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Regreso de un amor pasado por LycanZero

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Notas del capitulo:

Cuatro???!!! O.o

****Sasuke vs. Kalim****

Las espadas chocaban con gran estrepito, las chispas anaranjadas salían de ambas armas cuando el metal chocaba; el león se aventaba contra la hermosa pantera, que con movimientos gráciles podía esquivar dichos ataques, sin embargo tampoco perdía el momento para contrarrestar también. Sasuke se dedicaba a solo ataques con su katana, ya que dedujo rápidamente que su oponente era incapaz de utilizar algún tipo de técnica ninja.

-No peleas nada mal- dice arrogante el Uchiha.

-¡Hmp! Maldito mocoso… será mejor que no me subestimes- Kalim se arrojo con fuerza contra Sasuke el cual logro que perdiera  equilibrio pero no cayó al suelo, con un buen movimiento pudo mantenerse pie al mismo tiempo que tomo buena distancia de su contrincante.

-Nada mal- seguía diciendo el pelinegro para seguir provocando al pelicafe, su katana empezaba a tener en el filo varios y delgados rayos, y al ser transparente gracias a los rayos se podía ver ahora de un color blanco con contorno azul.

-Te crees mucho ¿No es así?- en verdad se estaba enojando, ese tipo era my engreído, tal vez los humos de que era el líder de un poderoso y antiguo clan se le habían subido a la cabeza. Pero él le haría entender que era mucho más poderoso que él; de repente su gema comenzó a brillar para que luego dicho brillo dirigiera a sus pies y en ese momento la velocidad del chico aumento de una manera muy eficaz ya que no el Sharingan podía alcanzar dicha velocidad.

-Interesante- Sasuke subió a un árbol hasta que llego a la copa y pudo observar que no solo Kalim se había vuelto mucho más rápido sino que también su bestia- será bueno probar ahora… Buraki- de un momento a otro a Sasuke le empezaron a salir varias y extrañas manchas en a cara, cubriéndole así la mitad del rostro (hagan de cuenta cuando tiene la primera fase del sello maldito de Orochimaru).

-No me digas que tu...- los ojos dorados del joven se abrieron mostrando confusión, el aspecto y la energía de Sasuke habían cambiado completamente, se sentían más oscuras pero no malignas. Sin pensarlo volteo a ver a la bestia de su adversario y su rostro palideció… lo que estaba pasando… ¿Era posible?

**** Naruto vs Viper ****

Naruto le observaba, con el impacto había logrado que la capa descubriera su rostro, era un hombre de facciones duras, ojos de un verde oscuro y cabello de un café claro, su piel era morena y sus labios mostraban una línea recta. Para el rubio en pocas palabras era un hombretón que solo deseaba pelear y punto, no había nada más.

-Para mí, es un honor pelear con usted- dijo el hombre mientras inclinaba un poco la cabeza en forma respetuosa, Naruto se le quedo viendo con cara de (O.O).

-¿Ah?- fue lo único que logro articular ya que en si el enemigo le estada adulando en cierto sentido.

-Es de mala educación no responder… no tienes educación… te matare, te matare- las facciones serias de Viper cambiaron completamente por una sonrisa sádica y llena de locura, sus ojos pequeños y dilatados daban una muestras de que el tipo era un sádico de los grandes. Naruto, por otro lado, se desconcertó mas ya que el cambio de su oponente era repentino y sin precedentes.

-¡¡ ¿Pero cómo quieres que reaccione?, si eres mi enemigo!!- por fin dijo el rubio alterado mientras alzaba las manos con todo y espadas.

-Tienes razón, soy tu enemigo- dijo por fin el hombre con su tranquilidad anterior y esto hiso que Naruto le diera un tic en el ojo- pero aun así, estoy muy feliz de que me tocara con uno de los líderes de los clanes… pero puedo ver que tu no sientes lo mismo… en otras palabras no soy digno de ser tu rival- en esta ocasión el aura se volvió deprimente.

