One day at Zero´s Life por yuukiyuki

ONE DAY AT ZERO´S LIFE.

Lo odio, lo odio y lo amo tanto, es lo mas bajo que he caido y existen veces en las que creo que todo es un extraño sueño y espero a despertar recostado en la paja con ese caballo velando mi sueño (si, suena patetico y antisocial, pero y que?!) pero, al parecer, eso no sucedera.

La corbata roja es lo unico que falta ahora para completar mi uniforme de la academia, Dios, odio esas cosas, solo sirven para estorbar y para aparentar ser una soga al cuello cuando uno esta deprimido.
Por un efimero momento pienso en dejar esa cosa de nuevo en el cajon, pero lo reconsidero, ya puedo escuchar a Yuuki diciendo "porque no traes tu corbata Zero, somos los prefectos y bla bla bla" dejo de escucharla como a los 15 segundos de que empiezan los regaños, no es mi madre maldicion!
Casi olvido la insignia de prefecto, que es por lo que habia vuelto en primer lugar.
Las cosas, podria decirse que volvieron a la "normalidad"...como si pudiera ser, hablando serios, que cosa de esta academia es normal? Vampiros con humanos? bien, no me quejare, no hay animos el dia de hoy para eso.
Salgo del cuarto, uno de los grandes ventanales tiene una linda vista de las puertas que separan los edificios de la luna de los del sol, el bullicio de todas las alumnas del turno matutino llega hasta mis oidos como un sonido molesto, ella ya esta ahi, subida en las paredes pidiendo a gritos que el mar de hormonas retroceda, siendo ignorada, como suele ser costumbre, y *suspiro* si, como suele ser costumbre tambien, todo indica que tendre que salvarla de nuevo.
Comienzo a caminar a paso lento en direccion a la salida, mientras camino su largo cabello del color del chocolate acude a mi mente, me pregunto porque nadie de los de la case diurna se cuestiona como es que un dia ella tenia el cabello al hombro y al siguiente le da a la cintura, son estupidos o que cosa?
Alento aun mas mi andar, dejarla sola unos minutos mas no le haran daño a la princesita, ella puede sola perfectamente bien con la bola de psicopatas enagenadas, y el presidente de la clase.
Su profuso amor hacia Ruka aun resulta tan misterioso para mi como la receta secreta del pollo del coronel Kentucky, como es que puede gustarle tanto esa engreida malhumorada, digo, si fuera Rima o incluso Seiren, lo comprenderia, pero Ruka? santo cielo, eso es a lo que llamo tener caracter.

Una mirada, y todas estan detras de la linea amarilla imaginaria, las puertas se abren acompañadas de un tortuoso rechinar algo escalofriante, contengo la respiracion, por que, pues...quien necesita el maldito aire?! si, lo admito, puede que el pulso se me halla acelerado un poco, pero fue por el cansancio de lidiar con la locura femenil! no por otra cosa!

Y ahi estan, el cuadro perfecto de vampiros parados a la puerta, con sus trajes blancos dandoles la apariencia de angeles que no son, porque demonios se quedan parados en seco con una pose de modelo? yo no veo camaras en ningun lado, no veo la necesidad de...eso fue un flash?! matare a la maldita que se halla atrevido a tomar una foto bajo MI guardia.
Da inicio el show, creo que caminan en camara lenta a proposito, ni siquiera los guardianes de la bahia caminaban con esa lentitud, Hanabusa no pierde la oportunidad de filtrear con quien se le ponga enfrente y de lucirse ante el mundo, detestable.
Uno a uno, van pasando y dedicandome miradas de desprecio, y a Yuuki miradas de sumision obligada, yo devuelvo todas y cada una de esas miradas con la mayor repulsion posible, ella no para de mirar el suelo avergonzada, tipico.

Al final de la caravana, al pasar tu, sonries, imperceptiblemente, un gesto tan perfecto y tan sutil que solo yo puedo notar, se que mi pulso ya no puede estar mas alto asi que solo escondo la mirada bajo una fina cortina de pelo, fingiendo que tu simple precencia me da ganas de vomitar.
Soy un cazador de vampiros, o no? eso me dijo Yagari, los cazavampiros no se ruborizan joder!!!

