El sonido del agua que cae gota por gota.
El melodioso sonido de la soledad que se mescla con la obscuridad de este lugar.
Escucho que alguien quiere abrir la puerta, volteo y eres tú, has regresado.
Tan solo con tu presencia, para mí, todo se ilumina y toma un más agradable sabor.
Me acerco y pongo mi mano sobre tu mejilla, tu tan solo sonríes al roce.
-Te extrañe- rompes el silencio en el que nos sumergíamos.
-Yo también te extrañe- parecía haberlo dicho solo por responderte, pero era verdad.
Te acercaste más a mí y me besaste fugazmente – espero y no te hayas lastimado mientras no estuve- siempre fui muy torpe, pero solo a tu lado, era para llamar tu atención.
-No paso nada, estoy bien, especialmente porque ya llegaste- sentí que mis mejillas tomaban un tono rosado y tan solo observe la sonrisa que tenias por mi anterior comentario.
-Taka…- me acercaste a ti en un abrazo que correspondí –Te amo-Mis mejillas empezaron a arder por escuchar esas 5 letras salir de tu boca, sentía la mayor felicidad del universo al escucharte mencionar esas 2 pequeñas palabras.
-Yo también te amo- me alce un poco para poder juntar tus labios con los míos en un, fugaz pero a la vez tan inmenso de sentimientos, beso.
Nos soltamos del abrazo y tomaste tu maleta.- Nee~ la subiré al cuarto- empezaste a subir las escaleras con tu maleta roja, yo tan solo me limite a verte subir y al entrar a nuestra habitación me perdí un poco en mis pensamientos
-Por fin volvió.
-Esta es una de las cosas que odio de sacar Singles o Albums, tener que viajar afuera de la ciudad para promocionarlos y tener que ausentarse días o semanas.
-Taka-chan
-¿Ah?- tu voz me saco de mis pensamientos – ¿Qué sucede?
-Nada, solo quería saber que tanto piensas
-Yo tan solo pienso en ti – tu cara ruborizada era una de las cosas que más me gustaba ver en el mundo- ¿O es que tu no piensas en mi?- pregunte con un tono dolido fingido.
-Claro que lo hago Taka, tu eres mi todo, mi razón para vivir, y agradezco tanto habernos conocido, Te amo y espero y no lo dudes nunca.-
-Shima, yo no dudo que me ames, ademas, yo te amo y no necesito nada mas para vivir, solo te necesito a mi lado para salir adelante-
Tomaste mi mano y me llevaste escaleras arriba, hacia nuestra habitacion, la que compartiamos ya hace algo de tiempo.
-Te amo- no dejabas de decirlo -Te amo- seguias pronunciando – Te amo -Seguia escuchandose -Te amo y por favor, Amame tu tambien
-Shima, Te amo- pronuncie una vez- Te Amo -Empeze a repetir -Te Amo- Ya se volvia demasiado repetitivo -Te Amo y sin ti yo moriria.
Llegamos a la puerta de la habitacion, a mi nunca me gusto ese color tan seco que tenia, pero tu decias que parecia una deliciosa puerta de cacahuate y que era la vista perfecta para cada dia. Giraste el pomo de la puerta y ambos entramos a la habitacion.
-Taka, dejame mostrarte mi amor, dejame ser uno contigo, necesito estar junto a ti, lo necesito.
-Shima, Te amo, quiero unirme a ti.
Sonreiste, sonreiste solo para mi.
-Pareces tonto cuando me devuelves la sonrisa.
Hice un puchero.
-Pero eres mi tonto
-Shima- te acerque a mi y comenze a besarte- Hazme tuyo una y otra vez, no quiero dormir esta noche.
-Lo que digas Taka-Me besaste y comenzaste a acariciar mi espalda. Me sentaste en la cama y comenzaste a desabrochar mi camisa. Yo solo seguí tu ejemplo y te pedi que levantaras los brazos. Te quite la camiseta azul que traias y pude ver tu pecho. Me sonroje
-¿Pasa algo Taka?
-No.. nada.