Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ésa promesa por aishiteru_sama

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii

Notas del capitulo:

¡Wooo! ¡tanto tiempo sin subir algo por aquí! XD No pueden culparme, ya estoy en fechas de trabajos finales... ¡y son la muerte! ¡ARGH! Además de que ya tengo... "otro" tipo de ocupaciones como chica jejejejejejejeeje ¡SE-CRE-TO

 





Prólogo

 





-Es q-que no es justo...





-Lo sé...





-¡No quiero que suceda! -soltó en un grito mientras el agua caía sin control de sus ojos grises -¡No quiero! ¡No quiero!





-Yo tampoco... -también lágrimas, aunque de forma más discreta, se deslizaban por sus mejillas -Yo tampoco quiero...

 

 

 

 

Estaban debajo de un enorme y frondoso árbol. El viento soplaba entre sus hojas y provocaba la caída de algunas, indicando que el otoño no tardaba en llegar

 

 

 

 

Ése aire frío sólo acentuaba lo desolador del momento





-¡¿No puedes hacer nada?! -preguntó desesperado -¡A  lo mejor si les dices que quieres quedarte...!





-Ya lo hice... -interrumpió con una sonrisa triste -Y no me escucharon... jejeje así son los padres





-¡Quizá si te quedas en mi casa...!





-No quiero ser molestia...  ya tienes suficientes problemas con Cross como para que yo lo complique más...





-¡Tú jamás serías molestia!- dijo seguro -¡Nada me haría más feliz que estuvieras conmigo, aquí, para siempre! ¡Es la verdad, Lavi!





-Allen...

 

 

 

 

Lavi Bookman. 11 años. Un niño de cabello rojo y ojos verde esmeralda... sin embargo, el derecho era oculto permanentemente por un parche de algodón, pues había sufrido un accidente que le dejó ciego de ése ojo; aún así era uno de los chicos más guapos de su edad. De 1.40 m, delgado y piel apiñonada. Era amigable, juguetón y muy inteligente, poseedor de una excelente memoria y la habilidad de recordar exactamente cuanta cosa viera

 

 

 

 

Allen Walker. 9 años. Cabello blanco-plateado y ojos grises. Una larga cicatriz le atravesaba desde la frente hasta la mejilla en la parte izquierda del rostro: un fuerte accidente de automóvil se la había hecho; sin embargo, ésa marca le daba cierto aire exótico y acentuaba de manera extraña sus lindos rasgos. De 1.34 m, delgado y piel blanca. Amable, educado y con en excelente talento para tocar el piano

 

 

 

 

Ellos eran los protagonistas de tan amarga escena...

 

 

 

 

Se habían conocido cuatro años atrás cuando Allen se mudó al vecindario y Lavi, al vivir a su lado, inmediatamente fue a conocerlo.

 

 

 

 

Luego de que el más joven le contara su accidente, la muerte de sus padres y el infierno que vivía con su tutor Cross Marian, Usagi le hizo la promesa de protegerlo y estar siempre ahí cuando lo necesitara

 

 

 

 

Desde entonces fueron inseparables... al menos hasta ése inevitable momento,  en el cual Lavi se iría a vivir a otro país por el trabajo de sus padres





-¡No te vayas! -de pronto le atrapó en un desesperado abrazo; hundió la cabeza en su pecho -¡No te vayas, por favor! ¡No quiero! ¡No quiero!





-Tampoco quiero irme -correspondió el gesto con igual fuerza; recargó su cabeza en la del contrario -¡No quiero irme!





-¡Entonces no lo hagas! - le miró suplicante y con una sonrisa esperanzada -¡Vámonos! ¡Huyamos de aquí!





-¿Y a dónde iríamos? -sonrió con compresión: Walker era más pequeño y, por lo tanto, poco consiente de lo que implicaba ése proposición. Aún así quería terminar de oírlo: le aliviaba de cierta manera





-¡Iremos con Kevin Yeegar-sensei!





-¿El maestro a cargo de la Biblioteca?





