Capitulo XI Sayounara
Lo que restaba de aquel fin de semana tan revelador había terminado, la mañana del lunes llegaba inevitablemente, ruki se ya se encontraba despierto dispuesto para arreglarse y asistir a clases, pero antes de tomarlas tenía algo que hacer.
Llegaba a la escuela, estaba decidido a hablar con Yoshiki después de pensarlo toda la noche creía tener una idea clara de lo que sentía, su plan era hablar con Yoshiki y después con Aoi. Tomo su celular escribió un mensaje de texto lo envió y se dispuso a ir a la oficina de su aun novio acompañado en ese momento por dos de sus amigos Reita y Kai, la noche anterior sin que Aoi lo supiera les pidió que lo acompañaran.
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Estaba a punto de entrar a la biblioteca, tenía algunos trabajos pendientes, aparte no tenía la mínima intención de entrar a la clase de Yoshiki. Quería evitar que surgieran problemas innecesarios con ese tipo.
b34;Sayonara mata ne genki de ite ne
Zutto zutto wasurenai kara
Sayonara kitto mata aeru yo ne
Yakusoku da yo yubikiri genmanb34;
Era el tono de mensajes de su celular lo que sonaba, lo que causo las malas miradas de los bibliotecarios.
- Podría apagar eso joven –
- Gomen nasai, ahora mismo lo callo.
Saco su celular su rostro se ilumino de una gran alegría al ver el remitente del mensaje que decía lo siguiente:
Ruki:
Hola espero hayas dormido bien, necesito hablar contigo,
Espérame en el árbol de cerezo que está en la parte baja de la escuela,
Tardare un poco en llegar pero por favor espérame…
Rápidamente busco el libro que necesitaba se dirigió a la zona de préstamos y después de que le sellaran el libro en señal de préstamo salió corriendo hacia el lugar en el que se encontraría con el amor de su vida.
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Estaba ya bastante cerca de la oficina de Yoshiki, Reita y Kai aun lo acompañaban pero sabían que lo que seguía debía hacerlo solo en un acto de unión tomaron sus manos para brindarle su apoyo y sin decir nada se marcharon.
Tomo aire, debía ser valiente por primera vez en su vida, debía afrontar las consecuencias de sus actos y no salir corriendo como siempre lo había hecho, desde que tenía memoria siempre que algo lo asustaba o lo sacaba de su zona de confort, provocaba que saliera corriendo a refugiarse en los libros o en su soledad misma.
Pero ya no quería que fuera así, hoy todo cambiaría sería una nueva persona dispuesta a luchar por lo que soñaba pero sobre todo por lo que amaba.
Con esos firmes pensamientos se animó a tocar la puerta, la cual fue inmediatamente abierta por la persona buscada.
- Hola amor que milagro que me visitas – le decía amorosamente Yoshiki mientras le tomaba las mejillas.
- Hola, necesito hablar – debía ir al grano –
- Claro amor pasa – de inmediato se adentró –
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- Ahora me cree señor Matsumoto, usted mismo vio como Kai y Reita apoyan en esta moustrocidad a ruki y también oyó lo que ese hombre le ha dicho a su hijo, dígame si sigue dudando de mis palabras – decía Uruha saliendo de un salón contiguo a donde se encontraba la oficina de Yoshiki, llevaban rato esperando la llegada de ruki, se encontraban ahí ambos padres de ruki y su supuesto mejor amigo.
- Muchas gracias takashima, has demostrado ser un gran amigo, ahora vete y deja que nosotros arreglemos todo – su mirada no demostraba ningún sentimiento de dolor o tristeza al contrario reflejaba un odio profundo hacía todo de lo que sus ojos habían sido testigos.
- No tiene que agradecer nada todo lo hago por ruki, señora Matsumoto perdone por el dolor que les eh causado, jamás hubiese querido que todo esto estuviese pasando – le decía a la bastante afectada madre de ruki, que sorprendentemente aun contenía las lagrimar que le rogaban por salir.
- Está bien Uru, ahora ve a tus clases nosotros te informaremos como termino todo este bochornoso momento.
- Ok entonces hasta luego, y de nuevo perdónenme – era un gran actor, jamás notaron la fría felicidad que lo embargaba en ese momento.
Conocía bien a los padres de ruki sabía que no le iría nada bien. Pero sobre todo sabía que ruki le diría adiós a Tokio y si la vida era buena tal vez le diría adiós a Japón.
