Capitulo 5 Celos,celos,celos,celos?
Ginji abrió los ojos, ya era de día, sintió la suavidad de la almohada de plumas bajo su rostro, pero lo que mas le agrado y le hizo especial de despertar en un futon, a la altura del duro suelo fueron los brazos calidos del medico rodeando su pecho y haciéndole sentir protegido. El rubio acomodo su cara sobre uno de aquellos hermosos y bien trabajados músculos y le dio un beso.
Despertando al maestro de las agujas el cual se incorporo. Pregunto sonriendo- Que estas haciendo Ginji?
El rubio se giro hacia Jubei y le devolvió la sonrisa. Tomo la mano derecha del mayor y le dio un beso en la palma de la mano. Algo tan curioso y espontáneo hizo que el mayor sonriera de nuevo. Tomo la cara del menor y le dio un beso para después juguetear con la rubia melena.
Después se levanto y arropo de nuevo a Amano.
- Jubei....
-No digas nada. Externo mientras ponía su dedo índice suavemente sobre los labios del rubio.
- Sigue acostado, voy por el desayuno.
Una vez andando hacia la cocina, mientras se ataba la yukata, se giro hacia el rubio
- No me vas a negar que tienes hambre verdad?
Mido y Kazuki abandonaron el departamento, y se encaminaron a la salida para tomar el auto y dirigirse al Honky Tonk tenían una cita con un cliente y a Mido siempre le gustaba llegar con tiempo de sobra para estar relajado.
Estaban a unos pasos de la salida cuando el pelilargo recordó que había dejado un libro sobre la mesa que le había prometido a Natsumi.
- Ban tengo que regresar, por el libro no tardo y salio corriendo hacia el departamento.
Mido solo suspiro sin decir nada, y siguió con la mirada hasta que el hermoso joven se perdió entre aquellas calles.
Se encamino a la salida y subió en lady Bug después de todo tenían tiempo de sobra, bajo la ventanilla del conductor saco una cajetilla de cigarrillos del bolsillo de su camisa, golpeo el paquete haciendo que saltaran tres cigarrillos por sobre los demás tomo uno con los labios y saco el encendedor que le había heredado Yamato y lo prendió.
Busco estar lo mas cómodo posible en lo que su pareja regresaba, mirando hacia la salida sin realmente importar lo que veía solos esperaba a Kazuki para poder irse, cuando le vio salir de aquel lugar.
- Ginji? Se dijo para si, no había duda era Ginji.
- Pero que esta haciendo a esta hora? - No debía de estar trabajando? Se cuestionaba.
Cuando le vio despedirse con un apretón de manos y un abrazo tipo Ginji de.......
- Ese tipo es Jubei? Se pregunto.
- Que estaba haciendo con Jubei?
La pareja se despidió Jubei tomo al rubio por el mentón y le dio un tierno beso. Haciendo que el joven se ruborizara. Para después alejarse corriendo mientras volteaba hacia atrás y se despedía con la mano.
Pasó a un lado de Ban pero nunca le vio, estaba más entretenido en despedirse de Jubei.
Mido no lo podía creer, pero aparte sintió unos celos terribles y una furia que hizo que apagara el cigarrillo aplastándolo por completo.
- Ginji....Externo para si en un tono apenas audible para El y lleno de rabia.
Kazuki llego sonriendo con el libro en la mano subió al pequeño auto y noto la seriedad en Mido.
- Pasa algo Ban?
-No, no pasa nada. Y si decir mas arranco y tomo hacia el Honky Tonk.
Una vez en el bar, ambos pidieron café, Kazuki fue donde Natsumi y platicaba alegremente dando sus opiniones del libro que le prestaba. Mido estaba en la barra, perdido en sus propios pensamientos, cuando vio al joven llegar tan fresco y feliz como era su costumbre. Le vio ir a hablar directamente con Wang y darle una explicación y una disculpa por no llegar a dormir.
Cuando Mido escucho que no había ido a dormir, sus celos y molestia se tornaron en rabia y termino rompiendo la taza.
- Me debes además del café la taza. Externo Wang anotando la cuenta en una pequeña libreta que guardaba en un cajón.
- Hola Ban, Hola Kazuki, Hola Natsumi y después se fue a la cocina tenia toda una torre de platos que lavar.
Mido le siguió todo el tiempo con la mirada. Mientras le daba un sorbo a la nueva taza de café.
