El camino se me hizo bastante corto, la música y los recuerdos de la tarde anterior me llenaron de tal felicidad que todo amenizo mi viaje de vuelta a casa y finalmente llego después de 45 minutos de viaje. Abro la puerta de mi hogar, dejo mis llaves junto con mi celular en la mesita que se encontraba en la entrada de la morada.
Camino unos centímetros para virar a mano derecha, llegando a la cocina. Me dispongo a preparar algo para comer ya que Salí de casa de Kurt muy temprano y no me dio tiempo de desayunar junto a mi novio. La verdad es que tenía que realizar algunos cuantos tramites con mi padre, me daba tanta alegría de que por fin me aceptase como soy, y me pueda amar por ello.
A la hora después, me junto en la plaza de Westerville con mi padre quien parece haber llegado hace poco, lo veo a la distancia y agito mis manos para que pueda verme, y lo hace.
-¡¡Buenos días papa!! – le saludo abrazándole, gesto que imita de forma cariñosa y paternal, luego se separa.
- buenos para ti también hijo…- me esboza una sonrisa –bueno, ¿¿ya estás listo para que me acompañes?? – me dice sosteniendo mi hombro.
- sí, siempre estoy listo…- le suelto, provocando una carcajada en mi progenitor.
- entonces…- me dice aun con una sonrisa en los labios - andando….hay mucho que hacer….- se da vuelta y le sigo – y…Emm…que tal esta tu novio…– me dice incomodo aun. Este gesto provoca en mi gran alegría por el hecho de que él se esfuerza para referirse a un tema que le incomoda. Quizás lo hace porque ya no me quiere lejos de él, como en un pasado no muy lejano.
- sí, se encuentra bastante mejor a la semana pasada…- le respondo sonriente y algo colorado - ayer su familia y amigos – agrego en último momento - le tenían preparado una fiesta sorpresa de bienvenida – comento con orgullo y alegría a la vez. Mi padre por unos momentos se queda callado, un tanto pensativo si cabe destacar, hasta que finalmente rompió el silencio que se produjo entre nosotros.
- ¿¿Cuándo me lo presentaras?? – Suelta de pronto, me quedo con la mirada abierta de par en par, no sé que responder, y cuando creo poder responderle, me sorprende con otra pregunta – o ¿¿Cuándo se lo presentaras a la familia??...yo ya he hecho mención de algo – sonríe cómplice - están todos expectantes por saber quién es el dueño de ese corazón romántico…- me dice con una sonrisa paternal. Por fin puedo salir de mi congelamiento para responder sin impedimento las preguntas de mi padre.
- ¿¿Qué te parece mañana?? – Se me ocurrió de pronto – quizás invitarlo a cenar, y así presentarlo frente toda la familia – me encontraba nervioso, ya que puso una cara de… no me esperaba que fuera tan luego…pero después de un rato sonríe.
- mandare entonces a preparar la mejor cena de todas….-me revuelve el pelo – también aprovechare de llamar a la familia hoy, después de que terminemos con estos asuntos…¿¿te parece??...
- sería fantástico, de hecho lo…- de pronto mi teléfono celular suena, lo saco de uno de los bolsillos de mi pantalón. Cuando ya no creía poder sonreír más, lo hago al ver lo conectados que nos encontrábamos… - mira que coincidencia – le muestro mi fabulosa sonrisa a mi padre – es el…- apretó el botón para contestar…- hola mi a….
Una voz bastante agitada y desesperada me descoloca, inmediatamente mi sonrisa desaparece, a la vez también me encuentro frunciendo el ceño lentamente…
- ¡¡¡Blaine….amigo eres tú!!!.... – era Finn.
- Finn…- me extraño - ¿¿ qu-que haces con el teléfono de Kurt??...- comienzo a entrar en pánico.
- Viejo…Kurt esta…- hace una pausa que me parece eterna -…está internado en el hospital…- me dice entre lagrimas.
- ¡¡¡QUE!!! – Suelto fuertemente, provocando la proximidad de mi padre quien por lo visto se encontraba preocupado también…- ¡¡FINN QUE DEMONIOS LE PASO A KURT!!...
- N-no se…con exactitud… - ahora se escucha más desesperado – por favor viejo ven, te necesitamos…- me cuelga sin más. Me encuentro en estado de shock. No sé porque me convencí de que esto ya no pasaría, que ya nada nos separaría…
- Hijo… ¿qué pasa?- me pregunta mi padre acariciando mi cabeza para que me tranquilice - ¿dónde está Kurt?...
