Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sálvame por Pikacha

[Reviews - 26]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aquí esta el capítulo numero dos n.n

Espero y les guste, después de una larga espera.

 

¡¡Gano España!!

¡¡Felicidades a todos!!

 

 

Sálvame
By Pikacha

 

2° Nueva vida, nueva escuela.

Nunca hagas apuestas.
Si sabes lo que has de ganar, eres un pícaro;
Y si no lo sabes, eres un tonto.

 

Ni siquiera dije como me llamo mi nombre es Naruto, soy un chico de cabello rubio y ojos color azul, con unas extrañas marcas en las mejillas con las cuales parezco zorrito, narrando mi historia y olvidando presentarme.

Estoy dentro de mi nueva casa, mucho más espaciosa para mi gusto, de dos pisos, espero que mi cuarto sea el del bacón, me gusta sentir el viento golpeando mi cara, me hace sentir mucha libertad, aunque dudo que papá quiera ponerme una después de lo que paso. Suspiro cansado.

Naruto tu habitación está arriba, es la de la derecha–  dijo mi padre sonriendo, hay días que lo envidio por esa sonrisa.

Con pereza me dirigía a la recamara con mis cosas, bueno solo con la maleta ¿no esperen que yo meta mi cama solo? Bueno subí las escaleras y entre. La habitación era mucho más grande que la anterior, pero no era lo más genial que fuera la del balcón, si no que esta tenía baño propio, Kami-sama si se apiadaba de él después de todo, ahora yo no tendría problemas con su padre por el baño.

Solté una risa pequeña; como me alegraba recordar aquellas tontas peleamos que teníamos papá y yo por la ducha, jugando piedra, papel o tijeras como dos pequeños, haber quien era el primero en usarla.

Veo que ya viste el baño – me dijo papá detrás de mí.

Yo solo asentí como respuesta, no suelo ser muy platicador en ocasiones me gusta tener privacidad y que no me molesten, solo en ocasiones se me puede ver con una sonrisa en el rostro.

– Pronto llegara la mudanza con los muebles, necesitare que me ayudes – me dijo obligando a decir que si con su mirada amenazadora.

Algo me decía que iba a hacer un día súper cansado y así lo fue; limpiando, cargando cosas, moviendo cuadros, limpiando. Desgraciadamente mi padre decía que yo tenía mucha energía y tenía que usarla en algo productivo. La noche llego rápido con la mayoría de cosas puestas en su lugar, cenamos algo ligero y nos fuimos a dormir.

 

°°°

Estaba corriendo por la ciudad en penumbras, ni un alma en la calle se miraba, solo yo corría por estas en total oscuridad, no miraba luz por ninguna parte y él venía detrás de mi… él me iba a alcanzar, mis piernas ya no podían más, pero no me podía rendir, tenía que escapar.

– ¡¡Ayuda!! – grite desesperado, estaba sudando.

Seguí avanzando a una gran velocidad, no podía detenerme, no debía dejar que él me alcanzara ¿Por qué me pasaba a mí? Tenía miedo y quería llorar, ya no era un chico de cinco años al que podían dañar tan fácilmente.

Tropecé con una piedra, no podía detener más las lágrimas, tenía que llorar, debía ahogarme en mi propio vaso de agua, podía sentir su esencia acercarse, pude sentir como respiraba sobre mi hombre en mi espalda.

– Esta vez no está mami para defenderte – me susurro al oído.

 

– ¡¡AHHH!! – grite lo más fuerte que pude.

Cálmate– me decía la voz dulce de mi papá a un lado de mí.

No podía calmarme, él estaba aquí, él me encontraría, me lastimaría.

Los ojos del rubio derramaban gruesas lágrimas de dolor contenido, sus cuerpo se encontraba todo sudado, se movía escandalosamente en la cama, mientras que Minato trababa de tranquilizarlo, pero era inútil. El chico vomito lo que había cenado esa noche y fue cuando reacciono que había sido todo un sueño… un sueño que lo perseguía todo el tiempo.

Yo estoy aquí para protegerte – me murmuro mi padre – todo está bien – me decía mientras me abrazaba fuertemente… yo era débil, muy débil, esa noche llore como un pequeño en los brazos de él, otou-san se dedico a hacerme sentir protegido, algo que jamás iba a sentir.

