Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

ALL YOURS por mana san

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Dedico este fic, con todo mi cariño a mi queridisima nee chan, quien me inspira y me apoya en todo lo que hago....

Para ti nee!!!!!TQM!!!

ALL YOURS

 

 

 

Sofoco la braza de su cigarrillo en el cenicero próximo a su mano, exhalo un profundo suspiro que aparto los cabellos rojizos rebeldemente situados sobre su rostro y que  estremeció, probablemente, a todo el pasillo de aquel lujoso hotel en el que se hospedara por causa de su última y más reciente gira.

 

Estaba aburrido, de hecho, hacia siete meses que estaba aburrido, frustrado, enojado y quien sabe cantos sentimientos mas lo aquejaban.

 

 El cúmulo de sentimientos amontonados en su interior no podían extinguirse como lo había hecho anteriormente con su cigarro, claro que  no, seguían ahí, inamovibles e implacables; ni siquiera la motivación de encender un nuevo cigarrillo lo motivo, la cama estaba demasiado lejos de la mesa donde aguardaba su cajetilla y definitivamente no le parecía que valiera la pena levantarse, de hecho de un tiempo para acá, no muchas cosas valían ya la pena.

 

Pero, era Hideto Takarai, poderosa  y feroz deidad del rock y de la música nipona en general, que era entonces la causa de este decaimiento en el que fuera llamado Akuma;  bueno, para llegar a las respuesta del anterior cuestionamiento le era necesario remontarse siete meses atrás cuando la pieza clave de su existencia se viniera abajo dejando su vida convertida en un montón de trozos sin ilación que amenazaban con desmoronarse catastróficamente.

 

Suspiró de nuevo, se extendió completamente sobre el amplio lecho de la habitación mirando fijamente al techo, sin mirar nada en realidad, cerro los almendrados y hermosos ojos y el recuerdo volvió a su mente. No deseaba recordar en lo absoluto, pero definitivamente necesitaba hallarle sentido a aquello que pasara en esa ocasión.

 

 

 

-Se acabo Haido- La sensual y ronca voz de Gackt, que antes le causara agradables escalofríos,  le perforo de cien a cien como una aguja enorme que le atravesara el cráneo. En esos tres segundos no le creyó, muchas veces había amenazado con terminar y realmente esta amenaza duraba lo que tardaban en llegar a la cama, pero esta ocasión, su tono de voz era diferente, era carente de titubeos y  definitivamente mas serio.

 

-¿Que...?- Cuestiono deseando que el otro se echara a reír y lo abrazara tiernamente, alegando que lo había engañado de nuevo con esta broma tan pesada y definitivamente, de pésimo gusto.

 

 Desafortunadamente  el alto vocalista giro despacio su cuerpo hacia el ventanal de su sala de estar, ese fue el primer  y horrible indicio de su voluntad, se negaba a mirarlo a los ojos.

 

-Ya no tiene sentido seguir con esto...se termino Haido....- Aunque trataba de reflejar dureza en su voz, el leve temblor en las palabras eran para Hyde otra clara señal de que iba en serio.

 

Mejor le hubiera sido haberlo matado en ese momento, bastaron las cortas palabras y los pocos segundos para que el panorama de existencia de Hyde se viniera abajo como una acuarela borrosa, el suelo bajo sus pies parecía ser arenas movedizas y su pecho dolía como si lo hubieran apuñalado, justo en el corazón.

 

-Gacchan...no...no hablaras en...-

 

-Es muy enserio Hyde!- Interrumpió cruelmente al voltear su rostro y demudarlo en una mueca de rencor.

 

Hyde no decía ni hacia nada, simplemente estaba esperando despertar, a abrir los ojos y verse entre los brazos de su amado Gackt y darse cuenta de que no había sido más que una horrenda pesadilla, pero esta no parecía querer terminar.

 

Con voluntad de hierro, el vocalista se aproximo al pequeño frente a él que parecía haber perdido el espíritu en ese preciso instante, lo tomo por los estrechos hombros y busco en esas oscuras pupilas, ahora carentes de vida, la sombra de raciocinio.

 

-Me escuchaste Hyde?...se...-

 

-¡Noo!!!!!!!!...- Por fin, lo potente voz del jrocker se dio a conocer como tal, el estruendoso alarido retumbo en los oídos de Gackt lastimando sus tímpanos.

