Comenzó a mover su mano arriba y abajo abrigando a hacer lo mismo con la suya, Inuyasha por más que intentaba liberar su mano no podía, Sesshoumaru lo superaba en fuerza por mucho, sin embargo ahora estaba siendo cuidadoso con el, acariciando gentilmente su espalda y susurrándole al oído.
-te está gustando esto ¿verdad?
La respuesta era más que obvia, sin embargo Inuyasha se seguía sintiendo muy incomodo y temeroso pues recordaba cómo fue violado.
Entonces Sesshoumaru comenzó a besarlo sensualmente en el cuello dándole un suave mordisco, sin dejar de masturbar a Inuyasha quien se sentía ya más que incomodo sobreexcitado, sentía que todo su pequeño cuerpo ardía, y su corazón no dejaba de latir fuertemente, en eso inesperadamente Sesshoumaru lo tomo de la cintura lo levanto y suavemente le introdujo dos dedos abriendo espacio.
-aaaaaaaaa........
Sus gemidos fueron acallados increíblemente por un apasionante beso de su hermano quien no descuidaba su ano y seguía moviendo sus dedos en su interior, su lengua entraba y salía jugueteando con la lengüita de su hermanito quien sentía que se le acababa el aire, le succionaba sus labios como su fueran un caramelo, y para finalizar le mordió suavemente la lengua, que fuera de desagradarle a Inuyasha de cierto modo le gusto.
Lo sentó nuevamente en sus piernas dándole la cara, y comenzó a lamer sus pequeños pezones que estaban ya muy duros, el pequeño Inuyasha simplemente ya no oponía resistencia alguna, lo que le felicitaba las cosas a Sesshoumaru quien simplemente no podía detenerse.
Le succionaba los pezones y les daba uno que otro inocente mordisco cuidando de no lastimarlo y los gemidos por parte de su hermanito no se hacían esperar, era muy acallados como si intentara reprimirlo, esto por supuesto no le agrado a su onii-san por lo que le metió tres dedos más de un solo movimiento causándole un gran gemido a Inuyasha cosa que lo satisfizo.
-no te calles tus gemidos déjame escucharlos.
-aaaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhh....
Y dicho esto le beso las manos, alrededor de ellos estaban muchos árboles que no se habían percatado estaban llenos de aves blancas y negras que al escuchar el fuerte gemido de Inuyasha salieron despavoridas volando a la lejanía dejando atrás una gran lluvia de plumas que adornaron el paisaje cayendo en la laguna y cubriendo a Inuyasha y Sesshoumaru quienes quedaron maravillados con la lluvia de plumas blancas y negras.
En tanto Sesshoumaru saco sus dedos y levanto nuevamente a Inuyasha.
-ya no puedo esperar más Inuyasha estoy al límite.
-¿Qué?, espe......................aaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhh
Sesshoumaru lo penetro de un solo movimiento y una vez estando completamente dentro de el espero a que se calmara, y comenzó con las lentas y gentiles embestidas, pues estaba consciente de que aun podía dolerle por la vez pasada, en tanto Inuyasha sentía que iba desmayarse era demasiado para él, la sensación del enorme pene de su onii-san dentro de el entrando y saliendo lo estaba matando, sentía todo su cuerpo exageradamente acalorado y sentía que su pecho le ardia, ya ni siquiera podía gritar se estaba quedando afónico, Sesshoumaru se percato de ello, estaba claro que no lo podía soportar era demasiado para el cuerpo de un niño, sin embargo no se podía detener tenía que seguir su cuerpo no le permitía parar.
Las embestidas continuaron lo abrazo fuertemente contra su pecho y le comenzó a lamer y besar el cuello, entonces se percato de que Inuyasha lo estaba abrazando con sus pequeños y temblorosos brazos, una y otra vez las embestidas continuaron.
-aaaaaaaaaaggggggggggg..............yaaaaaaa............es...demasiado............
-no, aun no es suficiente.
Y dicho esto se lo metió aun más profundo.
-aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa............
Y sin más Inuyasha finalmente vencido por sus impulsos termino viniéndose en el pecho de ambos mientras que Sesshoumaru lo hizo en su interior mientras lo atrapo en un ardiente beso devorándose sus labios y lengua.
Cuando finalmente acabaron quedo un hermoso paisaje cubierto con plumas alrededor de dos excitados hermanos donde uno de ellos estaba casi desmayado.
Sesshoumaru salió lentamente del interior de su semi consciente hermanito, cargándolo en brazos salió de la laguna y lo recostó en el suelo, viendo entretenidamente como las plumas se le atoraban en su bella cabellera, tomo una y comenzó a acariciar su cuerpo con ella cosa que le provocaba cosquillas y comenzó a volver en sí.
-sess..........
Sus palabras fueron calladas por un beso.
-no trates de hablar, descansa.
-Sesshoumaru ¿Por qué me...haces esto?
La pregunta ilumino le ilumino la mente como un rayo.
(pensando) ¿Acaso yo estoy enamorado de Inuyasha?
Al pensar en eso se sentó a un lado de Inuyasha lo tomo en brazos y recargo contra su pecho.
-porque yo...te......
En ese momento Inuyasha noto que el corazón de su hermano comenzaba a latir fuertemente al igual que el suyo, lo tomo del rostro obligándolo a verlo a la cara.
-¿tú qué Sesshoumaru?
...................continuara.