 

°°°

 

El siguiente día era domingo.

Cuando desperté mi papá ya no estaba conmigo, y yo lo comprendía ¿Quién iba a querer estar con alguien como él? Suspire de nueva cuenta cansado, no tenía sentido levantarme ese día, mi cuerpo todavía se sentía cansado. Mire el reloj topándome que ya era mediodía ¿Tanto dormí?

A los cinco minutos de estar despierto mi padre entro con esa sonrisa que tanto envidiaba – Te prepare algo de comer – me dijo mientras yo lo ignoraba – hice Ramen…–.

 

°°°

Los dos estábamos en la sala mirando la televisión, nos encantan los maratones de series que dan los domingos, ya sea de programa donde resuelven asesinatos, o programas bobos donde la gente hace cualquier cosa por salir en la tv.

Naruto – me decía mi padre cuando estaba saliendo un anuncio de los partidos políticos, sinceramente los odiaba, pero la canción era pegajosa.

mmm…– le conteste, no muy contento, quería escuchar la canción de Raúl.

Mañana entras a la preparatoria– me dijo algo que yo ya sabía – quisiera que fueras un poco más sociable – soltó.

No quiero – le dije molesto, después de que no dejaba escuchar la televisión, le pedía que conviviera con personas que ni siquiera conocía.

Quiero que tengas amigos – decía en tono preocupado, y ahora si lo interrumpí.

– ¡No quiero! – conteste alzándole la voz.

La conversación termino ahí, enojado y murmurando que la gente se mete en asuntos que no le concierne me retire a mi cuarto, entre azotando la puerta al cerrarla  ¿Por qué su padre se metía en algo que no le concierne? ¿Por qué no lo deja en paz?

Si por lo menos el adolecente se diera cuenta de lo tanto que le preocupa su actitud a su papá…

 

°°°

 

El maldito despertador de ranita me levanto a las 5:30 a.m., en fin, casi no tenía sueño así que no fue problema levantarme y bañarme, simplemente deje que el agua se llevara el enojo que Minato me había hecho pasar el día anterior. Desayune lo más rápido que pude, mientras mi padre apenas y se levantaba a las 6:30. Fruncí el seño.

Vámonos – le ordene, él sabía que estaba molesto.

Pero ni siquiera me eh bañado – me contesto sonriendo tratando de justificarse con ese pequeño gesto ¡¡Como la envidiaba!!

Gruñí enojado, no es que fuera un animal ni nada por el estilo, si no que me molestaba que se comportara tan irresponsable – pues desayuna, yo me largo… – le gruñí mientras salía a la calle, mi carácter era demasiado bipolar en ocasiones, suspire de nuevo para echarme a correr una dos cuadras esperando que mi padre no me alcanzara y regañara por mi comportamiento.

Vi como una rubia de cuatro coletas iba corriendo a un lado de mí arrebozándome –ya no corría- , pude ver que llevaba una foto de alguien, esta iba riendo, su sonrisa (por raro que sonara) se miraba un poco macabra.

Suspire de nuevo ¿Qué me esperaba en esa ciudad? Lo mejor sería ignorar eso y seguir maldiciendo a su padre por ser un irresponsable, no sé ni cómo puede cuidar de mí, creo que cuido más yo de él, es un infantil.

Iba cruzando la calle, sin haberme fijado antes sin venia un auto, un grave error cabe recalcar. Estaba tan enfrascado en mis pensamientos que jamás note como un tráiler doble remolque se acercaba a mí.

Cuando reaccione (por el clatson del que me iba a arrollar) ya estaba a punto de aplastarme, me quede en shock total, iba a morir y de una manera horrible, mi rostro era todo un dilema, podía sentir mi corazón acelerarse de una manera increíble.

Dicen que antes de morir podías ver toda tu vida y era verdad, la miraba pasar delante de mis ojos en menos de un segundo, podía recordar cosas que antes no, cuando era pequeño, la última vez que había mirado a mamá, incluso cuando conocí a Karin.

Mi corazón, mi palpitar estaba súper acelerado, mi vida se estaba acabando y yo no hacía nada para salvarla… tal vez era así como debía de acabar.