 

-¡Tu no me puedes dejar....!!- Las lagrimas mancillaban ya los hermosos orbes, el delicado cuerpo se resbalo  hasta el suelo terminando por abrazarse dramáticamente de las rodillas de Gackt  quien lo observaba incrédulo, tal nivel de humildad y necesidad nunca los había visto en Hyde; el sensual y hermosos demonio de la seducción, inamovible, indestructible, lloraba ahora desconsolado como un niño.

 

-¡Levántate...Haido...!- Suplico tomándolo de los hombros y tratando de incorporarlo para romper esa insoportable visión que le destrozaba el corazón en mil pedazos.

 

-No!!!...- Balbuceaba atragantándose de sus saladas lagrimas provocando en el causante de tal sollozo un sentimiento de culpa incontenible.

 

-No me hagas esto...Hyde por favor- Exclamo sollozando también, incapaz de resistirse al llanto de genuina angustia expedido por aquel que jamás mostrara ante el siquiera arrepentimiento.

 

-Es lo mejor...

 

-Mejor!!...para quien?!!...para mí no...mírame.,...me estas destrozando y dices que eso es lo mejor!!...-No mucho duro la contrición de Hyde, se revolvió enfurecido de sus brazos y retrocedió como un animal malherido. Su dedo índice le apuntaba acusador y rabioso y su mirada parecía querer fulminarlo.

 

-Si...lo mejor!!! ya no puedo lidiar con esto...!!- Lo dijo al fin, con la furia que guardada con tantos años, pero que se viera menguada por el amor.

 

-Soportar que!!!....eres un madito cobarde!!...claro...tienes que controlar todo lo que te rodea!!!...por eso no soportas el hecho de tener que esconderlo!!!-Esta era su conclusión, a su parecer, su posesivo amante no soportaba la idea de verse sujeto a vivir su relación bajo una estricta discreción, cosa que jamás se le había dado bien.

 

 Durante unos minutos Gackt le miro incrédulo.

 

-Miedo!....estúpido!!...si por mi fuera ya habria gritado a los cuatro vientos que te amo!!...- Exclamo fúrico apretando los puños y las mandíbulas, era obvio que había algo más dentro de su pecho, pero se negaba a decirlo.

 

-Entonces...dime!!...dime por amor a lo mas sagrado por que me haces esto!!..-Se volvio a derrumbar en el suelo, derrotado y abatido, exhausto de gritar , llorando como un ser insignificante y desvalido.

 

-Hyde...-Se acerco a el y alcanzó su altura arrodillándose en el fino piso de mármol.

 

-Yo puedo, soportar alejarte de tu esposa , eso lo acepto y no me importa pero...- Cerro sus ojos aguardando una corriente de lágrimas que salían sin parar, Hyde lo sujeto del hermoso rostro, rostro que le inspirara un incomparable sentimiento de puro amor que nunca se creyó capaz de sentir.

 

-No voy a alejarte de tu hijo más tiempo...yo ya no...- Las palabras taladraron su cabeza, fue incluso incapaz de seguir llorando, la avasalladora determinación de su amante le dejaba fuera de cualquier argumento o discusión.

 

Cierto era lo que decía, para muestra este momento, hacia una semana que había vuelto de Norteamérica tras dos meses de gira y no se había parado aun en su casa, prefería mil veces compartir el lecho con su amando a volver a su casa, donde una relación vacía y fingida le carcomía el alma.

 

-Gackt...- El aludido se incorporo frotándose los ojos.

 

-No es justo para el que su padre este lejos...no voy a ser la causa de que crezca con tu ausencia, no puedo ser tan ruin de arrebatarle a su padre a un criatura que no se puede ni defender...- Se alejo lentamente de Hyde quien lo vio irse como si desapareciera, como si se desvaneciera; definitivamente, lo acababa de perder.

 

-Así que...te pido que te vayas, con tu familia, familia que tu mismo te empeñaste en formar- Veracidad incorruptible de nuevo, fue el quien se empeño en casarse y en tener un hijo; y no podía refutar tales verdades.

 

parecía como, si ese momento lo hubieran estado esperando ambos, fue la resignación o tal vez la adrenalina la que lo hizo ponerse en pie.

 

-Gackt...- Pronunció de nuevo con la voz entrecortada.

 

-No vas a convencerme....- Dijo sin llorar y sin sufrir, con una insensibilidad casi admirable.

