-Acepto tu condición Kyubi… pero ven a mí- de la hermosa esfera comenzaron a salir unas extremidades en formas de guadaña pero unidas a su núcleo, tenían la forma de una shuriken, una que podía destazar al que quisiera. Naruto observo en los recuerdos de Sora que ella había creado una técnica parecida a su Rasengan sin embargo la de ella era más poderosa, una técnica que podía destruir al enemigo a nivel celular… Rasen Shuriken.
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Kyubi arremetió contra Sakura pero esta salto ágilmente a un lado de la habitación, al instante su bestia arremetió contra el gran zorro pero este volvió a rugir y en esta ocasión salió un potente fuego, el Cerberos de Yoru arremetió con una flama de ese mismo elemento pero el de Kyubi era mucho más poderoso; combinando el fuego con el viento se provocan llamas mucho más poderosas. Aquel enorme perro de tres avezas se estaba consumiendo en el ataque por lo que el pelinegro la llamo para que volviera a su joya.
-Naruto todavía necesita decir el nombre de la joya para poder abrir el camino, sin embargo ustedes ya no lo necesitan porque tienen los conocimientos necesarios para ellos… pero les puedo asegurar que el mocoso podrá hacerlo en los tres días que sobran para su dichosa invasión… jamás podrán ganarles a los legendarios lideres.
-¡¡¡CIERRA EL MALDITO HOCICO!!!- Sakura subió a la cabeza de la serpiente y dirigió a Kyubi pero este desapareció al instante, evitando por completo el ataque pero luego volvió a aparecer detrás del ser viperino y dio un fuerte zarpazo en su lomo. La serpiente rugió de dolor mientras que Sakura salía despedida por los aires. Yoru por ir en su ayuda dejo despejada la entrada, cosa que el Kyubi aprovecho para poder escapar. Cuando la puerta estuvo abierta volvió a la joya y esta con velocidad sorprendente desapareció de la vista de ambos chicos.
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Los días fueron lentos y tortuosos para Naruto y Sasuke ya que cada día que pasaba era tortuoso para ellos. Estos últimos tres días aprendieron muchas cosas, los recuerdos que tenían eran tan frescos que parecían propios, aunque literalmente lo eran, y dominaban sus poderes como era correspondiente. Pero en el caso de Sasuke todavía era frustrante ya que no podía hallar el modo de que su gema viniera a él; recordaba a cada momento cuando el zafiro perteneciente a Naruto se posaba suavemente en su mano después de casi un minuto de haberlo llamado, fue la alegría total del rubio e inmediatamente convoco a Kyubi, este apareció sin problemas con un carácter prepotente pero no hacía nada fuera de las ordenes que el rubio le daba.
Los tres días que surtieron como lapso de tiempo fue también el lapso de la reunión de toda la organización Shoku; estaban listos para enfrentarse a los chicos de Konoha. Sakura desde que dejo escapar a Kyubi entreno incansablemente para poder aumentar sus poderes.
-Hora de irnos- ordeno Sakura; Yoru, Kalim: Leila, Shana y Viper estaban cubiertos por sus capas de color negro con el estampado del Ying y el Yang en sus espaldas junto con un dragón y tigre blanco. Sakura por su parte llevaba una capa de color blanco aunque con el mismo estampado de el de sus subordinados solo que en el símbolo del Ying sobresalían unos picos negros que terminaban al llegar al Yang.
Comenzaron a correr entre los árboles, la pelirosa sabía muy bien que si se iban así tardarían unos tres días más en llegar a la aldea cosa que no dejaría que sucediese sin embargo tenían que alejarse lo suficiente de su escondite para que no fuera encontrado ya a distancia considerada convocarían a sus bestias para ir rápida y directamente a la aldea de Konoha donde no solo estaría Naruto y Sasuke esperándolos sino también aquella mujer rubia que marco su destino actual.
Naruto les platico a sus padres toda la situación por lo que desde un día antes habían comenzado una evacuación inmediata. Itachi y Deidara habían llegado a tiempo en la mañana entregándole a Sasuke el rubí. El pelinegro se llevo una gran sorpresa al ver que su hermano y Deidara eran la reencarnación completa de Setsuna, su mejor amigo de infancia en su vida pasada, pero estos al mismo tiempo se sorprendieron al enterarse de que Naruto era la reencarnación de Sora.
-Pensamos alejarnos lo más posible de la aldea para evitar que haya muchos daños, además pensamos que Sakura no se restringirá y convocara a su bestia para llegar aquí después de todo… Kyubi la enfrento para llegar a lado de Naruto- dijo Sasuke mientras ponía sus armas en su maleta. Itachi no se separaba de él ya que quería que se le contara todo lo que había pasado en su ausencia.