-Disculpa, yo no quería dar a entender eso- comento Naruto rápidamente, no le gustaba ver a las personas deprimidas así que intento animar a su enemigo.

-No, usted piensas eso… no soy digno de pelear contra usted… y lo comprendo, soy débil, soy muy débil pero, pero le demostrare… ¡¡¡QUE PUEDO MATARLO!!!- Viper alzo su espada y a velocidad increíble dirigió a Naruto que palideció al instante pues la cara sádica de su contrincante en verdad le daba miedo; pero recuperándose rápidamente cruzo sus espadas para bloquear el ataque. Pero eso no evito que se hundiera un poco en la tierra, la fuerza del hombre era grande.

-Vaya tío- aplicando chakra en sus pies logro dar un fuerte impulso haciendo retroceder al enorme hombre. Este le observo detenidamente, el chico había hecho un gran esfuerzo para detener su ataque, si seguía atacando con la misma intensidad lograría cansarle y así vencerle; sin embargo lo estaba subestimando, el no era un chico cualquiera, el era Sora… una mujer que antiguamente fue hermosa, astuta y fuerte.

-¿Sora-sama esta con usted… o es usted?- la pregunta le tomo de improviso per se sereno rápidamente, la verdad había dolido saber la verdad después, aquella verdad que se le fue otorgada cuando Sora le dio todos sus conocimientos, sus recuerdos, su vida pasada.

-Ella… soy yo… cuando desperté los poderes de un Jinchuriki, su alma se desvaneció- como dolía admitirlo, no habían platicado mucho pero Sora se había convertido en una buena amiga, que se presento en pocas ocasiones solo para mostrar su preocupación, contarle la historia o darle consejos.

Cuando se dio cuenta de su ausencia, surco sus recuerdos y descubrió que para saber todo, para despertar al máximo sus poderes… las almas se tenían que fusionar para ser uno solo, tal vez no se había ido del todo pero dolía ya no poder platicar con ella además de que no tenía el pretexto de decir: “tengo tantas preguntas que hacerle”, porque simplemente no tenia coherencia, cuando se fusionaron los recuerdos se le volvieron propios, las respuestas a sus dudas llegaban rápidamente.

-Entiendo… entonces en verdad peleo con la líder de los Taiyō- terminada su “platica” reanudaron su pelea; Naruto usaba con maestría sus dos espadas, pero debía admitir que le costaría trabajo vencer a Viper que solo usaba la fuerza bruta en su espada para atacar.

**** Gaara vs Yoru ****

El pelinegro estaba empezando a impacientarse, la defensa absoluta de Gaara era increíble, la arena le protegía pero también atacaba al mismo tiempo y por más que buscaba no encontraba un punto ciego por donde dar una buena estocada. Su cerberos llevaba la ventaja en batalla hasta que el mapache también empezó a utilizar la arena, eso empeoraba más las cosas ya que como él era más grande tenía que hacer mas cantidades de arena las cuales eran aprovechadas por el pelirrojo.

-No será como la última vez- fue lo que dijo Gaara en tono serio y frívolo. El pelinegro solo alcanzo a arrojar una sarcástica sonrisa, era irónico que en tan solo una semana de haber peleado el pelirrojo ya tuviera mucha ventaja en este nuevo combate.

-Esto se me pone difícil… lo siento pero no puedo volver a perder, si lo hago mi princesa jamás me lo perdonara- la seriedad rápida del pelinegro puso más alerta a el pelirrojo. Su ojo azulino cambio a un rojo sangre y de pupila tenía una espiral negra.

-Siempre he querido saber ¿qué es eso?- como niño que ve algo inusual Gaara apunto al ojo con uno de sus dedos.

