Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Solo falta por HikariDan

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

En uno de esos muchos días lluviosos estaba escuchando la canción de Mientes de Camila y la combinación trajo como resultado esto, algunas frases las tomé de personas conocidas, así que:

Chicos, chicas, si leen esto y recuerdan su frase... ni modo, ¡ahora es mía!

Esta historia tal vez sea solo un one shot, pensé en hacerla de 2 capítulos pero no creo poder hacer otro, no sabría que poner. (Explicaciones... o tal vez otros puntos de vista, las versiones de los otros personajes...asdf?)

Notas del capitulo:

Tal vez no tenga sentido y sea difícil de entender...
Quiero agradecer a una chica súper linda que me ayudó y soportó algunos de mis cambios radicales de humor... además

de haberme ayudado con la corrección del capítulo y en muchas otras cosas más; gracias a mi prima recién encontrada Necoco! eres un amor!
y ya que dije eso solo falta poner la aclaración de que:
Gravitation es de Maki Murakami y yo no me beneficio económicamente ocupando a sus personajes.

Y una nota extra sin sentido, para alguien que tal vez nunca la lea:

-"supéralo"-... he tomado tu consejo.
¿Sigues al pendiente de mí?
Si es que realmente conoces mis movimientos
Si has oído cada una de mis palabras a pesar de la distancia
Y si tu corazón sigue latiendo al compás del mío
Sabrás que esa cruz ha caído...

Recuerdo lo que él dijo cundo terminamos, recuerdo cada palabra y cada gesto; no hubo lágrimas de su parte y mucho

menos mías, no hubo rencor, de sus labios solo salieron palabras dulces.

—Shuichi…—él me miró. Nunca, o casi nunca, decía su nombre completo, así que había notado mi cambio de actitud.

—Dime.

—Quiero terminar contigo—lo dije de forma fría, aunque eso no era raro en mí. Desde lo que pasó con Yuki mi forma

de ser se volvió así, creando una coraza para evitar más daños.

— ¿Por…por qué? —pedía una explicación. Esto era lo menos que se merecía una persona como él, alguien que dijo

amarme y que me di cuenta algo tarde que en verdad lo hacía, ¿que podía decirle? ¿Que mi forma de besarlo había

cambiado porque mis labios ahora eran tuyos? ¿Que ya no podía abrazarlo como antes lo hacía por temor a que

percibiera tu olor en mí?

—Hay alguien más—siempre me ha gustado ser directo y decir las cosas como son, sin pensar en lo que los demás

puedan sentir.

— ¿Lo amas?

—Si…—casi un susurro, dije lo que era la verdad en ese momento.

— ¿te ama? — Admito que esa era una pregunta complicada, pero no por ello carecía de respuesta.

—Él dice amarme…y espero que en verdad lo haga—suspiré. Pensar que dejaría a quién me había mantenido vivo y, de

alguna manera, feliz, era realmente complicado.

—Entonces…si te ama y lo amas, no tengo derecho a intentar retenerte. —No podía creer lo que Shuichi me decía,

esperaba cualquier cosa menos eso; él es una persona expresiva que se deja llevar por sus impulsos. Me quedé sin

palabras y el continuó aún cuando su cuerpo temblaba levemente.

—Yo… intenté cada día que te enamoraras de mí—en eso tenía razón, hay veces que me preguntaba como lo hacía. Oí que

suspiró. — Creo que debe ser alguien maravilloso—en ese momento pensaba lo mismo, que eras perfecto para mi. — Me

gustaría conocerlo, aunque pensándolo bien mejor no, podría enamorarme… Si logró que te enamoraras, yo

definitivamente caería ante él. —me regaló una sonrisa

—Tal vez si se conocieran yo saldría sobrando…

—Yuki…

— ¿Qué?

—Antes de que me dejes, antes de que todo termine, regálame un último beso —su voz sonaba apagada y aunque quisiera

no podría negarme. De hecho en ese momento comenzaba a arrepentirme de dejarlo.

 

Sin decir más me acerqué a él tomando su esbelto cuerpo entre mis brazos, rodeó mi cuello y nuestras bocas se

juntaron en un beso que sabía a dolor. Al principio el contacto era muy superficial, pero después permití que su

lengua ingresara en mi boca. Sus manos comenzaron a recorrer mi espalda y no pude evitar corresponder esas

caricias, por lo que pronto la ropa comenzó a estorbarnos. En ese momento estaba a punto de engañarte a ti como lo

había hecho tantas veces con él. Tal vez era por eso que no sentía culpa.

 

Habíamos llegado hasta su habitación entre caricias desesperadas, consumiéndonos por el deseo de sentirnos por

última vez. Ni una palabra más nos dedicamos, lo único que salía de nuestras bocas eran leves jadeos y, así como

empezó terminó, sentí su cuerpo estremecerse bajo el mío y ya todo se había acabado.
Nos separamos con un beso y nos vestimos para pretender que nada pasó. Salí de su recámara con rumbo a la sala para

tomar mi saco e irme y cuando lo hice lo oí salir segundos después de mí.

