Los miembros de SCREW caminaban en semi-oscuridad hacia el backstage. Oían los gritos de las fans aun extasiadas por el beso que habían podido presenciar.
- Las habéis dejado locas.- dijo sonriendo Jin.
Los responsables de eso, Kazuki y Yuuto, sonrieron mirándose el uno al otro.
- ¿Cuánto tiempo tenemos?- pregunto Kazuki sin apartar la vista del bajista.
- Pues no lo sé la verdad...- contesto Byou.- ¿Por qué?
- Por nada...
Kazuki agarró por el brazo a Yuuto y tiró de el hacia uno de los camerinos. Cerro la puerta y echo el pestillo para, tras unos segundo pensando, volver a abrirla. El resto de los miembros seguían allí sin reaccionar.
- No molestéis, ¿vale?- pidió con una sonrisa antes de cerrar de nuevo.
Ensanchando la sonrisa se volvió hacia el bajista, quien igualmente le sonreía.
- Después nos reñirán.- comento este.
- Me da igual.- se acerco a el, sujetándole de forma seductora por la corbata.- Ahora mismo todo me da igual.
Yuuto llevo su mano izquierda hasta el cuello de Kazuki, acariciándolo durante unos segundos antes de tirar de él para unir sus labios. Sentía un ligero pinchazo por los piercings del guitarrista, lo que no impidió que, al entreabrir este sus labios para respirar, Yuuto introdujera su lengua en la boca del otro.
Mientras continuaban besándose el bajista llevo su otra mano hasta la cintura de Kazuki. Pegándolo a sus caderas. Por su parte, el castaño tiraba lentamente del nudo de la corbata del otro hacia abajo.
Interrumpieron el beso poco antes de que Kazuki terminara de sacar toda la corbata del nudo, y cuando lo hizo la tiró al suelo con parsimonia, mirando al bajista seductoramente. Este le sonrió de igual modo antes de juntar sus labios de nuevo. Le sujeto suavemente por los codos conduciéndole hasta el extremo de la habitación, donde había un sofá sobre el que el cayo sentado.
Kazuki, aun de pie, le miro lascivo.
- En el concierto pensé que me iba a volver loco, no me bastaba solo con un beso.- susurró mientras se desabrochaba el chaleco y lo tiraba al suelo, comenzando a hacer lo propio con la camisa negra.
Yuuto se mordió el labio inferior, disfrutando de la imagen que había ante él.
- No deberías tirar la ropa al suelo...- murmuro desabrochándose su propio chaleco, ya que la chaqueta ya se la había quitado en el concierto.- Podría mancharse...
Kazuki se inclino doblando la cintura, quedando su rostro a la altura del de Yuuto, le paso el dedo indice por la barbilla.
- Ya te he dicho que me da igual.
Busco una vez mas los labios del bajista mientras sus manos bajaban acariciando la piel desnuda del otro, llegando hasta el cinturón. Lo desabrocho con avidez, así como el pantalón, e introdujo una mano dentro que comenzó a mover. Le oyó gemir dentro del beso, haciendo sonreír al guitarrista interiormente.
Yuuto se inclino levemente hacia delante, tomando a Kazuki por la parte trasera de los muslos, recorriéndolos con sus manos, lo empujo hacia él obligándole a posar una rodilla en el sofá. Separo sus labios de los del otro y, con cierto trabajo debido a la caricia que estaba recibiendo, le saco la bota de la pierna que había alzado. Este subió su otra rodilla al sofá para que el bajista hiciera lo mismo.