Justo cuando sentí que todo había terminado, que había llegado mi hora, cuando sentía que por fin iba a estar con mamá, alguien me tomaba entre sus brazos, salvando mi patética existencia.

La caída fue suave, más suave de lo que debería de ser, mis ojos los tenía cerrados por el miedo que había sentido, cuando comencé a abrirlos mire unos ojos preciosamente verdes, un verde claro, un verde que me envolvía, que me hacía ver vida, un verde que me daba inspiración, un verde que me enamoraba. Saliendo de mi embobamiento por el verde (recalco que nunca me había gustado ese color), mire que estaba sobre un atractivo chico pelirrojo, su cabello rojo se miraba tan vivo.

¿Te encuentras bien? – me pregunto sacándome de nuevo de ese embobamiento.

Esa voz era tan… esperen ¿en que pienso?yo…– estoy nervioso ¿desde cuándo?

Creo que amortigüe bien el golpe – me dijo con una pequeña sonrisa en los labios.

Esa sonrisa era tan… sentí como un calor me recorría la piel, sonrojando mis mejillas – yo…– ¿Qué era lo único que podía decir? ¿Qué va a pensar de mí? Que soy un idiota que ni siquiera puede hablar.

Si no es mucha molestia–  me decía, mostrando sus dientes perfectos – ¿podrías levantarte?—pregunto cortésmente.

Claro que sería mucha molestia, no vez que me siento muy bien… no podía creer en las cosas que pensaba, moví mi cabeza tratando de despejar esas cosas y me puse de pie lentamente ¿Qué? Tenía que disfrutar el momento. Entonces me di cuenta de que llevaba el mismo uniforme que yo, después de todo si tenía suerte.

Mi nombre es Gaara – me dijo mientras se ponía de pie.

Mucho gusto – le susurro un poco apenado, parezco colegiala enamorada – soy Naruto – por lo menos ya puedo formar frases completas.

El gusto es mío – decía sonriendo y limpiando su uniforme– veo que vamos a la misma escuela –.

– Eso creo…– le dije, que bien ya no titubeaba.

Bueno – sentía que se iría – me tengo que ir – soy adivino – te veo allá – me dijo despidiéndose con la mano, para después salir corriendo mire como se dirigió a la chica que antes había mirado correr a un lado de mi, pude ver como la rubia fruncía el seño enojada regañándolo por algo, sentí como si fuera mi culpa, seguido de eso la chica le sacaba la lengua al otro y salía corriendo – ¡¡Temari!! ¡¡Devuélvemela!! – lo escuche gritar.

Sonreí de medio lado con las mejillas sonrojadas, aquel chico hacia qué mil sensaciones recorrieran mi cuerpo, parecía embobado, cuando me di cuenta de lo estúpido que me debía de mirar me fije la hora… faltaban diez minutos para la primera clase, me había distraído demasiado. Comencé a correr hacia el instituto.

 

°°°

 

Llegue a las puras siete a las puertas del salón, no es mi culpa haberme perdido tres veces, bueno tal vez fueron cuatro, pero ¿Quién contaba? Entre al aula esperando que el maestro se hubiera perdido y no hubiera llegado, efectivamente y para mi suerte era así. Comencé a caminar buscando un pupitre donde sentarme y me dedique a mirar a mis compañeros, casi todas las chicas estaban sentadas en la paleta de su mesabanco cuchicheando de quien sabe que cosas, mientras tanto los varones estaban en algún rincón y por lo que miraba esas revistas no eran precisamente de biología.

Ignorando aquello, busque de nuevo un lugar donde sentarme, pero al parecer todos estaban ocupados, o nadie le quería ceder un lugar, bueno para que engañar los demás también lo ignoraban a él, bueno solo una chica que jugaba con sus dedos no.

– ¡¡Te digo que no!! –  se escucho una voz que gritaba, mejor dicho se escucho esa voz.

Dirigí mi vista a la puerta, ahí estaba Gaara gritándole a un chico de cabello azabache, demasiado negro diría yo, sus ojos también lo eran, eran misteriosos, tan misteriosos como la noche, su piel era un poco pálida. En su boca estaba marcada una sonrisa de medio lado que indicaba superioridad. Todas las chicas voltearon a ver cuando ese entro al lugar.

