~Sarang.
Hermoso ¿no?
Te gusta, lo sabes. Lo deseas, lo sabes. Pero va más allá del deseo y la pasión que logra despertar en ti; también lo sabes. Es mucho más que cualquier sentimiento que hayas experimentado con tus anteriores amantes. Va más allá de lo sensual y lo excitante. Es algo nuevo, algo que te da miedo descubrir bien que es; pero que sin duda te está consumiendo, lentamente. Llevándote a la desesperación y al... delirio.
Tu respiración se agita cada vez que te roza. Tu corazón se acelera cada vez que te mira. Tu imaginación vuela cada vez que pronuncia tu nombre. Y... tu locura, aquella aumenta cada vez que te sonríe y se aleja. Quizás provocándote inconscientemente; como todo lo que hace. Pero también tu sangre hierve, cuando ves que sus sonrisas no son sólo para ti. Que sus miradas tampoco son dirigidas solamente a ti. Y que su tiempo, no es solamente compartido contigo. Qué desquiciante es ese otro sentimiento; tampoco, nunca antes experimentado por ti. Sin embargo, este si logras identificarlo.
Un juego, piensas. No él no jugaría contigo. No es como tú. Y tus pensamientos te llevan a varias conjeturas. Y tus reflexiones en vez de aclararte... te confunden.
Pero está bien.
Dejaras de pensar más en ello. Porque es lo mejor. Pues aunque sin saber que es aquel sentimiento que esta albergando en tu pecho; cada que está cerca de ti y lo miras; el deseo por tenerlo entre tus brazos, de tenerlo para ti, esta cegándote. Aunque vaya aún más allá de todo eso... y lo sepas; sin embargo no lo entiendas bien.
Mas siempre te detienes. No le quieres hacer daño. Controlando así tu necesidad, con mucha fuerza de voluntad.
— ¡YunHo! —. Qué lindo ¿no? Que te llame; que pronuncie tu nombre. Te gusta la forma en que lo hace —. ¡YunHo! —. Definitivamente te agrada la forma en que sale de aquellos carnosos labios. Y aun así lo ocultas bien.
Tu mirada se posa en la suya. Sus ojitos dormilones, su mirada soñadora; sin evitarlo te pierdes en ella.
Y le sonríes...
...y él te sonríe de vuelta; encantadoramente.
Tus manos imperantes se ajustan alrededor de su cintura. Lo atraes a tu cuerpo, sus manos se posan en tus hombros.
— YooChun —. Tranquilo, suave. En un suspiro de tus labios, su nombre.
Tu rostro se esconde en su cuello. Tu mejilla derecha sobre su hombro. Aspiras su aroma... dulce, embriagante. Agradable. Tus ojos se cierran, grabando en tus memorias su fragancia, su calidez.
— ¡YooChun! — pronuncias nuevamente su nombre. Un llamado necesitado. Lo estrechas fuertemente en tus brazos.
Sus manos te separan lentamente de su cuerpo. No quieres despegarte, pero no puedes impedirlo.
Una mirada con un matiz de preocupación se dibujo en su rostro. Perfecto.
— No pasa nada — le dices suavemente, tu mano izquierda sobre su mejilla. Le regalas una suave caricia —, sólo déjame estar a tu lado. Déjame abrazarte — te sinceras; sin proponértelo, empiezas a descubrir el sentimiento que te provoca.
Ahora son sus brazos los que te rodean, después de haberte regalado la más bella de las sonrisas... de sus sonrisas. Ahora es su rostro el que se oculta en tu pecho.
Lo abrazas fuertemente, envolviéndolo completamente entre tus brazos.
Son pocos los minutos que han pasado, pero no estás consciente de ello. Estando con él, el tiempo desaparece, no sabes qué es eso... ni te interesa.
Lo único importante es tenerlo allí contigo, estar allí con él. Estar juntos. Eternamente.
— YunHo... —. De nuevo tu nombre escapa de sus labios. Bajas tu mirada para verlo fijamente, esperando a que siga —. Te quiero —. Inesperadamente un beso es robado de tus labios. Y la sorpresa se dibuja en tu rostro. Y comprendes aquel dulce sentimiento que te alberga...
— YooChun... —. Te mira expectante. Qué lindo se ve con aquel sonrojo coloreando sus mejillas ¿verdad? Lo hace ver inocente. "No" Él es así —. Yo también te quiero — finalizas; y lo besas tiernamente. Pero aún así sabes perfectamente que va más allá de un lindo te quiero. Es algo más fuerte, más limpio, más puro, más tierno y más dulce. Lo amas y él... él lo hará muy pronto también. Si es que no lo ha hecho desde siempre... Jung YunHo.
Fin.