- Lo siento papa, te prometí que te acompañaría pero debo irme…- me alejo rápidamente, pero este me detiene, me giro furioso.
- Voy contigo…-me dice serio y preocupado…por ambos.
Una media hora o tal vez mas fue lo que me demore en llegar al hospital de lima, Ohio. Me estaciono, bajo del vehículo acompañado de mi padre, quien parece estar más nervioso que yo, caminamos lo más rápido posible hasta llegar a la entrada del local, y para después encontrarnos en la recepción del hospital. Le pregunto a la enfermera por la familia Hummel y el recién interno. Me indica de forma amable la sala en la que se encuentra, no es muy lejos, a solo dos pasillos. Cuando voy virando hacia mano izquierda siento que de pronto todas las miradas caen sobre mí, como si yo fuese el culpable. Me acerco temeroso, solo un par de chicos del club glee. Veo a Rachel quien esta apoyada en su novio Finn, el que se encuentra devastado, mas adelante encuentro a Quinn, Brittany y Santana, estas últimas tenían sus manos entrelazadas, la morena le daba pequeños besos en la cabeza de la rubia, tenía su cara hinchada de tanto llorar, al igual que su otra compañera, Quinn. Esta última levanta su cabeza para verme, se levanta y me abraza.
- Lo siento….- me susurra – de verdad que lo siento.
Se separa, coge de mi mano y me lleva a la habitación de Kurt. Al entrar me encuentro con Carole que está sentada al lado derecho de mi novio cogiendo de su mano dulcemente, y a su lado izquierdo se encontraba Burt quien acaricia sus cabellos. Se ve devastado.
- Has llegado al fin…- se acerca el más grande con ojos tristes – pensé que ya no llegarías- me abraza.
- Claro que vendría – le dije entre triste y enojado – es mi novio no podría dejarle solo jamás… yo lo amo tanto…- le digo.
- Me alegro chico…- pone su mano sobre mi hombro.
- Y bueno¿¿ qué fue lo que le paso??- pregunto volviendo al tema que nos reunía a todos.
- Entiendo por lo que me cuenta Finn, quien fue el que lo trajo, inmediatamente hasta aquí, Kurt estaba sangrando de varias partes de su cuerpo, tanto brazos como piernas…
Desvía la mirada a su hijo y yo hago lo mismo, ya que sus brazos están a la vista veo las enormes heridas que se propino a sí mismo. Son horribles. Los médicos pusieron puntos en cada una de las heridas, pero eso no evita el desagradable panorama que me azotaba en ese momento. Me parece increíble como aquella piel tan inmaculada libre de imperfecciones ahora se encuentre totalmente dañada, y que de seguro dejaran huellas. Huellas que aunque quiera olvidar jamás se irán, solo por estar presentes en su piel. Me acerque hasta donde se encontraba, le tome su mano y me quede a su lado por unas cuantas horas.
Al salir de la habitación, me encuentro con los otros chicos del club glee que no vi en un comienzo y a mi padre que se encontraba apoyado en una pared con la mirada baja.
A su lado se encontraban Puck y Loren, también Sam, Mike, Tina y Artie. Puck apenas me ve salir se me acerca.
- ¿¿Como esta Kurt??... – me pregunta débilmente - …de verdad me preocupa…
- El está bien…- le digo conciliador, acto seguido se lanza sobre mí en un abrazo fuerte y cariñoso, como si quisiese mostrarme su dolor y angustia atraves de él, también respondo su abrazo. Cuando se aleja un poco puedo ver en sus ojos lágrimas sinceras, Puck puede ser un bravucón, pero con sus amigos es realmente muy bueno.
- Ya ya… - Loren se acerca a nosotros y le regala un beso tierno en los labios para que este mejor… - todo saldrá bien…- ahora me dice posando su mano en mi hombro
Ya era la una de la madrugada, y ninguna enfermera ni ningún médico se nos acerco para darnos resultados de cómo se encontraba Kurt. Ya la mayoría del grupo se había ido, solo quedábamos Burt, su señora, Finn, Rachel, Santana y Brittany. Mi padre se había marchado no hace mucho, con la escusa de que tenía que trabajar, por lo cual no puse ningún tipo de insistencia para que se quedara, también me advirtió que, cualquiera fuera la emergencia que le llamara, tal vez el podría ayudarme a solucionar el problema que me aquejara.
