cuando escucho el piano, el castaño se había levantado y había empezado a tocar y a pesar de estar borracho no por ello dejaba de tocar bien, fue hasta la sala y dejo el café sobre la mesa de centro para luego sentarse y escuchar las hermosas melodías del tensai.
-Para estar ebrio no lo haces mal –opino Tezuka desde el sillón.
-Digamos que es algo natural –respondió Fuji tocando algo más intenso –esto demuestra que quiero a Yuushi, sino no me tomaría la molestia de calmarme antes de matarlo.
-Fuji…
-Estaba muy cansado, si claro tan cansado que se largo –espeto Fuji con una mirada aterradora.
-Déjalo ya –dijo Tezuka levantándose.
-No le intereso, no pone nada para esta relación –acuso Fuji con furia.
-Ya cálmate, mañana veras que todo se soluciona –dijo Tezuka deteniendo al tensai.
Fuji comenzó a sollozar cuando sintió los brazos de Tezuka lo rodeaban, se volteo a abrazarlo y comenzó a llorar pues ya no soportaba, pues sentía que su relación estaba por acabarse y no sabía cómo solucionarlo pues quería a Oshitari y no deseaba que terminaran, pero ya no le veía futuro a lo suyo pues el otro tensai no parecía tener interés en reforzar la relación, el chico de lentes se llevo al tensai a la alcoba y lo recostó sobre la cama.
-No te vayas –pidió Fuji.
-Solo me voy a quitar el saco –dijo Tezuka.
Se recostó al lado del fotógrafo que lo abrazo como si fuera un oso de peluche, acaricio el cabello de Fuji, mientras le mandaba un mensaje a Keigo, maldiciendo por dentro a Oshitari pues era un ciego que no se daba cuenta de la gran persona que tenia al lado, maldiciéndose a sí mismo por haber sido igual de ciego y abrir los ojos demasiado tarde.
Ya era de madrugada cuando Oshitari entro en su apartamento, vio sobre el sillón el saco de su pareja y una taza de café frio, entro a la habitación que compartía con el castaño y encontró a este en la cama fuertemente abrazado a Tezuka, ambos estaban dormidos y vestidos pero no se habían dado cuenta de la intromisión del chico del Hyotei, este miro con algo de enfado a la pareja de castaños y carraspeo un poco para que alguno de los dos despertara, el chico de lentes se movió un poco y abrió los ojos con pereza para encontrarse con la mirada del otro tensai que se encontraba al pie de la cama de brazos cruzados esperando alguna explicación de la escena que se presentaba frente a él.
-Oshitari ya llego –dijo Tezuka moviendo un poco al castaño.
-Tezuka… látigo… Yuu –murmuro Fuji dormido.
Con cuidado de no despertar a Fuji se quito poco a poquito, pues el fotógrafo dormía plácidamente, al no sentir al chico de lentes busco a tientas algo que abrazar y tomo la almohada para seguir con su sueño, el chico de lentes tomo su saco y trato de alisarse la camisa, mientras Oshitari seguía viéndolo esperando que dijera algo, el ex-capitán le hizo una seña indicándole que hablaran afuera para no molestar a un Fuji durmiente.
-¿Se puede saber que fue eso? –pregunto Oshitari con enfado.
-Sin querer tomo algo de vino en la exposición y se emborracho por lo que lo traje a casa.
-¿Sucedió algo más que debería saber?
-Solo lo traje y nos quedamos dormidos, no estaba en condiciones de quedarse solo, estaba muy alterado –explico Tezuka.
-¿De qué iba a estar alterado?
-La discusión que tuvieron le afecto, será mejor que arregles las cosas, él te quiere y si no haces algo lo vas a perder –dijo Tezuka dirigiéndose a la puerta.
Oshitari solo vio como Tezuka salía de su apartamento sin agregar una palabra más, fue a la habitación donde se encontraba aun dormido Fuji ajeno a lo que pasaba, preguntándose qué rayos estaba planeando Atobe y otra vez un sentimiento de culpa lo embargo.