Kazuki iba a volver a unir sus labios cuando los del otro cambiaron de rumbo, yendo a su cuello, el cual lamió y beso dejando ciertas marcas. Entretanto sus manos se dirigían a la cintura del castaño, para despojarle de las dos prendas que le quedaban. Desabrocho el cinturón, acto seguido el pantalón y sujetándolo por los extremos se dispuso a deslizarlos hacia abajo. El guitarrista se bajo del sofá, sin despegar sus labios de los del bajista, mientras este le bajaba el pantalón del todo. El castaño termino de quitárselo como pudo y llevo sus manos hasta la cintura de Yuuto. Agarrando tanto el pantalón como la ropa interior tiro hacia abajo, al tiempo que Yuuto alzaba ligeramente las caderas para ayudarle. Se los dejo a la altura de los tobillos, cuando tropezó con las botas, desesperado ya, queriendo continuar.
El bajista sujetó al otro por el cuello con ambas manos para besarle apasionadamente, mientras este se despojaba de la única prenda que aun cubría su cuerpo.
Tras esto se sentó sobre las caderas de Yuuto, notando contra su piel el excitado miembro del otro. Le rodeo el cuello con los brazo, respondiendo al beso, al tiempo que mecía sus caderas juguetonamente, logrando una creciente excitación en ambos.
Yuuto, cuyas manos se encontraban en la cintura del otro, pegándolo a su cuerpo, descendió una por la espalda de Kazuki, acariciándolo con la yema de sus dedos, llegando hasta su entrada. Introdujo un dedo con cuidado y lo movió en su interior. El guitarrista tenso ligeramente su cuerpo, arañando sutilmente la nuca del otro mientras gemidos ahogados por su labio mordido escapaban de su boca. Yuuto se paso la lengua por los labios, ansioso, ante esa imagen y reacciono introduciendo un segundo dedo. Repitió la acción de moverlo, notando como el cuerpo del guitarrista se tensaba excitado a la par que su miembro.
Kazuki clavo su mirada brillante de placer en los ojos del bajista.
- Yuuto...
Ese simple susurro sumado a la imagen que ofrecía el guitarrista en ese momento produjo una oleada de placer en el otro, que, saco los dedos del interior de Kazuki para introducir su miembro. Ante esto el castaño gimió protestando por la repentina molestia que representaba la intromisión, acostumbrándose al poco tiempo, cuando Yuuto comenzó a mover le levemente sus caderas. Kazuki continuo el movimiento, desplazándose arriba y abajo suavemente al principio, para ir aumentando paulatinamente la velocidad.
Sus gemidos rebeldes consistían un factor de placer añadido para Yuuto, que apenas depositaba sus labios sobre los de Kazuki para no dejar de oírlos. Recorría su cuello y principio de pecho, pasando cerca de su oído en alguno de sus viajes para dejar escapar suspiros que estimulaban al guitarrista. Sus manos acariciaban toda la longitud de su espalda abrazándole.
Kazuki rasguñaba sin descanso la espalda del bajista. Había aumentado la velocidad de sus movimientos y se sentía enloquecer. Más aún cuando notó sobre su miembro una mano traviesa, que lo recorría totalmente con un ritmo acompasado a la velocidad impuesta por él. Había inclinado su cabeza hacia atrás, con los ojos cerrados y los labio entreabiertos, moviéndolos por momentos en mudos quejidos de placer.
Yuuto escondía su rostro en el cuello del otro depositando de vez en cuando algún beso que hacía cosquillas a Kazuki.
Comenzaban a notar que el final se aproximaba, por lo que reunieron más fuerzas para hacer más enérgicos los últimos embistes. Juntaron sus labios una vez más, gimiendo desesperadamente ambos dentro del beso. Se abrazaron y, tras unos minutos llegaron, con segundos de diferencia, al orgasmo.
Aún permanecieron unos minutos abrazados sin moverse antes de separarse y comenzar a vestirse entre miradas pícaras y besos inocentes.
Salieron de la sala encontrando al resto de la banda en la de al lado. Los tres llevaban auriculares, escuchando distraídamente música. Al verlos más o menos se fueron sonrojando.
- ¿Qué pasa?- preguntó Kazuki con una sonrisa.
- Nada...- dijo Jin, que había sido el único que no había apartado la mirada.- Solo nos preguntábamos por qué hacen tan finas las paredes en estos sitios...
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