Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Mi cama no habla por Gadya

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Dedicado a la legítima dueña, mi sis, y a NeraN, que le gustó y lo pidió

La canción es "Mi cama no habla" de Trula La

MI CAMA NO HABLA..

Un cantante cualquiera,
y una canción cualquiera,
de un grupo cualquiera,
de una ciudad cualquiera.


La música llega a mis oídos con una fuerza inimaginable, imposible de ignorar, y sin embargo, es como si no la sintiera, no me percato de su aturdidora presencia, mi mente está sumida en mis propios pensamientos, todos protagonizados por tí, centro de mi universo que cree para poder escapar de mi vida mundana en donde era imposible que entraras. El ambiente enrarecido de aquel bar desconocido me asfixia, y a la vez me apaña, cómplice de la locura que estamos cometiendo, aquella que cada semana repetimos, temerosos de ser descubiertos, urgidos de nuestra mutua compañía, de las caricias que sólo tú puedes darme, de los suspiros que sólo yo puedo arrancarte, de las sensaciones que sólo afloran cuando nuestros cuerpos se sienten sin telas de por medio que puedan separarnos.

A quien le importa lo que diga,
un natural de esta isla,
dividida en mil dominios.


Amparados en este tugurio nadie podía reconocernos, y envueltos en ese milagroso anonimato, éramos libres de amarnos sin temor a nada ni a nadie, en aquel lugar nuestros nombres eran olvidados, nuestros rostros se esfumaban de la mente de los presentes al tiempo que los vasos se vaciaban del alcohol y los cigarrillos se deshacían en una nube de humo, para luego huír a mi Templo envueltos en la negrura de la noche. Pero esta velada es distinta. A pesar de lo que ambos deseamos, estamos sentados frente a frente.

A que no estás ahí sentada,
cuando escuchas mis palabras,
una loca no te hagas.


Tantas veces intenté decírtelo y tus miedos me detuvieron, pude verlos en varias ocasiones reflejados en tus ojos, en tu rostro, en cada gesto que hacías cuando me amabas. Tu temor me obligaba a replegarme sobre mí mismo. Pero la situación no podía continuar adelante, y ahora que te lo digo no quieres escucharme. Estás tan asustado como antes, quieres seguir fingiendo que nada pasa.

Un arreglo cualquiera,
de un músico cualquiera,
que esta en escena,
de este lugar cualquiera.


Aquella música retumba en las paredes de este bar de mala muerte en el medio de un pueblo desconocido para todos. El ambiente cargado de anónimos nos engulle tal y como la primera vez que nos juntamos. Te cité entonces en este bar, y sin otra cosa más que locura te dije que te amaba, que te necesitaba, que te habías robado mi mente y mi alma, y tú me callaste con un beso antes de que pudiera terminar de hablar.

Y no quedemos donde empieza,
somos amantes, que lo sepan,
quitemos las caretas.


Juramos aquel día mantener el secreto, que nadie supiera que te amaba con locura, que nadie imaginara que me necesitabas con desesperación, que ni siquiera sospecharan que cada noche nos ocultábamos entre las sombras de mi Templo para amarnos sin reservas, sin temores y sin culpas.

Que nuestros besos se cumplieran,
pa' que amores tuvieran,
es que perdí la cabeza... por ti
.

Esa noche nos besamos, de mil formas imposibles nos amamos, nos mezclamos y volvimos a separarnos una y otra vez. La lujuria y la pasión presidieron aquel acto en que nos juramos incondicionalmente que sin importar lo que pasara, nunca te irías de mi lado, y yo nunca te dejaría

Mi cama no habla,
pero fue testigo de lo que hicimos tu y yo,
mi almohada es muda,
pero te vio desnuda cuando hacíamos el amor.