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- Y bien amor de que quieres hablar, si es de lo del viernes no te preocupes yo seré paciente.
- No Yoshiki no es de eso que quiero hablar, yo eh lo que quiero decir es que… - era interrumpido por los labios del mayor sobre los suyos – mmm espera por favor esto es serio – decía intentando quitárselo de encima.
- Eres muy joven para tomar todo tan seriamente – ahora lo abrazaba, mientras ruki intentaba librarse de su agarre.
El sonido del abrir de la puerta tan violenta los hizo voltear asía esta, ruki quedo helado al reconocer al hombre que en ella se encontraba.
- Papá – dijo en un hilo de voz –
- Takanori sal de inmediato – dijo tan duramente pero sin alterarse o subir su tono de voz, aunque no era necesario que gritara para causar temor.
- Papá eh yo te puedo explicar – la única respuesta que recibió fue una bofetada de su progenitor, que después de esta lo jalo violentamente y lo aventó hacia fuera donde fue recibido por los brazos de su madre.
Yoshiki no había reaccionado hasta ese instante.
- Óigame el que usted sea su padre, no le da derecho de tratarlo así – al igual que ruki un golpe fue la respuesta a sus palabras.
- Papá nooo por favor – se oyó desde fuera.
- Maldita sea aún no te lo llevas, sácalo inmediatamente de aquí – dijo mientras cerraba la puerta.
La madre de ruki miraba a su hijo con cierto aire de dolor, decepción y hasta asco al saber las preferencias de su hijo.
- Vámonos takanori –
- No mamá detenlo por favor –
- Dije vámonos, eres una vergüenza, no causes más problemas –
- (una vergüenza) – jamás pensó oír esas palabras de su madre – mamá – dijo antes de ser jalado de igual manera violenta asía la salida del colegio.
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- Ahora si óyeme profersucho de quinta – decía mientras lo jalaba del cuello de la camisa – no pienso demandarte o algo así, no pretendo manchar el apellido de la familia Matsumoto por las estupideces de takanori, pero óyeme bien si me entero que te le acercaste si quiera aun kilómetro de distancia lo vas a pagar muy caro.
- No puede alejarme de él, yo lo amo, el me ama, no pueden quitármelo de nuevo –
- ¿de nuevo? Eres un maldito enfermo, no sé de qué demonios hablas pero podemos negociar ¿Cuánto quieres para callarte y olvídate de lo pasado con mi hijo? Puedo ofrecerte una cantidad bastante generosa de dinero – sacaba su chequera.
- No entiende, lo amo no quiero dinero lo quiero a él, le propongo algo eh él y yo nos podemos ir muy lejos de Japón, nadie sabrá nada de lo que paso nos cambiaremos los nombres y así su familia quedara sin mancha, deje que me lo lleve lejos – se hincaba para rogarle no quería perder de nuevo a su amado Hide.
- No digas estupideces, a pesar de todo takanori es mi hijo, mi sucesor, no quiero manchas en la familia pero tampoco quiero perder a mi único hijo varón, ha perdido el camino por culpa tuya, por culpa de sus amigos, por culpa de esta maldita escuela; yo sabía que no era lo correcto que viniera a vivir a Tokio, él siempre fue muy recto, el modelo de hijo perfecto, mi orgullo. Pero desde que se vino todo cambio tanto, formo esa banda junto con primo y sus supuestos amiguitos, se comenzó a pintar el cabello, a oír música vulgar y estúpida, pero siempre tuvo presentes los valores familiares y mantuvo sus excelentes notas, por eso cedi en bastantes aspectos pero veo que cedi de más, y es hora de jalar las riendas de nuevo; así que aceptas el dinero y te callas o se aleja por las buenas si no quiere sufrir las consecuencias.
- No acepto nada – respondió firmemente – yo lo amo no me importa cuanto tenga que sufrir siempre y cuando lo tenga conmigo.
- Muy bien, esa es su respuesta, está bien, aunque no veo como puedan estar juntos si ni siquiera va a saber dónde encontrarlo.
La puerta se abrió de nuevo ahora entraba Toshi quien no podía creer la escena que miraba, su mejor amigo hincado en el suelo con los ojos llorosos ante un hombre que traía toda la pinta de ser alguien de la alta sociedad.
- ¿Qué pasa aquí? – preguntaba.
- Eso es todo lo que yo tenía que decir, hasta nunca – dijo el padre de ruki antes de irse –
- No lo dejes ir Toshi, me quiere quitar de nuevo a Hide, se lo va a llevar, nooooooo ayúdame – se levantaba dispuesto a seguir a aquel hombre pero Toshi se lo impidió.