-Se le conoce como el” ojo del demonio”… sin la necesidad de sus extraños sellos puedo manipular la mente de mi enemigo para crearle ilusiones… es a lo que ustedes llaman Genjutsu- Yoru pudo observar como el pelirrojo se sorprendía pero claro que no le iba a decir que otra función era mantenerse comunicado con Sakura, eso ya sería bastante información.

-Es interesante… es como una derivación del Sharingan… deseo ver su poder- la arena de Gaara volvió a atacar, los movimientos eran rápidos y certeros. Sin embargo ya no parecían preocuparle a Yoru; y cuando la arena por fin dio en el blanco… con sorpresa Gaara vio como su adversario desaparecía ante la captura.

-Estoy aquí- dijo Yoru, pero el pelirrojo estaba muy alerta ya que sus ojos podían ver a más de cinco enemigos rodeándolo. Todos tenían armas, todos tenían las mismas características y todos tenían sombras. Así que no podía diferenciar uno de otro ni menos saber cuál era el verdadero, si eran ilusiones, eran muy buenas además de que no sabía cómo romperlas ya que al no ser Genjutsu su chakra no serviría de nada.

-“Ahora soy yo el que te mete en un aprieto”… creo que eso es lo que piensas, pero te equivocas- la arena comenzó a atacar a todas las copias, si el verdadero estaba ahí le daría, de eso estaba seguro.

**** Deidara vs Shana****

El rubio movía de un lado a otro aquel largo mango mientras que la pequeña utilizaba su cimitarra para bloquear, el ataque. A Shana le causaba risa que esa fuera el arma de uno de los mejores guerreros del líder del clan Tsuki, simplemente no lo podía creer parecía un simple tubo plateado que lo único que podría hacer seria noquear a una persona.

-Tu arma es muy patética… en nombre de mi princesa te matare y le llevare tu cabeza- con un movimiento hizo que Deidara retrocediera. Y la chica comenzó a atacar mientras que, ahora, era el rubio quien bloqueaba.

-Mi arma no es patética- dijo con tranquilidad al mismo tiempo que la interponía entre su cuerpo y el filo de la espada enemiga- si la quieres a su máximo potencial solo debiste decirlo- y dicho esto de aquella abertura imprescindible en el mango comenzó a brillas de un color dorado y de repente salió el complemento de la guadaña… una hoja de puro chakra.

La pequeña tuvo que retroceder pues mientras nacía aquella hoja filosa la punta de esta estaba a punto de llegarle a la cara y atravesársele. Las burlas se dieron de inmediato puesto que cuando la guadaña termino de crearse el rubio comenzó a atacar sin piedad, a él no le importaba que su enemigo fuera una pequeña niña, ya que esa mocosa había sido la que había matado a Orochimaru, un ruin criminal, pero a fin de cuentas un legendario Sannin. Shana salto hacia las espaldas del rubio con la esperanza de asestarle un golpe mortal…

-No me subestimes- dijo el rubio y de inmediato el filo de la guadaña cambio de lado poniendo el filo en el cuello de Shana, esta ya no hizo movimiento alguno, todo había sido rápido. Ella aseguraba su golpe, pero ante sus ojos el filo de la guadaña había desaparecido por escasos cinco segundos para luego aparecer de lado contrario, logrando rodear su cuello, el cual sería cortado con el mínimo movimiento que infligiera Deidara.

-Esto es imposible- Shana era orgullosa, con alter ego de los más grandes a pesar de un cuerpo pequeño y por lo mismo no podía comprender como Deidara le había vencido así como así. Ella era fuerte, decidida y, sobre todo, un arma mortal-

-La hoja está hecha de chakra y por lo mismo la puedo moldear a mi manera… cambiarla de lugar no fue nada difícil- el rubio tenía una cara seria, sin emociones impregnada en ella. Su total atención estaba fija en una sola cosa… matar a quienes amenazaban su vida tranquila en Konoha. Eso sería algo que jamás perdonaría ni siquiera a un pequeña niña.