Después de unos cuantos minutos de estar sentado casi sin ánimos de nada, me paro y me pongo a caminar en dirección a la cafetería del lugar. Doy unos cuantos pasos de donde me encontraba y siento que Finn me topa el hombro para que me de vuelta.
- ¿¿A dónde vas?? – me pregunta despacio para no despertar a su novia.
- Emm…- titubeo ridículamente – al casino…¿¿por??...¿¿necesitas que te compre algo?? –le digo con una sonrisa amigable, gesto que lo responde de igual manera.
- Si, pero te acompaño – me dice finalmente – es que necesito hablarte de Kurt – la sonrisa que llevaba en un momento desaparece, ahora su rostro es mas sombrío.
- Si, vamos… - le digo indicándole con la cabeza para que fuéramos caminando hacia el casino del hospital.
Cuando llegamos yo pido un café simple y el solo una botella de agua natural. Buscamos un lugar donde podamos sentarnos y conversar, y en unos segundos divisamos uno que se encontraba cerca del pasillo que daba a la sala de Kurt.
- Y…bueno….¿¿qué me ibas a decir de Kurt??... – le digo después de darle un sorbo a mi café.
- Uff…viejo – me dice después de que la gente comenzó a hablar de nuevo, es como si tuviese miedo de lo que diría, y no quería que fuese escuchado por otra persona que no sea yo – no sé como comenzar… - se soba con su mano derecha la nuca – bueno, esto aun no me queda muy claro pero espero que podamos sacar nuestras propias conclusiones de esto apenas termine de contarte lo que sucedió…- ambos tragamos saliva – esta mañana…
La mañana era clara y calurosa por lo que se podía apreciar atraves de la ventana de mi pieza, me estiro y después de un rato me hago unas cuantas ganas para bajar a comer algo, ya que tenía bastante hambre. En el living me encuentro con mi madre quien viene saliendo de la cocina con unas bolsas…compras a la feria….era lo primero que se me vino a la mente antes de saludarla.
- ¡Finn! Cariño que haces tan temprano despierto… - me dice mi madre extendiendo sus brazos hacia mí, me rodea con ellos y después se separa para darme un beso en la mejilla, como no alcanza a dármelo, me pone una de esas caras de madre sentida o cara de perrito, asique me veo en la obligación de inclinarme un poco para que me bese – así me gusta – sonríe triunfante y se da la vuelta.
- Me imagino que como me vengo despertando no me llevaras a comprar las cosas de la casa ¿¿verdad?? – le pregunto deseando creer en lo que dije, pero mi rostro cambia al escuchar la negativa de mi madre.
- Cariño…-me dice mi madre al ver mi cara de descontento – tu sabes que ya no soy la mujer de antes, ahora me cuesta un poco llevar tanto peso – me dice excusándose – por eso crie a un jovencito sano y fuerte como tu – extiende sus manos para pasarlas por mis brazos - ¿¿lo harás por mi cierto??...
- Bueno…- me resigno – como negarme a esa cara…- le digo sonriéndole.
- Entonces esta hecho…- me dice chocando sus manos frente ella
- Am...pero…y Burt?? – le digo de pronto recordando que ahora ya no era solo yo el hombre de la casa – digo, porque el también es fuerte y te puede ayudar con eso…. – le digo aun con la tonta esperanza de zafarme de ir.
- El nos encontrara haya… - la escucho decir desde la cocina – se fue temprano porque quedo por juntarse con algunos de sus clientes más frecuentes…- me da a entender.
Después de que termino de comer y de vestirme, mi mama le deja una nota a Kurt que le asegura en donde nos encontraremos en caso de no vernos en casa. Después de unas tres horas de compras, era la hora de volver a nuestro hogar. Cuando bajamos del auto me sentía bastante emocionado, porque le compre a Kurt una bufanda color turquesa, que me pareció bastante bonita.
- Mama –le dije al salir de la cocina, después dejar las bolsas que llevaba en el mesón – iré a despertar a Kurt para mostrarle el regalo – me sentía feliz, porque por primera vez le daba un pequeño obsequio a mi hermano. Subo las escaleras ágilmente, me dirijo a su pieza que se encuentra la final del pasillo, tarareando una canción, llego, golpeo y abro sin prestar demasiada atención.
