Capitulo 8 - Completamente perfecto
Frente a mi en la mesita de comer me ponían los papeles de divorcio, Melody junto al tremendo orangután que se consiguió de abogado no me miraba a la cara y yo con cara de idiota y con la comida cayéndoseme de la boca la miraba confundido.
Lo primero que se paso por mi cabeza al salir del trastorno fue un tremendo
*¡¿PERO QUE FUCKING?!*
- Solo fírmalo ¿quieres? Después de todo es algo que tu querías.
Trague la mala comida de enfermo que tenia en la boca y me limpie con la manga del pijama.
- ¿Me puedes explicar que mierda te pasa?
- ¡no te hagas, te escuche cuando le dijiste a los chicos lo que querías hacer!
- ¿pero que mierda...?¿ahora escuchas tras las paredes?
- ¡¿Qué importa como lo supiera, es lo que querías así que firma de una vez y terminemos con esto quieres?!
La verdad estaba muy sorprendido pero no por eso reaccionaria estúpidamente. Lei todo el papeleo y al parecer todo parecía ser legal y no había nada extraño o sospechoso. Titubee cuando tuve el lápiz en la mano pero Melody tenia razón eso era lo que quería acabar mi matrimonio era lo mas sano, además ya no habían razones por las cuales mantenerme junto a ella.
Me pedia la casa y parte del dinero que gano, me pareció completamente justo, podía ver a las niñas las veces que quisiera y eso me parecía genial. Puse mi firma en el último documento y antes de entregárselo le dije:
- ¿Por qué haces esto tan de la nada?
- Porque tu y yo no estábamos destinados a estar juntos...
Me quitó el documento de las manos y de pronto escuche la puerta abrirse. Kai me miró sorprendido, miro a Melody y al temible mastodonte junto a ella pero no dijo nada solo se quedo parado observando.
- Solo quiero hacer una ultima cosa antes de irme de tu vida para siempre...
- ¿Qué?
Se volteo a ver a Kai y lo miró de una forma muy extraña, diría que hasta burlesca.
- Espero no te enojes mucho Kai.
Y sobre la misma poso sus labios sobre los míos, fue corto pero pude sentir en ese breve instante todo el dolor que cargaban dejándome un amargo sabor. Al erguirse note como caían lágrimas por sus mejillas depositándose en su boca. Fue el beso más triste que alguna vez me dieron.
Paso junto a Kai se detuvo y le dijo:
- Espero que a ti te de todo el amor que yo esperaba, les deseo mucha suerte.
Ese mismo dia me dieron de alta. No sabíamos si sentirnos felices o culpables. Kai me ayudaba a caminar al auto, debo decir que odio las muletas... son tan incomodas...
- Tu madre me llamó, nos está esperando fuera de mi casa, dice que ha llevado todas tus cosas
- ¿Todas? - mueve la cabeza hacia atrás y pone cara de pánico-
- ¿Por qué pones esa cara?
- ¿sabes lo que significa que se haya llevado todas mis cosas?
- Am... ¿no?...
- Eso incluye el equipo con los amplificadores, las guitarras, los mezcladores, las computadoras... ¿sigo?
- ¿y?
- Tengo muchas cosas
- ¿y?
- ¿Donde las voy a meter?
- ¿Qué tantas cosas pueden ser? Además mi casa es grande, tengo un lugar donde guardo lo que no ocupo, si lo ordenamos podemos adaptar un espacio para tus cosas...
- ... siento mucho las molestias... comenzare a buscar ahora mismo un apartamento.
- ¿Qué tiene de malo mi casa?
- Nada...
- ¿entonces porque no quieres quedarte ahí conmigo?
- Pues... porque... no se...
- No seas tonto, además necesitas alguien que te cuide y yo estoy dispuesto a servirte de enfermero.
Me reí coqueto, la propuesta sonaba tentadora
- Nee... ¿y te pondrás un vestido cortito y la tiara?
Me miró medio traumado.
- ¡Ah! ¿te pondrías una liga también? Eso me mata...
- ¡Miyavi!
- Kai te verías tan sexy... -voz suave-
- ¡Miyavi estoy manejando!
- No, aun no empiezas a manejar. -me acerque y le besé el cuello-
Introdujo la llave en la chapa de contacto del automóvil y el motor rujió.
- Ahora sí
- -risas- aguafiestas...
En el camino solo hablamos del divorcio, de cómo había ocurrido todo, y note que estaba molesto.