Las reacciones son la cereza del pastel, el enorme enfado de Hanabusa y Ruka, la indiferencia de Shiki y Rima, los celos de Ichijou y Takatsuki, ira impotente de parte de Seiren, y la gloriosa aura de felicidad que emana de todo tu ser producto de mi sonrojo (totalmente inconciente!) y que me hace pensar, estupidamente agreguemos, que podria vivir hasta la eternidad alimentado de solo eso.

Se acaba el desfile, todos se dispersan y ahora se suppne que lo siguiente en mi lista de cosas por hacer es matar las horas que vienen escondido del agobiante mundo humano recostado en un pedazo de pasto, esperando, ehem...a que terminen tus clases...no con ansias, por si se te paso por la cabeza, engreido.

Deberia estar ya cansado de hacer esto todos los dias, pero lo cierto es que este pedazo de tierra en particular es especialmente relajante y es sumamente agradable no hacer nada en compañia de la refrescane sombra del arbol
Solo me siento, estiro mis piernas y cierro los ojos.
No pasa ni un minuto cuando un dolor que por desgracia conozco tan bien como la palma de mi mano me quema toda la garganta obligandome a abrir los ojos de golpe, las pupilas desorbitados seguramente, y rojas como la sangre, también seguramente *suspiro*
Mi mano temblorosa se extiende hasta alcanzar el pequeño paquetito negro con una rosa roja grabada en la parte superior y mecanicamente extraigo una pastillita de su interior.
Aun no puedo digerirlas enteras, las malditas tabletitas saben a los mil demonios, asi que ahora, en vez de disolverlas en agua, tengo que partirlas en trozos pequeños, casi hechas polvo, debemos agradecer a Ichijou la idea.

Hn...Senri tiene razon! no habia notado hasta ahora que esto parece cocaina, ahora entiendo porque aquella vez que el director me encontro con el polvo en cuestion en la mano casi sufre un infarto, y porque despues trato de arrastrarme a esa mierda de drogadictos anonimos, solo para aclarar, si esto fuera coca tendria que inhalarla por la nariz, no mencionare porque tengo conocimiento de ello -_-

Maldición! Tampoco creo necesario tener que decir que el polvito sabe aun peor que la pastlla, pero no se como es que asi mi organizmo no lo rechaaza, creo que simplemente le gusta sufrir.
Ya empieza a oscurecer.
Una vez que se calma mi apetito puedo volver a recostarme y cerrar los ojos, lo unico bueno que le veo a esto de ser una sanguijuela es esa hermosa caracteristica de tener agudizados los sentidos, siendo humano jamas habria percibido de esta manera el aire rozando en mi cara, el aroma de las flores llegando a mi nariz, el...

De repente se pudre el ambiente...- digo yo casi mecanicamente sin abrir los ojos -Que mierda haces tu aqui?- le pregunto, el maldito toma asiento a mi lado y yo sonrio de lado -Oh, es que al señor Kuran no le preocupan las manchas en su blanco uniforme?- dio burlonamente, siento su mano apartando unos mechones de cabello de mi frente, lo hace tan tiernamente que se me revuelve el estomago

-Asi me agradeces que me salte las clases para visitarte?- me pregunta con ese tono de voz tan atrayente y tan suyo, giro un poco la cabeza para quitar su mano de mi rostro y a la vez para evitar que me mire sonrojado y el se rie, su risa resuena en mi cabeza

-De que demonios te ries Kuran???!- grito yo enfadado levantando la mitad de mi cuerpo del pasto y recargando la espalda en el tronco del arbol, el se me queda mirando divertido y eso solo puede aumentar mi enojo, le tomo del cuello de la camisa con rudeza, mi mano libre esta hecha un puño dispuesto a romperle toda su asquerosa cara de vampiro engreido, su imposiblemente hermosa cara de...NO!!!
El, con una tranquilidad que lo mires como lo mires no embonaba con la situación, coloca su mano sobre la mia, la que le iba a romper toda su maldita cara, y esta, traicionando a su dueño, se relaja de inmediato, por mas que quiero no puedo volverla como estaba, es mas, ella lo obedece a el y no a mi, Kaname acaricia mis dedos, lentamente los va moviendo para que queden enlazados con los suyos, y mientras lo hace su expresión se vuelve la de un niño que juega a moldear cosas con plastilina.
Cuando termina intento soltarme pero ya es demasiado tarde, mi otra mano tambien ha sido vilmente sometida, solo con mirarla con sus ojos envenenados Kuran ha hecho que ella descanse sin vida a mi costado, entonces el maldito lo aprovecha, me toma de la cintura como a una delicada damicela (que lo halla dejado...bueno...que siempre lo deje hacerlo no significa que acepte ser comparado con una damicela...) y acerca su rostro al mio, clavandome su hipnotica mirada.
Para escapar de ello hundo mi rostro en el hueco de su cuello y el hace lo mismo, el olor de su piel supera por mucho al de cualquier flor que exista en este planeta

