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Innocence. por amy

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Notas del fanfic:

Hola!! ~

Blah.

No se que paso, este shota debía contener una parafilia asquerosa y sangre, mucha sangre...

Y NO!

Vocaloid tiene influencia en mí e.e (?) XDD

Seriously xD han escuchado PONPONPON? si, ese video insane que nos muestra lo malas que son las drogas...

Hay una versión de Len (vocaloid) e_e sumado a una canción "Cat Food" de otro tipin nekoso(?) e_e bueno, eso arruino mi panorama sádico, cambiándolo a uno sumamente dulce...

Notas del capitulo:

Bien, Ruki es un niño gato. See... googleen shota neko y ya... Que yo las conozco y se muy bien que no es necesario que lo busquen para imaginarselo ! verdad? :E  XD

En una parte se dice "patita" bueno, no, Ruki tiene manos.

Sólo que así suena más KAWAI e.e

Manteniendo el Reituki vivo!

HATERS GONNA HATE! e.e

Hace frío, vayan por una cobija y algo para abrazar 8DD!

y...

Enjoy! ~ :3

 

 

 

 

Fue una tarde, saliendo del trabajo, que ya era más noche que tarde. Si de por sí sus ánimos ya iban por los suelos, una linda llovizna terminó con todo. Lo peor, es que algunas gotas se convirtieron en un tremendo torrencial, que arrasaba con todo a su paso, la gran fuerza de la naturaleza.  Corría, con la chaqueta sobre la cabeza, esfuerzo inútil para no mojarse, pues apenas unas puntas de su cabello aún estaba secas.

Ya cansado, se refugió bajo de un pequeño local abandonado, con tejado. Se quitó la chaqueta de la cabeza y se la puso, pero la temperatura de su cuerpo seguía baja.

Giró ligeramente la mirada, encontrándose con un pequeño cuerpo sobre un montón de cajas, bajo el mismo tejadito que él. Se acercó curioso, era un niño, quizá de no más de 10 años. Este agarraba sus orejitas con desespero, bajándolas hasta la altura de sus ojos. Con cada trueno, su colita negra y empapada se agitaba asustada, haciendo sonar el cascabel dorado que prendía de ella.

Caminó hasta quedar frente a él, y, en el suelo, vio un cartelito, con la tinta corrida.

“Por favor, cuida de mí”

Le enfureció que alguien haya sido tan cruel como para dejarlo ahí abandonado, a su suerte. Pero no creía poder cuidarlo, según sabía los gatos eran tranquilos pero de cuidados. Además no era un “simple gato”.

-Meow…- pronunció lamiendo su patita, atrayendo la atención del castaño. “¿Estará lastimado?” Pensaba con preocupación, hasta que otro trueno resonó, haciendo al gatito saltar y apegarse más a la pared. Akira se mordió el labio, dudaba que alguien más tuviera corazón como para recogerlo de allí, aparte su conciencia lo torturaría si llegaba a su casa, y tomaba algo caliente para arreglar su temperatura corporal.

Se agachó y acarició levemente una de sus orejas, el gatito la levantó rápidamente, al igual que su cuerpo. Asustado, retrocedió. –Hey, tranquilo…- susurró sonriéndole. –No te haré daño, ven.- el gatito se quedó quieto por unos segundos, dudando. Poco a poco se fue acercando, Akira le acarició la cabeza.

-Meow.- ronroneó bajando sus orejitas y moviendo un poco su cola, volviendo a sonar el cascabel.

-¿Cómo te llamas, pequeño?- preguntó buscando algún collar en su cuello.

-Ruu… Ruki… ¿Cuidarás de mí? – más que pregunta, fue súplica. Akira vio esos ojitos azules tristones, sumados al clima, su corazón era de un pollo, ¡Piedad pedía! Más no alcanzó a responderle, ya que otro trueno asustó al gatito, que brincó y se abrazó del “extraño que parecía bueno” frente suyo. Akira acarició sus cabellos mojados con suavidad. Lo pensó un poco, quizá podría cuidarlo.

Lo apartó, el gatito lo miró con desilusión, hasta que vio como el castaño se quitaba la chaqueta que tenía puesta y la ponía sobre él. –No puedo dejarte aquí solo.- dijo acariciando su carita, sonriendo nuevamente. Ruki sonrió y se acercó a lamerle la mejilla.

La lluvia ya no estaba tan fuerte, y él no tenía una paciencia eterna, así que aprovecho para salir corriendo hasta su casa, con su nueva mascota en brazos.

-Llegamos.- dijo dejando al gatito sentado en el sillón, este sacudió sus cabellos para secarlos, al igual que su colita. Akira tendió su chaqueta para que se secara y fue por una toalla para Ruki, regresó y la puso sobre su cabeza, paseándola con suavidad.

-Meow… ¿Cómo te llamas?

