...Inicios del Siglo XXI...
- Ti amo – Aquella voz podía llenar por completo su alma, sus palabras eran escasas, su forma de demostrar sentimientos simplemente era compleja, todo verbo ó acción exclamatoria moría atropellada de manera vergonzosa en su garganta, es por eso que aunque no respondía con la misma intensidad a las palabras de su amante, las manos entrelazadas y aquella mirada que solo Veneciano podía ver, eran la mas fuerte “Te amo” que pudiera decir.
Sus manos viajaron despacio, soltándose en el trayecto de entre los dedos del castaño, para hallar morada sobre las pronunciadas caderas cubiertas con aquel traje azul militar, el calor de la pasión en el cuerpo del alemán era transmitido por cada poro de sus abiertas palmas infundiéndole aquella misma calidez al cuerpo de su pequeño amante de la pasta.
Un apretón intenso hacia su cuerpo, y sus labios hicieron contacto con premura, acariciándose como olas en la arena, como el cálido win* sobre la cima del monte Etna, rojizos al contacto haciéndoles sentir una chispa interna arder dentro de sus cuerpos.
Los finos dedos color canela se enredaron entre las doradas hebras perfectamente peinadas del más alto, intensificando mas aquel acto de amor entre ambos, su boca se abría, dispuesta y sumisa, cediendo ante el enemigo sin rendición alguna, iniciando la batalla de la entrega y el afecto, recorriendo ambos cualquier lugar disponible a su alcance.
¡Dios! ¿Cómo era posible sentirse tan en paz?, sin duda debería ser pecado. Por que era ahí, entre sus labios, que el de ojos azules sentía era donde pertenecía, aquel lugar al que siempre había anhelado llegar sin saber donde buscar, el nirvana en la tierra, el beso era intenso, sin tregua, chupaba suavemente el labio inferior de Veneciano hasta tornarlo color cereza, pasando con su lengua sobre la irritada piel, para luego volver a morir entre su deliciosos sabor, tan único, tan sugestivo, tan enteramente suyo…
Sentirse el único poseedor de aquel mono prototipo, saberse su benefactor y protector, el único en el mundo con el derecho de ver sus vivaces iris marrón, saber el aspecto de sus sonrojadas mejillas y el timbre de sus gemidos mientras entra en él de manera frenética y rítmica, proclamarlo de su propiedad, era tan ó más satisfactorio que tenerlo entre sus brazos.
El suelo perdía la batalla por seguir manteniéndolo en pie, necesitaba aferrarse nuevamente a su cuerpo, a su esencia, perderse en su ser y dejarse embargar de su amor, apretó con fuerza la espalda de Ludwin en clara muestra de que aquel beso lo estaba llevando al cielo, en repuesta fue conducido con paso firme hasta el cobijo de algún árbol que le proporcionaba sombra y resguardo.
Lo tomo de las caderas con fuerza, levantándolo a la altura de su cintura y absorbiendo por completo el peso del más bajo, devorando con renovadas fuerzas, esta vez su cuello, degustando aquella tan adictiva piel que le ofrecía Veneciano.
Solo una vez había sido tan feliz entre los brazos de alguien y aunque él ya no se encontraba más en este mundo, su corazón ardía con las caricias de Ludwin, por que le amaba, era lo más importante en su vida compitiendo fervientemente con el amor a su gente, perderse en la inmensidad de sus profundos ojos azules, tan claros como los cielos de La Toscana, tan transparentes y puros como las aguas del mar mediterráneo, la protección que le daba y el amor que le profesaba.
Sentía que desde el primer momento en el que años atrás se conocieran, desde ese instante su corazón había sido raptado por el Alemán, aun sin el mismo darse cuenta de aquel terrorista acto, del cual, él agradecía a dios. Y, sí un día lo perdiera, sí un día el destino le jugara una cruel pasada de nuevo.
- Quisiera morir viendo tus ojos – Fue el susurro que sobre su oído calo tan profundo como el bosque del Báltico, llevándolo a mirar directamente a los ojos del italiano, con la pregunta muda escrita en su rostro.
Simplemente sonrió tiernamente, como solo él podía hacerlo, llevando sus manos a las mejillas de Ludgwin para acariciar la áspera piel con devoción. – El abuelo Roma nunca planeo desaparecer – Se permitió una pausa para recordar el ultimo día de su más viejo y único pariente directo aparte de su hermano – El… simplemente desapareció, y y yo, bueno – Con mejillas rojas y mirada baja, su voz sonaba tranquila y suave – Sí eso pasara, quisiera que fuera viendo los cielos que tienes por ojos.
Finalizo mientras lo volvía a besar, solo que esta vez, con amor puro, los labios de un conmovido y agradecido rubio.
Tristemente, esa noche… seria la ultima de su amor.
C O N T I N U A R A :::…
Pues pelé mucho por que me dejara anexar unas cuantas cosas al las categorías de notas finales y notas de autor y como no quiero ponerme de malas las pondré todas dentro del fic xD
¿Qué les ha parecido mi nuevo bebe? *-*, espero sea de su agrado, no intenten matarme xD, les quiero, nos vemos el Miércoles en la actualización Besitos, passsta y mucho wurst para todos.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español