Miro esos ojos grandes de color cafe, el cabello negro y ondulado, tu piel tostada, tu rostro, tu sonrisa y escucho tu voz.
- Feliz cumpleaños- te dije al abrazarte.
- Gracias- correspondite a mi abrazo.
- Yo...no sabia que darte- mire al piso- no sabia que querias de regalo, Atsuko.
- Sumiko- oigo mi nombre a lo lejos- SUMIKO.
Salgo de la ensoñacion en la que me encontraba... otra ves me perdi en mis recuerdos.
- Perdon- te sonrio, ahi estas mirandome.
- Otra ves recordando, ¿cierto? - te sientas a mi lado.
- Perdon- se que te digo eso todos los dìas, pero no puedo evitarlo.
- Ella ya no ...
- ¿Quieres saber que quiero de regalo?- te acercaste a mi.
- Si- tomo tus manos.
- No importa lo que te digas debes jurarme que me lo daras- me tomas de los hombros- ¿lo juras?- me miras fijamente.
- Te lo juro- contesto confundida.
- Quiero un beso tuyo como regalo.
Esa forma de ser tan directa me enamoro, el como decias las cosas sin temor al que pasara me gustaba tanto.
- Es hora de ir a la escuela- tomas mi mano.
- Si- miro a mi al rededor... todo en mi habitacion me hace pensar en ti, los recuerdos son como ruinas en mi corazón que hicieron sus bases en lo mas profundo de mi alma
.- ¿Un beso mio?- me sorprendi- pero tu eres una niña como yo- no comprendia, pero dentro de mi eso era lo que mas deseaba hacer cada ves que te veia.
- ¿No quieres?
- ¿Me quieres?
- Por supuesto- me contestaste convencida.
- Entonces si quiero darte un beso como regalo de cumpleaños.
Te acercaste a mi lentamente, pusiste tus brazos al rededor mio y yo los mios al rededor de tu cuello, comenzaba a sentir tu aliento sobre mis labios y tus manos temblorosas en mi espalda.
Y por fin sucedio... me besaste.
Fue un beso tan inocente, pero hermoso, para ambas era nuestro primer beso, tu acababas de cumplir seis años y yo apenas tenia cinco.
Otra ves me sumergi en un recuerdo tuyo.
Lagrimas resbalan por mis mejillas miestras aprieto mas este albun de fotos...
¿Quien es esa persona tan feliz? esa persona soy yo ¿cierto?
No puedo creer que yo sonriera de esa forma estando a tu lado...
Seco mis lagrimas y entonces recuerdo que yo no tengo fotos tuyas.
Vuelvo a mirar mis manos... no hay albun de fotos...
Me levanto mi respiracion es agitada, mi frente esta llena de sudor y mi cuerpo tiembla... otro sueño...
Escucho tu voz y me apresuro a salir de la cama, te busco por todos lados, pero sigo sin encontrarte.
¿Por que te oigo siempre tan lejana?
Te separas de mi y acaricias mi rostro suavemente, siempre tan cuidadosa conmigo.
- Eres mi novia- pronunciaste- solo mia.
No me preguntaste, afirmaste algo que se habia decidido desde que te conoci.
Mi corazón se detuvo al verte frente a mi sonriendome como antes lo hacias, estas tan cerca... tal ves estoy teniendo un sueño diferente, pero te ves tan real.
- ¿Te encuentras bien, Sumiko?- te acercas a mi y pones tu frente contra la mia- te ves alterada.
- Estoy bien- te abrazo y tu correspondes.
- ¿Una pesadilla?
Pongo mis brazos al rededor de tu cuello y te beso, te sorprendes, pero poco a poco me vas correspondiendo.
- Todo lo que deseo y neceisto para estar bien es tu sonrisa, Atsuko- digo al separarnos.
Pones una cara de confucion y sorpresa.
- Sumiko...- acaricias mi rostro, cierro los ojos para sentirmejor tu contacto.
- Atsuko.
- Yo...
- Si soy tu novia eso significa que estaras siempre a mi lado ¿verdad?- te sonrio.
- Si, siempre estare contigo, Sumi.
Necesito hacer algo, necesito ser firme, aunque si este mundo de un momento a otro se inunda, debo permanecer.
¿ Como llegue a quererte tanto?lo he olvidado.
¿Por que te quiero? simplemente asi es.
- Abrazame, Atsuko- soy feliz.
Miro como suspiras tristemente.
- Sumiko- me abrazas.
- ¿Es un mal sueño? dime que tu no te has ido- me aferro a ti.
Estubiste tan cerca y aun ahora, seguramente, estas a mi lado, pero aun asi tu voz cada ves es mas inalcanzable para mi.
Me duele la cabeza, quisiera escuchar otra ves de tu boca decir "te protegere".
- Estare a tu lado siempre....
- Atsuko- me recuestas sobre la cama y acaricias mi cabello hasta dejarme dormida.
- Algún día debes dejar ese sueño... soy Juunko no soy mi hermana y jamás lo sere, aunque seamos gemelas jamas sere ella, algún día debes dejarla ir.
- ¿siempre?
- Ni aunque muera te dejare.