Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

“Solo quiero ser amado, solo eso” por pri_sasukelove20

[Reviews - 29]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

 

La vida que veía venir en un futuro no sería nada fácil. Y estaba seguro que… sufriría por ello como cualquiera que estuviera decidido a expresar libremente sus sentimientos.

A salir del armario como muchos lo dicen.

Y entonces llegó el tan esperado momento. En una mañana bastante fresca, me paré en la entrada del instituto a esperar a la persona que debía saber mi secreto. El secreto que guardaba desde hace… cinco años.

—Me gustas mucho, Gaara. Por favor… sé mi novio.

Esa fue la peor estupidez de mi desagradable vida, pero ya era demasiado tarde para arrepentirse. ¿Quieren saber su respuesta?

Pongámoslo así… me rompió el corazón.

—Me das asco…-acto seguido, me golpeó el rostro y caí sentado al suelo-Nuestra amistad queda terminada, Uchiha.

Con la sangre saliendo de la comisura de mis labios, solo pude derramar un par de lágrimas antes de tranquilizarme por completo. Lo vi alejándose y perdiéndose dentro del colegio…

Gaara era mi mejor amigo y acabé perdiéndolo por decir algo… algo indebido. Tantos años de amistad arruinada por algo que siento por él. Me maldije muchas veces durante toda la clase, por mi carácter poco social no tenía con quien juntarme.

Las chicas me veían como el chico popular de todo el colegio. Eso se rompió en menos de seis horas… mi popularidad de hombre seductor cambio drásticamente.

¿Cómo?

Simple. El rumor se esparció por todas las aulas. Al parecer… Gaara había hablado de más y…

—¡Oye, no te enamores de mi, Sasu! Tengo novia.

—Los maricones deberían ir a un colegio de gays ¿No? Aunque no creo que existan, lastima.

—¡¡¡Estás enfermo!!!

—Eres una vergüenza para los hombres, Sasuke. ¡Vete de esta institución!

—¿Sabes? Podrías ayudarle a mi novia con su vestido. ¿Te vistes de mujer o te comportas como una?

Miles de burlas. Cada vez que cruzaba los pasillos me lanzaban alguna palabra hiriente no teniendo en cuenta cuan mal me hacían. Gaara… lo veía junto a otros, riéndose, señalándome como si fuera un ser de otro mundo.

Tantos años de amistad… y me traicionaba de esa manera. Estaba bien si no me amaba, pero… ¿Por qué debía decirle a todo el mundo de mi preferencia sexual?

¿Y los profesores?

No hacían nada por impedirlo. Esta es la realidad… discriminan por ser diferente. La sociedad nunca va a cambiar, no en todo el mundo al menos.

Y eso no fue lo único que sucedió.

—¡Lárgate de aquí!

—¡Padre, por favor!

De alguna manera… los rumores llegaron a mi hogar. Mi madre lloraba en una esquina, mientras mi hermano mayor la consolaba.

Por Dios… no se había muerto nadie.

—Recoge tus cosas y vete de esta casa.

—¡No puedes…!-mi voz temblaba, y para qué negarlo. En ese mismo instante… mi vida se rompía-¡Soy tu hijo!

Me miró con una expresión dura y sin una pizca de arrepentimiento.

—Yo…-observó a mi hermano mayor-Solo tengo un hijo. No sé quién eres…

 

¿Y ahora?

Estoy en el patio trasero de la escuela siendo las ocho de la noche. Con solo una mochila a mi lado y sentado debajo de un árbol… llorando.

—Solo… por solo ser diferente… me tratan de esta manera.

Mi único amigo me odia y me traicionó. Mi familia me echó de mi propia casa… todo el colegio se burla de mi. Verdaderamente pienso… que debería suicidarme como muchos.

Cuando sientes que no tienes salida o no puedes salir de ese túnel oscuro donde solo el dolor te consume, la única salida es… dejar de preocuparse y dejar de respirar.

Estarán mejor si no estoy vivo.

Debería hacerlo…

—Pero… tengo tanto miedo…-rompí en llanto. Nadie me observaba, podía llorar todo lo que quisiera o eso pensé.

Un balón golpeó mi cabeza con algo de fuerza haciéndome caer de espaldas al césped. La luz era escasa en el patio, solo los postes iluminaban el lado de afuera.

—¿Estás bien?-escuché una voz muy preocupada. La voz de un chico.

Sentí su mano tomar la mía y ayudarme a ponerme de pie. Luego pasó de largo y tomó el balón de futbol que había terminado un poco alejado de mí. Cuando logró tomarla, se acercó a mí nuevamente.

Yo…

Yo quedé maravillado.

A la luz de la luna, sus ojos eran tan hermosos y ese cabello dorado, perdón, rubio. El cabello dorado no existe.

—De verdad lo siento…-rascó su nuca con nerviosismo-¿Te duele mucho?

—Solo un poco-admití serio, recuperando la compostura-¿Qué haces aquí a estas horas?

—Je, practicando.