No es que Mido fuera un hombre malo, el apreciaba a Ginji y le hacia sentir aliviado el ver que el rubio ya no parecía un cadáver viviente de todo lo que sufría.
Ya no sentía remordimiento cada vez que se encontraba con la mirada melancólica de Ginji, actualmente su mirada volvió a ser dulce e inocente, ya sonreía y se veía como Ginji.
Pero el que saliera con alguien eso era otra cosa.
El no le había dado permiso para que saliera con alguien y mucho menos, mucho menos que se fuera a enamorar o amar al bastardo de Jubei.
Así que en lo que llegaba el cliente mientras tomaba café y fumaba, seguía con la mirada, los pasos del rubio. Y pensaba como hacer para que el rubio, se alejara del medico.
- Ban...? Pregunto Kazuki que estaba preocupado por el extraño comportamiento del telépata.
- Pasa algo Ban? - Desde que salimos estas raro, que te esta molestando?.
- Ya te dije que nada, solo me duele la cabeza.
El rubio completamente ajeno de las ideas tormentosas en el corazón de su ex compañero, sonreía y platicaba con Wang y Natsumi sobre lo genial que había sido su cita, sin entrar en los detalles de lo sucedido en la casa de Jubei.
Lo cual hacia que la rabia en Mido se acrecentara.
Para suerte de todos los presentes, Heven hizo su entrada al Honky Tonk seguida del cliente Honju Kazoumi y su socio Shinojara Misuki.
De inmediato la rubia ocupo uno de los gabinetes para tener privacidad y hablar con comodidad Kazuki y Ban ocuparon su lugar como recuperadores mientras la negociadora hacia las presentaciones Natsumi les servia café.
Ban hecho la ultima mirada fugitiva al rubio quien subió corriendo al piso superior a la habitación que en ocasiones anteriores compartieron. Al perder de vista al menor se centro en la negociación.
El trabajo de recuperación se trataba de una misión considerada muy peligrosa el pago seria en efectivo un millón doscientos cincuenta mil yenes para cada uno si lograban rescatar a la hermana de Shinojara Misuki.
La joven Sakura fue llevada engañada por un tipo de nombre Yuri del clan Ura-Fuchoin. A la parte conocida como la línea del cinturón. Por eso la policía no podía intervenir solo un grupo de expertos.
Kazuki al escuchar el nombre del causante y el clan mostró una cara de sorpresa.
- Esta seguro que se trata de Ura - Fuchoin! No puede ser.!
- Que sucede Kazuki?. Pregunto Ban intrigado.
- Esos malditos son los que acabaron con mi familia Ban. Externo el joven perdiendo un poco la compostura.
- Te refieres a los que se enfrento tu familia cuando eran niños Kazuki? Pregunto la negociadora.
-Por lo que entiendo el grupo es muy peligroso! Externo el Sr. Honju.
- En efecto es muy peligroso. Intervino Kazuki para después encontrar su mirada con Ban Mido. Quien noto de inmediato el dolor y rabia que le daba, el encontrarse con dicho grupo.
- Los Get Backers aceptan la misión, solo que para poder llevarla a acabo necesitamos de un equipo de expertos, y ellos tendrán que tener que recibir el mismo pago. Externo Mido poniéndose de pie.
-Por favor solo rescaten a mi hermana, estoy dispuesto a pagar lo mismo a cada uno.
- Entonces Señores el trato se cierra. Comento la negociadora.
Despidieron a los clientes quienes dijeron transferirían el dinero a la cuenta de la negociadora con el anticipo en cuanto supieran el numero y nombre de cada uno.
Una vez en la mesa sentados Ban y Kazuki frente a Heven empezaron a hacer una selección de quienes les acompañarían basado en sus habilidades.
- Ban no olvides es la fortaleza ilimitada, tienen que ser los mejores. Externo Heven.
- Es verdad Ban el grupo Ura- Fuchoin son familiares míos y ellos manejan una escuela donde se trabaja con hilos negros, pero no solo eso tienen otras técnicas muy diferentes que aunque no parece, son temibles y mortales Ban.
- Dos transportistas siempre una Himiko tu sabes que aunque es renuente y no le agrada trabajar en equipo es muy confiable. Además sus habilidades son muy importantes. Externo Mido.
- Akabane Ban no lo olvides es muy eficaz y es frío, mata sin pensar y muy rápido. Aunque su apariencia es temible es muy útil. Externo Kazuki.
- Shido. Que opinas de el Ban?