—Espero que seas feliz Yuki, espero que él pueda amarte tanto como yo lo hago—Me di la vuelta topándome con su

hermosa mirada amatista.

—Ojala y así sea—me acerqué a abrazarlo. — Gracias—dije suavemente y nos separamos otra vez.

—Entonces… esto es todo, si alguna vez necesitas mi ayuda, si cambias de opinión o si te das cuenta de lo que haces

no fue lo mejor, yo siempre estaré aquí para ti, como un amigo; espero que seas feliz, yo lo seré porque tu

felicidad es la mía.

En ese momento no pude decir más. Salí de su casa, si me quedaba un instante más no podría dejarlo. Entré a mi auto

y me dirigí a toda velocidad a tu departamento, para avisarte de que ahora solo seríamos tú y yo. Al llegar toqué

insistentemente el timbre y saliste a abrir con una expresión de fastidio, la cual cambió al notar que era yo.

—Terminé con él—apenas entré dije eso, y caminamos para sentarnos frente a frente en unos sillones. Tomaste mi mano

y te miré—. Dime que no me equivoco, que no cometo un error al confiar en ti, que no terminarás dañándome como él

lo hizo. Prométeme que no dañarás mí corazón más de lo que ya está—lo que había sucedido con mi ahora ex-novio, tú

llegada y tú intrusión a mi mundo habían devuelto un poco de la vida que él se había llevado y en ese momento me

hacía sentir más frágil de lo que estaba dispuesto a admitir.

—Haré todo lo posible—gran mentira, ahora que lo pienso—solo dime que hacer para no romper tu corazón, dime que no

debo hacer si quiero hacerte feliz. —Sonabas tan sincero que en ese momento puse mi alma a tus pies, deje ir todo

el arrepentimiento que tenía, ya que por pensar que podía ser feliz a tu lado había dejado ir a alguien tan

especial.

—Ámame… no me dejes—sentía que mi voz podía quebrarse, pero estaba seguro que no lloraría, hace varios años había

jurado no volver a hacerlo y, aunque frente a él lo había hecho, no pensaba volver a hacerlo. — Y si lo haces que

sea por alguien que te ame más que yo—comenzaba a recordar lo que Shuichi me había dicho—, aunque no creo que lo

encuentres. Podrán amarte, pero no tanto como yo lo hago.

—No te preocupes, mi amor—te acercaste a abrazarme y de pronto me sentí protegido. — Haré todo lo posible para no

defraudarte.

 

Llegaste cuando mi vida estaba casi reconstruida, tenía pareja, un chico de cabellos rosas. Llegaste a ilusionarme

y yo caí tan fácilmente; recordé a la primera y única persona a la que había amado, hasta que tú me juraste amor y

creí amarte como con él lo hice. Eras tan parecido a él, tanto, que cada que te veía creía verlo. Confundiste mi

mente a tal grado de terminar mi relación con el fin de intentar estar contigo; tú, llegaste trayendo una luz de

esperanza que me guió hasta hacerme caer de nuevo en la oscuridad; tú que conocías todos mis puntos débiles y los

ocupaste en mi contra. Querías terminar lo que él comenzó, querías destruirme por acabar con su vida, pero no salió

como lo planeabas. Tal vez me heriste pero alguien llegó para sanar mis heridas.


Me resulta increíble que la persona a la que boté por ti, a quien dañé sin querer y sin que lo mereciera, esa

persona cuyo corazón fue roto por mí—ahora me encuentro en igualdad de condiciones—sea quien me apoye. En serio, es

increíble que alguien ayude a curar las heridas de otro cuando la persona a la que ayuda es quién lo dañó a él en

un principio. Aún no se como él puede hacerlo, estoy seguro que yo no podría, porque soy una persona con pocas

virtudes y muchos defectos, y me sorprende que a pesar de eso él se empeñe en seguir conmigo.

Ahora no hay nada más que decir. Entre tú y yo todo ha acabado, creí que había encontrado el amor, pero veo que una

vez más me he equivocado; me equivoqué contigo, Yoshiki Kitazawa. Te entregué un corazón partido que prometiste

proteger, un corazón herido que juraste no romper y que, al final de cuentas, destruiste.


Pero a pesar de eso te doy las gracias, gracias por demostrarme, o mejor dicho por ayudarme a darme cuenta de que

él me ama sinceramente, que él no hará lo mismo que tú y tu hermano hicieron. Ahora se en quién confiar, le he

entregado mi tiempo y cariño, mi confianza y mis besos, le he obsequiado cada una de mis sonrisas, solo me falta

darle lo que a ti te di tantas veces, solo me falta decir "te amo".

Notas finales:

Y eso es todo!
Yoshiki es uno de los personajes de Gravitation que me gustan, no quería ponerlo como el villano pero era perfecto

para esta historia(si es que se puede llama a esto historia), su parecido con su hermano es muy grande y tal vez a

Yuki le recuerde a Kitazawa, por eso lo puse.
Yuki es un personaje demasiado complicado, se puede esperar cualquier cosa de él...
Si tienen alguna duda, pregunta o queja pueden dejarla en un RR.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).