-¿Dónde estuviste? –pregunto Atobe al ver entrar a Tezuka.
-Te mande un mensaje diciéndote que había llevado a Fuji a su casa y me quede hasta que Oshitari llego –respondió Tezuka dirigiéndose a la alcoba.
-Que considerado eres –comento Atobe siguiéndolo.
-Keigo no empieces otra vez, Fuji estaba mal y no paso nada –dijo Tezuka poniéndose la pijama.
-Pero tu quisieras que fuera así –acuso Atobe de brazos cruzados.
-Son comentarios como ese por los que no te soporto –dijo Tezuka enfrentando a Atobe –te quejas de todo y no tratas de hacer nada para solucionar los problemas.
-Yo no soy el del problema –se defendió Atobe ofendido.
-Todos son el problema menos tu –recrimino Tezuka enfadado pero con calma –esto no puede sostenerse solo de lo que hago, lo he intentado pero tienes que poner algo de tu parte.
-Regreso al rato –dijo Atobe saliendo.
-Claro huyendo de los problemas estos desaparecerán –dijo Tezuka con frustración.
Atobe dejo el apartamento lo más rápido que pudo, pues que Tezuka se hubiera atrevido a decir que había un problema con él era inaceptable, era Tezuka quien de seguro se acostaba con Fuji solo que eran muy discretos y no habían podido descubrirlos, si su relación iba en declive no era su culpa es mas solo tenía que soportar por que se le pasara a Tezuka su idilio con Fuji y todo estaría mejor, podría olvidarlo después de todo el también se desquitaría con Oshitari para estar en igualdad de condiciones.
-Parece que la pasaste bien anoche –comento Oshitari sentado en el comedor.
-Sí, claro la mejor noche de mi vida –dijo Fuji con sarcasmo tomando algo de café –solo desahogue mi frustración con Tezuka por tu culpa.
-¿Mi culpa?
-Tenemos que hablar –dijo Fuji con pesar.
-¿Hablar de qué? –pregunto Oshitari con indiferencia.
-De nosotros, de lo que tenemos, debemos trabajar en nuestra relación si queremos que esta funcione –dijo Fuji tratando de explicarse.
-Contigo siempre es trabajar, ¿acaso no puedo estar en paz en la casa? –cuestiono Oshitari con fastidio.
-¿De qué hablas?, yo hago todo aquí para no molestarte y das todo por sentado, siento que no te esfuerzas por mi –explico Fuji tranquilamente.
-Me mato en la facultad y quedo exhausto después de estar en el hospital, así que discúlpame si de lo último que tengo ganas es de trabajar en lo nuestro, no tendría por qué trabajar en mi propia casa en algo que ya esta –dijo Oshitari enfadado.
-Se tiene que trabajar en una relación, no quiero descuidar lo nuestro –contesto Fuji dolido por la reacción de su pareja –Yuushi solo quiero ver algo de interés de tu parte, solo pido eso.
Oshitari no respondió quedándose callado por un instante, su celular comenzó a sonar lo cual lo salvo de contestarle al castaño, atendió el teléfono prestando toda su atención al aparato y olvidándose de la discusión que mantenía con Fuji, asintió un par de veces y se levanto de la mesa en busca de sus cosas pues al parecer iba a salir.
-Regreso en la tarde –informo Oshitari tomando sus cosas.
-No hemos terminado de hablar –dijo Fuji levantándose.
-Voy al hospital –dijo Oshitari saliendo.
Fuji se sentó de nuevo totalmente frustrado, el dolor de cabeza con el que había despertado comenzaba a acrecentarse, pues parecía inútil hablar con Yuushi para tratar de mantener su relación pero una vez más el otro tensai se sentía demasiado seguro del castaño y creía que todo se solucionaría por sí solo, si fuera como Tezuka todo sería distinto, el no se daría por vencido y lucharía por el castaño, si tan solo fuera Tezuka su pareja todo seria diferente.