-Entiendo… por lo que me dices Sakura es la líder mientras que la tal Leila y Yoru son sus subordinados… y esperemos que no sean más sino nos veremos en un gran aprieto a lo que en número se refiere- decía el mayor de los hermanos Uchiha. Naruto, Sasuke y Gaara podían conformar a su Bijû sin problema por lo que sería una pelea de tres contra tres sin embargo si había uno más Deidara y el se encargarían de exterminarlo ya que al ser los dos la conformación del alma solo podían convocar a la bestia cuando estaban juntos… pero si había más de cuatro se verían en problemas con la desventaja.
-No te preocupes Nii-san… todo saldrá bien… pienso proteger a mi aldea como sea- Sasuke activo su Sharingan, nadie tocaría Konoha lugar que le brindo la calidez de un verdadero hogar.
-Entonces no me queda más que apoyarte en todo- Itachi paso su brazo por el cuello de su hermanito pero este no lo quito solo le sonrió con arrogancia, la típica de los Uchiha y salieron del lugar. La hora de enfrentarse a su enemigo más grade había llegado y no permitirían que destruyera su amada aldea.
-Sasuke, Tsunade-obachan insiste en acompañarnos- dijo Naruto con una mega gota resbalando por su cabeza.
-Seré útil porque soy la mejor medico del mudo shinobi- defendió inmediatamente la Sannin. Sin poder ganar la batalla la rubia termino yendo con ellos.
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Sakura considero que ya estaban a una buena distancia, así que ordeno la convocación de las bestias. Ella no lo haría, porque gastaría su energía en vano y eso no lo deseaba. Yoru la llevo consigo en la cabeza de en medio del enorme Cerberos. Leila iba sobre su enorme serpiente Jörmundgander que se deslizaba de forma rápida trayendo y aplastando a su paso los arboles en su camino; Shana saco a relucir un hermoso lobo blanco al que llamaba Hati el lobo que perseguía a la luna en tiempos pasados, por su lado Viper convoco a otro lobo igual que el de su compañera pero el de él era de un pelaje grisáceo muy hermoso su nombre era Skoll, el lobo que perseguía a el sol. Lobos hermanos y juntos eran poderosos. Por otro lado el de Kalim era una enorme pantera negra, con una piedra azulada insertada en su frente, sus ojos eran de un plateado puro, y en sus patas tenía unas especies de muñequeras plateadas donde había más piedras parecidas a las de su frente… el nombre que le daba era Kabuki.
Naruto, Sasuke, Itachi, Deidara y Gaara podían sentir los rugidos y poderes de las bestias ya convocadas. A pesar de estar a una gran distancia el poder se sentía cercano. Tsunade no podía sentir lo que ellos… sin embargo ella si sentía algo que le era muy familiar, un chakra enorme que había sentido por primera vez hace mucho tiempo, unos quince años.
-Creo que es hora- dijo Sasuke, Naruto le vio y asintió.
-Vamos, Hageshii Kaze (Violento viento)- el zafiro resplandeció con fuerza y rápidamente apareció Kyubi rugiendo con estrepito. El rubio subió a su cabeza e inmediatamente comenzó a correr.
-No me quedare atrás, Yozora (cielo nocturno)- el rubí soltó un brillo furioso de color rojizo y al mismo tiempo surgió el león de pelaje blanco. Igual que Naruto subió a la cabeza y empezó a pisarle los talones a su compañero.
-No nos quedaremos a tras- dijeron Itachi y Deidara a la vez. Las dos mitades del diamante resplandecieron y ante ellos salió una liebre, de cola larga y sedosa, su pelaje plateado parecía resplandecer con los rayos del sol… Kitsumi.
-Yo tampoco… sujétese Tsunade-sama – Gaara hizo resplandecer su gema ambarina y salió su mapache, Shukaku. La pelea pronto comenzaría cuando las bestias se encontrasen. El camino se hacía largo para ambos bandos pero al fin estaba llegando la hora de terminar con lo que hace pocos días había comenzado, no era algo a lo que podían darle larga espera.
-Sasuke ¿Quién peleara con Sakura?- dijo el rubio demasiado serio. Sus espadas Montante (16) estaban en ambas manos tenían al final de la empuñadura a Hageshii Kaze.
-No lo sé, creo que será el primero que llegue- contesto el otro con su sonrisa arrogante “made in Uchiha”; el rubio solo rio ante el comentario y asintió con energía en que tenía razón.
-A mi no me importa quién se la quede… pero de una vez les digo que el tal Yoru es mío- dijo Gaara con una mirada asesina por lo que nadie se atrevió a contradecirlo.
