Desde hace mucho, mucho tiempo que ya no siento nada, miro dentro de mí lo que encuentro es soledad y vacio. Las personas siguen ahí, sin embargo siento como si no estuvieran. He intentado llorar incontables veces, pero no lo logro, y siempre en vez de apenarme o entristecerme, solo consigo una risa enferma, estoy perdido en mi mismo, con frecuencia me pregunto… ¿Dónde se encuentra mi alma?
Mi nombre es Allen Marley, tengo 16 años y soy estudiante universitario ya en el tercer año. Entre a la universidad a los 13 años, desde muy pequeño he sido mucho más inteligente de lo normal. En cuanto a lo físico, mi color de cabello es castaño claro casi rubio y ojos de color violeta, tengo buen estado físico, me han elogiado incontables veces debido a ello.
El asunto es que decidí alejarme de todo y le pedí a mis “padres”, que me dejaran ir un tiempo a estudiar y quizá terminar mi carrera en el extranjero, aunque de mala gana y muy sorprendidos aceptaron. A pesar de todo, esto estaba bien si no lo hacia la situación empeoraría…yo… no quería recordar mas, de lo que ya se.
Después de despedirme de mis padres, me subí a una de mis limosinas y el chofer me llevo al aeropuerto, cosa que enojo mucho a mis “padres”, ya que no utilice uno de nuestros aviones privados para ir hacia mi destino, y preferí no hacerlo.
Seguí todo el procedimiento que había estudiado en mis “mundo virtual”.
Todo el viaje fue tranquilo y largo en el avión. Odiaba admitirlo pero esta era mi primera vez “afuera”.
Mi camino de la llegada al aeropuerto a la gran casa que mis padres compraron en especial para este viaje era enorme, aunque no me sorprendía después de ver en la mansión que había vivido todos estos años, En esta mansión había muchos sirvientes.
- Le apetece algo, ¿señorito? – me pregunto un hombre bastante alto, con cabellos castaños oscuro muy bien peinados hacia atrás, apenas entre a la mansión. Definitivamente era un hombre que en la sociedad seria visto como muy atractivo, no pasaba los 23 años de edad.
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- No… está bien, iré a descansar, ¿Dónde se encuentra mi habitación? – le pregunte cortésmente
- Las sirvientas lo guiaran hacia ella. – dijo haciendo una pequeña reverencia – se le ofrece algo más? – pregunto finalizando la reverencia.
- No, gracias – le dije ya empezando a seguir a las sirvientas que esperaban al principio de las escaleras.
- Entonces me retiro – dijo para luego desaparecer rápidamente del lugar.
Cuando llegue a mi habitación, lo primero que hice fue buscar entre las habitaciones llenas de ropa, una ropa de dormir que me agradara esa noche, elegí una al azar y me fui directo a dormir.
A la mañana siguiente me despertó el mismo mayordomo de la vez anterior y me aviso que el baño estaba listo para mi baño y la ropa limpia para el primer día de universidad. Después de bañarme y vestirme baje a desayunar y luego me dirigí a una limosina y me fui a la universidad. Cuando llegue hubo una gran alboroto, por lo de la limosina, y claro el guapo y atractivo chico saliendo de esta. Siempre he sido popular con las chicas, por lo que no me sorprendió.
Luego de eso me fui en camino hacia la gran habitación donde estaba por comenzar la ceremonia del nuevo año escolar recibiendo a nuevos alumnos. Me senté en el asiento más cercano que encontré luego de entrar en la enorme habitación.
Muy tarde me di cuenta que me había sentado junto a una chica algo llamativa, esta estaba sentada a mi derecha, y fijo la mirada en mi muy bruscamente, lo que me sorprendió.
- Hola, tus debes de ser un alumno nuevo. Verdad?? Yo también, espero que nos llevemos bien – me dijo abrazándome de golpe, otra acción que me sorprendía de esta chica. – me llamo Elizabeth – dijo para luego soltarme y volver a su lugar.
Ella tenía el cabello de un rubio hermoso, ojos de miel y una ropa bastante llamativa, llevaba una minifalda de tablas con cuadros rojos y líneas negras sobre estas, esta falda era muy corta, un tipo de calcetas muy altas que dejaba un pequeño espacio, pero aun así notorio, De piernas que se dejaba mostrar y una camiseta negra con una calavera en el centro - Elizabeth Treheien – dijo con una amplia sonrisa.
- Hola, me llamo Allen Marley, pero mis amigos me dicen Al – dije devolviéndole la sonrisa bastante mentirosa, porque la verdad era que… - Mucho gusto, espero también llevarme bien contigo – le dije amablemente.
- Entonces tú llámame Lizzy, ¿de acuerdo? – me dijo ya con mucha más confianza
- Si , está bien – dije alegre
- Me aburren este tipo de bienvenidas, son muuuuuuuuuuuuy aburridas – dijo poniendo sus mano alrededor de su cara apoyando sus codos en sus piernas, nasí se podía diferenciar a una mujer alta subiendo unos escalones hacia el micrófono.
La señora empezó a hablar, al parecer era la sub-directora de esta universidad una de las más prestigiosas y adineradas del planeta. Lo único que alcance a escuchar fue u poco ya que Lizzy me estuvo entretuviendo con la historia de su familia.
- Así que los de primer año, deberán de encontrar en la tabla de afuera el numero de sala según su letra de asignación de rango de inteligencia, no se olviden que ya que estamos remodelando tendrán que dormir en parejas en cada habitación, se encontraran con sus cosas en las piezas asignadas con su letra de rango, ya se les fue informado a sus padres … - la señora había seguido hablando pero no me concentre mucho en eso ya que mi amiga Lizzy estaba muy entusiasmada hablándole de lo bien que lo pasaba en las vacaciones cuando viajaba.