-¿Moldear el chakra? ¿Qué demonios es eso?- los Jinchuriki como ella no podían entender aquello, simplemente sus cuerpos no estaban “aptos” para realizar los afamados jutsus. Deidara no dijo nada, era mejor acabar con aquella amenaza de manera rápida par a que no sufriera.

-Sera mejor que todo aquí acabe- el rubio tomo con fuerza el mango de la guadaña, cerró sus ojos y tiro hacia su cuerpo aquella larga arma.

-Muchas gracias- fue lo que alcanzo a decir la pequeña antes de ser decapitada. Deidara no pudo creer lo que oía así que volteo y vio el rostro de Shana, tenía una sonrisa angelical y llena de paz, como si la hubieran librado de un gran martirio.

El lobo a lo lejos aulló, era un tono triste, de seguro era por la muerte de la pequeña sin embargo el rubio pudo notar que aquel ser lobuno llamado Hati desaparecía agradeciendo el fin de esa vida. Sus ojos mostraban el mismo alivio que el de Shana.

**** Itachi vs. Leila****

La chica movía su espada cual látigo afilado pero eso no era nada para Itachi, el se movía con mucha agilidad mientras manipulaba su guadaña para evitar que las partes cortantes del arma de Leila le golpearan. Poco a poco se iba acercando a la chica, está dándose cuenta llamo a su espada para que volviera a su estado original y así empezar a pelear cuerpo a cuerpo.

-Te empeñas mucho en proteger a tu aldea- omento la joven, dando tajos arriba, abajo derecha e izquierda.

-Ahí está mi futuro… es normal que lo proteja- contesto el Uchiha algo extrañado con el inicio de una conversación.

-Y ¿Si mueres aquí?- pregunto seriamente.

-No, todavía no puedo morir… si crees poder ganarme inténtalo pero te aseguro que no será fácil- Itachi creyó que era una conversación para decirle con indirectas que no era rial para ella, sin embargo la joven ante tal respuesta sonrió de manera dulce. Una sonrisa parecida a la de su madre cuando estaba aliviada de algún suceso del que se veía mala pinta.

-Pues entonces sigue haciéndote más fuerte… el verdadero enemigo todavía no ha despertado- dicho esto Leila arremetió contra el pelinegro con fuerza, esto le había tomado de improviso por lo que a Itachi le costó trabajo evitar los ataques y a consecuencia de eso tuvo varios cortes, pero nada que no se pudiera curar en un día.

-Yo soy el genio de mi clan… y fuerte soy… pero si es necesario… ¡¡¡ME HARE MUCHO MAS FUERTE!!!- con esto desapareció ante la mirada atónita de Leila para luego sentir como de su vientre brotaba un liquido cálido y de color rojizo. Lo último que pudo vislumbrar su borrosa mirada era el filo de la guadaña de Itachi.

-Confía en las personas… no dejes que los celos y las mentiras te cieguen- dicho esto la mujer cerró los ojos y al igual que Shana mostro una expresión de gran tranquilidad y paz. Su serpiente se cristalizo y desaprecio.

**** Sakura vs Tsunade****

La Sannin había golpeado fuertemente la cabeza de la chica, logrando que se arrastrara a unos treinta metros de ella, pensó que ese golpe la dejaría inmovilizada totalmente así que se dirigió a ella a paso lento pero firme. La pelirosa en verdad era una amenaza a la cual tenía que eliminar.

-No podrás moverte con facilidad… el golpe que te di hizo que los nervios de tu cuerpo se desorientaran a las ordenes del cerebro… no podrás mover tu cuerpo como quieres- dijo Tsunade tajante. Sakura se enojo mucho al ver que era verdad, intentaba mover su pie derecho y se movía el hombro izquierdo. Pero algo así no la detendría así que comenzó a explorar los movimientos de su cuerpo.

-Aunque usted me vea como una mocosa… puedo asegurarle que tengo los conocimientos necesarios para ganarle- dijo la pelirosa burlonamente mientras se paraba a gran velocidad y dirigía a una sorprendida rubia.