-Oigan eso no es justo… al parecer a nosotros nos toca la mujer o la niña- decía Itachi con una aura deprimente.
-Tranquilo Itachi… tal vez pelear con una mujer mayor no sea tan malo como pelear con una pequeña… así que nosotros agarramos a Leila antes de que mi hermano o le tuyo lo hagan- decía Deidara para poder anima a su novio cosa que no estaba logrando con mucho éxito.
El otro bando también estaba escogiendo a su oponente, sin embargo Sakura dejo bien en claro que ella se enfrentaría a los dos líderes y que nadie pusiera una excusa para que no lo hiciera, ella había comenzado con esto y ella lo acabaría. Pero al estar más cerca del punto de batalla sintió un chakra muy familiar para ella, uno que nunca había olvidado a pesar de sus escasos cuatro años.
-Cambie de opinión… Yoru escoge a quien quieras, Kalim tú te enfrentaras a Sasuke y los demás escojan a quien se les plazca… yo tengo otra presa que eliminar- todos gritaron con alegría, con el cambio que se les fue otorgado tal vez podrían divertirse mucho mas.
Desde ambos vado ya se podían distinguir las bestias enemigas, ambas parecían acerarse aun más lentamente. Gaara comenzó a adelant5arse al igual que Yoru. Sakura bajaba de la cabeza de cerberos y comenzaba a correr entre los árboles para ir más rápido; cuando Tsunade vio esto hizo lo mismo y dirigió a la chica. Nadie se dio cuenta de que la Sannin también corría hacia el campo de batalla además de que parecía no importarles mucho.
Leila preparaba su Spatha, Yoru tenía su estoque medieval, Shana poseía una Cimitarra (17), Viper tenía una Bracamante (18) y Kalim blandía con fiereza su espada larga (19). Ambos bandos se acercaban más y más y de pronto… sin poder evitarlo el choque entre ambos por fin sucedió.
La energía que se soltó por el fuerte choque parecía como una bomba de gran potencia que alumbraba con más potencia y por instantes los hermosos parajes que se destruían poco a poco. Sakura abajo había chocado con Tsunade con la que sin decir palabras comenzó a atacar sin piedad, la recordaba, todos los años de su existencia desde que la dejo había recordado su rostro con el fin de vengarse… la venganza por haberle arruinado la vida.
Naruto había chocado contra Viper, había cruzado sus espadas para poder bloquear el ataque de aquel enorme hombre, ahora podía ver bien sus facciones, su piel era morena, cabello castaño, de ojos negros que mostraban gran fuerza de voluntad, su mandíbula era cuadrada y con expresión llena de emoción. Su fuerza física podía compararse tal vez con la de un toro pero eso no sería suficiente para hacer ceder a un ANBU de elite.
Kalim había atacado a Sasuke como su princesa se lo había ordenado, le alegraba que la pelirosa le otorgara la oportunidad de pelear con uno de los lideres eso tal vez significaba que ya estaba aceptando su poder y potencial; mientras que Yoru se le había dado la simple orden de agarrarse a quien quisiera eso daba a entender que no era digno de pelear contra un líder antiguo. Sus ojos felinos se posaron en los de Sasuke los cuales eran de un color rojizo y con unas comas que marcaba muy claramente su Kekkei Genkai… el Sharingan. Yoru tenía una cuenta pendiente con Gaara y por lo mismo el choque entre ambos rivales surgió, ambos saltaron de la cabeza de sus bestias para caer en las ramas de los arboles mientras que los enormes Bijû peleaban entre ellos.
-Es hora de aclarar las cuentas- dijo Yoru que mostraba la resplandeciente punta de su espada.
-Lo mismo pensaba yo- Gaara dejo caer su tridente el cual se convirtió en arena y esta misma perforo el suelo creando mas arena, cruzo los brazos como si no tuviera ganas de pelear; Yoru ante la acción se dirigió a él e intento darle una estocada pero la arena respondió mucho más rápido y a una velocidad increíble cubrió en su totalidad al pelirrojo parar protegerlo. El pelinegro se sorprendió ante aquel movimiento y se alejo de un solo salto, quizás… esta vez… iba a ser muy diferente.
Deidara e Itachi chocaron al mismo tiempo con Leila y Shana, la serpiente y el lobo arremetían contra la pobre liebre o eso se creía ya que de un momento a otro aquella liebre se dividió en dos… incluso el pelaje cambio… una era de color blanco puro con una joya de color negro en el centro de su frente mientras que la otra era de color negro y también tenía una gema pero esta era de color blanco. Los chicos tenían en su poder guadañas, aquellas que aparecían en los antiguos escritos que representaban a la muerte.