Termino la ceremonia de bienvenida y todos mientras salina veían su letra de asignación y luego veían su próxima clase. Fui el último en salir, después de despedirme de Lizzy quien me pregunto cuántos años tenia y al decirle se quedo un poco sorprendida y después de un momento de silencio dijo : -Esto va a ser interesante con una risa malévola, luego se fue a su sala de clases corriendo muy alegre. Las clases generales estas empezarían en dentro de 15 minutos, debía de apresurarme a ver mi letra de asignación e irme a clases.
Al salir del gran cuarto de la ceremonia fui directo a donde se veía una gran tabla con todos los nombres y asignaciones de los estudiantes.
Mire mi reloj un tanto nervioso y fu corriendo hacia la tabla y por desgracia pise mal y me caí,
“¿No está muy blando como para ser el suelo?” pensé y luego levante la mirada y había caído encima de un chico algo más alto que yo. Este se encontraba en el suelo mirándome fijamente, algo molesto pero al mirarle directamente a los ojos este suavizo un poco la mirada.
Me pare rápidamente y me fije en mi asignación para irme pronto de lo contrario llegaría tarde a clases. Empecé a mirar la tabla y aparecía mi nombre
Allen Marley. Asignación: A Habitación: 367 compañero: Bryan Adams.
El chico en el que me caí se había levantado y se encontraba a mis espaldas, después de haber analizado, Bryan Adams, competencia directa de la empresa de sus padres. Tenía razón Lizzy este sería un año interesante
- Hey!! Presta atención, cuando te hablan – en ese momento sentí una mano en mi hombro, muy brusca y pesada que me hizo girar.
Ese chico era en el que me había caído, tenía el cabello negro con ojos azules hermosos, por un momento quede hipnotizado, fue muy curioso ya que yo…
- Que te ocurre? – me pregunto – quieres que te acompañe a la enfermería? – me pregunto algo preocupado.
- No, estoy bien, le ruego me disculpe por mi torpeza y caer encima de usted – le dije haciendo una pequeña reverencia.
- Eh?, no…. Está bien y no seas tan formal – dijo algo más tranquilo.
- Gracias, y mi nombre es Allen Marley, pero puedes decirme Al – le dije con una amplia sonrisa.
- - Mi nombre es Bryan Adams, oh…. Eres mi compañero de habitación no?, y también vamos a la misma clase… - dijo algo confundido.- Entonces vamos juntos– dijo con una hermosa sonrisa
- Está bien, vamos….- dije algo sonrojado.
------------------------------- Bryan------------------------------------------------------------------
Después de haber conocido a un chico muy singular y en realidad muy... Lindo. Fuimos ambos a la misma sala de clases, no le preste mucha atención al profesor por alguna razón no dejaba de mirar a Al quien se veía muy lindo concentrado, su cabello se ondeaba con el viento que venía de una ventana de la habitación de clases. Sus ojos se veían hermosos, con su hermoso color violeta, me sentía extraño, nunca sentí algo parecido por alguien, desde que este estuvo encima de el no dejaba de pensar en el, inundaba su mente con lo hermoso que se veía cada vez mas y mas. Ese día como primer día de clases solo había una, y se iban a sus habitaciones a preparar todo para el día siguiente. Al se durmió temprano, se veía tan lindo durmiendo con sus labios un poco abiertos, algo sonrojado y tapado hasta las cadera, dejando a la vista como se veía de lindo con su camisa sin mangas, y que se veían sus delicados brazos.
Lo que más me llamo la atención fueron sus labios rosados, por un momento quise acercarme, besarlo y meterse junto a el en su cama, abrazarlo hasta amanecer, pero luego me di cuenta que yo estaba pensando todo eso, pero el era…….hombre.
Me dormí profundamente, pero me desperté a mitad de la noche porque no podía dejar de pensar que el era hombre y como se sentía hacia el.
Me levante y mire hacia Al, estaba en la misma posición que vi cuando me dormí, me acerque a el y son poder evitarlo empecé a delinear sus labios con mis dedos para luego arrebatarle un beso apasionado, me aparte de el por un momento para contemplarlo y me sorprendí al verlo con los ojos abiertos y con una sonrisa muy seductora.
- ¿Por qué te has detenido? – me dijo con una voz muy sensual.
- E-e-estabas despierto? – pregunte muy nervioso
- Por supuesto, pero no te detengas ahí…. Sigue hasta el final – dijo mientras hablaba se acercaba mas y tomo mi cara con una mano y me beso, no me había dado cuenta que mientras lo hacía había metido sus otra mano en mi pantalón, buscando peligrosamente cierto punto sensible.
- Q-que estás haciendo? – pregunte algo nervioso
- Que estoy haciendo? – pregunto con una mirada sensual
- Ahh…. – gemí, Al había apretado mi zona pene.
- No te gusta? – pregunto inocentemente, con una hermosa sonrisa
Justo en ese momento sonó la alarma, un sueño eh??,
“Había sido muy real…” pensé.
Pero entonces descubrí, que de verdad me atraía mucho este chico aunque fuera…Hombre, además que había pasado muy poco tiempo, pero fue amor a primera vista, aunque en mi mente se planteo la idea si esto era malo o prohibido…
“No existe nada bueno ni malo; es el pensamiento humano el que lo hace aparecer así “