2.- Borg + Celos
La puerta se cerró, pesadamente. Reconoció al instante el olor de los circuitos y el plasma quemado. En el nombre de Surak… eso era irreal.
Kurotsuchi Mayuri lo miró, impasible, sin hacer un solo comentario. Nemu, en su rincón, siguió trabajando; mientras su amo no la llamara, ella no se acercaría al extraño recién llegado. El vulcano contuvo lentamente, sus oleadas de ira; su espalda se puso aún más recta, si cabía y sus ojos casi ennegrecieron. El capitán shinigami se decidió a hablar
-De todos los bastardos de este universo…
Spock lo interrumpió secamente
-No soy ningún bastardo, May de Borg. Al menos, mis padres estaban reconocidos como seres sintientes…
Mayuri soltó una risilla maníaca
-¿Qué vas a decirme, Spock de Vulcano? ¿Vas a restregarme tu sangre noble y tu ascendencia humana? ¿Vas a decirme que el carbón es superior al silicio? ¿Vas a hablarme de tu compasión y la lógica y el IDIC, pese a que los tuyos te trataron como a mí?
El mestizo aspiró aire, lentamente, controlando sus emociones. Asco, desprecio, envidia –sí, de la mente perfecta y lógica de un Borg, inmutable frente a cualquier emoción- y horror.
-“Toda resistencia será inútil” es una bienvenida? ¿O una imposición? Y, en todo caso, May, no vine a discutir de filosofías… Unohana taichou mencionó que usted tiene nuestro equipo de comunicación y análisis. Vengo a exigirle que me los devuelva
Otra risilla
-Mayuri-sama, Spock; Mayuri taichou. Verás, mi querido duende verde, sucede que, en este mundo, soy un capitán, una persona respetable… no puedes venir así como así a ordenarme o a exigir nada
-Un Borg no es una persona
-Los shinigami desconocen eso
Spock asintió, ligeramente
-Brillante de su parte. Supongo que la actitud de los capitanes cambiará cuando sepan que usted es un asesino perseguido en toda la galaxia e incluso en el espacio profundo
-Lo dudo, puesto que estoy trabajando de su lado
-Ignoran la clase de… infección que un Borg representa. Dicho sea, con todo respeto, Mayuri taichou
Kurotsuchi negó con la cabeza, sacándose el tocado egipcio y rascando su cabello azul, en un gesto de impaciencia
-Spock… no estoy en TU universo y no estoy haciendo daño a nadie
-Entonces, efectivamente teme que lo delate
Mayuri frunció el ceño
-¿Qué diablos quieres?
-Nuestros comunicadores, taichou. Y mi tricorder. Y los phasers…
-Vaya, veo que todavía bajan armados para sus misiones “pacíficas”
-No era nuestra intención descender en este lugar. Unohana taichou mencionó que usted nos sacaría de aquí. Y debemos volver al Enterprise
Un gesto de sorpresa y diversión en el rostro del Borg
-¿El Enterprise? ¡Por Kami! ¿Acaso los klingon no se han hecho cargo de ese trasto todavía? Cuando nuestra reina madre vivía, las cosas eran diferentes… y no te preocupes. Nadie más feliz que yo, de sacarlos de aquí –señaló varios puntos en la pantalla, un poliedro de 49 lados- de acuerdo a esta interdimensionalidad, el Menos Grande rasgó el hiperespacio cuando Zaraki lo mató. Estaban ustedes en el flujo molecular del teleportador hacia Rangere, cierto?
-Efectivamente. Se suponía que teníamos que descender sobre el planeta
Mayuri miró al vulcano, los ojos amarillos fijos en los chocolate oscuro del otro, burlándose
-¿Tashiv de Rangere vive todavía?
Spock se desconcertó por un momento, dudando al responder. Bueno, después de todo, los Borg habían quedado extintos y éste frente a él no tenía intención de regresar con sus desaforadas ideas de un universo perfectamente mecanizado
-Sí. Aún vive. Tendríamos que haberlo visto hace veintinueve horas punto dos minutos
La carcajada que siguió fue aún más desconcertante
-¡Vaya! ¿Es el universo un Azar? ¿O está todo predestinado?
