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El Chico del Otro Lado por sariali

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Notas del fanfic:

   Yo!!!

   He vuelto con mi nuevo proyecto, he trabajado en esta historia bastante y espero que pueda estar al nivel de mi primer historia: Intentémoslo.

   Espero que no les aburra y que les guste, les aseguro que les sorprenderá si lo siguen leyendo.

   Por cierto: NARUTO Y TODOS SUS PERSONAJES SON PROPIEDAD DEL GRAN MASASHI KISHIMOTO, NO MIOS; HAGO ESTO SIN FINES DE LUCRO Y SÓLO CON FINES DE ENTRETENIMIENTO.

   Por cierto: ¿Que les pareció mi resumen? A mi me gusto.

Notas del capitulo:

Aqui esta el prologo, puede parecer que inicia algo lento, pero ya ira adquiriendo forma poco a poco.

   En fin, tratare de actualizar cada semana, los jueves o slos viernes, aunque como ya me conoceran...tal vez me demore un poco ...

   Espero les guste. A LEER!!!

Prólogo: El Funeral.


 


 


        En la habitación se sentía una profunda tristeza, más profunda que una fosa marina, más pesada que tres elefantes juntos. En el centro de la sala había un ataúd, abierto, como si quisiera dejar que su ocupante respirara. Afuera caía la nieve, algunos copos chocaban contra los vidrios de la ventana y producían un ruido imperceptible para la mayoría de los humanos. En contraste con aquel imperceptible ruido, unos suaves sollozos se escuchaban en el salón, a pesar de que no hubiera prácticamente nadie que los escuchara, pues todos estaban en la parte de abajo, bebiendo café mientras fingían que lamentaban la muerte de aquella persona.


   Pero todos eran unos simples hipócritas. Pues no había nadie en realidad que  lamentara el deceso. Todos eran unos mentirosos. Todos fingían dolor y lástima. Pero la verdad era que sólo el joven de quince años que se encontraba al lado del ataúd desde que éste había llegado a la casa, sentía verdaderamente la partida de aquella persona.


   El chico era, sin duda alguna, ajeno a la familia, pues a diferencia del fallecido y del nuevo dueño de la casa, quienes tenían el cabello y los ojos negros y la piel del color del mármol, éste chico tenía un cabello tan rubio que parecía trigo, y tenía unos hermosos ojos azules, de un color tan azul como el mismísimo cielo en los mejores días del año, aunque ahora estaban enrojecidos e hinchados por tanto llorar, además de que su piel, de aspecto suave y cremoso, era de un tono ligeramente moreno, como si se hubiera bronceado el tiempo perfecto para que su piel adquiriera un tono entre blanco y moreno…


   Su nombre, Naruto. Uzumaki Naruto. Él había sido un chico callejero durante la mitad de su vida. Sus padres habían muerto cuando él había nacido y se escapó del orfanato al que lo habían enviado a los cinco años de edad, pues allí los mayores lo maltrataban y lo humillaban por ser el más débil de todos los niños. Y hasta hacía tres años, su vida había sido rondar por las calles y callejones de aquella fría ciudad, robando comida de los basureros, robando lo que pudiera para sobrevivir, escapando de los pandilleros y los buscapleitos. Durante ese tiempo, él había pasado de ser un chico débil a ser realmente fuerte y que soportaba toda inclemencia que la vida le mandaba para sobrevivir.


   La vida en la calle no es como la pintan en la tele o en los libros. No, para nada, de hecho, la vida callejera que los libros, películas y series presentaban no era ni la octava parte de dura de la verdadera. En la vida real uno no contaba con ayuda de algún igual, era muy rara la ocasión de ver a dos vagabundos juntos, pues a la menor oportunidad (ya fuera por comida, dinero, ropa, techo o algún otro beneficio) se traicionaban entre sí; en la vida real uno casi nunca podía encontrar comida comestible en los basureros, en la vida real los policías no eran amigos, sino enemigos y asesinos terribles; en la vida real nunca había nadie a quien le importara un simple chico callejero. O al menos eso era lo que el chico había pensado durante la mayor parte del tiempo en que había vivido en las calles.


    Pero un día el destino le sonrió. Un día había cometido la estupidez de robarle a la persona que en esos momentos yacía boca arriba en la caja mortuoria. Y esa misma persona lo había golpeado, y lo había derribado mientras se reía en su cara. Y luego todo su mundo se había oscurecido.


