Capítulo II: Última oportunidad antes del adiós…
Nuevamente había corrido a buscarle… no estaba seguro del por qué lo hacía… …l siempre tan frío y calculador, él que nunca se dejaba llevar por instintos ni sentimentalismos…
Sin embargo, cuando se trataba de esa persona siempre era lo mismo… sus sentidos le traicionaban, su mente no determinaba qué era lo correcto y qué no lo era…
Por ello había viajado otra vez a Alemania a buscarle… a llevarle definitivamente con él… se lo había prometido a Rio-chan… se estaba jugando su última carta…
La puerta de un departamento frente a él, se decidió a llamar y escuchó unos leves ruidos, unos pasos aproximándose a la entrada… la puerta abriéndose… pero lo que vio lo dejó atónito.
- ¿Sí?- le respondía una mujer ¡Ey! ¿No eres tú ese pianista famoso?!- casi gritaba de la emoción mientras él sólo le observaba fríamente
- ¿Eyes?- se escuchó una voz desde dentro.
Reaccionó, miró una vez más a aquella joven, dio media vuelta y se encaminó hacia los ascensores…
- ¡Eyes!- le llamaba corriendo detrás suyo para alcanzarle- ¿Ocurrió algo? ¿Los chicos están bien?!-
Se dio vuelta para verle, el joven parecía preocupado... suspiró…
- No, olvídalo- le respondió entrando en los ascensores, pero fue jalado hacia afuera por su ex amante… al girarse hacia él le dio una bofetada.
Kanone llevó una de sus manos a su rostro, pero no le miró, sabía que los celos y el rencor le inundaban… aunque también estaba consciente de que todo aquello era su culpa… si no hubiese actuado como lo hizo… si se hubiese quedado a su lado en vez de huir…
Le sujetó fuertemente de la mano y le llevó jalando hacia el departamento mientras el muchacho trataba de zafarse del agarre.
Cuando entraron, Kanone le arrojó sobre el sofá, buscó la cartera de la joven y se la dio sacándola afuera y cerrando la puerta de un golpe… Se dirigió nuevamente hacia Eyes, le sujetó de la muñeca y le llevó hasta la habitación tirándole en la cama.
- ¿Acaso crees que así puedes solucionar las cosas?!- le cuestionaba enojado, pero principalmente dolido.
Cuánto desearía él ser el número uno de su ex amante, pero no… había creído antes que seguramente en su ausencia Kanone debería de haber estado con otras personas, y ahora estaba más que seguro de ello.
- ¿Quién era?- le cuestionó dejándose hacer sin obtener respuesta alguna.
Kanone le besaba el cuello dejando pequeñas marcas por donde pasaba… Dejó su cuello y levantó el rostro para verle, para luego besarlo, beso que correspondió ansiosamente el menor mientras permitió la interrupción de su lengua…
Un beso profundo que de vez en cuando Eyes cortaba para mordisquear y succionar los labios de su compañero.
Se separaron un poco para quitarse las ropas. Kanone permitió a su koi tomar la delantera colocándose boca arriba… Eyes besaba y mordisqueaba su cuello… sus hombros… su pecho, deteniéndose un buen rato en sus tetillas mientras su compañero gemía de placer…
Subió de nuevo en busca de otro beso profundo a la vez que frotaba su cuerpo al otro provocando más placer y más calor… ambos miembros friccionándose, los dos abrazándose apretando más los cuerpos si ello era posible…
El aire les faltaba otra vez debiendo deshacer el beso. Eyes separó un poco su cuerpo para provocar que sus miembros tengan más contacto y siguió frotándose al otro hasta que el calor fue insoportable y el clímax llegó con un grito de placer audible y semen ensuciando parte de sus cuerpos y las sábanas…
Eyes iba a bajarse a lamer aquello que había quedado, pero Kanone le retuvo y le puso boca arriba besando con desesperación sus tetillas y mordisqueándolas… deteniéndose luego un rato en su vientre para bajar más tarde hasta su miembro, el cual comenzó a lamer y succionar mientras comenzaba la introducción de un dedo en la entrada del menor… Cuando se hubo acostumbrado introdujo el segundo y el tercer dedo…
A su vez, sin esperar mucho, introdujo su miembro en la entrada y comenzó a penetrarle…
- Mj… ahh… Kanone…- gemía de placer el menor
- Mj… Eyes… -
Las embestidas aumentaban su intensidad a la par de la excitación… Eyes abrazó a su compañero de manera que ambos cuerpos quedasen más juntos y así también seguir lamiendo y mordisqueando los hombros de Kanone, mientras éste besaba el cuello de su amante en cada oportunidad que encontraba.
Hasta que el clímax llegó viniéndose primero Eyes. El mayor apuró sus movimientos embistiendo más fuerte y rápido para segundos después venirse dentro del menor.
- ¿Por qué siempre tardas más en terminar?- cuestionó el menor.
- ¿Te molesta eso?- replicó saliendo de su compañero y acostándose sobre él.