Antes de que el vulcano pudiera intentar responder a semejante incoherencia, la voz de Mayuri cambió, al acento binario que sólo los mecanismos Borg expresaban
-En tres horas se abrirá una ranura, comandante. Necesitaremos sin embargo, la ayuda de uno de los Espada, para controlar la maniobra de Garganta. Sugiero que hable con Unohana taichou, para verificar cuál de los Espada puede prestarle ayuda… en caso de que quiera hacerlo, claro. Y llame a su nave; es posible hacer eso. Sus cosas están en aquella mesa. Deben estar listos porque quedarán unos segundos flotando en el vacío, antes de que el rayo tractor del teleportador pueda rastrearlos y transportarlos, ya sea a la nave o a la superficie de Rangere. Y ahora, váyase.
El organismo de silicio sonrió, recuperando el acento humano
-Mi madre era tan humana como la tuya, bastardo vulcano… me alegro que, en esa alternatividad, Kirk haya muerto antes que tú…
Spock enverdeció intensamente y apretó los puños hasta que sus nudillos se pusieron blancos. Sin responder a la provocación del Borg, se acercó a la mesa y conectó el comunicador
-Spock a Entrerprise ¿Me reciben?
Dos clicks de interferencia y luego, la voz de Scotty
-¡Comandante! ¡Por mi santísima abuela! Dónde demonios están? ¡El rayo del teleportador simplemente se detuvo y los rangerianos están desesperados buscándolos! No había seña de ustedes en nuestros escánneres ¿El capitán está bien?
-Afirmativo, señor Scott. Nos encontramos en un… espacio alternativo. Dígale al alférez Chekov que calcule el punto exacto donde el teleportador dejó de funcionar, sobre la órbita de Rangere. En ese punto, en exactamente dos horas con 59 minutos punto seis segundos, se abrirá la rasgadura hacia el subespacio que nos dejó aquí. Entonces, podrá seguir nuestra señal y teleportarnos. Que Chekov haga la maniobra, los seres que habitan este lugar nos dejarán flotando en el vacío espacial y no resistiremos más de 10 segundos sin los trajes…
Spock esperó hasta que Scotty digirió la información; después, ya a bordo del Enterprise, podrían dar más explicaciones del asunto
-Sí comandante, estaremos listos… alguna otra cosa?
-¿Se encuentra el doctor Sulu?
En el puente, todos se miraron con extrañeza; sólo Spock llamaba a Sulu por su título académico, doctor en botánica y biología. Y más de una vez habían colaborado juntos en experimentos relacionados con el tema. El japonés se levantó de un salto
-¿Sí, comandante?
-Sulu, contra lo que parece, no es un asunto de biología. Es algo referente a su cultura natal –una pausa- toda la gente de este… mundo paralelo, habla japonés. Yo lo comprendo perfectamente y el capitán lo entiende gracias al traductor intradérmico… pero no me queda claro el significado de una palabra ¿Puede aclararme qué es un shinigami?
En el puente, Hikaru Sulu sintió como si regresara a los cinco años y estuviera en el jardín de su abuela, escuchando sus leyendas y cuidando de las plantas, porque cada una poseía un mushishi -un espíritu elementario- y cada alma que moría, era recogida por un shinigami, un Dios de la Muerte. El piloto tomó aire
-Comandante… cómo se llama el lugar donde se encuentran?
-Hueco Mundo. El lugar exacto es Las Noches.
Hikaru Sulu contuvo la risa; era, virtualmente, imposible. Pero conocía bien al vulcano y lo mejor era responderle con la verdad
-Están ustedes en… algo así como el Inframundo, comandante. Y si están con shinigami, no se separen de ellos. Hueco Mundo es un lugar MUY peligroso, está lleno de hollows…uh, humanoides mortíferos.
-Efectivamente, fueron los shinigami quienes nos rescataron y curaron a Jim…al capitán. Le agradecería mucho, señor Sulu, que mandara toda la información a mi tricorder
-¡Oh Kami! ¿Jim está herido?
-Se ha recuperado pronto. Por otro lado, su Supremacía se ha comunicado con ustedes?
Esta vez, fue Uhura quien respondió
-Sí, comandante. Tashiv de Rangere esta enormemente preocupado por su desaparición; temía que la Flota Estelar le levantase cargos, dado que éste es nuestro Primer Contacto de manera oficial y las negociaciones se han retrasado desde la desaparición de ustedes dos
-Por favor, teniente, abra línea con Su Supremacía
Spock jamás había visto a un Rangeriano antes… y su impresión no fue para menos. En la pantalla diminuta del intercomm, el perfil apolíneo, el largo cabello azul, descansando sobre los hombros y las pesadas garras felinas daban no sólo ferocidad a Tashiv de Rangere. Era un león semihumano, lleno de dignidad y simpatía a la vez. Lo impresionante en realidad, fue el inesperado parecido con Grimmjow; podía haberse dicho que eran de la misma especie.
