Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amnesia Detectivesca por xilema95

[Reviews - 37]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo: Espero les haya gustado! sí, tal vez los acerqué muy rápido, pero apenas estoy aprendiendo (y seamos sinceras, todas queremos ver acción en el primer capitulo) Disculpen si tiene fallas y gracias por dejar comentarios!
Noche de estrellas fugaces. Light y L observaban desde la ventana del hotel; claro, aún unidos por la cadena.

Hacía poco que Light había recuperado su memoria, y junto con ella, el deseo de ser el Dios del nuevo mundo, pero algo había cambiado. Convivir tanto tiempo con L lo había transformado. Ambos compartían casi los mismos gustos, disfrutaban sus conversaciones, sus juegos, y había llegado a creerse que en verdad podían ser amigos.

“¿¡Pero qué demonios estoy pensando?! ¡¡Es mi enemigo, tengo que matarlo!! En verdad... ¿Tengo que matarlo? ¿Es necesario? ¡¡Por supuesto que es necesario!! ¡…l es un estorbo para mi utopía! Aunque... tengo que aceptar que somos muy parecidos... y que… tal vez me agrade un poco…”

Una voz lo saca de sus pensamientos

-Nunca había visto una lluvia de estrellas fugaces- confiesa L maravillado por tan bello espectáculo, inconsciente de lo que Light pensaba

-No me extraña, considerando que tú nunca dejas de trabajar- el castaño contemplaba todo con poco entusiasmo

-Light-kun, si fuera por mí, yo siempre vería éstos espectáculos

-¿Y por qué no lo hacías?

-Siempre he tenido que resolver casos, uno tras otro; no podía darme el lujo de tomar unas vacaciones- da un suspiro de pesadez y tristeza.

Ambos se quedan en silencio. Light no podía evitar voltear a ver de reojo al detective ¿Pero por qué lo hacía? No estaban intercambiando palabras, no era necesario. ¿Qué le sucedía?

L, por su parte, notaba las miradas de Light, y sentía un estremecimiento cada que ocurría. Consideraba a Light su amigo.... ¿o lo estaba considerando algo más sin saberlo?

-Ryuzaki....

-¿Si?

-Sabes, lo que me dijiste hace un momento... Dime la verdad, ¿te gustaría ser alguien normal? ¿No ser un detective?

El pelinegro esboza una leve sonrisa

-Sí, en ocasiones me gustaría serlo. Me gustaría olvidar todo, y en especial... – mira al castaño a los ojos – olvidar a Kira

-...

-Light, ¿Crees que eso sea posible?

-Bueno, - mira las estrellas que caían – dicen que si le pides a una estrella fugaz tu deseo, se hace realidad

-¿En serio?

El menor sonríe – claro si realmente lo deseas

El detective mira una de las estrellas, y cierra sus ojos pidiendo su deseo; Light al verlo pasa un brazo por los hombros de su compañero, como si quisiera brindarle una esperanza. L se gira para verlo y ambos notan lo cerca que están sus rostros.

-Light...

Perdiendo todo juicio, ambos rozan sus labios; indecisos, y ante el contacto comienzan a besarse. No sabían que sentimiento los impulsaba, no había espacio para pensar en ése momento; los dos se mantenían entregados, estrechando más sus cuerpos y profundizando más el beso.

Luego de varios minutos se separan, entre confundidos y satisfechos.

“¿Por qué diablos hice eso? L es mi enemigo, pero... yo....”

“Estoy cavando mi propia tumba. Estoy seguro de que tú eres Kira, y me he atrevido a enamorarme de ti.... ¿Esto es amor? Me hace feliz, pero estoy sufriendo al mismo tiempo. Si tengo todas las pruebas, no podré soportar el encerrarte. ¿¡Por qué tenías que ser tú?! ¡¡Tengo que alejarme de ti, pero no puedo!!”

-Lo siento Ryuzaki, yo no quería... – nota como los ojos del detective se vuelven algo vidriosos - ¿Ryuzaki, estás...?

-Light, me siento muy cansado ¿Te importa si dormimos ya?

-... como quieras.

Ambos se levantan y se acomodan en la amplia cama en la que se veían obligados a dormir. Los dos fingían dormir, pero cada uno estaba debatiendo en su interior.

“He debilitado al gran L, debería sentirme superior y regocijarme, ya que me así me será más fácil matarlo ¿Pero por qué no lo siento así entonces? Es más, ¿Por qué lo besé? ¿¡¡Qué me sucede!!?”

“Light, lo has logrado. Me has debilitado, has tocado mi punto más débil; mis sentimientos hacia ti. Ahora sólo esperarás el momento más oportuno y me matarás ¿Verdad? ¿Por qué tú? ¡Me duele tanto! ¡Me duele tanto saber que no soy nada para ti! Sólo estás jugando conmigo...”

Por primera vez el pelinegro se sentía tan agobiado, que mientras dormía las lágrimas salieron sin permiso de sus ojos.

También lo hicieron las gotas de lluvia, afuera.

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).