Entonces caí en cuenta de ello. Ese chico… era el capitán del equipo de futbol. Y me sentí un estúpido no recordándolo, todas las mujeres suspiraban por él, claro, además de mí.

Pero ahora que saben mi triste verdad, mi patética vida ya no será lo mismo.

Una año más grande que yo. Jamás tuve la oportunidad de conocerlo, pero había escuchado rumores que era muy buen jugador y había sido elegido para una beca. Pero por alguna razón… no quiso viajar, y la rechazó.

Y lo extraño...

No sé su nombre.

Todos se referían a él, como el rayo amarillo.

—Ya veo… se ve que te gusta mucho el deporte-sonreí.

—¡Sí!-su sonrisa era maravillosa. La más resplandeciente que había visto jamás-Oye… tus ojos… acaso tú.

Estaba preocupado y entonces recordé mi estúpida debilidad al rememorar lo de hace instantes. Mis lágrimas estaban todavía presentes en mis mejillas. Me alejé un poco y las sequé con mi manga.

—Disculpa. Debo irme…

—¡Espera!-me tomó del brazo dejando caer la pelota.

—Por favor… suéltame-respondí serio.

—¿Porque estás llorando? Vi tu mochila… ¿te fuiste de tu casa?

—No te incumbe-gruñí y me solté bruscamente.

Aun en medio de la noche, pude ver sus ojos llenos de dolor. Y no lo entendí.

—Créeme que me incumbe… Sasuke.

Quedé sorprendido. Ese chico sabía mi nombre.

—Sé lo que pasó-entrecerré los ojos-Lo que te hicieron fue… muy cruel. Nadie te defendió.

—No hay nada que defender. Todos piensan igual, los homosexuales son una abominación para la “Sociedad normal”. Y te aconsejaría que no te acerques…-reí con ironía, estaba a punto de llorar-No importa… no volveré a este colegio-pasé de largo de él cruzando el patio a la salida.

—¡¡Sasuke!!

—¡¡No me importa que sepas mi nombre, pero déjame en paz por favor!!-grité al punto de que casi mi voz era un ruego y entonces… comprendí que estaba volviendo a llorar.

Comprendí que estaba solo.

Que no tenía a donde vivir.

Que mi vida se había puesto de cabeza por confesar mí sexualidad.

¡¡¡Por gustarme un hombre!!!

¡¡¡Mi vida es un infierno y sin un apoyo… sin contar con nadie…

—¡¡¡¡¡VOY A MATARME!!!!! ¡¡¡¡Me mataré padre, Gaara… y así… no tendrán que recordar mi repugnante presencia!!!!-grité con todas mis fuerzas mirando el cielo estrellado.

—¡¡¡¡¡Sasuke!!!!!

Sentí unos brazos tomarme con fuerza por la espalda. Escuché los sollozos de ese desconocido en mi hombro…

Y lo abracé, ocultando mi rostro en su pecho, buscando protección.

—Quiero morirme…

—No digas eso, por favor-sollozó-Sasuke…-levantó mi rostro, me tomó de las mejillas con delicadeza. ¿Quién era? ¿Por qué se preocupaba por mí?

—¿No te da asco estar con un homosexual?-reí con tristeza. Creo que a ese punto… estaba perdiendo la cabeza.

—Alguien como tú no se ve todos los días. Eres muy valiente…

—¿De… de que hablas?-no podía parar de llorar.

—Tú, tuviste el valor de decir algo que a muchos le cuesta. Debes sentirte orgulloso.

—¿Orgulloso? ¡¡¡Orgulloso de qué!!!-me descontrole por completo-¡¡¡Perdí a mi único amigo, el colegio entero se burla de mi!!! ¡¡¡Y mi familia me echó de casa!!! ¡¡¿DE QUE DEBO SENTIRME ORGULLOSO?!! ¡¡ES UN INFIERNO!! ES… ES UN…-se me quebró la voz y decaí.

Sentí como me sostenía entre sus brazos.

—Te amo… Sasuke.

Mis ojos se agrandaron. Quedé sin habla ante sus palabras, pero luego… pensé que era otro que se burlaba de mi condición, lo alejé de mi y comencé a correr despavorido dejando mi mochila con el poco dinero que había juntado.

—¡¡¡MALDITO… ERES COMO LOS DEMAS!!!

—¡¡¡SASUKE!!! ¡¡¡POR FAVOR, DETENTE!!!

Debería ser divertido para alguien ver a dos chicos corriendo a lo largo de un patio escolar y gritarse mutuamente. Pero yo… solo estaba llorando y sintiendo un peso enorme en mi pecho.

—¡¡¡JODER!!! ¡¡¡DETENTE!!!

Comenzaba a agitarme, y finalmente… me detuve frente a él. Fulminándolo con la mirada. Pero en mi deplorable estado, estaba seguro que no mostraba la gran cosa.

—¿Por qué…? Vete… no entiendes que necesito estar solo. ¡¡Voy a suicidarme para no tener que asquearle a nadie!!

—¡¡No voy a permitirlo!!-se abalanzó sobre mí.

Un calor… comenzaba a expandirse en mi interior. ¿Qué era?