-Hazlo...- me susurra sicalipticamente, cual si esa fuera una palabra clave para activarme mis ojos tornan de color, rojos de nuevo, y yo me quiero resistir, pero mis colmillos estan afuera, rozando su palida piel, saboreando su sangre prohibida incluso antes de tenerla
Por mas que intente resistirme lo hago casi desesperadamente(aclarando que al final fue porque yo quise y no porque él me lo halla ordenado), sus manos se aferran con un poco mas de fuerza a mi, le ha dolido, y el saber eso me llena de felicidad, el lo sabe, y muy egoistamente se guarda sus gemidos para si, nunca me ha dado el placer de escucharlo gemir aunque sea solo un poco.
Y la sangre brota para alimentarme, exquisita y dulce como solo la de el lo es, la tomo hasta que me harto el paladar, luego lamo  la herida que acabo de provocar y la sangre deja de fluir en un instante, mis sentidos estan un tanto aturdidos aun cuando lo siento, ese mismo dolor que yo provoque me es dado de vuelta, también me aferro a el para no gemir, aprieto la boca con fuerza, y esas sensaciones placenteras me van llenando el cuerpo, primero rapido, luego lentamente, el dolor quedo atras hace mucho.
Es un placer que me nubla los sentidos, alzo mi borrosa vista al cielo oscuro sobre nuestras cabezas,  la luna se ve tan cercana que siento que si alzo la mano la podre alcanzar, el unico sonido que escucho es el de Kaname alimentandose de mi.
Cuando retira sus colmillos lo hace de una manera muy suave, lugo lame lentamente la herida y deposita un beso en esas dos pequeñas marcas que me hacen de su posesión, traza un camino con sus suaves labios hasta mi boca, va dejando manchitas rojas por todo mi cuello, cuando llega a mi mejilla su mano se aparta de mi cintura y me toma el menton obligandome a mirarlo con algo de rudeza

-Kiryuu...- susurra, su respirar me hace cosquillas y su cercania me incita a deshacer la distancia que nos separa

-Kuran...- susurro yo también, se que siente como mis labios se mueven al hablar, que tiene de exitante llamarnos por el apellido? no lo se? pero exita...
Sin preguntarme me besa, me obliga a separar los labios y a probar de mi propia sangre mientras que el prueba la suya, cuela su humeda y caliente lengua en mi boca, la enreda habilmente con la mia en una frenetica danza por ver quien consigue el dominio del beso.
Mas, esta noche es la milesima onceava vez que perdere, que le dejare recorrer cada centimetro de mi piel con su malvada boca y le permitire penetrarme hasta que se le agoten las fuerzas.
Como paso ayer y como *sonrisa* seguramente sucedera mañana

-Es a mi a quien sonries de esa manera?- me pregunta mientras desliza fuera la roja corbata y comienza a desabotonar el saco negro

-Quisieras...- le respondo con un tonito socarron

-Me vas a obligar a hacerte sonreirme entonces Kiryuu?- inquiere desabotonando su saco y su camisa

-Te voy a dar la oportunidad de intentar hacerme sonreirte Kuran, pero te advierto que no sera sencillo- digo apartando esos pedazos de tela estorbosos y dedicandome a lamer, chupar y morder su perfecto pecho.
Y me preguntaba como es que no me aburre hacer lo mismo todos los dias?
Si, por desgracia yo, a Kaname, Kuran, este seductor, engreido y perfecto rey de las sangüjielas lo odio, lo odio y lo amo tanto....