-No me lo creo- aun sorprendida bloqueo el ataque de Sakura, sus puños de encontraron y comenzaron una salvaje pelea cuerpo a cuerpo. La joven pelirosa se había recuperado en cuestión de segundos, tenia potencial como un ninja medico, tal vez que el de ella.

-Usted no me ganara… tengo que cumplir mi misión- dijo la chica con mirada decidida.

-No permitiré que destruyas nuestra aldea… ni que le hagas daño a sus habitantes- contesto la Sannin de la misma manera. Sakura solo agacho la mirada y esta vez se podía ver decepción.

-Usted jamás comprendió ni comprenderá mis actos... yo solo  tengo una misión que cumplir… ¿Por qué dices cosas que ni al caso? ¿Por qué crees que vengo a traer destrucción a un lugar que no me ha hecho nada?... tu no comprendes- las lagrimas de coraje salieron de sus verdes ojos, se separo de la Sannin y grito con ira- ¡¡¡VEN A MI... BESTIA SAGRADA!!!

Un rugido potente, un largo y enorme cuerpo, unos ojos verdes llenos de fiereza y unas fauces dispuestas a destazar todo. Tsunade no pudo evitar no contemplar al ser viperino, era la primera vez que le veía pero aun así sabia quien era… había visto muchas pinturas de ella en los muros antiguos de las ruinas que había visitado como turista; una bestia de los vientos…

-¿Esa es tu bestia?- una pregunta muy obvia, Sakura rodo y  puso los ojos en blanco.

-Sí, es mi fiel compañero… se llama…

**** Sasuke vs Kalim*****

El chico de ojos dorados no puede creerlo, no asimila que eso en verdad pusiera suceder. En la antigüedad el rey de las bestias era un hermoso león blanco de poderes sorprendentes y al mismo tiempo existía la bestia sagrada del agua que también era la creadora de las lluvias, de las tormentas y de los rayos, Byakko, el tigre blanco. Lo que veía ahí para él era algo insólito; el pelaje blanco del hermoso león se vio profanado con rayas negras, sus ojos hermosamente dorados se tornaron de un color rojo igual que el de su amo. Una combinación poco usual pero increíble.

-La parte oscura de mi corazón permanece sellada con mi voluntad… pero cuando en verdad quiero eliminar a alguien, mis ansias de matar salen a la luz… este es el resultado; las marcas en mi cara y en Buraki muestras nuestra alma manchada- Sasuke empezó a atacar a Kalim con rapidez y fuerza sorprendente, el chico tardo un poco en reaccionar y cuando lo hizo Sasuke ya estaba sobre él.

-Te demostrare que puedo matarte- el chico contrarresto los tajos que le Uchiha le daba. No permitiría que una simple reencarnación le matara así como así. El tenía orgullo y uno mucho más grande que el de sus compañeros a tal punto que no aceptaba morir en esa guerra; la verdadera todavía no estaba ni cerca de comenzar. Si era necesario abandonaría la lealtad hacia su princesa e iría con el verdadero líder de la guerra entre la paz y la destrucción.

-Te reto a intentarlo- Sasuke a cada segundo aumentaba mas su velocidad y con lentitud impredecible fue a rebasando la actual velocidad de su enemigo. Quería acabar con el de un tajo, ya que se había dado cuenta de que su hermano y Deidara ya había acabado.

-Yo… yo… ¡¡¡NO PIENSO MORIR AQUÍ!!!- con furia e histeria impregnada en el rostro de Kalim comenzó a atacar sin sentido a todos lados cerca de Sasuke, este lo único que podía hacer era defenderse pues el chico no le dejaba otra opción, a pesar de ser ataques llenos de locura eran precisos y no dejaban ningún hueco por el cual contraatacar.