- Mmm... no Shido no me convence, prefiero a Ginji.
- Estas seguro Ban? Pregunto Kazuki.
- Estas celoso?
- No Ban no es eso, es solo que el Señor Ginji es inestable emocionalmente y en la línea del cinturón las emociones dominan la mente y no quiero que sufra, puede sufrir mucho Ban y lo sabes.
- No te preocupes Kazuki creo que lo podremos proteger.
-Ban que opinas de Jubei?
- Bah para nada claro que no.
- Ban Jubei tiene grandes habilidades en la pelea, es increíblemente valiente y fuerte y además es capaz de morir por proteger, deberíamos considerarlo.
- No, en tal caso mejor Shido.
Una vez escogido el equipo Mido, se sentía completamente complacido, esa misión como siempre seria un volado, nunca saben como resultaría, pero por el momento al menos a Ginji lo separaría del bastardo ex amante de su Kazuki.
Como convencer a cada uno para ir seria labor de los recuperadores, pero Ginji no se le iba a escapar.
Mido hizo gala de su facilidad para embaucar que diga para reclutar, y así logro tener el equipo que necesitaba. Con los mejores hombres para entrar a la fortaleza ilimitada el lugar donde abunda la desesperación, la miseria, la violencia y la podredumbre.
Al día siguiente el equipo traspaso las puertas de la fortaleza ilimitada. La fortaleza en la parte mas cercana a la salida, reina la miseria y la sobre población, pero no es tan violenta como en su interior, conforme se van adentrando es cada vez mas violenta y miserable.
Al entrar Jubei los estaba esperando.
Kazuki al ver a su amigo y ex amante y cómplice se emociono, pensó para si que Jubei estaba allí para desearle suerte y despedirse de El.
- Jubei siempre tan romántico. Se dijo a si mismo. Y se acerco hacia El.
- OH Jubei siempre tan lindo. Pero Yo ahora estoy con Ban, es algo que debes entender. Externo el pelilargo mientras le regalaba una mirada soñadora a Mido, quien se sintió complacido con la actitud de su pareja.
- Kazuki no me malinterpretes Yo no vengo por ti, vengo por El, señalando al rubio que estaba a su derecha.
El heredero de la casa Fuchoin quedo boquiabierto y ya no dijo nada.
Mido no dijo una sola palabra, pero era obvio que estaba mas que molesto.
Jubei se giro hacia Ginji y le atrajo hacia El recargándolo sobre su pecho. El menor le abrazo y se recargo en El mientras le sonreía con dulzura. Mirando hacia arriba para encontrarse con la mirada de Jubei.
Acto seguido el medico tomo el mentón del rubio para levantar la cara y le dio un beso dulce y apasionado ante la mirada de los demás. Después le abrazo con ternura y mientras lo hacia le dirigió una mirada retadora a Akabane mientras sacaba a relucir sus agujas para intimidarlo.
Mido se quedo en una pieza sin articular palabra, tratando de calmar sus ánimos para no descubrirse ante Kazuki. Pero deseaba matar al subordinado de Kazuki.
Por su parte el pelilargo, le molesto no ser el único en el corazón de Jubei. Y deseaba estrangular al Señor Ginji.
Akabane disfruto el espectáculo con la idea en mente que el rubio podía ser presa fácil en sus manos, si ya no estaba con Mido. Y una leve sonrisa y el brillo de sus ojos le delato.
Shido admiro a Jubei, era capaz de lograr lo que se proponía.
Mientras Himiko solo pensaba que si Jubei poseía el corazón de Ginji, siempre había una esperanza para Ella. Le lanzo una mirada fugitiva a Fuchoin y lo recorrió era hermoso no lo negaba, pero no era Ginji y era imposible que Ban lo amara mas que al rubio. Podía llegar a tener el corazón de su amado ojiazul, era su oportunidad.
Después de la demostración de amor de Jubei hacia el rubio, haciéndole sentir tan especial y amado. El grupo se encamino hacia la parte interior de la parte baja de la fortaleza.
Jubei al despedirse le prometió a Ginji que si lo necesitaba buscara la forma de mandarle un mensaje y el iría a su encuentro.
Ban le dirigió una mirada, de desprecio al medico mientras se marchaban.
Iniciaba una misión en donde el peligro se encontraba a la orden del día, pero una diversidad de emociones e intereses estaban también en juego y donde eran un equipo, pero también eran enemigos por defender lo que de alguna manera consideraban les pertenecía.