- ¿Pasa algo? Estas muy raro...
- No. Estoy bien...
- ¿a quien tratas de engañar Kai? Dime que pasa...
- ... me molestó lo que hizo Melody
- ¡¿QUE?! ¡ESTAS LOCO! ¿Cómo puede molestarte? Ahora podemos estar juntos sin problemas... deberías estar celebrando...
- No me refiero a eso, eso me tiene mas que feliz, fue lo otro lo que me molestó.
- ¿Qué cosa?
- Cuando te beso. ¿tenia que hacerlo? ¿y en mis narices?
- No se Kai, yo no la culpo, yo habría hecho lo mismo.
- ¡claro! Defiendela ahora...
- No estoy defendiéndola. ¿Qué habrias hecho tu en su lugar?
- Largarme
En ese momento aparcamos fuera de la casa de Kai, aproveche para hacer que me mirara.
- Está bien... quizás abría hecho lo mismo... pero eso no quita que me haya molestado.
Le sonreí y le apreté la mejilla
- Te vez tan lindo cuando estas celoso... ¡Uy! si me dan ganas de comerte a besos - le sonreí y le di un beso en la mejilla-
Me miro feo pero luego me dedicó una sonrisa y miro por la ventana, yo hice lo mismo, no vimos a mi madre en ningún lado, nos bajamos del auto y entramos a la casa.
Todas mis cosas, mis guitarras mis equipos mi ropa, mis zapatos, los recuerdos de mis fans y las miles de cosas inútiles que he ido juntando con el tiempo estaban regadas por la casa.
Tome una pelota que estaba junto a la puerta y sonreí amplio
- ¡Pensé que estaba en la casa del vecino! ¡maldito viejo nunca me quiso decir que el no la tenía!
Mire a Kai quien estaba con la boca abierta de par en par
- Te ves lindo con la boca abierta... -sonreí- te dije que tenía muchas cosas...
- ... am... a... ah... -agitó la cabeza y sonrió- ¡bien, manos a la obra!
Entro a un dormitorio y comenzó a hacer mucho ruido, fui a verlo a duras penas con las malditas muletas que tanto me incomodaban y lo encontré corriendo un mueble. Metió las pocas cosas que tenia tiradas por ahí dentro del mueble y comenzó a acarrear mis cosas. Le trate de ayudar pero las putas muletas eran un estorbo, acabaron tiradas por ahí. En unas horas ya teníamos todo listo, limpio y ordenado; nos tiramos en el sillón a descansar y ver tv, luego el se levantó y fue a tomar una ducha. Cuando estuvo de vuelta se sentó a mi lado y apoyo su cara en mi hombro. Su cabello estaba húmedo y su piel desprendía un delicioso aroma, vestía un pantalón de buzo y sobre sus hombros descansaba una toalla, su piel al descubierto dejaba ver los músculos de sus brazos y su pecho. Al verlo así me entraron ganas de... Ejm... de... bueno... ya me entendieron ¿no?
- Oye...
- ¿mm?
- ¿puedo tomar un baño?
- Claro. ¿Por qué me preguntas? Solo ve, no me preguntes tonto...
- Ya se, no me refería a eso cuando pregunté
- ¿entonces?
- Necesito ayuda...
- ¿ayuda?
- Sí, me cuesta levantar la pierna muy alto y como te dije quiero tomar un baño... me costará meterme a la bañera además necesito ayuda con los vendajes. ~Help me please~
Me miro afligido y suspiro.
- Bien, ve al baño iré por toallas.
Me paré y fui al baño. una vez allí me saque el chaleco, los pantalones y la sudadera quedando solo con los bóxers. Di el agua, la bañera comenzó a llenarse, me senté al bode de esta y comencé a sacar los vendajes de a poco, en eso Kai se apareció en la puerta, lo quede mirando y le sonreí.
- ¿me ayudas?
Estaba muy rojo, se acerco y se sentó a mi lado, fue sacando las vendas una por una hasta que se vio la superficie de mi herida. Estaba bastante cicatrizada pero aun así se podía apreciar perfectamente la marca que había dejado en mi muslo. Mientras Kai hacia eso yo me encargaba de ponerle jabón al agua. Estaba bastante distraído en eso por lo que me asuste al sentir la presión de la mano de Kai sobre mi pierna.
- ¿Te duele?
- ...No. Solo me molesta un poco cuando levanto la pierna muy alto.
