Entiedo que quiere... una última vez... un adiós.
-quítate la ropa.
-¿qué?
-por eso lo hago yo- hasta parece que estuvo en abstinencia durante un día.
¿Un día?
Alentaba la aceleración de su novio gimiendo de gusto cuando humedecía sus pezones, mientras lo desvestían y le bajaban el pantalón hasta las rodillas. Sin darse cuenta se quedó sin energía del placer para ir cayendo al suelo.
-… el suelo… es frio…
Esa fue una mala excusa.
… si… una excusa…
Rey ¡Picarón!
-… no… ah… los muerdas… ahhh…- casi lloró cuando mordieron su pectoral derecho, aun sabiendo que Grimmjow, siendo todo un animal en el mal y buen sentido, lo marcaría en esa última ocasión -… ahhh… - abría sus piernas voluntariamente pero sin darse cuenta, las caricias en ellas lo hacían rendirse ante su novio-Grimm… jow.
-si estas tan excitado como yo.
-… aquí… no- quizá en un hotel… aunque nos verían raro… un hotel lejano, fuera de la ciudad, o del país, o… de este mundo…
- no tengo tiempo que perder- le recordaron con pesadez, sin embargo aun no se hacía a la idea de tener sexo a pleno aire libre - donde sea está bien, de la forma que sea también- de la forma que sea, eso viniendo de ti no lo dudo-normalmente estaría bien cuando fuera pero hoy no, lo importante es con quien….
-… ahh… ¿Qué… ah… qué haces?- sin darse cuenta le pareció sentir algo duro contra su propio miembro, no lo comprendía por completo cuando le explicaron lo que sucedía.
-me masturbo cerca de tu miembro, mi lindo Ichigo- si bien en un principio no le pareció debido a que no lo gozaba completamente pronto le pareció maravilloso, el tacto directo del pene de su pareja y ver tan cerca su cara de goce.
-… no… mmmm… ahhhhh-… ¿qué hago?
Quítate.
Pero… me gusta… creo.
Acércate más.
No, se va a ver muy… muy grimmjesco.
Cámbiame.
Vete a la chingada.
-dame un rato más y me vengo- finalmente no se alejó ni acercó, viéndole el lado bueno de ser “el de abajo”, de esa manera quien debía pensar y actuar en esas situaciones era Grimmjow.
-… ra… ahhh… pido….
-sigue hablando… Ichigo…- le mordieron el cuello, haciéndole gemir aun más, totalmente extasiado.
-… te…- le daré el gusto… aparte de que quiero decírselo-… ah… amo… pante… ra… ahh… salvaje… - ¿no crees que lo de pantera salvaje estuvo de más?
¿Tú que sabes? Tú no lo sientes.
Porque no me dejas.
Y ni te voy a dejar, escala de gises.
El mundo se le borró de un segundo para otro, y a la vez se matizó de tantos colores al momento de escuchar el grito de gusto profundo de la pantera.
Se dijo brevemente que eso era seguramente lo que debía sentir cualquier persona que tuviera sexo bien hecho y a la vez con la persona que ama.
-… rico… que… ahhh… rico…- …perfecto, lo dije en voz alta… ¡y tanto que me costo la primera vez resistirlo!
Lo miró y los ojos azules brillantes. Lo enamoraban. Finalmente dejó de resistir el impulso y le besó la mejilla y brevemente la boca para recostarse de nuevo.
-abre la boca…
-…para… ah…
-enseñarte a besar- ¿Qué no ya le gustaba como lo hacía?
Uui, rey, que creidito me saliste.
-Gri…Grimm….
-hazlo-sólo…para complacerle a él.
Aja.
Es por él, no porque yo quiera.
Que si, te creo.
- tienes que tratar de no soltar mi lengua….- ya tenía la boca abierta y con cada palabra tan cerca sólo deseaba más besarlo, ya ni siquiera le interesaba si no le gustaba como besaba, con juntar su boca era suficiente-… y básicamente… desear no dejarme sabor… y consumir todo el liquido que puedas…
-apren… deré en la práctica-empezó como siempre hasta darse cuenta que su pareja era quien normalmente hacia el beso adictivo, así que intentó por todos los medios seguir las instrucciones… y creyó hacerlo bien hasta que el maestro hizo su trabajo.
Aprovechándose de la situación paso sus manos por debajo de la camisa, para esta vez verlo desnudo.
-déjame el saco…- aun no sentía la lluvia.
-…no… la última… vez… no pude verte…- la pena lo inundo, hasta decirse que en qué posición estaba para sentir vergüenza-… sin nada.
-¿quieres verme sin nada?- es lo que dije…sólo que trabándome y no queriéndolo admitir.
-ahhh…- reconoció enseguida ese dulce dolor en su parte trasera, el miembro de pantera introduciéndose.
-para eso… quiero que me la chupes.
-¿…el… ah… chupes… de… ahh…?
-ese mismo.
-pero…- pero si le muerdo, o lo rasguño o me espanto y lo muerdo con mucha fuerza, o si no lo gusta o si no es así, o si…
O si, o si, tú sólo haz lo que hiciste con sus dedos.