-¡Sí! ¡¿No recuerdas que hace unos días nos dijo "-Cuando necesiten algo no duden en pedírmelo"?! ¡Es hora de aprovecharnos!





-Pero seguramente no se refería a esto -suspiró -¿Qué cara pondrá cuando le pidamos que nos esconda?





-¡No le vamos a pedir eso! -sonrió con travesura





-¿No?





-¡No! Sólo le diremos que nos dé asilo por ésta noche. Mañana a primera hora nos salimos de su casa y caminaremos a la estación de trenes, ¡abordaremos el que nos lleve más lejos!





-¿Y cómo pagaríamos los boletos?





-He ahorrado un poco -en su cara se leyó "victoria" -Son como $700, ¡nos alcanzará hasta para rentar una habitación!





-¿Cómo conseguiremos más dinero?





-He tenido que aprender a ganar en los juegos de azar para pagar las deudas de mi tutor -unos cuernitos le salieron por la cabeza -Yo nunca pierdo kukukuku -de pronto volvió a su gesto de convencimiento -¡Puedo ganar dinero para que sigas estudiando!





-¿Tú me mantendrás? -era... adorable...





-¡Sí! ¡Lo haré con tal de estar contigo para siempre! ¡Todo para que tú...! ¡Tú...! -nuevamente de sus orbes cayó agua -¡Por favor, Lavi! ¡Vámonos de aquí! ¡Si quieres hasta saco tus cosas del auto! -se aferró con mayor ahínco - ¡Pero no me dejes! ¡No me dejes!

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...





-... ¿Por qué no quieres que me vaya?





-¿Eh? -le miró con confusión -¿Por qué...?





-Sí, ¿por qué? - hablaba serio; su sonrisa se había ido y le miraba... de una manera tan brillante -¿Porqué no quieres volver a quedarte solo? ¿Porqué sin mí ya no tienes a dónde escapar de Cross? ¿Porque ya no te ayudaré con la tarea?





-Pero... ¿Qué dices? - le sujetó fuerte por el cuello de su sudadera -¡No quiero que te vayas porque te extrañaría! ¡No sólo por la tarea, o los juegos! ¡Sin ti yo...! ¡Yo...!  -sintió cómo la sangre se acumulaba de golpe en sus mejillas -... yo...





-¿Me quieres?





-¿Qué?





-¿Me quieres? -repitió; ahora lo aprisionaba por la cintura -No me refiero a un querer de vecinos o compañeros, ni siquiera como el de amigos...





-Te refieres... ¿a la manera en que se quieren los papás?





-... y los novios... -seguía tan serio -Es decir, ¿estás enamorado de mí?

 

 

 

 

No respondió... sin embargo optó por abrazarle más y hundir de nueva cuenta la cabeza en su pecho

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

... asintió levemente mientras sentía su corazón palpitar como nunca...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...de verdad le quería...





-¡Entonces es una promesa! -dijo con voz fuerte y animada; se separó un poco para verle mejor -¡Te haré una promesa!





-¿Promesa?





-Yo... no puedo quedarme... ¡pero puedo volver!





-No... entiendo...





-¡No te preocupes, Allen! ¡Volveré por ti cuando haya comprado una linda casa y tenga un trabajo decente! -sonrió hermosamente -¡Así que no te atrevas a mudarte! ¡Te prometo que volveré! ¡No importa el tiempo que pase!





-¿De verdad? - también sonrió, aunque sus ojos llorosos hacían un dramático contraste  -¿D-De verdad?





-¡Claro que sí! Pero... ¡jamás te perdonaré si te casas con alguien más! -su cara se sonrojó a más no poder -¡TÚ Y YO NOS VAMOS A CASAR CUANDO VUELVA POR TI!

 

 

 

 

Ellos... ¿casarse algún día?





-L-Lavi... -le miró con toda la inocencia que podía expresar un niño de su edad enamorado -¿Casarnos?