-Su Supremacía…
-¡Comandante Spock! ¡Alabado sea Leono y todos los dioses! ¿Cuándo podremos verlos?¿Se encuentran ustedes bien? ¿Y James?
Spock inclinó la cabeza, cortésmente
-Nuestro rayo teleportador fue desviado de manera inesperada, Su Supremacía. Confiamos en aterrizar en Rangere en unas seis horas más, a lo sumo. Jim… el capitán Kirk se encuentra bien; tuvimos un ligero accidente que retrasó nuestra llegada
Tashiv soltó la carcajada
-Spock, no es obligatorio que seas tan formal conmigo. James es un amigo personal, no sólo de Rangere… no los dejaré salir de palacio y volver a su absurda nave sin antes comer bien y descansar como se debe. O le diré a Jim que no comprendo cómo terminó casado con un vulcano y lo llevaré a mi propio harem, para tentarlo- le guiñó un ojo.
Spock elevó una ceja, conteniendo el pinchazo interior de celos.
-Aceptamos su invitación con gusto, Su Supremacía- alzó la mano en el yun ta’al y Tashiv hizo una leve reverencia, antes de desaparecer. Scotty volvió a la pantalla
-¿Comandante?
-Sigan las órdenes prefijadas, señor Scott. Y tranquilice al doctor McCoy; presupongo una probabilidad del 85.2 por ciento de que su estado sea rayano en la histeria; subraye que Jim está bien y conmigo. Spock fuera.
El vulcano se ajustó el faser a la cintura y el tricorder al hombro. Aún tendría que aclarar los cálculos faltantes con Mayuri… pero eso podía esperar. Después de haber visto a Tashiv, Spock comprendió que algo más allá de las coincidencias estaba pasando ahí y que a eso se refería Mayuri con su extraña frase sobre Azar. Antes de que pudiera preguntar nada, el escándalo en la puerta vino a distraerles.
Los dos jóvenes entraron discutiendo
-¡No me importa lo que haya dicho el hombre verde, Uryuu! ¡Es FALSO! ¡Y deja de portarte como niñita histérica!
-Yo, histérica? ¿HISTÉRICAA? Ese tipo es un telépata, sabes? Te leyó la mente y me dio la razón, Kurosaki; lo que hay entre nosotros es falso!
-Ah, ahora soy Kurosaki, neh? Ya no soy Ichigo, Ichi-nii… como si anoche no hubiera pasado nada, quincy de porquería!
El llamado quincy enrojeció. Mayuri no tardó en perder la paciencia
-Qunicy, Shinigami-daikou, quién diablos los dejó entrar?
Hasta entonces, los dos chicos no se percataron de que la habitación no estaba vacía. El vulcano los miró atentamente. Así que éste era Kurosaki Ichigo y el otro, el quincy evidentemente tenía algún problema y la escena de celos lo implicaba a él de alguna forma ilógica, ya que nunca había leído la mente de Kurosaki. Los dos se atragantaron hasta que el moreno se decidió y se adelantó
-Lo… sentimos, JuNi no Bantai-Taichou… señor, podríamos hablar con usted?
El vulcano elevó una ceja
-Ciertamente. Soy el comandante Spock, Oficial Científico del Enterprise- una ligera inclinación de cabeza
-Yoroshiku, comandante. Mi nombre es Ishida Uryuu, soy un quincy… y éste es Kurosaki Ichigo, el shinigami…
-Sustituto, si. Me han hablado ya de usted, Inoue Orihime-san y el Espada Grimmjow. Aunque claro, éste último no lo hizo de forma directa ¿En qué puedo ayudarles?
Los dos chicos se miraron con un gesto de rencor mutuo y Spock pudo notar la tensión entre ambos. Ishida habló
-Nos interesa saber… qué le dijo Grimmjow?
Spock contuvo el reflejo de hacer ojos de espiral ¿Qué diablos les pasaba a ese par?
-Nada verbal. Unohana taichou solicitó mi ayuda para tranquilizarlo, cuando le mencioné que soy un telépata táctil. El Espada se negaba a aceptar ayuda de los shinigami, en base a su código de honor. De manera que inicié una fusión mental con él, a fin de facilitar el trabajo de los sanadores y de la capitana. Lo que ocurrió después fue resultado de la extensión de sus heridas y, presumo, de lo que lo forma Espada. Es decir, Unohana taichou mencionó que el agujero en su vientre se debía a una especial condición mental, una suma de sentimientos oscuros y totalmente ilógicos
Ishida asintió, gravemente
-Así es, Spock-san. Los Espada son hollows, seres hechos de sentimientos oscuros… sería tardado de explicar
-Sí. Pude darme cuenta de ello. Normalmente los vulcanos usamos un escudo mental para precavernos de las emociones de otro ser, cuando entramos en contacto con éste. Sin embargo, la oleada de… sentimientos mezclados logró vencer parte de mis propios escudos y logré tener un atisbo comprensible de sus emociones.