-…yo…no sé.
-no pasa nada, yo no me quejaré si son tus dientes lo que me lastiman.
-…si… lo intentaré- muy a pesar de lo que le afirmaron pudo ver que en la cara del mayor que, mínimo, le soltaría un golpe su le mordían la herencia.
Lo dejaron sentarse para que diera con como lo haría y de qué manera vería su Jaegerjaquez. Ahora dando por fin la con lluvia, más dándole poca importancia por otra idea en su cabeza.
Se debe ver aun más alto si él está de pie y yo me pongo de rodillas… más alto… más imponente… más… guapo.
-… ah… te sientas… o te…acuestas… no sé cómo, Grimmjow.
-¿Cómo me prefieres?- ¿Cómo lo habías pensado?
-… de- será la última vez en mucho que lo vas a tener- … de- ya estás de pervertido, no puede ser peor-… de- no seas maricón, puto- … ¡de pie!
- está bien- yo puedo hacerlo- aclaró un poco su mente, hasta que mejor paró de pensar en lo que estaba enfrente. Se arrodilló y como lo pensó se veía aun más atractivo. Sin embargo no concedía ser más activo en aquello- tienes que tocarlo.
-… ¡ya sé!- bueno, aquí vamos.
-no seas goloso- le advirtieron pues pensó que de esa manera acabaría más rápido su insaciable pareja.
Goloso.
Cállate y no repitas sus insultos.
-…eh…pues…
-poco a poco. Primero la punta la lames- sacó la lengua y simplemente trató de imitar lo que vio que le hicieron en varias ocasiones.
¿Qué te parece?
¿Cómo preguntas eso?
Con la misma boquita que “comes”.
…bien… está… sabros… ¡¿cómo me haces decir estas cosas?!
-…luego, vas metiéndotelo… según el ritmo que tengas- ¿lo estaré haciendo bien? -que exquisito lo chupas- ahí está tu respuesta.
Prefería no saberla.
Subió y dedicó una mirada suplicante mientras trataba de no atragantarse con esa “salchicha” casi en la tráquea.
-un poco… un poco más….-nunca hubiera acelerado el movimiento en su boca si no escuchara esa voz del espada, tan diferente y excitada gracias a él, haciéndolo gritar.
-si no puedes beberlo… sólo no lo tomes… ahhhh-era caliente el liquido y le pareció que tenía el mismo sabor que la boca de su amado, ninguno, neutro y adictivo. Y aun con el gusto no pudo beberlo-¿estás bien?- de milagro.
-… ah… hasta…
-si… me tardo un poco - ¿un poco?-Ahora tu premio-… ahí… con que esta era la verdadera “sexta maravilla”
Que cuerpo tan más buenote se carga.
No le digas así… pero cuerpo tan mas papi se lleva… y es mío ¡si!... me… sobresalté.
-¿así te gusto?
-…pu… es… si-lo tomaron por los brazos para elevarlo y recargarlo contra una pared, donde sin ninguna preparación, pues ya no era necesario, lo embistieron de golpe. Se agarró de donde pudo en cuanto iniciaron el bamboleo en su interior. Las uñas fueron las primeras en encontrar alivio, arañando la espalda del peliazul.
-pe… ahh… perdón…
-lastímame, está bien….
-ahh… aaahhh…Grimm…
- si ya no puedes abrir más no importa…-no podía hacerlo motivo por el que le aliviaba que el otro siempre hallara la manera de mejorar lo que él no lograba.
-mmm… si… ahh… si…
-…yo me abriré paso- cada movimiento se hacía eterno, y se lo agradecía infinitamente como el que esas sensaciones hicieran que olvidara la razón por la que debía estar hundido en una severa depresión.
La lluvia le mojaba absolutamente todo el cuerpo y aun así está ardiendo por los brazos fuertes que tentaba de vez en cuando, las manos que, aun queriendo ser rudas, le tomaban la cintura sin presionar, el aliento tibio en su rostro, los músculos duros de la espalda al abrazarlo, el miembro que entraba y salía velozmente dando justo donde quería y, lo que hacía que perdiera su propia alma, los ojos azules, intensos, mirándolo entre el agua… con una admiración que le hacía sentirse en dios entre los hombres.
¿Por qué no duro más que él nunca?
Debe ser porque…
No me contestes… no quiero ni saber.
-que buen culo tienes-¿y tiene que decírmelo?
-ahh… ca… aaahh... - quiso callarlo pero el orgasmo aun le recorría el cuerpo entero.
-pierna, vientre, pecho, retaguardia… y una hermosa cara… eres perfecto, Ichigo, el adecuado para mí. Me encantas-le avergonzó oír eso, más porque Grimmjow no era romántico pero parecía necesitar hacerle sentir especial. Y lo lograba.
Lo acomodaron nuevamente en el piso, sobre un charco de agua que empezó a hervir apenas iniciaron con el sexo.
-aaahhh… no pa… res… ah- apretaba sus piernas contra las caderas del otro y con las manos se agarraba de su cuello, aun así la penetración ya no era tan profunda-ahh… no… me sueltes… mmm- le pidió consumido en la delicia.