-¡Te lo prometo, Allen! -continuó con la determinación brillando en su orbe esmeralda -¡Regresaré por ti y nos casaremos! No importa si somos chicos, ¿verdad? Eso no impedirá que seas mi esposo... porque yo... ¡YO DE VERDAD TE QUIERO!

 

 

 

 

Y antes de darse cuenta sus labios estaban unidos...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Era un toque simple, sencillo, con una presión no mayor de la necesaria pero la suficiente para indicar que era a voluntad...

 

 

 

 

No hubo más que eso... pero era lo más maravilloso que había sentido en toda su corta vida...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Sin perder tiempo devolvió ésa presión al mismo tiempo que subía temblorosamente sus manos al pecho de Usagi... y éste, notándolo, aprisionó con mayor emoción la estrecha cintura...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Sí, un beso de amor infantil... pero sin duda real...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Se separaron luego de unos 10 segundos. Ambos tenían la cara roja, la respiración acelerada y una sonrisa tiernísima





-Allen... -aún se negaba a soltarlo -¿Tú también me quieres?





-¡Sí! -respondió sin dudar -¡Te quiero! ¡Te quiero!





-¿Vas a esperarme?





-¡Siempre te esperaré!





-¿Te... casarás conmigo?





-¡Por supuesto que sí!





-¡Es una promesa!

 

 

 

 

Juntaron sus frentes... y se miraron mientras sonreían...

 

 

 

 

Ésa sería su promesa... sólo su promesa





¡CLAC! ¡CLAC! ¡CLAC!

 

 

 

 

Sonó el claxon del automóvil de sus padres. Se soltaron por inercia





-¡LAVI!- llamaba la voz de su madre -¡Lavi, ya vámonos! ¡Despídete de Allen-chan y regresa!





-¡Ya voy! -contestó -¡Un minuto!





-¡Pero sólo uno! Si tardamos más perderemos el avión!





-Lavi... -volvió a llamarle con tristeza -No te vayas... ¡No ahora! ¡No cuando te quiero de ésta forma! ¡No es justo!





-Ya te dije que no puedo quedarme... es hora de partir...

 

 

 

 

Walker quiso abrazarle otra vez...  pero cuando lo intentó... se apartó...





-Lo siento... -ya no le miraba -Si te vuelvo a tocar... seguramente yo... te haría caso con eso de huir...





-¡Lavi!





-¡Es una promesa! - le dio la espalda- ¡ES UNA PROMESA!

 

 

 

 

Y con esto salió corriendo en dirección al auto





-¡NO! ¡NO TE VAYAS! -le persiguió -¡TE QUIERO, LAVI! ¡TE QUIERO!





-¡YO TAMBIÉN TE QUIERO! -gritó mientras seguía corriendo y sin mirar atrás -¡TE QUIERO, ALLEN! ¡RECUERDA MI PROMESA!

 

 

 

 

Finalmente llegó al carro y abordó presuroso. Su madre hizo lo mismo y su padre arrancó de prisa





-¡LAVIIIIIII!

 

 

 

 

No lo alcanzó: sus cortas piernas no le brindaron mayor velocidad...

 

 

 

 

Llegó a la acera cuando el auto ya estaba desapareciendo en la esquina





-¡LAVIIIIIIIIIIIIIIIIII! -exclamó con todo el aire que tenía

 

 

 

 

Pero ya era tarde...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Ya se había ido...





-¡ES UNA PROMESA! -gritó a la nada mientras seguía llorando -¡ES UNA PROMESA, LAVI! ¡UNA PROMESA!

 

 

 

 

Y ahí se quedó: parado en ésa banqueta mirando la dirección que había tomado su amigo...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Estaba solo... con el corazón lleno de ése amor que ahora lo lastimaba...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Tenía frío... el aire no dejaba de soplar y congelarle los huesos...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

Las hojas del árbol donde solían jugar se regaban  por la calle, muertas y secas...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

...

 

 

 

 

... ya todas se habían caído...

 

 

 

...

 

Notas finales:

ARGH!!! SOY UNA CHICAAAAAAAAA! *se pega la cabeza en la pared una y otra y otra y otra vez*


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).