La de Itachi era de un hermoso negro afinado, el filo era de un resplandeciente plateado que contrarrestaba la negrura del resto del cuerpo del arma, en la unión del mango con el metal había adornos de rosas con espinas, muy hermosas ya que solo contenían cinco pétalos. La de Deidara era un báculo completamente blanco sin metal alguno que representara el peligroso filo que podía destazar a cualquiera, lo único que había en aquel mango era una ligera y casi imprevisible abertura.
-Itachi yo me encargo de la pequeña- con esto dicho el rubio fue al encuentro de su rival. El Uchiha maldecía por lo bajo ya que no le gustaba pelear mucho con las mujeres (véase a Shikamaru XD) sin embargo por el bien de su aldea era capaz de matarla; su familia y su vida a lado de Deidara se encontraba atrás de las grandes puertas de Konoha.
-Creo que… esto tiene que acabar rápido- Itachi se inclino un poco para tomar impulso, sus ojos con el Sharingan en el estaban también listos para copiar o ver cualquier movimiento rápido, Leila le imito en la postura y luego de unos segundos… ambos se dirigieron a gran velocidad para que sus armas chocasen con furia.
**** Sakura vs Tsunade****
-Pensé que jamás la volvería a ver- dijo la pelirosa con mal fingida nostalgia.
-Has crecido mucho- fue la única contestación de la rubia. Su mirada seria se fijaba en los verdes ojos de Sakura, estaban vacios de todo sentimiento positivo lo único que reflejaban era odio y deseo de vengarse- parece que cometí el error de dejarte con ese par… tu comportamiento es una gran amenaza para todo el mundo.
-Se equivoca… esos lunáticos me mostraron mi verdadero destino y aunque los odie por cómo me trataron y enseñaron… estoy contenta con la misión que tengo que cumplir, pero con usted es diferente… usted me había prometido una buena familia y juro que sería feliz… parece que le agrado jugar con los sentimientos de una pequeña niña- escupido venenosamente.
Tsunade no dijo nada, sabía que tenía la razón pero ese no era motivo para que quisiera destruir una aldea que no había tenido nada que ver, eso estaba fuera de toda persona racional. Sakura ya no dijo más si no que como el viento desapareció y reapareció enfrente de la Sannin que no tuvo tiempo de responder y por lo mismo no esquivo el golpe de fuerza descomunal que poseía la pelirosa. La chica de dirige a Tsunade, su deber tenía que ser cumplido costara lo que costara sin embargo su venganza era algo que deseaba desde pequeña y no podía controlar tal deseo.
-Eres fuerte- afirmo la rubia mientras se levantaba con cierta dificultad. Se limpio el hilo de sangre que corría de su labio inferior- Tengo que ver… que tan fuerte eres- con esto dicho desaparece y aparece arriba de la chica plantando una gran patada y destrozando el suelo. Al observar lo hecho se da cuenta que Sakura no estaba.
-No me vencerás tan fácilmente… tú no eres… un Jinchuriki- dicho esto su joya resplandeció dejando ver sus espadas. Las movía con gran agilidad y maestría.
-“Parece que esto va a ser difícil”- dijo Tsunade para sus adentros mientras volvía a correr en dirección a Sakura con la intención de golpearla. La chica solo espero, tenía que acercarse un poco más, ella no era como sus subordinados, ella…
-Yo también… ¡¡¡¡YO TAMBIEN SOY UNA KUNOICHI!!!!- le lanzo sus espadas, las cuelas fueron esquivadas como si nada pero esa era solo una distracción-Doku Kiri (Niebla venenosa)- un espeso humo morado salió de la boca de la pelirosa envolviendo todo su alrededor, inclusive las flores y los troncos de los arboles empezaron a marchitarse.
-¿Pero qué?- frenando su carrera, aguantando la respiración y dando un gran salto, Tsunade intento salir de aquel peligroso campo pero al brincar se encontró cara a cara con Sakura, quien le asesto un golpe volviéndola a meter al campo venenoso.
-Muere… Hyoton: Sensatsu Suishou (Elemento hielo: Muerte de las mil agujas del hielo voladoras)- pequeñas y delgadas agujas se formaron en el aire para luego dirigirse con fiereza al cuerpo de Tsunade. Esta utiliza una técnica de cambio y decide ocultarse por unos momentos entre los árboles para pensar en su siguiente movimiento.
-Creo que solo me queda intentar esa técnica- dice para sí la Sannin mientras sale de su escondite, lanza una bomba de humo y dirige a velocidad contra Sakura, esta decide esperar el momento preciso para contrarrestar sin embargo, de un momento a otro el chakra de Tsunade desaparece dejando totalmente desconcertada a la pelirosa.
- Ranshinshou (Conmoción eléctrica del sistema central nervioso)…