El amor es recíproco, no unilateral
Estaba buscando
Tú estabas en una misión
Entonces nuestros corazones se combinaron como
Una colisión de estrella de neutrones
(Muse, Neutron star collision)
A veces se preguntaba si a todos les pasaba alguna vez que terminaban sintiendo algo diferente por algún amigo… creía que si, porque todo debe comenzar como una inocente amistad, luego pensaba un poco mas y se cuestionaba si era normal fijarse en tu amigo que al igual que tu era hombre… suponía que no y eso le molestaba, lo frustraba, lo confundía.
No lo conocía desde hacia mucho pero lo poco que habían conversado había servido para comprender un poco su vida, su modo de pensar, el como percibía las cosas. Sasuke no era un niño común, destacaba, ya sea por su apariencia o personalidad inalcanzable, la gente solía idealizarlo lo que lo ponía de mal humor porque lo hacían mantener una imagen que el realmente no quería, por el mismo motivo le costaba expresarse y confiar en la gente, pero con Naruto fue diferente, desde un principio prometió ser especial.
El modo en el que sus caminos se habían cruzado había sido bastante extraño. Una tarde cualquiera, un día soleado, demasiado para su gusto, un estúpido trabajo de arte y la jugarreta cruel del destino.
- Disculpa, ¿Podría tomarte una foto? Es para un trabajo… - había dicho sin fijarse mucho en el chico rubio que tenia en frente.
- Claro – había respondido este, sonriendo.
Lentamente levanto la cámara y fijo la mirada en el rostro alegre del que parecía tan solo unos años menor que el, lo fotografió un par de veces y luego bajo la cámara.
- Bueno, gracias – dijo sin mirarlo aun, revisando las fotos, pero el chico no se iba así que levanto la cabeza para encontrar su rostro a unos centímetros de distancia. Sintió que se ruborizaba aunque no entendía por que.
- Son negros… - había comentado el rubio – creí que tenían algún color… jamás había visto unos ojos tan oscuros – pero no lo dijo en tono de miedo, si no mas bien de emoción. Sasuke miro también los ojos del rubio, azules, celestes, un color entre cielo y mar, y no pudo evitar sentir lo que sintió, como si hubiera algo, un algo que lo atara desde el fondo de su pecho a esa increíble criatura que lo miraba de ese modo tan único y diferente. – Soy Naruto – se presento alejándose de improviso y despertando al Uchiha de sus pensamientos.
- Soy Sasuke – respondió este intentando volver a su tono normal. Naruto le pregunto el porque de las fotos y el moreno respondió a sus preguntas de un modo amable, cosa que no haría con cualquiera y de algún modo, terminaron por acordar juntarse al día siguiente, en el mismo lugar, por la mañana.
Al final se encontraron, Sasuke creyó que Naruto no iría, pero a penas diviso la plaza y vio una cabellera rubia el corazón se le desbordo por los nervios, caminaron, conversaron, intercambiaron números de teléfono y correo electrónico, se estaban haciendo amigos.
Hubo un momento, en que estaban sentados en el pasto observando las fotos que Naruto comenzó a doblar un papel distraídamente, Sasuke lo observo todo el rato y cuando termino, el rubio lo miro sonriente y le tendió una mariposa de origami.
- Ten, un regalo – dijo despreocupadamente tirándose en el pasto, el Uchiha la tomo con cuidado y analizo el trabajo, era una perfecta mariposa blanca, luego la guardo entre sus cosas.
No entendía porque pero ese simple gesto lo había echo feliz.
- Em… Sasuke – pero tenia que ocurrir en algún momento, el sentimiento de alegría no duraba por mucho tiempo y había llegado el momento de que se terminara.
- Uhmh?
- ¿Crees que podrías enviarme las fotos?
- Por supuesto…
- Quiero enviarle una a mi novia…
No sabia porqué pero aquello le había dolido, quizás porque había dado por hecho el que Naruto era soltero, en que podrían ser amigos, y aunque si lo pensaba de un modo mas objetivo el que el rubio tuviera novia no afectaba su posible amistad, pero el Uchiha no lo vio de ese modo y noto que no había pensado con racionalidad en ese momento.