-Akira, mira, tengo que ir a bañarme, espera aquí y después te daré algo de comer.- dijo después de secarlo por completo, Ruki subió las orejas feliz y asintió. Akira entonces lo dejó solo. El gatito recorrió con su mirada la habitación, curioso, era un pequeño departamento, casi como el de su antiguo amo. Movió su colita, escuchando el tintineo del cascabel, rió al descubrirlo y la volvió a mover.  Se recostó en el sillón para esperar a “Akira”, le había gustado mucho su nombre, y más el saber que tendría un lugar lindo para vivir.

Akira no tardó mucho en bañarse y vestirse, yendo hasta la sala, sorprendiéndose de encontrar al gatito recostado en el sillón, jugando con una de sus orejitas, levantándose con rapidez al verlo.

-¿Quieres leche?- preguntó entrando a la cocina, seguido del pequeño, que asintió felizmente. Akira sirvió un poco en un tazón para cereal y la dejó sobre la mesa, se giró para servirse en un vaso para él, y al voltear vio divertido como el gatito no alcanzaba por lo bajito que era.

-Siéntate.- dijo jalando la silla, Ruki le agradeció y se sentó, agachando su cabecita para lamer la leche. Akira lo miró enternecido y divertido, al parecer sí que tenía hambre, ya que acabo con todo el líquido en muy poco tiempo.

-¿Aún tienes hambre?- el gatito asintió con timidez. Akira vio la bolsa en el centro de la mesa, la jaló y vio que había panes de dulce. -¿Te gustan?- preguntó mostrándole una dona de chocolate.

-¡Sí! ¡Gracias!- respondió enérgico, al tener la dona en sus manos, empezando a comerla. El rubio sonrió y tomó otro pan de dentro de la bolsa, haciendo lo mismo que el gatito.

-Entonces, Ruki… ¿qué hacías solito en la calle?-

-Mi antiguo amo consiguió un perro y me botó.- comentó con tristeza.

-Lo lamento, ¿llevabas mucho tiempo ahí?

-Ayer me dejaron ahí…

-¿Y desde eso no has comido?

-Bueno, mi amo me dejó unas galletas, pero me las terminé esta mañana.- contestó soltando un bostezo.

-¿Quieres dormir ya?

-¿Me… sacarás… afuera?- preguntó con miedo.

-Claro que no, pero no tengo otra cama…

-¿Puedo… dormir contigo?...- preguntó en un susurro, con las mejillas encendidas. Akira se le quedó mirando con sorpresa. -¡Seré bueno! ¡En serio! ¡Por favor no me eches! – pidió alarmado.

-No te voy a echar, si te traje es porque quiero cuidarte.- le aseguró sonriendo, Ruki movió su colita muy alegre, haciendo sonar el cascabel de nuevo.

-Entonces vamos…- dijo levantándose, apagando la luz de la cocina y la sala, llegando a su habitación, seguido del gatito.

De su clóset sacó ropa para que Ruki se cambiara, este las aceptó con un “Gracias” y empezó a desvestirse, ante la mirada de Akira.

-¿No… quieres entrar al baño para cambiarte?- preguntó nervioso, con las mejillas sonrosadas, sin poder apartar la mirada de esa piel tan blanca como la misma leche que había tomado.

-¿Hmm? ¿Te molesta? Mi amo siempre me pedía que me cambiara frente a él.- contestó con normalidad, acomodando la playera prestada, que le llegaba hasta por debajo del abdomen, y las mangas colgando hasta sus codos. Se bajo los pantalones, agachándose para recogerlos del suelo, y, casi a propósito, dejo su trasero frente los ojos de Akira.

-¿Qué clase de amo habrás tenido?- se preguntó en un susurro el castaño, girándose para no ver nada.

-Listo.- anunció recogiendo su ropa, Akira se giró y sonrió, le había dado su propia ropa y por obviedad, esta le quedaba “algo” grande.

-Bien, entonces a dormir.- Ruki subió a la cama de un brinco, gateó hasta la almohada y se dejó caer, ronroneando por la comodidad. Akira rodeó la cama, y se acostó del otro lado, intentando hallar algo de distancia entre sus cuerpos, algo imposible, ya que la cama era individual.

Tan pronto apagó la lámpara de la mesita de noche, se volteó y acomodó su cabeza para descansar, sintió al gatito juntarse a su cuerpo, acurrucando su cabecita en su pecho, haciéndole ligeras cosquillas con sus orejitas.

-Meow… gracias por cuidar de mí…purr…- ronroneó  haciendo su cuerpo “bolita” debajo de la cobija, que Akira se encargó de acomodar sobre él.

-De nada…- respondió acariciando su cabeza con suavidad, a lo que el gatito volvió a ronronear.

Notas finales:

What'z up ? :3

Ohh ~ Avril Lavigne es tan linda y es todo un amor >w<

Cofcof... xD

¿Habrá continuación? DD8 Dunno... lo escribí sólo para sacarlo de mi cabeza xDDU

Dejen reviews plz ;w;

y vayan a leer :

Stupid Mother fucker! 

>DD

 

Amy fuera!! 8DD


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