   Para cuando despertó, se encontraba en una cama cómoda y caliente, algo que realmente no esperaba volver a experimentar en lo que le restaba de vida. Y entonces había aparecido de nuevo él, se había presentado como Uchiha Itachi, y le había dicho que podía quedarse… Para el rubio eso había sido tan increíble que incluso se sintió en peligro, por lo que a la primera oportunidad, lo había amenazado para que lo dejara ir. El chico había escuchado historias de gente que secuestraba vagabundos para torturarlos por placer, o para extraer sus órganos y venderlos a un muy buen precio, o para prostituirlos sin dudarlo, o para venderlos a familias ricas que tenían placeres no aceptados por la sociedad.


   Pero no había sido así, y tras una larga explicación, el rubio había comprendido los motivos de es apersona para llevarla a su casa: Su hermano menor, Uchiha Sasuke, de 16 años, había perdido a su mejor amigo que, por azares del destino, resultaba ser idéntico a él… Así que a su hermano se le había ocurrido la brillante idea de traerle un sustituto.


   Y él había aceptado. Y tras un rato, el rubio conoció al chico pelinegro.


   Con el paso de los meses y luego de los años, Naruto había aprendido a querer mucho a Sasuke, y aunque al principio el pelinegro se había manifestado muy molesto por una idea tan cruel por parte de su hermano, quien al parecer no creía que sustituir a alguien al día de fallecido era algo anormal, terminó por acostumbrarse a la presencia, carácter y comportamiento del rubio. Con el paso de los años, ellos se habían vuelto verdaderos amigos, aunque no lo pareciera a primera vista.


   Y desde entonces Naruto se había llegado a encariñar con los dos hombres que lo habían sacado de la calle.


    — Tranquilo.


   El rubio se volvió. Recargado en el marco de la puerta, con un semblante triste pero tranquilo, estaba Sasuke, mirándolo con los ojos enrojecidos, pues él también sufría la muerte de su hermano.


   — No me pidas eso. No es fácil aceptar que haya muerto. — Respondió el rubio entre ligeros sollozos.


   — Lo sé. Nadie pudo haber imaginado que su novia lo envenenaría por despecho.


   Y así había sido según el reporte oficial, la joven (cuyo nombre Naruto no recordaba, y realmente no le importaba un pepino) estaba en posesión de la policía y había dicho lo que había pasado. Itachi la había terminado y ella, furiosa le había regalado una caja de chocolates con veneno suficiente para matar dos elefantes.


   — Él no merecía morir. No lo merecía. — Dijo el rubio con voz lastimera.


   — Lo sé. Pero así es la vida. Debemos seguir adelante.


   Avanzó hasta al lado del rubio, con las manos en los bolsillos de su pantalón negro, iba vestido de luto, al igual que todos los presentes, incluido el rubio. Pero a él se le veía bien, aunque al rubio no le gustara el color negro.


   — ¿Qué vamos a hacer ahora? — Preguntó Naruto con la voz quebrada.


   — el seguro de vida de Itachi nos sostendrá el tiempo suficiente para que consigamos un trabajo para mantenernos. Descuida, yo, que soy el mayor de los dos, tendré la mayor responsabilidad.


   Naruto se levantó y lo abrazó, los dos jóvenes compartían el mismo dolor.


   Naruto estaba tan hundido en su pena, que no notó como Sasuke olfateaba su cabellera casi imperceptiblemente, una ligera erección comenzó a formarse dentro de sus pantalones. Naruto seguía llorando en su hombro, presa de la tristeza causada por la muerte de su protector.


   Lo que el ojiazul no sabía, era que con la muerte del hermano mayor, algo había cambiado en su mejor amigo, algo que tal vez hubiera llevado dormido mucho tiempo, esperando el momento por salir a flote.


    Ahora era cuando la pesadilla comenzaba. Afuera, la nieve dejó de caer.


 


 


 


                                                           ………………….CONTINUARA…………


  


 


     


 

Notas finales:

Y?

   Espero no les haya parecido aburrido. Algunos podran creer que es un tema un tanto cliche pero les aseguor que tratare de hacerlo más original... Jejej ya veran más adelante.

   Nos vemos el jueves/ viernes!!!

  Ohh... por cierto... ¿REVIEWS???


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