 

-Eso lo se...eres Gackt...el implacable...- Se limpió las lagrimas del rostro, se miraron por algunos minutos y se marcho de aquella casa a la que llamara casi casi, hogar, dejando atrás al que sentía era el amor de su vida.

 

Naturalmente no fue a su casa, fue donde la única persona que soportaría el infernal proceso de su separación, se dirigió a su mejor amigo Tetsuya Ogawa.

 

Y fue este quien soportó por mas de diez días, el escucharlo gemir de dolor revolcándose en la cama, pugnando contra si mismo por salir corriendo y rogarle a Gackt que no lo dejara, fue Tetsu quien lo vio arrojar el teléfono por la ventana al no ver respuesta o llamada  y, fue Tetsu quien lo vio resignarse tristemente a haberlo perdido definitivamente, fue le quien vio el espíritu de Hyde extinguirse lentamente hasta que no quedo casi nada de su fogosa personalidad.

 

Entonces volvió a su casa, con su esposa que era perfectamente feliz sabiéndose aborrecida, pero era la esposa de Hideto Takarai, con esa condición cualquier desden era bien recibido; de colocar las ventajas y prestigio que colgarse el apellido de su marido y el desprecio que con solo mirarla le demostraba sobre una balanza, los beneficios derrumbaban a las contrariedades por mucho.

 

Una sola cosa le agradeció a Gackt después de sacarle el corazón a la fuerza y pisotearlo frente a sus ojos, convirtió a su hijo en el centro de su vida y este le dio nuevas fuerzas a su vida, se dejo de arrepentimientos y vio en esa pequeña replica de si mismo la oportunidad de expiar sus errores mediante un descomunal amor paterno, y jamás se había sentido tan bien de amar a alguien así.

 

Aun y con todo esto, al recostar a su hijo a dormir y encontrarse a si mismo viendo el techo de su habitación, se sentía tan incompleto, se estaba volviendo loco de la desesperación, la palabra extrañar era un mísero termino para el vació que Gackt había dejado en su interior, no había forma de pretender que no lo seguía amando hasta las entrañas, que necesitaba sentirlo y estar con el, no podía negar que , lo necesitaba tanto como al aire que ahora respiraba.

 

Dio un salto al presente cuando las lágrimas le mojaron el cuello, no quería volver a llorar, de hecho no podía hacerlo más.

 

-Gacchan...por que?...por que me hiciste esto?...- Ya era justo y necesario que alguien le diera una maldita razón, por que de pronto le habían desbaratado la vida y se la habían arrojado a la cara echa añicos irreparables.

 

Dio vuelta sobre si mismo y se encogió abrazando un almohada a su cuerpo, se abrazo a si mismo sintiéndose tan patético como ridículo; su propio mísero abrazo no era capaz de sustituir a los potentes y firmes brazos que lograban quitarle el aliento de solo estrecharlo, no podía emular el calido aliento de su amante sobre su oído mientras le cantaba dulcemente al dormir; no tenia ya el calor de su cuerpo cubriéndolo como un todo haciéndolo sentir seguro y feliz.

 

Y así, desde ese día no habían tenido contacto alguno, ninguna palabra ni llamada, Gackt se había perdido muchísimos eventos sociales y publicitarios y Hyde sabía perfectamente que había sido para evitarlo, para no verlo. Esto le causaba un poco de paz, era claro y evidente que esta aversión se debía al sentimiento que aun compartían, por que estaba seguro de que el recalcitrante amor que lo consumía por dentro estaba presente también en el que había tenido las agallas de abandonarlo.

 

Hasta el delicioso proceso de la auticompacion y victimizacion propias tiene su limite, y por hoy era suficiente, tanteo sobre las revueltas sabanas y dio al fin con el control remoto; encendió el lujosos aparato empotrado en la pared para que no desarmonizara con la decoración victoriana de la habitación, pero mala suerte, al hacerlo, precisamente el aparato estaba en un canal donde justo a esa hora y ese día aparecía la reseña del ultimo concierto de Gackt en una ciudad aledaña.

 

-Maldición!!!...- Sofocó su grito de desesperación contra un cojín colocado sobre sus rostro; ver esas imágenes era como verterle sal sobre una herida abierta.

 

-Vaya!!...mira como te has puesto!!...- Dijo cuando la curiosidad lo venció y se animo a echar un vistazo; las imágenes del concierto le revelaban el nuevo look del jrocker.