- Kurt, sabes que vi un… -me paralizo al verlo tirado casi inconsciente en el suelo de su pieza. Me lanzo hasta donde el, sin importarme si mancho mi ropa, lo único que pienso en ese momento es en sostenerlo…¡¡NOOOOOOOOO!!...suelto desesperado –Kurt…kurtie… - le tomo sus mejillas acariciándoselas, después repitiendo el mismo movimiento en sus cabellos –…por favor…no nos dejes… - comienzo a llorar, mis lagrimas caen en su frente, comenzando a caer lentamente por los costados –…por favor…- insisto - …no me dejes…- y no sé porque pero me veo en la necesidad de…¿¿ besarlo??…¿¿Qué me pasa??...eso ya no me importo cuando tenía mis labios en los de el…los quito de pronto.
- ¿¿Finn??...-me pregunta medio inconsciente –…fue el…- no le entiendo pero en esos momentos no quiero que se esfuerce mas.
- ¡¡MAMA!!...- pego un grito que hiso eco en todo el lugar y en unos minutos mi madre ya estaba con nosotros, con lagrimas en los ojos llamando a la ambulancia y a Burt.
En el camino intento contactarme con todos mis amigos y en especial con Blaine… el novio del chico que acabo de besar. Mi hermanastro. Después de unos minutos, en la sala de espera llega Burt corriendo desesperado preguntando por su hijo, Carole se para de donde se encontraba para poder llegar donde su marido y abrazarlo. Al rato después nos permiten saber un diagnostico muy superficial que, además era evidente. El se intento suicidar. Nos dan unos minutos para estar con él a solas. Yo me encuentro bastante nervioso al entrar a la habitación, se encontraba mas pálido que de costumbre y en sus brazos bastantes puntos que le proporcionaron las enfermeras y el médico que lo atendió, está conectado a un numero grande de maquinas que controlen su respiración, pulso, y otras cosas.
- Hola Kurt…- le hablo despacio, no quiero que se despierte o se esfuerce –se que estas pasando por un momento malo… - le acaricio su cara, y con mi otra mano le agarro unas de sus manos que se encuentra recostada en la altura de su estomago - …pero me gustaría que supieras que siempre, para lo que necesites…siempre estaré junto a ti y… - comienzan a brotarme lagrimas, no puedo continuar pero siento que la mano de Kurt que tenía tomada me aprieta – Kurt…¿¿estás despierto??...- asiente con su cabeza, mientras yo me pongo colorado.
- gracias…Finn…- me dice entrecortado -…pero quisiera decirte algo…qu...que….te dije en casa…antes de venir acá…- se me había olvidado por completo, Kurt me había dicho:…fue el…, un escalofrió recorrió mi cuerpo.
- Se quien es…- me dice de pronto –…tengo miedo Finn… - me dice tomando mi mano mas fuerte.
- No te preocupes – le digo valiente aunque no sepa quién es –…siempre estaré ahí para protegerte…- le acaricio su rostro suave –pero debes decirnos quien es para poder ayudarte – trago saliva nervioso -y atrapar al infeliz que te hizo esto.
- Finn…- me dice despacio y lagrimas en sus ojos – no es tan sencillo – ahora caen algunas lagrimas de sus ojos, se las limpio al instante, no sé porque pero me siento impotente de no poder hacer nada por él, quiero que se sienta seguro pero no puedo, el desgraciado tal vez lo amenazo para que no lo pudiesen descubrir.
- Dímelo…- me acerco para que me lo diga –por favor…- siento como de pronto estalla en llantos, lo abrazo para que se sienta seguro. Después de unos minutos se separa de mí.
- Te lo diré…-me mira con ese ahora ya usual tono de luz apagado de vida en sus ojos – pero si me prometes no revelarlo…por ahora - ¿¿Qué?? Me pregunto…acaso lo está protegiendo…solo termino asintiendo –no fue solo uno –me dice nervioso con la mirada media perdida- fueron…- suelta de pronto me siento expectante ante su confesión –Karofsky, Azimio y…– hace una pausa al parecer le cuesta trabajo sacar el ultimo nombre de sus labios. Yo, por mi parte me encuentro casi al borde de la ira, solo apretó mis puños lo más fuerte posible para tranquilizarme…
- Y…¿¿Quién más??...- suelto rudo y temeroso a la vez.