- Ya veo – comento sin embargo levantándose – bueno, es hora de irme, debo terminar el trabajo – dijo dándole la espalda, Naruto se puso de pie también y lo siguió hasta el paradero. - Fue un gusto verte, te enviare las fotos… - se despidió tendiéndole la mano, Naruto la estrecho y sorpresivamente le dio un abrazo, se detuvo a escasos centímetros del rostro, respirando contra el blanco cuello de Sasuke quien sintió escalofríos, la promesa de un beso no dado, esa sensación de deber y no deber, de algún modo saber que se podría pero sin atreverse a concretarlo. El Uchiha se alejo y subió al bus que acababa de parar, pago el pasaje un tanto ruborizado y avanzo hasta el último asiento, Naruto seguía de pie en esa esquina, observándolo, sus miradas se cruzaron y se mantuvieron hasta el último minuto, cuando el vehículo giro y se perdieron de vista.
Quizás siempre que conoces a alguien y vez en esa persona, inconscientemente una posible pareja, te frustra la idea de que el o ella puedan tener novio, peor aun cuando asumes que puede que te atraiga una persona que recién vienes conociendo, es de tu mismo sexo y es hetero. No es como si fuera imposible aun con eso, pero de todos modos es más difícil, se sufre más y por lo general los resultados no son del todo buenos.
Ese día llego mas temprano que de costumbre a su casa, debía terminar el maldito trabajo así que traspaso las fotos al computador, las del día anterior y las de Naruto de ese día, la imagen del rubio en la mayoría del álbum lo consterno de un modo que no creía, esa sonrisa tan natural, el modo en que sus ojos se entrecerraban con la luz solar, o cuando miraba fijamente un punto perdiéndose en sus pensamientos. Cada uno de esos cuadros mostraba su personalidad, tan transparente que parecía agua, o mas bien aire.
Separo las mejores y abrió photoshop para arreglar un poco la iluminación, ya que por lo demás estaban perfectas, se enorgulleció de su trabajo con la perspectiva, había varios rostros de desconocidos que el había logrado captar con gran precisión y con el mejor ángulo posible, pero las de Naruto eran las mejores. Suspiro algo cansado y creo una carpeta con el nombre del rubio, luego busco el correo de este en su móvil y envió las fotos, lo que no se esperaba era que segundos después el otro respondiera, agradeciéndole y agregándolo al msn. Hablaron casi toda la noche y Sasuke olvido por un momento que había algo que los separaba, tampoco pensó mucho en lo que podía sentir por el ojiazul, solo fue el, de una forma extraña y diferente, como todo lo concerniente a Naruto.
Cuando ya eran cerca de las cinco de la madrugada termino su trabajo que se trataba de mostrar las perspectivas de los rostros, a parte de la edición y calidad de una fotografía. A Sasuke le gustaba captar imágenes a través de la cámara, era como poder atrapar algo y que permaneciera de un modo intemporal en un papel, a menos que este fuera destruido, así también se destruía un mundo. Es por eso que también le gustaba leer, o lo que fuera que le permitiera crear una utopía donde solo el estaba, solo el comprendía y nadie pudiera dañarlo. “Vivir en una fantasía, es mejor que vivir una realidad sinsentido” siempre se repetía eso y aunque sabia que no estaba del todo bien al menos lo hacia sentirse tranquilo. Sasuke también sabia que el no era del todo común, jamás se había enamorado ni fijado en nadie realmente, por un tiempo había pensado que no había nadie en el mundo para el, pero luego dejo de darle vueltas a ese asunto y acepto que estaría solo siempre, si había tenido algunas aventuras pasajeras, nada importante pero eso solo confirmaba su teoría. Sasuke también estaba seguro que no le importaba si una persona era hombre o mujer, lo que valía era el ser que había dentro, fuera lo que fuera, una personalidad libre y sin preocupaciones era mejor que una atada a los cánones de la vida humana, como muchas veces lo era el. Pero ahora resultaba que Naruto había quedado grabado en su mente desde que sus miradas se cruzaron fijamente, hasta ese momento no había creído en el amor a primera vista, aunque más bien lo atribuía a una atracción simple y a segunda vista, pero de todos modos era grave, y preocupante para su salud mental.