Yo simplemente ignore ese gesto de ellas, y me sonroje cuando mire que Gaara me dirigía una mirada solo a mí. Los dos chicos se me acercaron.

Hola Naruto – me dijo dedicando una pequeña sonrisa a mi persona ¿Cuántas sonrisas envidiare? Él es Sasuke Uchiha – me presento a su amigo.

Las chicas suspiraron enamoradas, al parecer estaban obsesionadas con él, no hacían más que desnudarlo con la mirada, no es que el azabache estuviera feo, estaba como quería...¿yo pensé eso?

Mucho gusto–  le dije, mientras estiraba mi mano para saludarlo, pero el muy bastardo ni siquiera se digno a mirarme y siguió caminando, ignorándome completamente.

– No te preocupes – me susurro Gaara al oído – él es así – aseguro, mientras yo de nueva cuenta me sonrojaba – ven vamos a sentarnos – me invito, caminamos hasta los últimos asientos, el Uchiha se sentó junto a la ventana, ahora sí que lo envidiaba.

Gaara se sentó a un lado de él, así que yo me senté enfrente de Sasuke, no tendría ningún problema si quería hablar con mi pelirrojo, esperen… ¿dije mi?

El profesor llego en cuanto me senté. Su cabello era castaño, y su cabello venia sujetado en una cola alta, tenía una cicatriz algo grande que atravesaba su nariz, sus mejillas venían rojas y estaba murmurando algo, pero como estaba hasta atrás no escuche nada.

Hola chicos– saludo cortésmente mostrando una sonrisa verdadera, mientras se rascaba la nariz – Soy Iruka Umino y seré su profesor de literatura – se notaba nervioso– espero que podamos llevarnos bien – enseguida empezó a anotar su nombre en el pizarrón, junto con su asignatura – a ustedes no los conozco, así que gustaría que se presentaran – pido amablemente.

Se empezaron a presentar por filas de derecha a izquierda, yo estaba entre las últimas de la izquierda así que no había problemas. Los chicos solo decían su nombre, lo que les gusta y lo que no, y si querían sus metas.

Yo soy Sakura Haruno– decía una hermosa chica de cabello pelirrosa, si no fuera doncel tal vez ella sería la chica con la que quisiera estar – lo que me gusta… el chico que me gusta – en ese momento empezó a violar a Sasuke con le mirada, ok… esa chica quedaba descartada.

Varias comenzaron a hacer lo mismo que Sakura en la presentación ¿es que no se tenían amor propio? Suspiro derrotado al escuchar como una decía que se casaría con ese bastardo.

Etto–  ahora un chica de piel blanca y con ojos color perla se ponía de pie – soy Hinata Hyuga…– fue lo único que se animo decir después de casi tener un colapso nervioso, después de todo creo que yo y ella seremos grandes amigos.

¡¡Yahoo!! – Ahora el chico de atrás gritaba escandalosamente – Soy Kiba Inuzuka – se presento mientras mostraba una gran sonrisa – adoro los perros y lo que odio son las pulgas – dijo mientras miraba a un su compañero de a lado con odio, este tenía unas gafas oscuras puestas.

Mi nombre es Shikamaru Nara– decía uno que ni siquiera se había puesto de pie – me gusta ver las nubes…esto es problemático – dijo haciendo reír a más de uno.

El chico que Kiba miro con odio se puso de pie – Soy Shino Aburame – dijo con voz fuerte y hasta un poco escalofriante – me gustan los insectos y odio los insecticidas – aclaro, alrededor suyo se sentía un aura maligna, mientras que el castaño del Inuzuka sacaba uno de su mochila.

Parece que aquellos tenían una rara rivalidad.

Hola a todos – saludo un chico gordito con unas papitas adobadas entre sus manos – soy Choji Akimichi – hablo mientras se metía unas tres papas a la boca, después de masticarlas agrego – me encanta comer – dijo sonriendo.

Una rubia ahora se puso de pie– Soy Ino Yamanaka – decía pero deje de prestarle atención cuando comenzó a desnudar a Sasuke en su triste fantasía.