 

En la pantalla del aparato aparecía la gloriosa imagen del cantante, con el hermosos y esculpido torso desnudo y cubierto de sudor; el cabello negro y alborotado cubriéndole el rostro, en una pose de completo poderío sobre el escenario. Las palabras de la chica que explicaba la reseña de tal evento se desvanecieron y se enfoco en la imagen frente a el y se vio perdido mirando aquel cuerpo perfecto a su parecer, su cuello, sus brazos, todo le parecía tan hermoso y perfecto que creyó que vomitaría de la desesperación de verse definitivamente privado de todo eso.

 

-Me tienes que dar otra oportunidad...- Se desplomo sobre el lecho apagando el aparato cuando ya fue insoportable seguir mirando; de nuevo el hálito de la locura le rondaba como león hambriento.

 

Es que perder a alguien así, como Gackt, era inconcebible, lo mataba la nauseabunda idea de que ya otra persona estuviera a su lado.

 

-¡No...no....no....no!- De un salto, reflejo de su nueva determinación se puso de pie.

 

-Aunque sea lo último que haga...me vas a escuchar...- Tembloroso quizás de miedo , expectación o nerviosismo se abrió paso hacia el balcón, deslizo las puertas y se topo con el cielo negro de la media noche.

 

Exhalo con profundidad como deseando absorber la magnética energía de la noche y miro hacia las estrellas en el cielo que desde el día que perdiera a su amado ya no le parecían maravillosas y fascinantes. Eran ahora solo para él, viles puntos luminosos que no inspiraran más que monotonía.

 

Fue entonces cuando, vio en aquel mapa celeste y su profunda oscuridad el miserable estado de su ser. No sabía quien o que era, se sentía muerto, su vida pasada había desaparecido, el presente era extraño y borroso y el futuro, ni siquiera existía. No sin Gackt.

 

Era obvio que necesitaba y con urgencia, poner un orden lógico y apropiado a su vida pero, para ello requeriría de tomar tantas dediciones que quizás, terminarían con el.

 

Tenia miedo, miedo de saber que amaba tanto y con tanta fuerza que estaba por perder la razón, miedo de ser conciente de las cosas que tenia que hacer para salvar la existencia de aquel amor que lo llenaba por completo y miedo de...perderlo todo en el proceso.

 

Ahora, la poderosa estrella mas rutilante que los despreciados astros que engalanaban el celeste manto descendió con humildad a su condición humana; sin pretensión ni engreimiento, sin mas que el animal deseo de ser feliz.

 

Cristalinas gotas de dolor materializado resbalaron por aquellas blancas mejillas que antes fueran coronadas día y noche por los besos ávidos y tibios de su adorado amante, y que ahora no eran mas que cuna de sus lagrimas.

 

Cambio aquello de miedo, por la palabra aterrado, así era como se encontraba cuando la solución a sus conflictos rondara por su cabeza nublándosela de temores perfectamente justificables.

 

-Me odiaran por tomar esa dedición?- Se pregunto a si mismo, casi casi exigiendo una respuesta aun poder superior.

 

-Y si lo hago?..estará todo bien?...- Su orgullosa cabeza fue descendiendo derrotada, hasta que todo su ser se encogió frente a la baranda del balcón.

 

-Que hago??!!...que??!!!...-Sus incesantes lágrimas caían a gotas en el piso, le dolía tanto su pobre corazón , estaba mas miserable y triste que cualquier otro que hubiera conocido, dándose cuenta de que esto no era vida.

 

Y no lo era, una existencia basada en mentiras, en ocultarse, en reñir, en un amor con ataduras y carente de libertad no era vida.

 

Con erráticos movimientos se incorporo y se dirigió de nuevo a la habitación, saco sus maletas del armario y las volcó en el suelo esparciendo su contenido y buscando un preciado objeto en especial que necesitaba en ese preciso momento, a medida que su búsqueda avanzaba su desesperación se incrementaba y las lagrimas empapaban ahora la ropa que revolvía sin cesar; hasta que sus dedos se toparon con los preciados objetos que buscaba.

 

Tomo en la mano derecha, una pequeña fotografía donde aparecía la imagen de frente de su pequeño hijo y en la otra, una fotografía de Gackt, las observo por un tiempo y se dio cuanta de que, ambos componentes no tenían por que ir separados, acerco ambas imágenes a su pecho colocándolas sobre su corazón y respiro profundamente, dejándose envolver por el torbellino de hermosos y despiadados sentimientos que ambos seres le inspiraban.