—¡¡No me abraces!!

—¡¡¡¡TE AMO SASUKE, JODER… entiéndelo, maldita sea!!! ¡¡No estoy bromeando!! Te amo… desde… desde hace mucho.

—¿Q-que?-fue lo único que logré articular de mis labios.

—Sé tu nombre… porque fuiste y eres la persona que conquisto mi corazón. Puede ser lo más lamentable para ti, pero… enterarme de tus gustos, me ha hecho feliz. ¡Sé que puede sonar horrible! Has sufrido mucho en un solo día y lo comprendo.

—Mal… maldito…

—¡Mírame, Sasuke!

—¡¡No!!-cerré los ojos largando constantes lagrimas.

—¡¡Sasuke!!-tomó mi rostro.

—¡¡¡No!!!

—¡¡¡Mírame!!!

Los abrí… y me topé con sus ojos azules aguados.

—Tal vez no sea ese Gaara, pero… mis sentimientos por ti son verdaderos. Si me das una oportunidad… me gustaría… me gustaría amarte.

Es lo único que he deseado.

Ser amado. Como todos en el mundo.

Que me amen, solo eso.

—¿Cuál… es tu… nombre?

—Naruto. Namikaze Naruto.

—Naruto… de verdad tú…

—Te amo…-acarició mi mejilla-Y no me importa que seas hombre, no me importa en lo absoluto. Ven conmigo.

—Pero… tus padres…

—Mis padres, Sasuke… se podrán contentos. Ellos saben de mi preferencia, saben que llevo soñando confesarme al chico más lindo del colegio-mis lágrimas siguieron surcando mis mejillas-Y Sasuke… quiero que conozcas mis amigos. ¡Te agradaran mucho!

Esto debe ser un sueño… alguien que me ama.

—Dame tiempo-pedí sollozando-Yo… amé a Gaara demasiado y no te conozco…

—Esperaré lo que quieras, por lo pronto… me conformo con esto…

—¿Qué…?

Acercó su rostro al mío y probé otros labios por primera vez.

Ese Naruto me había robado mi primer beso…

OOooOO

—¿Sasuke?

El joven rubio rodeó por la cintura a su pareja admirando el patio trasero de aquella vieja escuela abandonada.

—¿Te encuentras bien?

El moreno sonrió.

—Estoy bien, Dobe… solo… recordaba-habló con nostalgia.

—¿Recuerdos malos o buenos?

—Buenos.

—Puede saberse…-besó su mejilla.

—Cuando nos conocimos. Nuestro primer beso fue cerca de ese árbol-señaló el frente.

—El beso más maravilloso de todos-se separó del ojinegro y lo tomó de las mejillas, sonriéndole cálidamente-¿Te arrepientes de algo?

—No sé nada de mi familia desde hace años, pero… no me arrepiento de nada. A decir verdad… fue un milagro lo que me pasó, si no hubiera pisado este lugar aquella noche… probablemente me hubiera quitado la vida sin conocerte.

—Teme…-rosó sus labios con dulzura-Hubiera muerto contigo.

—Lo importante ahora, es que estamos juntos y quiero pasar el resto de mi vida contigo, Usuratonkachi.

—Te amo, Sasuke.

Se abrazaron, al tiempo en que sus labios se unían con pasión y mucho amor. Una pequeña lágrima se escurría de uno de sus ojos ónix, su rubio la secó al instante de separarse.

—Sasuke…-le miró preocupado.

—Estoy feliz, no pongas esa cara… Dobe. Ven…-lo jaló del brazo caminando a la salida-tu madre nos matará si llegamos tarde a nuestra boda.

—Je… ¡Por mí, nos casaríamos aquí mismo!

—Idiota… aquí no. ¡Quiero recordar nuestra boda en un sitio más… tierno!-sus mejillas se sonrojaron levemente.

—¡Te quiero tanto!-lo besó con pasión-¡No te apartes de mi, Sasuke!

—¡Nunca!- y volvieron a besarse con frenesí a mitad de camino a la iglesia.

 

He sufrido… pero he tenido mi felicidad antes de que fuera tarde.

Quizás… mi vida hubiera terminado mucho antes. Pero en mi túnel sin salida, hubo una pequeña luz de esperanza.

Y esa luz…

Fue mi Naruto.

Notas finales:

 

Espero les haya gustado. Muchas veces me he puesto a pensar lo mal que los pasan aquellos que aman en secreto a su mejor amigo, un compañero de escuela o incluso a algún familiar. Es muy duro. Sin duda sus vidas deben estar llenas de dolor, más por como lo tomaría la familia.

Hace poco vi una noticia que me rompió el corazón. Un chico en Estados unidos confeso su condición y todos en el colegio se burlaban de él. Solo tenía amigas, pero no era suficiente.

No soportaba sus burlas, lamentablemente, gravó una cinta donde explicaba su condición y se suicido.

Fue algo muy triste. Ojala dejaron de tratar a los demás como “Seres diferentes”

¡¡¡Todos merecemos amar!!!

Saludos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).