Me sonrío, se paró, puso mi brazo tras su cabeza para darme estabilidad y me ayudo a entrar, una vez dentro de la bañera se dio media vuelta para irse. Me saque la ultima prenda de ropa que llevaba y me senté tranquilamente disfrutando del agua.
- Oye... ¿Dónde vas?
- -se voltea- A la casina.
- Dijiste que me ayudarías...
- Pero ya te ayude...
- No seas malito, ven ayúdame.
- Pero...
- ~¿Pleeeeeaaaaseee?~ -grade la cabeza haciendo un puchero-
No recibí respuesta, solo se devolvió. Se arremangó los pantalones hasta la rodilla, luego se metió a la bañera conmigo, eso me asustó pero no deje que se diera cuenta, tomo la regadera, se puso atrás tras de mi y se sentó en el borde de la tina con una pierna a cada lado de mi cabeza. Echó a correr el agua dejándola caer sobre mi cabeza y espalda; cerré los ojos y me deje llevar por la sensación de sus manos lavando mi cabello.
- Tienes manos de ángel...
- Lo sé -risas-
Me enjuagó el cabello y lleve mi cabeza atrás para mirarlo, conecté mi mirada con la suya y me deje absorber magnéticamente por sus ojos; lleve mi mano a su nuca y lo lleve a mi boca, delinee sus labios con los míos y me cargue levemente sobre ellos, Kai deslizo sus brazos por mi cuello y se quedo enredado ahí. Note que en su mano tenía una esponja, puse mi mano libre sobre ella y la deslice por mi clavícula. Nos separamos y seguí moviendo su mano con lentitud por mis hombros, ya no nos mirábamos, ambos veíamos como la esponja con nuestras manos viajaban por mi cuerpo dejando un camino de espuma tras ella. Solté su mano y el siguió con la tarea de lavar mi piel. Su suave y lento contacto por mi cuello, mis hombros, mi espalda, mi clavícula, mi pecho, mi abdomen, mis caderas ya se estaba volviendo torturante. De pronto un irritante sonido llegó a nuestros oídos y Kai se levantó a contestar. Era el teléfono. Termine de bañarme y Salí de la tina... sí, exactamente lo que piensan... nunca necesité ayuda -risas-
Me envolví en la toalla y Salí del baño.
- ¿Que pasó?
- Nada, numero equivocado. ¿saliste solo?
- Si... es que estabas ocupado... tengo sueñito ¿vamos a dormir?
- Si, yo también tengo sueño el baño me dejó derrotado. ¿pero no tienes hambre?
- Kai...
*mierda... cállate Miyavi... no se te ocurra decírselo...*
- ¿Qué?
*¡no lo digas!*
- Tengo hambre pero...
*mierda ya se me salió*
- ... no es de comida.
Honestamente no se que me pasaba ese dia... debía ser el golpe de emociones... el hecho de haber salido del hospital, el hecho de que todo saliera bien, de que pudiera estar con Kai sin importarme nada pues ya no era un hombre casado, el hecho de verlo en esas pintas tan provocativo llamándome a la tentación... no se que cosa era pero ya no había vuelta atrás, ya no era broma, ya no me controlaría como hubieron veces que lo hice, ahora iba en serio, la piel de Kai me llamaba a probarla y no podía ni quería controlarme.
Tome a Kai de la cintura y lo mire fijamente a los ojos, el me miro muy sorprendido y sonrojado, lo bese despacio y lo apreté a mi cuerpo atrevidamente haciendo que nuestros miembros se rosaran. Sentí como Kai ahogaba un suspiro dentro de mi boca, y como su miembro iba endureciéndose de a poco. No pude soportarlo mas, lo tome de la mano y me lo lleve a su dormitorio.
Lo recosté sobre la cama y lentamente me acomode a horcadas sobre el, deposite un beso en su cuello, y deslice mis manos por su sus costados muy suavemente. Podía escuchar el retumbar nervioso de su corazón sin problema alguno. Bese sus parpados, sus pómulos, su nariz, sus mejillas, sus labios... ahí me detuve largo rato, explore su boca a mis anchas, juguete con su lengua a mi antojo, bese, mordí y lamí su boca con ternura, luego con deseo, con pasión y finalmente con lujuria. El dulzor de la boca de Kai me quemaba los labios, era adictivo, Kai es completamente adictivo. Jale entre mis dientes suavemente su labio inferior y después deslice mi lengua hasta su mentón, baje a su cuello y subí a su oído, lamí y mordí su lóbulo izquierdo, bese su cuello, lo recorrí completo mientras acariciaba su abdomen. Me apreté un poco a su cuerpo y nuestras entrepiernas volvieron a rosarse exquisitamente. Note como su miembro estaba tan erguido como el mío, volví a frotar nuestros miembros, esta vez Kai gimió levemente. Música para mis oídos, su suave voz haciendo ese sonido era sin duda el deleite más grande que jamás llegue a imaginar tener.
