”Si tan solo la vida fuera al menos mas fácil, si tan solo pudieras mirarme a mi y dejarlo a el.
Si aceptaras y correspondieras mi sentimiento para darte todo de mi, para verte sonreír por mis acciones y mi cariño…”
Mi cabeza daba vueltas…
Mi corazón estaba golpeando con fuerza… Dolía.
Mi pecho tenía fuertes marcas… ¿marcas?
—No me siento bien… Estoy tan mareado… —Sonreí inconscientemente y algo se movió detrás de mi— ¿que es esto?— Removí mi cuerpo en la cama y me quede observando a aquel rubio, el que siempre llevaba una bandita en su nariz, la cual ahora descansaba en su cuello mientras aquel hombre dormía placidamente a mi lado… ¿desnudo?…
—“uuuhm Akira… ¡Vamos! ¿Qué esperas? ¡Hazme olvidar!¡maldita sea!”— Intente recordar lo que había sucedido la noche anterior. ¿De verdad había…? ¡Me niego a creerlo!
—¿Taka?—Su tono meloso tono de voz invadió mis pensamientos, levante mi mirada para encontrarme con la suya… Esa que estaba llena de cariño ¿Por qué? Me estaba incomodando demasiado.
— ¿Estas bien?— Sentí los brazos de Akira rodearme con suma calma lo cual hizo que me quedara completamente inmóvil ante el…— Takanori…— su voz sonaba y aturdía mis oídos… Era tan suave como cada uno de sus susurros..
—Lo siento, Akira… ¿Qué mierda hicimos? —Me aleje lentamente de el para mirarlo fijamente—
—Anoche solo paso lo que debía pasar— Vi como sus ojos demostraban una ilusión ¿Dónde quedo ese tipo rudo que conocía?—¿No recuerdas? Hi-hicimos el amor… fue totalmente…—sus palabras flaquearon un poco—
Sentí un fuerte escalofrió, mi pecho se comprimiera al escuchar semejante… ¿cursilería?
—¿Pero que carajo estas diciendo? Yo no… ¿Por qué?…Mierda… — Lo interrumpí, dando un salto y me miro extrañado… ¿Realmente el creía que habíamos hecho el amor?
Sexo… Akira… Solo sexo…
Unos débiles recuerdos de anoche perturbaban mi mente dejándome helado, como si tres baldes de agua fría cayeran sobre mi cuerpo al uniso.
No quería aceptar la verdad… El error. Quería creer que nunca había sido así…
Akira negó con la cabeza mostrándome algo de tristeza en su mirada y me tomo de las manos acercándose a mí peligrosamente lo cual hizo que me sonrojara bastante. ¿Qué demonios me esta sucediendo con el?
—¿Cuándo lo olvidaras? El no te corresponderá ya lo sabes. ¿Cuándo podrás entenderlo, Taka? Te estas haciendo daño. —Acaricio mis mejillas aun utilizando ese tono que raramente me hizo vibrar. Jamás en mi puta vida lo había oído de el. Sin quitarme la mirada de encima sonrió amargamente. — Anoche… lo veía en tus ojos, lo sentí así…Se que puedes llegar a amarme como yo te estoy amando. Taka, elígeme, yo estoy aquí para ti. —De un momento a otro quiso besarme, pero no se lo permití. Ya bastante tenia de esto.
”Odio tu amabilidad, todo lo que tiene que ver contigo.
En este momento solo quiero que te vayas.
No quieras intentar meterme en tu vida, no quieras dominarme, NO QUIERAS CONSENTIRME”
—¿Elegirte a ti cuando no puedo olvidarlo a el? ¿Qué sabes tu lo que puede llegar a pasar?— Vaya… eso fue rudo…Comencé a enojarme… ¿Tanto le costaba entender a quien le pertenecía mi estupido corazón?.
Sin obtener respuesta, sin mirarlo, me levante de esa cama, recogiendo cada una de mis prendas dirigiéndome al baño.
¿Dónde estamos? No me importaba, quería desaparecer…
—“Demonios… Akira es tan terco como yo con…”—
Suspire con desgano escondiéndome detrás de esa fina cortina. Dejando que el agua borrara todo rastro de anoche, que cubriera mi cuerpo mientras mis lágrimas comenzaban a aparecer con resentimiento y recargando mi frente en la pared, cerré con fuerza mis ojos pensándote otra vez…
—¿Por qué es tan difícil este amor?¿por qué es tan difícil amarte Kouyou…? Siento que jamás olvidare este sentimiento que tengo hacia a ti…—
Estoy perdido
Destrozado…
Estoy lastimando a alguien más por tu culpa.
Sentí unos brazos fuertes rodeándome por completo, Akira entro al baño tan silenciosamente que no había conseguido que me percatara de su presencia.
Jamás se cansaba de intentar conmigo…
”El amor es enfermo, digno del ser humano. Digno de una persona que se quiere dedicar una vida a sentir con toda su alma. Si es tan verdadero nada puede vencerte hasta que te quites la venda y consigas ver que nada es tan fácil como uno quisiera que lo fuera”
¿Que mas podía hacer?... Yo no amo a Akira y sufro por alguien más... Alguien que lamentablemente no puede corresponderme.
Akira… Tu y yo... ambos…
Ambos somos dignos de un amor imposible...
—Yo no puedo dejar que llores cada día por ese que hoy es tu mejor amigo— Susurro el, mi “amigo” en mi oído. Yo solo cerraba los ojos.
—¿Por qué duele tanto?— Quede frente de el y le cuestione con un fuerte nudo en mi garganta, mi voz sonaba ahogada y mi mente se encontraba colapsada por la enorme tristeza que invadía mi alma— ¿Acaso a ti también te duele de la misma manera?— Las traicioneras lagrimas recorrían mi rostro…Haciéndome ver tan débil y vulnerable…
* * * *
Frote mis manos para darles calor, el clima estaba intensamente frió y parecía que el cielo plomizo daba señales de que una fuerte tormenta de nieve azotaría la noche.
”Akira… Perdóname por escaparme de ti cuando intentas estar conmigo de la mejor manera”
mi mente se disculpaba tantas veces… Creo que sentía culpa después de haberte tenido esa noche.
De todas formas…
Fui sincero contigo al decirte que no puedo corresponderte, que te necesitaba como mi amigo, aunque me estaba doliendo verte así tan destruido como yo. Hice el “bien” para ambos…
En cuando me di cuenta, pare en seco mi caminar por las calles de Tokio al hallarme frente los estudios de PSC,
Kouyou… Te metiste otra vez en mi cabeza cuando ingrese allí simulando calma y felicidad.
De verdad estaba sudando frio entre temperaturas muy bajas…
Siempre fue un círculo completamente vicioso para mí. No había momento en el que me pudiera calmar.
Acelere mi paso ansioso, tan masoquista podía ser que me ponía feliz y triste cuando iba a verte, era una sensación indescriptible para mi estomago.
Entre a la sala y allí estabas con Kai riéndote de quien sabe que mientras cargabas tu guitarra blanca, esa que tanto apreciabas.
Me sonreíste… Mi corazón se comprimió y dio un vuelco cuando de un momento a otro el baterista de nuestra banda te dio un suave beso en el cuello y rodeo tu cuerpo con sus brazos.
No me quedo más remedio que reírme amargamente ¿de la situación? No… De mi y mi estupido sincero sentimiento hacia ti…