- Qué demonios te pasa, si no me quieres ayudar no me importa, pero déjame ir tras él. – le gritaba –
- Yoshiki YA estuvo suave YA no puedo soportar más verte así, siempre supe que no habías superado la muerte de Hide, pero pensé que habías llegado a medio asimilarla, pero ahora me doy cuenta que no fue así.
- De qué demonios hablas, deja de sermonearme –
- Hide está muerto y jamás va a volver, ese niño se llama takanori y no tienen nada que ver con Hide –
- Por qué no entienden que Hide volvió porque me ama, porque lo amo, y ahora nadie ni nada puede o debe separarnos.
- Ese niño no es Hide, no te ama, no es Hide – gritaba – yo también lo amaba y mucho antes de que tú lo hicieras – eso nadie lo sabía, que más no sabía nadie –
- Lo amabas? – estaba atónito ante tal revelación –
- Lo ame, lo amo y lo amare siempre, pero es una amor diferente al que le tenía antes, yo entendí que su presencia física nunca más regresaría, nunca eh tratado de buscarlo en las demás personas, sé que a él le hubiera gustado verte feliz de nuevo con otra persona, sabes que es lo que más amaba de ti –
- No, que era –
- Que sonrieras, desde el primer día que te conoció, lo que más le gusto fue verte sonreír –
*flash back*
- Toshi, hoy conocí a un chico muy lindo, creo que me enamore – le decía el pelirosa a su mejor amigo en ese entonces –
- no seas tonto nadie se enamora tan pronto – le molestaba que el niño que amaba le dijera eso que lo lastimaba tanto –
- es verdad Toshi, lo amo – decía sonriendo – sabes que es lo que más amo de él –
- qué? –
- su sonrisa, es que es tan pura y sincera, y yo fui el causante de ella – dijo con las mejillas rojas – creo que le agrade.
- que bien así si consigues novio por fin me podre deshacer de ti –
- eres un tonto u.u – el otro abrazaba al que por siempre sería su amigo y nada más.
- quiero que seas feliz enano, y si ese tipo te hace feliz ten por seguro que ya lo considero mi amigo –
- Gracias Toshi –
*fin flash back*
Así sucedió, Toshi se tragó todo su amor y se volvió amigo de Yoshiki quien nunca le mostro ser una mala persona por eso le dio su afecto.
- Desde que Hide murió jamás has vuelto a sonreír de la manera como a él le gustaba, jamás, ni siquiera ahora que creíste que Hide había reencarnado en ese niño, es por eso que sé que no lo amas, ni él te ama ti – decía con algunas lágrimas contenidas en sus ojos.
- Toshi, es que no puedo olvidar a Hide, porque me dejo porque, yo lo amaba tanto, dime como es que tú lograste olvidarlo porque yo por más que intento no puedo.
- Yo me volví a enamorar, y a pesar de no ser correspondido el darme cuenta de que estoy enamorado me ha hecho ver que he superado lo de Hide.
- De quien estás enamorado –
- De un idiota, egocéntrico que poco le importan los sentimientos de los demás, que ha utilizado a las personas para sanar su dolor, que vive en el pasado y que últimamente se ha obsesionado con un amor bastante enfermo por una persona que no tiene la culpa de su dolor. – el otro lo miraba enteramente confundido –
- ¿Cómo puedes amar a alguien así? –
- Sé que es eres un imbécil pero aun así te amo –
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Fumaba descontroladamente, ruki había dicho que tardaría, pero ya había pasado demasiado tiempo, estaba por demás nervioso y preocupado. Vio venir a sus otros dos amigos y de inmediato los llamo para preguntarles por ruki.
- No ha venido, eh que raro hace mucho que entro a la oficina de Yoshiki, ya debería haber venido – le contestaba el rubio –
- Y si el tipo ese le hizo algo, vamos a ver por favor acompáñenme – les pedía el pelinegro –
- Está bien te acompañamos, aunque no creo que él sea capaz de lastimarlo – le decía Kai.
Corrieron lo más rápido que pudieron con rumbo a la oficina de Yoshiki, en cuanto llegaron sin más ni más Aoi se adentró, para encontrarse con un Yoshiki lloroso y golpeado siendo abrazado por Toshi.
- Donde esta ruki – se apresuró a preguntar.