- …- no quiere hablar, me comienzo a exasperar.
- QUIEN MAS… - alzo mi tono un poco, realmente estoy furioso. Pero, ¿¿qué es lo que dijo?? no lo logro en tender bien, tal vez es porque me encuentro pensando en cómo eliminar al otro par – ¿¿quién??...
- Mi padre… -comienza a llorar y yo no lo creo, doy un paso en falso hacia atrás cayendo seco al suelo…mi padre…me queda dando vuelta en la cabeza….mi padre…no lo puedo creer…me paro rápidamente.
- ¿¿Qué??...- le digo –estás seguro de lo que dices… - le miro serio, pero él me responde con un si sincero .No puedo creerlo, como un hombre…¿¿como Burt pudo idear un plan tan macabro en contra de su hijo??
- Por favor Finn…- me dice tomando de mi mano –...cumple tu promesa… -me mira con los ojos llorosos, me acerco a el mas, casi a unos sentimientos de su rostro.
- Solo porque no quiero verte sufrir… -le contesto sincero…pero…¿¿Qué es esto…que siento en mi pecho??...siento latir mi corazón muy rápido, no aguanto más, deseo besarlo, quiero sentir sus labios contra los míos, otra vez. No espero ni dos segundos y ya me encuentro sobre sus labios, que parecen un algo confundidos, pero después de un rato ceden al mismo deseo.
Cuando nos separamos, veo que tiene los ojos cerrados y sus labios un tanto más rosados de lo común. Me pierdo en ellos.
- ¿¿Qué estamos haciendo Finn??...- me dice de pronto -…yo estoy enamorado de Blaine y …
- No te preocupes…- le digo tranquilizándolo -…solo déjalo así… - le beso la frente – me iré ahora…tengo mucho que pensar… -me despido y tan rápido como me otorgan mis piernas salgo del lugar…
Cuando Finn termina de contarme, lo de Kurt, lo quedo mirando sin saber que decir, me sentía enojado, furioso, me sentía totalmente iracundo ante la situación de su padre…su padre…aun no lo creo…
- Y ¿¿que más paso después??...- pregunto preocupado – ¿¿te dijo algo más relevante a la situación??...- lo veo ponerse algo nervioso y colorado también.
- Ehh…no nada…- me dice con la mirada avergonzada -...cualquier cosa que suceda con Kurt te mantendré informado…ahora…- me dice serio – con respecto a…Burt… - suelta pesadamente – buscare algunas pruebas que lo inculpen…y te aseguro que de esta no se salva –me dice furioso, se ve en como tomaba la botella que tenía entre sus manos.
- Vale… - le digo tranquilizándolo - …espero también poder ayudar en algo… -cambio mi rostro a uno más preocupado ahora – pero ten cuidado no sabemos a qué es lo que nos enfrentamos.
- Si lose…- me dice cabizbajo –bueno creo que mejor nos vamos, Rachel debe estar preguntándose dónde estoy – me esboza una sonrisa de medio lado que respondo amigable.
Caminamos lento hacia la habitación de Kurt, y al llegar nos encontramos con la mirada casi sin expresión de Burt, quien nos mira haciéndonos una señal de saludo que Finn responde y yo solo lo ignoro.
- No sé qué es lo que vaya a suceder de ahora en adelante – comienza a decirme Finn cerca de mi oído – pero de lo único que estoy seguro es que…- hace una pausa que me tortura, a cierta manera ,para continuar –comenzara a sospechar de nosotros… - le miro inocente y el solo asiente –solo piénsalo, somos los únicos de quienes podría sospechar ya que soy su hermano y tu eres su novio y en cualquier momento querrá hablar con nosotros...- me hace entender a que es lo que se refería -…desde ya te advierto entonces que te cuides las espaldas, porque no creo que quiera ir a la cárcel – trago saliva ante la cruda realidad que me presenta – y lo más probable es que nos mande a hacer cualquier tipo de daño…- finalizando con eso se despide de mi y se va junto a su novia quien lo miraba con un dejo de preocupación en su mirada.
Yo solo me ponía a pensar en lo que me dijo Finn, y tenía razón, no faltaba poco, era solo cuestión de días. Quizás horas para que empezase a sospechar. Sin decir nada, me largo del hospital, esta noche será larga y debo pensar con cautela mis siguientes pasos.