 

-Si...si lo valen...- Estrecho con adoración ambas ilustraciones y corrió desesperado al baño jalando alguinas prendas de la maleta que acababa de volcar, tomo una ducha rápida y se vistió.

 

Corrió por el pasillo como si el edificio estuviera en llamas y bajo a la recepción pidiendo un taxi, algo, una fuerza desconocida e hacían moverse con rapidez y tratar de llegar a su destino a la brevedad. Abordo el auto y dijo la dirección casi tartamudeando, la dirección era, hacia el hotel de Gackt.

 

 

 

Dada su violenta petición de que acelerara, el chofer así lo hizo, llegando al destino en cuestión de veinte minutos, Hyde salio del auto y observo con satisfacción, que bien conocía a su amado, en este preciso momento casi a media noche se llevaba a cabo una entrevista que probablemente el día de mañana seria televisada en todas partes del país.

 

Con paso tan firme y determinado como el mismo avanzo, la recepcionista grito al verlo, el camarógrafo giro hacia el enfocándolo a la perfección cuando Hideto Takarai, se le hecho encima a Gackto Kamui y le planto sendo beso en los labios, se retiro después de algunos minutos de asfixia para ambos cantantes, de paso sacando visible y claramente la lengua de su boca y diciéndole con todo amor sobre los labios...”Soy todo tuyo...te amo”.

 

 

 

Tres semanas después de lo ocurrido, la prensa aun acampaba fuera de la casa de ambos astros del Rock, mas en esta ocasión no había forma de negarlo y ninguno lo había hecho, no tenia caso, después de conversarlo en la habitación de Gackt esa misma noche, tras ocho horas de fogosa y feliz reconciliación descubrieron que no tenían por que seguir ocultando aquel sentimiento que ambos se profesaban.

 

-Vaya  Hyde- Musito el cantante sonriendo, cómodamente sentado en su sala viendo una y otra vez aquella escena que recorrió el país en cuestión de horas, en eso, su comodidad se vio obstaculizada por alguien que llamaba ala puerta, debía ser alguna amigo cercano ya que su ejercito de guardias no permitirían que algún ajeno entrara, confiado de su cuerpo de seguridad mas eficiente que la CIA, el FBI y el servicio secreto juntos abrió la puerta y la visión de os que llamabas, fue impresionante. Era Hyde, pero no venia solo, un bello niño de aproximadamente seis años, carita redonda y cabello negro algo crecido le miraba tímido abrazado a la pierna de su padre.

 

-Hyde...-El pequeño cantante se acerco y se abrazo con afecto a Gackt, claramente restringiendo sus muestras de afecto dada la presencia del pequeño.

 

-Hola...podemos...?-

 

-Ahh...claro pasen- Hyde levanto al niño en sus brazos quien se aferro a el y escondió el rostro en su cuello.

 

-Hiei...que modales...-Le reprendió, en eso Gackt cubrió sus labios con un delicado beso y le quito al niño de los brazos.

 

-Y tu como te llamas nene?- Le dijo al pequeño sonriendo hermosa y pacíficamente; el pequeño se sintió incomodo un rato y después lo miro.

 

-Hiei..-Respondió apenas y se metió el pulgar izquierdo a la boca, Hyde miraba todo esto en completo silencio.

 

-Mucho gusto Hiei chan...soy Gackt-Estrecho la manita de pequeño y lo bajo, lo tomo por los hombros y lo oriento mirando de frente a un enorme repisa llena de pequeños autos de colección.

 

-Mira Hiei chan....los que te gusten son tuyos- En cuanto dijo esto, el niño corrió como despavorido a la repisa tomando todos los juguetes que con sus manitas podía abarcar.

 

-Gackt pero...-La responsable petición del padre del niño se vio acallada por un apasionado beso por parte de Gackt. El otro sonrió feliz aforrándose al fuerte cuerpo de su amante y amado.

 

-Quieres...ir a la playa con nosotros?-Le miro a los ojos con adoración y lo estrecho.

 

-Seria un placer pero...repíteme una vez mas...lo que me dijiste en el hotel- Le beso de nuevo mirándole con la misma adoración y amor con los que era observado.

 

-Gackt..-sonrió y se acerco a su oído.

 

-Soy....todo tuyo-

Notas finales:

Espero que lo hayan disfrutado, en especial tu nee!!!!

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).