Sin darme cuenta Kai había cambiado posiciones y ahora era el quien deslizaba su lengua por mi cuello. Su cálida lengua contra mi piel se sentía exquisita, comencé a acariciar su espalda, su pecho sus brazos, sentí como bajaba cada ves mas, pasando por el centro de mi clavícula, se detuvo en mi pecho donde beso mi tatuaje y luego siguió bajando por mi abdomen volvió a detenerse y leyó el tatuaje que rodea esa zona.
- "No dudes y ve" mmm... muy sugerente...
Deslizó sus manos desde mis rodillas hacia arriba por mis piernas metiéndose dentro de la toalla, rosando mis caderas, sus manos se asomaron al otro extremo de la toalla y abrió los brazos haciendo que la tela se abriera dejándome completamente al descubierto. No me molestaba ni me hacía sentir incomodo, por el contrario me excitaba sobremanera.
De pronto sentí como la húmeda lengua de Kai se apoderaba de mi sexo, en un torturante sube y baja.
- Nnhhh...
Gemí suavemente, la sensación era abrazadora, muy estimulante. Deslice una mano y acaricie el cabello de Kai.
- Mmm... nnhhh...
Se sentía tan bien, tan exquisito, tan placentero, podía escuchar los latidos de mi corazón retumbar en mi cabeza, podía sentir cada fibra de mi ser estremecerse de placer.
- Mmhh.... Hahh...
El tortuoso sube y baja de la boca de Kai de a poco me estaba dejando sin aliento, de pronto sentí su mano envolver mi miembro, lamidas mas rápidas se hicieron presentes junto con el movimiento de su mano.
- Ahh.... aaahh... Kahhiii... aahh...
Estaba perdiendo la cordura, la sensación me estaba llevando a la gloria, deslice mi cabeza hacia atrás y sonreí mientras gemía su nombre. Cada vez el placer aumentaba considerablemente. Inconscientemente levante levemente la cadera un par de veces.
- Ahhh... Kai... mhh... ahhh... Ka - iihh... hahhh.... Ahhh... así... aahh..
La poca cordura que me quedaba amenazaba con desvanecerse en el aire al sentir tanto goce. Comenzaba a sentir ese delicioso cosquilleo que recorría todo mi ser, pero lo detuve al enderezarme. Atraje a Kai lentamente a mi boca para besarlo; no quería correrme aun, quería disfrutar más y que Kai disfrutara de igual forma antes de caer derrotado. Deslice mis manos por cada centímetro de piel que pudieron tocar haciendo que Kai se estremeciera bajo mis brazos. Me deshice del molesto pantalón que aprisionaba al nuevo amiguito de mi amiguito. Complacido de la vista que tenían mis ojos observé la hermosura de su cuerpo, deleitándome con cada rincón de su piel.
Bese su abdomen escurriendo mis labios, haciendo miles de figuras a mi antojo bajando cada vez más, probando la suavidad tersa de sus colores.
Mi aliento tibio chocó con la piel de su ingle sacando un jadeo leve de su boca, bajando despacio por sus muslos sentí nuevamente un suspiro; subí a su cuello y lo bese mientras ponía una mano en su pierna subiendo y bajando por ella despacio. Mi lengua juguetona jugó con uno de sus pezones y al instante mis oídos se llenaron con un gemido proveniente de la boca de aquel hombre bajo mi cuerpo. Sus gemidos me excitan tanto...
Pov Kai.
Esa mano sobre mi pierna estaba torturándome, su figura sobre mi cuerpo acariciando mis piernas sin dejar de mirarme fijamente a los ojos, su boca entre abierta me llamaba a gritos pero era más tentadora y excitante la imagen de tenerlo así, con su mirada nublada en placer recorriendo mi cuerpo deliberadamente, así que no posicione mis labios sobre los suyos, me quede mirando la clara piel de su cuerpo que contrastaba hermosamente con sus negros tatuajes perlados por las pequeñas gotas de agua que caían de de su cabello.