-Pero, en concreto, ¿De qué se enteró?
Spock frunció ligeramente el ceño. Vaya un par de chismosos
-Unohana taichou sabe de lo que me enteré. Y ella es la oficial médica. No creo que…
Ichigo lo interrumpió, tomándolo de la muñeca. Eso era lo que Spock estaba temiendo; que lo tocaran de alguna forma y los sentimientos del otro terminaran por afectarle
-Por favor, Spock-san… es algo personal. Créame, es… urgente
El mestizo logró percibir la angustia y la pena en el muchacho. Quizá fuese necesario que supiera la verdad; después de todo, él mismo había sugerido a Unohana que permitieran a Grimmjow ver a Ichigo y él sabía lo que era el infierno de tener a un ser amado al borde de la muerte
-Grimmjow-san no expresó directamente su preocupación por usted, Kurosaki Ichigo. Sin embargo, me fue evidente que la suma del… afecto por su persona y todo lo concerniente a su bienestar, era ¿Cómo lo llaman ustedes? Enorme… aunque ésta es una acotación mal definida. Puedo afirmar, en lenguaje humano, que el Espada definitivamente, lo ama
Ichigo enrojeció, mientras Ishida palidecía, mordiéndose el labio inferior. El shinigami sustituto apretó con más fuerza la muñeca del vulcano
-Onegaishimashou, Spock-san- Ichigo inclinó la cabeza, con una humildad inesperada- le suplico que lea mi mente… o jamás podremos aclarar esto
Spock quedó más desconcertado aún
-Puedo leerlo con el sólo roce de sus dedos en mi muñeca, Kurosaki-kun
-¿Qué es lo que ve?
El vulcano se concentró sólo unos instantes; el shinigami era enormemente fuerte a nivel psiónico… pero no tenía el menor control sobre sus facultades y no hizo siquiera esfuerzo de levantar un escudo. Entre el caos de pensamientos y emociones, Spock detectó dos picos de iceberg. Uno, Kurosaki Ichigo NO amaba a Grimmjow. Y dos, estaba angustiado porque Ishida no creía en él. En ese instante, Spock comprendió que el verdadero k’diwa de Ichigo era Uryuu y no Grimmjow . Se limitó a contestar, tan impasible como siempre
-Usted no tiene interés en el Espada, Kurosaki-kun. Y éste joven –señaló a Uryuu- es su k’diwa, su pareja… la palabra correcta sería t’hy’la… alma gemela, en su idioma
El suspiro en los dos fue obvio. Comenzaron a discutir como si el vulcano frente a ellos nunca hubiera existido
-¿Ves? ¡Te lo dije! ¡Te portas como una histérica!
-¿Qué diferencia hay entre decirte “te lo dije” y “no voy a decirte que te lo dije”, Kurosaki? ¡Y deja de decirme histérica! Soy hombre, carajo
El shinigami alzó al quincy y lo besó en la boca, pese a la evidente fuerza, rechazo y pataleos del otro, hasta que lo hizo ceder, el Borg ahora shinigami y el mestizo vulcano contemplando la escena, con el mismo desconcierto
-AHEM… - se permitió Mayuri- éste es un laboratorio, no un motel. Lárguense de aquí y déjenme trabajar… a menos que quieran que me les una –el brillo en los ojos del Borg fue diabólico. Spock sintió ligeras náuseas. Ishida se zafó de los brazos de Ichigo y se inclinó, reverentemente
-Arigatou, Spock-san. Doumo arigatou… no tengo forma de pagarle lo que acaba de hacer por nosotros
Spock se limitó a asentir y los dos muchachos salieron discutiendo, haciendo tanto ruido como cuando habían entrado.
-No me preguntes qué fue eso, vulcano. No me interesa. Y busca a Grimmjow; es él quien puede ayudarte ahora; mi propio teleportador estará limitado si no consigues que el Espada abra una garganta para sacarlos de aquí…
Sin añadir una palabra más, Mayuri se volvió hacia la computadora. Spock salió sin hacer un solo ruido.