Sentí tus manos en mi espalda, tus piernas aferradas a mi cintura, me sentí dentro de tí, y cada uno de tus gemidos me hacía perder la cabeza, confirmándome cuanto te amaba. Aquella vez toqué el cielo con las manos, tus gritos me abrieron las puertas del paraíso, y entré en él cuando te tuve, cuando te hice mío, cuando por primera vez pude reflejarme en tu clara mirada sin miedo a lo que pudiera encontrar en mis ojos. En esa cama me hice parte de tí, te hice parte de mí, nos hicimos cómplices en un juego prohibido que nos envolvía como las sábanas de aquel lecho, mientras, enredado en tu cuerpo, te tomaba.

Un arreglo cualquiera,
de un músico cualquiera,
que esta en escena,
de este lugar cualquiera.


Recuerdos cálidos acuden a mi mente, cuando el miedo no empañaba nuestras vidas, cuando amor sin reglas era todo lo que ocupaba nuestras mentes. Y sin embargo, cuánto cambió todo, míranos ahora, sentados frente a frente, presos del temor a que alguien pueda encontrarnos, consumiéndonos en el deseo de besarnos, de perdernos una vez más en nuestro ritual de locura y deseo, de amor irreverente e irrefrenable, en el cual nuestros nombres desaparecen, y sólo quedamos tú y yo. La música me impide escuchar mis propios pensamientos, y el humo, ver el brillo de deseo que ilumina tus ojos.

Y no quedemos donde empieza,
somos amantes, que lo sepan,
quitemos las caretas.


Ya me cansé de ocultarlo, de no poder besarte y abrazarte cuando te necesito más que a nada en el mundo, tan sólo porque somos compañeros, porque pertenecemos a un mundo en el que no podemos amarnos. Quiero poder tenerte y no tener que ocultarme para decirte que te amo con desesperación, que eres dueño de mi alma, de mi cuerpo, de cualquier destino que los dioses escojan para mí, que eres mi razón de estar aquí. Ya no me importa que lo sepan, que descubran que tu sola presencia me intoxica, que tus labios me llaman, que todo yo te pertenezco.

Que nuestros besos se cumplieran,
pa' que amores tuvieran,
es que perdí la cabeza... por ti.


Ya estoy cansado, y sé que tu también. Todo el miedo que sentías se ha ido, y doy gracias a los dioses por eso. Te amo, Aioros, te amo y te necesito, y ya no puedo ocultarlo ni quiero hacerlo. Te amo con urgencia, con pasión, con ternura, con deseo, y quiero que todos lo sepan, que al estar a tu lado bajo el sol no tenga que ocultar esas sonrisas que sólo tú logras dibujar en mi rostro, quiero poder besarte sin tener que ocultarlo. Me miras, y veo en tus ojos la respuesta a mis inquietudes. Con tan sólo una mirada me dices que también estás harto de jugar a esconderte en las sombras, que ya no importa lo que suceda, no quieres vivir nuestro amor sólo de noche.

Mi cama no habla.
pero fue testigo de lo que hicimos tu y yo,
mi almohada es muda,
pero te vio desnuda cuando hacíamos el amor
.

Te rodeo con mis brazos y te acerco a mi pecho, y rodeados por el humo del tabaco nos besamos sin compromisos, sin dudas, sin miedos, como la primera vez, y salimos del bar, corriendo bajo la lluvia para perdernos nuevamente en la oscuridad de mi Templo, y alli jugar a mezclarnos, a separarnos, a enredar nuestros cuerpos y nuestras almas infinitamente. Jugamos a tomarnos, a entregarnos, a crear nuestro universo imposible donde sólo nosotros dos estamos permitidos. Y así tus gemidos vuelven a retumbar en mi Santuario como cada noche. Pero esta es distinta. Esta noche es el comienzo de un nuevo día. Un día en donde ya no habrá máscaras. Un día en el que todos descubrirán cuánto te amo.

Mi cama no habla,
pero fue testigo de lo que hicimos tu y yo,
mi almohada es muda,
pero te vio desnuda cuando hacíamos el amor.

Notas finales: ...

Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).