¡¡Hello!! – Exclamó una castaña, poniéndose de pie – Yo Tenten – dijo sonriendo, y a comparación de otros esta se dedico a mirar a uno de sus compañeros – me gusta salir con mi novio – dijo riendo, gracias a kami-sama esta no alabo al Uchiha.

Soy Neji Hyuga–  dijo el muchacho al que la castaña había mirado, imagino que él debe de ser el novio. Este no digo nada más y sentó, se mira amargado.

¡¡WOW!! – Grito un chico – Yo soy Rock Lee – dijo mostrando esa enorme dentadura blanca – ¡¡Vivo la flor de la juventud!! – Volvió a gritar – me encanta el deporte – ese chico era el más raro de todos, tenía enormes cejas y su peinado de hongo era súper extraño, sus ojos parecían de bicho, con pestañas de Bob Esponja.

Por fin llego el turno del pelirrojo – Soy Gaara – hablo con esa voz – me gusta pasar mi tiempo…– miraba como movía su boca pero no sabía ni lo que decía, se sentía un poco bobo por ese comportamiento tan tonto.

Después de eso llego mi turno, pero no tenía nada que decir – Hola – dije con mis mejillas rojas – Mi nombre es Naruto Uzumaki – no supe más que decir y me senté.

Mi nombre es Sasuke Uchiha–  oh que bien, el bastardo hablaría – no me gusta nada en particular – decía mientras las chicas babeaban por él – me disgustan muchas cosas – que novedad – y odio las molestias – creo que eso va para las chicas, pero en vez de hacerlas enojar, las hacia babear más por él, tal vez lo hacía a propósito el bastardo.

Valla eso había sido largo.

Bueno creo que son todos – dijo el sensei – la hora se acabo – una sonrisa se formo en sus labios – nos vemos mañana – después de eso salió del aula.

Gaara se acerco a mí, logrando que otro sonrojo apareciera en mi rostro – Naruto – su nombre escapar de sus labios sonaba hermoso -- ¿Qué te gusta hacer? – pregunto curioso.

Ahora sí que no sabía que decir, no tenía ningún pasatiempo ni ninguna de esas cosas, y ni que se diga de mentir, porque era algo que ni siquiera se le daba bien.

Antes de que pudiera decir algo, el arrogante hablo – Él no podrá – dijo con una sonrisa de superioridad.

Claro que podrá – lo reto Gaara.

¿Qué cosa? – pregunte curioso.

Naruto, ¿tu jugarías futbol con nosotros? – cuestiono el pelirrojo, mientras yo me desconcertaba, yo no sé nada de futbol, ni me gusta el deporte.

– Si te llevas a este dobe contigo, perderás Gaara – dijo el Uchiha.

¡¡Me acaba de llamar dobe!! ¿Qué se cree? No me dejare, maldito bastardo, hay que regresarle el cumplido – yo puedo contra ti, teme – dije sin pensar.

Valla–  exclamo el azabache – parece que tienes coraje, usurotonkachi – me dijo en tono burlesco.

Hagamos una apuesta, si te parece Sasuke – ofreció Gaara – él que pierda será esclavo del otro por un día – dijo en un tono tentador.

– Entonces serás mi esclavo, dobe – hablo con su tono arrogante, dando por hecho que yo perdería.

Ni lo sueñes, teme – estaba molesto. Nos echamos unas miradas de eterno odio, ¿Cómo alguien podía ser tan molesto?

Los dos aceptamos al mismo tiempo, mientras que Gaara se ponía feliz.

 

 

Continuará...

 

Notas finales:

Poco a poco mejorara, se que parece más un GaaNaru, por parte de Naruto, pero con el tiempo cambiara.

Gracias a los que me dejaron un hermoso review, LOS AMO.

Un enorme agradecimiento a:

-KAITOSAMA96

-Kathleen

-relojes Montblanc

-watchesloot

-Midorico

-marizu194

-Alex

-luna

-Luna Bella

-michii

-dangeroOuz

¡¡LOS AMO!!

Y TAMBIÉN A LOS QUE LEEN QUE NO DEJAN REVIEW n.n

Nos leemos en el siguiente.

 

Los quiere Pikacha


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).