.:Mi Neko:.
.:Separados:.
Era una hermosa mañana, donde el sol brillaba, pero para nuestros protagonistas no era así.
Naruto estaba complacida mente dormido con Neko entre sus brazos, pero la paz no les duro mucho ya que el timbre sonó.
El escritor no hizo ni el más leve intento de levantarse, mientras que el gatito se estiraba saliendo de los brazos de su dueño.
-Naruto despierta, miau- le dijo el minino.
Justo cuando el rubio levantaba la cabeza, la puerta fue azotada por Sakura.
-Naruto será mejor que te levantes de una vez- decía en forma amenazante.
Neko sabía que ese día seria largo sin su dueño, habían llegado al acuerdo de que no quería dejarlo solo en casa, así que lo llevarían a un hotel para mascotas.
Flash Back
-No te quedaras en casa- le afirmo Naruto.
-¿Por qué no?- comenzó a imaginarse la respuesta –no me pasara nada.
-No quiero que cuando vuelva quemes la casa o intentes volar por la ventana- le contesto.
-No estoy tan dobe- dijo molesto.
-No te lo puedo afirmar- dijo burlonamente.
-¡¡tú eres el DOBE!!- le grito enojado.
Fin Flash back
-Naruto levántate- decía Sakura zangoloteando.
El minino rio por debajo, se acerco al escritor y le clavo las uñas en el pecho, el rubio se puso de pie rápidamente, maldiciendo las travesuras que le hacia el gato.
Naruto estaba en la sala acomodándose su traje, uno muy costoso, mientras nuestro minino solo se dedicaba a verlo.
El rubio sonrió y se acerco a él, sacando un pequeño zorrito de Kyubi de su bolsillo, era un chico para que lo pudiera disfrutar Neko.
-Es para que te diviertas mientras no estoy- le dijo acariciando sus orejas.
El gatito sonrió como pudo devolviéndole el gesto, sin duda alguna Naruto era una persona muy especial para él.
-Naruto se hace tarde- le decía Sakura.
La corbata del escritor todavía no estaba atada, fue cuando la editora se acerco a él, tratando de hacer el nudo…
//aléjate… aléjate de él//- se decía internamente- //no lo toques… no dejes que te toque dobe//- pensó el minino empezando a gruñir en ese momento recapacito, //¿Por qué siento esto? ¿Son celos? ¿Qué me pasa?//
Neko tomo al pequeño kyubi con su boca y camino pasando el medio de los dos logrando separarlos, la mirada del gato era de reproche hacia su dueño.
Sakura lo miro y soltó una pequeña sonrisa, algo le hacía comprender al gato, el único que quedo extrañado fue el escritor.
-vámonos celostino*- le dijo burlonamente Naruto.
El camino fue corto, al parecer el lugar donde lo dejaría se encontraba cerca de casa. El rubio y la pelirrosa venían enfrente, mientras le minino iba con el ceño fruncido atrás.
Al momento de bajar Naruto lo tomo entre sus brazos y lo llevo cargando hasta la entrada, se miraba un lugar fabuloso, había una gran fuente en el centro del lugar, a un lado se encontraban varias mascotas con sus respectivos dueños.
Llegaron a la recepción donde los atendió un hombre con lentes y de cabello peliplata. Neko todavía traía al osito en su boca.
-Buenas tardes, ¿en qué le puedo servir?- dijo cortes mente el hombre.
Sakura fue la que se encargo de hablar y decirle como estaban las cosas, que vendrían en la noche por él y que lo cuidaran bien.
El rubio traía entre sus brazos al gatito, le sonrió y lo abrazo demostrando que lo extrañaría y lo mucho que significaba para él, estar separados seria doloroso.
La editora se lo quito de los brazos, Neko solo lo miraba tenía un mal presentimiento de lo que pasaría.
Ahora era entregado a los brazos de aquel hombre de lentes, el gatito seguía con el zorrito en la boca y no lo soltaría ya que significaba mucho para él, pudo observar como su dueño se iba junto con Sakura…
Pov Neko
Este hombre tiene las manos frías, no confió en el, ¿por qué me sonríe?
-Vamos Neko- me dijo.
-miau- fue lo que conteste, se me está haciendo maña hablar con el miau, ¿Faltara mucho para que me vuelva humano?
Pensé que me llevaría con las otras mascotas que estaban a un lado de la fuente, pero no fue así, caminamos por lo largo de un pasillo, demasiado largo para mi gusto, después cruzamos una puerta y seguía otro pasillo, pero al final de esta había una puerta de metal, eso no me gusto, mire de reojo al baka que me cargaba, seguía sonriendo pero ya no de la misma manera…
-No te asustes-
Demasiado tarde; ya comenzaba a darme miedo, como odio ser un gato, no me puedo defender como debería.
Cruzamos la puerta y pude observar como ese lugar estaba más apartado de lo demás y ahora sabia porque.
El lugar estaba lleno de jaulas y lo peor es que dentro de ellas solo había puros gatos.
-Odio a los gatos- dijo aventándome a una jaula y cerrándola pero justo antes de eso, el hombre me quito mi preciado Kyubi – No seas infantil-
¡¡Estúpido!! Dije para mí mismo, odio a las personas que abusan de su poder…
-hahaha- se escucho una voz que se reía, me sorprendí bastante.
-Ese si debe ser un gato mimado- se escucho a un lado de mi jaula.