No despegaba sus ojos de los míos y de pronto su mano recorrió mi cuerpo llegando a mi miembro haciéndome vibrar de placer, me aferre a las sabanas dejando mi boca entreabierta por donde se escapaban mis gemidos suavemente.
- Ahh... aahhh... tak-aahh...
La sensación me volvía loco, mis gemidos cada vez mas fuertes fueron inundando la habitación, mi mete ya estaba nublada, el goce me tenia segado y el placer era tan intenso que sentí que me desplomaría bajo su cuerpo en cualquier momento.
- Aahh... takahh... nhhh... no sopor-toohh
Sentí su lengua en mi cuello y después un suave susurro en mi oído
- ¿Te gusta? Gime para mi si te gusta... quiero escucharte disfrutar...
- Mmm... s-sigue... mhh.... Ahh...
- Me encanta oírte gemir.
Me beso apasionadamente y aceleró el movimiento de su mano. Llegue al climax muy rápido corriéndome en la mano e Miyavi.
Soltó mis labios y se enderezó mirándome provocadoramente, lamio su mano despacio frente a mis ojos sacando toda mi esencia de esta. La imagen me pareció muy erótica lo que volvió a excitarme.
Pov Miyavi
Me había quedado hipnotizado al verlo gemir de esa forma. No tenía planeado hacer lo que haría unos momentos después pero ya estaba en mi límite.
Me acomode entre sus piernas y mientras lo besaba introduje el primer dedo en su interior. Gimió despacio, luego introduje el segundo recibiendo otro gemido y al introducir el tercero recibí un fuerte mordisco.
Luego de un momento comencé a mover los dedos haciendo que gimiera y que flexionara sus piernas. Luego de unos momentos aproveche la posición para introducir mi miembro lentamente. Se aferro a mi espalda y gimió doloroso. Esperé a que se acostumbrara a la sensación.
Bese su frente dulcemente y luego sus labios.
- Te amo...
Me besó de forma dulce y amorosa para luego decirme que me amaba con todas las fuerzas de su ser y que no podía pedir mas felicidad de la que ya tenía conmigo a su lado.
Sus palabras me conmovieron al punto de querer llorar, eso era todo lo que necesitaba. Teniendo el amor de ese hombre y a mis hijas a mí lado ya no necesitaba nada más. Bese sus parpados, su frente, sus mejillas, su nariz, sus labios y su mentón.
Lo tomé de la cintura y me enderece dejándolo sentado sobre mi. Envolvió sus brazos en mi cuello dándome lugar para tomarle atención a sus hombros y clavícula las cuales bese delicadamente. Comenzó a mover su cintura dándome una sabrosa sensación; sus angostas paredes apretaban exquisitamente mi miembro, una sensación sin igual, mil veces mejor que cualquier otra que haya tenido antes.
La habitación completamente en silencio contenía nuestras agitadas respiraciones y el brillo de nuestros cuerpos sudados.
De respiraciones agitadas pasamos a jadeos y luego los gemidos se hicieron audibles.
- Mhh... ahhh... aaah... taka...
Nos besamos descontroladamente ahogando los gemidos en la boca del otro. La fricción de su cuerpo contra el mío era algo suculento, realmente delicioso. Sentía que podía tocar el cielo con las manos. Me volvería adicto a Kai, eso lo tenía más que claro.
- Kai... ahh... aaahh... aah..
Recosté a Kai en la cama y compense a moverme dentro de el. Al instante envolvió sus piernas en mi cintura y yo tomé su mano. Apresure las envestidas y el roce se volvió demasiado placentero. Pronto comenzamos a gemir demasiado fuerte sintiendo el cosquilleo del clímax. Me aferre fuertemente a sus labios acabando en su interior y el en mi abdomen.
Lo mire largo rato antes de salir de su interior y lo bese tiernamente en los labios. Me desplomé en su pecho al caerme encima un terrible sueño. Salí de su interior y me recosté a su lado. Tire una manta sobre nuestros cuerpos y lo abrase de frente.
- Te amo
Ambos dijimos al unísono y nos reímos ligeramente para luego caer rendidos a los brazos de Morfeo.
Ya todo era perfecto, completamente perfecto. El siguiente dia prometía gloria y un hermoso sol en un cielo despejado donde ambos podríamos disfrutar de nuestra mutua compañía.