-no te suelto… no te quiero soltar nunca-¿habrá sido… en doble sentido? ¿Sólo yo note que su voz se oía triste?
Ya estás alucinando.
Yo lo oí triste.
-mmm… Grimm… jow- otra vez en ese punto y esa velocidad, su Grimmjow… diferente en algún sentido.
-dilo, sigue diciéndolo- las gotas de lluvia le caían en el pecho y algunas en la cara, eran heladas, por eso le sorprendió sentir que ahora se derramaban tibiamente sobre su tórax.
Como pudo vio la cara del hollow, impregnada de una enorme y pesada melancolía. Llorando sin dejarle de hacer el amor.
-… ahh… mariquita…- respondió como pudo y de manera de ayudar al otro.
Odiaba sus lagrimas y porque sabía que lo harían llorar y no quería una triste despedida.
-¿a quién le dices así, puta?- le sonrieron como si nunca hubiera estado afligido.
-… je…- le devolvió la sonrisa. Pronto le levantaron una pierna y siguió-aaahh… más… Grimm…
-te amo… Ichigo… shinigami…
-…mmm… gr…y yo a ti, Grimmjow… espada -Te amo lo suficiente como para estár contigo hasta el último momento que pueda aunque me lastime.
No hablaron más, simplemente sus voces salían para decir barbaridades o gritos. Ya le dolía y aun no se correría su novio, eso significaba más tiempo con el… y por ello no se quejaría y gozaría cada segundo.
Le mordió un brazo cuando el semen de Grimmjow por fin se quedo en el, ahogó el grito hasta que recuperó la cordura para soltarlo.
Ninguno pudo calmar su respiración pero el otro habló de inmediato, con una voz entre enojada y abatida.
-¿Cómo puedes… seguir haciendo el amor conmigo… sabiendo que no… no nos volveremos a ver?
¿Cómo sigo con esto? Porque la palabra clave es que sigue, entre más tiempo pase con él es mejor… por eso… hasta el último segundo… es valioso.
-porque…- lo empujó para que saliera. Quería responder más antes recargo la cabeza en el pecho de este, no podía recuperar el aliento-…porque…- lo abrazó con fuerza. Su pecho subía y baja más que el del espada así que quiso que entendiera que lo amaba pero eso no llenaría sus pulmones de aire para contestarle.
-… ahh… que… dios…- no esperó eso, que se aprovecharan y lo penetraran sin siquiera avisar.
Es Grimmjow… como si este fuera a rechazar una oferta… ¡que ni oferta era pero para el todo es igual!
Lo movieron de arriba abajo, cooperó con rapidez, no deseaba que el peliazul escogiera el ritmo.
-… Grimm… no seas… ah… un idiota…- le pidió con melancolía. Esa pregunta era pensada para que el no sufriera y, posiblemente, harían lo que fuera para ello, incluso irse sin despedirse.
-¿un idiota?
-… ahhh… ¡aaaahh!-ya no soportaba más, se corrió varias veces y su cuerpo le ordena detenerse.
-si ya sabes que lo soy.
Si, pensar que me enamore de la persona… ¿persona? Bueno, más rara de este mundo…más estúpida… más… especial… ¿por qué mi suerte tiene que llegar hasta este extremo?
El cielo quiso ayudar, parando su aguacero.
Pero nada le quitaría el dolor… de que ya amanecía.
-duele… Grimm…-… y mucho… no me dejes… nunca.
-perdón…- sé que no es tu culpa…-…a mí… ahh…también…
-… perdón… perdón…- finalizó el mayor y la abrazaron con violencia- te amo, te amo… Ichigo…- le acarició el cabello, bajando la mano hasta la frente y de ahí queriendo tocarle las mejillas. Sin embargo agarraron su mano y se la besaron- no lo hagas… no hagas nada… y déjame un momento…- ese pecho que subía y bajada del arrancar ya no era de cansancio, lo sabía, era de llanto.
No te diré adiós, se que nos volveremos a ver.
Para pelear.
Quizá… pero tarde o temprano se acabará esa pelea…el deberá seguir vivo y yo también… regresará a mi….y vamos a volver a salir.
Eso te da fe ¿verdad?
No, así deberá suceder… yo haré que suceda.
-Hay que esperar la próxima lluvia- habló mientras unas rezagadas gotas acababan con el mal tiempo.
-¿Qué?
-si- le sonrió y se levantó para alejarse un poco- cuando llegaste a la escuela estaba lloviendo, te vas cuando deja de llover… sólo hay que esperar…
-je…- el pantera lo jaló hacia él para abrazarlo en su pecho-… que razonamiento tan pendejo de princesasita…- no dijo nada, solo se recostó- … es… cuestión de… tiempo.
-¿está bien lo que hicimos?- le preguntaron finalmente, llevándolo a dentro de la escuela.
-si, está bien- aun con el pesar de entender que por amarlo hasta el último momento le haría más daño al separarse, le contestó lo que realmente sentía.
Estoy feliz de estos días pasamos juntos… sólo que se necesita de nosotros en casa. Pero por ahora… quiero que seamos intocables.