La puerta se escucho como se cerraba, de seguro el idiota ya se había ido, pero lo que me preocupa no es el, si no esa voz.
-Parece que al minino le comió la lengua el ratón- se escucho en la otra jaula de a lado, instantáneamente muchas risas diferentes se empezaron a oír.
Ok… oficialmente tengo miedo.
Continuara…
((Ustedes que se la creen))
-¿Quién…es?- pregunte dudoso.
-Somos tu conciencia- decía una voz arriba de mi- haha no te creas somos los demás gatos, oye ¿estás bien?- me pregunto.
-Creo que no, puedo escuchar a los gatos- dije.
-Es normal que los gatos se puedan entender entre ellos- me dijo otra voz- yo soy pelusa y estoy en la jaula de aun lado.
-que bizarro es esto- me dije a mí mismo.
-hahaha pelusa-dijo el gato de arriba burlonamente-¿Quién le pone pelusa a su gato?
-aquel que miro Stuart Little**- de nuevo se escucharon muchas risas.
Los gatos sí que tenían sentido del humor y yo siempre que los creí unos amargados, tal vez ellos podrían ayudarme a salir de aquí…mmm no lo creo si no estaría libres en este momento, necesito recuperar a Kyubi.
Comencé a analizar todo el lugar, ninguna abertura por mi jaula, tal vez si lograran que la abrieran…
Naruto se encontraba en su respectivo coche con Sakura, algo le decía que estaba mal, tenía un mal presentimiento de todo.
-¿sucede algo, sensei?-pregunto la mujer que lo acompañaba.
-no- dijo seriamente.
La puerta de metal se abría y de ella entraban dos hombres.
-¿Está dispuesto a pagarme mucho dinero si lo encuentra?- decía aquel hombre de cabello peliplata que lo había enjaulado.
-no dudes de ellos- le respondió esa voz que me da escalofríos.
El no podía estar aquí, era imposible, ¿Cómo me encontró?...
Orochimort se ponía a mirar a cada gato de cada jaula, el miedo se apoderaba de mí.
Enseguida me reconocerá, tengo que ser valiente, me acerque a las rejas que había y pude observar la puerta de metal estaba cerrada, no tengo oportunidad de escapar.
También pude observar el botón rojo que había a un lado de la puerta, creo que es para abrir la puerta, pero como llegare a ella…
Orochimort cada vez se acercaba más a mi jaula. No quedaba más que improvisar…
El hombre ojos de serpientes abrió mi jaula, tenía miedo pero era hora de ser valiente, metió la mano a la jaula tratando de tomarme pero en ese momento lo mordí sentí aquel liquido caliente por mi boca, me dio asco…
Orochimort se quejo y alejo su mano, fue ese momento en el que aproveche para salir huyendo, al momento de asomar mi cabeza pude ver a mi mini zorrito en la bolsa del peliplata salte sobre haciendo que cayera Kyubi lo tome inmediatamente con mi boca, observe el botón corrí lo más rápido que pude hacia él, subí a una caja y salte logrando presionarlo.
Pero la puerta no se abrió…
Sin embargo todas las jaulas quedaron abiertas y una alarma comenzó a escucharse, mis orejas me dolían de oírla.
Fin pov Neko
Orochimort esta mas que exaltado por la mordida del gato, cuando lo miro saltar y tratar de huir supo inmediatamente que era él, desgraciadamente para el minino el botón rojo solo soltaba a los demás gatos, pero eso de que servia si seguían atrapados en esa habitación.
Neko se encontraba desesperado por no saber qué hacer, puso observar como el ojos de serpiente de le acercaba.
-No tengas miedo- dijo el muy sínico.
Pov Neko.
¿Cómo no le iba a tener miedo después de todo lo que me había hecho?
El se acerba mientras yo retrocedía, no tenía idea de lo que ocurría a mi alrededor yo solo sabía que tenía que huir…
-Vamos pelusa-
En ese momento un gato esponjoso que me imagino yo que es pelusa mordió el trasero de Orochimort.
-¡¡AAAAHHH!!- grito mi enemigo.
Alabado seas pelusa acabas de salvarme, la alarma seguía sonando y fue cuando la gran puerta de metal se abrió, entraba un mujer de cabello rojizo.
-¿Qué diablos pasa?- pregunto.
Yo por supuesto no lo dude dos veces y comencé a correr, junto con otros gatos a mi lado, yo llevaba a Kyubi en mi boca todavía.
La mujer había sido tan tonta como para dejarnos el camino libre, dejando todo abierto, nosotros escapamos, pero pude observar como Orochimort venía detrás de mí.
Para nuestra desgracia nos encontramos con los perros en la fuente, ellos comenzaron a hacer un gran revuelo junto con nosotros. Logramos salir a la calle, ya no se miraba nadie siguiéndome, comencé a correr con más velocidad.
Po fin me detuve, me encontraba a unas cuadras del apartamento de Naruto, en mi conciencia solo cabía el hecho de que Orochimort no me dejaría en paz tan fácil, tenía que tener más cuidado desde ahora.
Fin Pov Neko
En un lugar muy lejos de ahí se encontraba Naruto todo preocupado, algo le decía que las cosas con Neko no estaban bien, tenía mucha angustia.
Salió del lugar en que se encontraba sin impórtale lo que dirían, necesitaba volver y saber que Neko estaba bien.
CONTINUARA…