- No, no es eso- respondió negando a su vez con la cabeza- … es que leí en un artículo que cuando dos personas se desean terminan juntos y cuando no es así terminan en distinto tiempo…-
- No siempre es así… Mira, yo cuando estoy con otras personas no puedo excitarme, pero pienso en ti y ya me encuentro deseoso del otro cuerpo pensando que eres tú- se sinceró.
Eyes le observó ruborizado… no sabía si sentirse contento porque aquello significaba que Kanone lo amaba o sentirse furioso porque le estaba confesando que solía acostarse con otras personas, cuando el menor sólo lo hacía con su amante…
Antes de que sobreviniera cualquier réplica por parte de su pareja, Kanone le besó primero fugazmente para luego ir aumentando la intensidad del mismo.
Se separó de él levantándose y sentándose en la cabecera de la cama, agarró el rostro del menor y lo llevó a su miembro. …ste comenzó jugueteando con la punta lamiéndola y mordisqueándola suavemente.
Luego lamió con placer los genitales mientras con su mano masturbaba el miembro del mayor… volviendo después a introducir nuevamente su miembro en la boca mientras Kanone disfrutaba de ese placer y gemía cada vez más fuerte sosteniendo con una mano varios de aquellos mechones plateados…
Luego sujetó al menor sacándole la boca de su miembro y lo recostó boca arriba comenzando a preparar su entrada… primero un dedo, luego el segundo y ya tan excitado se encontraba que le levantó las piernas y le acomodó para penetrarle de una sola estocada…
- ¡Mj!!- se quejó Eyes apretando un poco los dientes.
Segundo después comenzó a moverse lentamente aumentando el ritmo a la par de los gemidos… Los minutos pasaban en ese remolino de pasión… los gemidos se hacían más audibles… las embestidas aumentaban su intensidad… Por momentos salía del todo para entrar nuevamente y llegar cada vez más profundo si era posible…
Embestida tras embestida… gemido tras gemido…
- ¡Ahh! ¡Kanone!!-
- ¡Ahhh!!-
Esta vez llegaron los dos juntos al clímax… El mayor se acostó suavemente sobre su pareja mientras trataba de regularizar la respiración; cuando lo hubo logrado salió de él y se acostó al lado atrayendo a su amante a su lado y cubriendo ambos cuerpos con las sábanas…
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Cuando hubo despertado movió el brazo buscando a su compañero y al no sentirlo abrió los ojos y se sentó en la cama. Observó la habitación casi a oscuras, el paisaje de la ventana señalaba que ya se había hecho de noche.
Se levantó y se dirigió a la ducha, saliendo más tarde con el pelo chorreando agua y su cuerpo sólo cubierto por una pequeña toalla. Fue hasta la cocina para encontrar a su pareja preparando de cena su comida favorita.
Corrió hasta Kanone y le abrazó por atrás sujetándole fuertemente, el cual le soltó con un poco de trabajo dándose vuelta y besándole. Mostrándole, una vez finalizado ese profundo y pasional beso, dos boletos de avión con destino a Japón para el día siguiente…
Eyes los reconoció inmediatamente, él los había comprado prometiéndole a Rio-chan llevar aún sea a rastras a Kanone de vuelta con ellos…
- ¿Qué harías si te pidiera que vivieras aquí conmigo? ¿Me dirías que sí o volverías a abandonarme como sucedió hace tres años?- le miraba serio y quizás rencoroso.
Lo recordaba muy bien, tres años atrás su pareja le había pedido que lo acompañase, que se fueran a vivir lejos de Japón. …l se había negado rotundamente sin dudarlo… ¿cómo podría abandonar a los suyos? Aquellos muchachitos que dependían de él, que estaban tan confusos y temerosos como él pero que jamás lo demostrarían, tan capaces de matar sin comprender bien del todo lo que ello significaba…
Ser un Blade Children implicaba ser un maldito para la eternidad… nacer y morir de la manera más trágica… vivir una vida llena de dolor, alejados de las personas, sin existir nadie que se preocupara por ellos, verse obligados a matar… y ocultar su verdad al mundo, ocultar su esencia… incluso ver morir a aquellos de los suyos con los que se hubiesen relacionado…
Pero alguien había llegado y había cambiado sus destinos, un joven que no era uno de ellos, el hermano menor del Blade Children Kyotaka Narumi.
Si bien al principio había sido Rio-chan la que se había encariñado con él y Ayumu sólo buscaba saber algo sobre la misteriosa y repentina desaparición de su hermano, la verdad era que fue el único ser humano junto a su amiga Yuizaki que reparó en ellos y que buscó la manera de salvarles… o siquiera procurarles una vida un poco menos dolorosa.
¿Abandonarles como Kanone había hecho? Jamás, no podía siquiera detenerse a dudar de ello. Era inconcebible hacer algo como ello, principalmente Rio-chan se moriría si ello ocurría… más ahora que aquel joven, Ayumu, les había abandonado…
Eyes agarró los boletos, entró en la habitación y se cambió… había hecho el intento, aunque fuese un fracaso, al menos lo había intentado…
- Adios, Kanone… adiós para siempre…- se despidió abriendo la puerta sin girarse a verle.
El mayor sólo le observó en silencio hasta que la puerta se cerró…
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