-“Maldición”- el Uchiha no tenía otra opción, dio un salto hacia atrás para tener buena distancia, enterró al espada y…- ¡¡¡BURAKI!!!- la bestia rugió y al mismo tiempo salieron despedidos muchos rayos y recayeron en Kabuki y al mismo tiempo en el lugar donde el pelinegro había enterrado su espada salieron rayos que atacaron como serpientes venenosas a Kalim.

Este como pudo escapo del ataque, llamo a su bestia y emprendió la retirada cual cobarde era. Sasuke no lo podía creer, el maldito había huido mientras que sus compañeros que todavía estaban vivos seguían peleando. El los abandono y sin saber el porqué, pero el pelinegro no tenía tiempo de pensar en nada de eso, tenía que buscar a Sakura ya que al pelear con Kalim se dio cuenta de inmediato que la pelirosa no estaba peleando con ninguno de sus amigos y eso le preocupaba.

*** Naruto vs Viper***

A Naruto ya le estaban doliendo los brazos y es que cada bloqueo que hacia ante un ataque de tan descomunal cuerpo le costaba un gran trabajo, ese tipo de cuerpo corpulento le ganaba en lo referente a fuerza pero el, cual astucia de zorro, planeo el cómo vencerlo, lo único que le quedaba era utilizar la técnica de Sora. Pues por mas tajos que le había hecho al cuerpo de su enemigo no surgía ningún efecto, el andaba como si nada.

-Te matare- dijo Viper en susurro y nuevamente se dirigió a Naruto, este le observo con una irada compasiva y espero, espero a que el hombre le diera el golpe. Su adversario no comprendió la actitud del rubio pero aun si ataco y lo patio a la mitad. Pero al hacerlo vio que lo que había cortado era un tronco.

-Rasen Shuriken- dijo silenciosamente el Namikaze mientras que en su mano aparecía su Rasengan pero a los pocos segundos le surgieron las partes de una shuriken y brotaba de ella un ruido ensordecedor. Viper al oír tal sonido extraño miro hacia arriba solo para ver como esa técnica atacaba a su cuerpo desde adentro arrebatándole la vida dolorosamente.

-Princesa… cumpla la… misión- con esto cayo su cuerpo inerte en el suelo. Naruto no comprendió nada delo que había dicho su enemigo y tampoco le dio mucha importancia, tenía que ir en busca de Sakura.

Llamo a Kyubi para que fuera a él pero el zorro se encontraba ocupado con el perro de tres cabezas, eso hizo que un temor enorme abarcara su corazón ya que se suponía que Gaara se había encontrado con Yoru en el impacto, y sin embargo ya no estaba el mapache, solo se encontraba su compañero bestial peleando con él.

-Gaara… ¿Dónde estás?- bajo de los árboles para buscar por tierra a su, ahora, amigo pelirrojo. Y desde ahí pudo observar como dos liebres de pelaje blanco y negro iban en ayuda de Kyubi. La bestia de Sasuke tal vez también iría en su ayuda después.

-¡¡¡QUETZALCÓATL!!!- oyó la voz de Sakura, había rezumbado con fuerza y fiereza. Y Naruto por fin pudo ver con claridad a la bestia de la pelirosa. De escamas verde esmeralda, plumas de un especie de anaranjado rojizo en su cabeza y lomo, alas enormes de color verde y ojos de un verde centellante. Se parecía mucho a un dragón, una bestia de la destrucción…

La bestia en si era enorme y con un toque de misticismo, bella en verdad,  a pesar de que Naruto sabía que la serpiente era un ser destructor no podía evitar contemplarla, mostraba elegancia y nobleza. No le sorprendía que esa fuera la encarnación de la pelirosa ya que ella en la batalla anterior, en vez de parecer que estaba peleando con ellos parecía que estaba danzando con sus espadas. El porte de la chica en verdad parecía el de una princesa pero el de una princesa caprichuda que lo único que quería era destruir y complacerse a sí misma.

Notas finales:

si faltaron notas avisarme tambien oki?


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