- Se lo llevaron – contesto Yoshiki dejando escapar algunas lágrimas.
- Se lo llevo quien – Aoi se le iba encima.
- Sus padres, la verdad no entiendo nada, todo paso muy rápido, llego su papá lo golpeo me golpeo, su madre se lo llevo, y me ofrecieron dinero para no decir que tuvimos algo, me negué a eso y el solo me respondió que jamás sabría dónde encontrarlo. – Yoshiki volvía a llorar aun que ahora ya no sabía si era por ruki, por recordar que Hide lo quería ver feliz o por la repentina declaración de amor por parte de Toshi.
- No ruki noooo – el pelinegro salió corriendo asía la salida, con la falsa esperanza de encontrarlo aún, los otros dos lo siguieron.
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Llego a la puerta principal y al notar que ni un alma pasaba por ahí sintió como un profundo dolor comenzaba a apuñalarle el corazón, aquel dolor lo hizo caer sobre sus rodillas y sin poder soportar más aquello las lágrimas no se hicieron esperar, los otros llegaban a su lado para tomarlo de los hombros.
- Mi niño porque te fuiste, porque ahora que pudimos haber estado juntos –
Era la segunda vez que Reita lo veía en un estado similar al que se encontraba ahora, pero esta vez le rompía aún más el corazón. El llanto del pelinegro iba en aumento, hubiera sido menos doloroso que lo mataran a que le quitaran a el amor de su vida – ruki te amo – dijo en un hilo de voz.
- Levántate – le decía de una manera muy fría y sería Kai.
- Kai – lo llamaba el rubio dándole a entender que no era el momento para hablarle así a Aoi.
- Kai nada, Aoi levántate y límpiate las lágrimas – los otros solo lo miraban desconcertados, mientras este intentaba levantar a Aoi – tú me prometiste que ibas a luchar hasta el final y esto aún no acaba, así que no te derrumbes ruki te necesita fuerte.
- Tienes razón – contestaba mientras terminaba de levantarse y comenzaba a limpiar sus lágrimas – pero como voy a encontrarlo, sus padres cambian constantemente de casa y…-
- Y no olvides que cuando los Matsumoto se proponen desaparecer a alguien ni Sherlock Holmes daría con ellos, acaso ya olvidaron a la hermana de ruki, hasta la fecha ni el mismo chibi sabe dónde está – les decía un recién llegado Uruha – pero al final de cuentas él se lo busco, si hubiera sido un buen hijo o ya de plano un buen amigo nada de esto hubiese pasado, que pena – decía con una fingida tristeza.
- Tú!!! Fuiste tú, le dijiste a sus padres – le decía mientras se le acercaba para golpearlo pero el rubio y su novio se lo impidieron.
- Ay quien los entiende, no que les preocupaba que ruki saliera con ese tipo u.u yo solo pensaba en el bien de mi mejor amigo, hice lo que un buen amigo haría, ruki empezaba a meterse en problemas, lo mejor era que se fuera –
- Por qué Uruha, no entiendo por qué tanto rencor, sé que te lastime con mi decisión, pero no tenías por qué ensañarte con ruki –
- Amor yo no me ensañe con nadie, solo pensé en lo mejor para mi amiguito y para nuestra relación, es más si te portas bien te diré si ruki se encuentra bien o mal, al ser su mejor amigo seguro sus papás me dejaran hablar con él – sonreía de una manera tiernamente maniaca, mientras los otros lo miraban con bastante miedo – no me miren así, yo quiero mucho a ruki es como mi hermanito menor pero estaba cometiendo muchos errores, lo que hice fue lo mejor para todos.
- Eres un maldito Uruha, no te reconozco, jamás fuiste así – le gritaba el rubio.
- Tu tampoco eras un traidor y ahora lo eres – le respondía –bueno amor te dejo para que pienses las cosas, te espero en casa - estaba a punto de marcharse cuando Kai le dio la media vuelta y después de esto una bofetada.
- Eso y más te mereces maldita zorra – recién llegaba sakura que había sido testigo de esa última escena –
- (zorra, zorra, zorra) – esas palabras no dejaban de resonar en su mente, le removían tantas cosas dentro de su ser – lo dice señorita perfección, dime kaisito acaso tú ya le dijiste a Reita que en tu otro colegio te cogías con sakura – el rostro de Kai palideció ante esas palabras – por tu expresión deduzco que no lo has hecho…
- Uruha vámonos – le pedía el recién llegado.
- O cuéntale tu sakura, dile como esta gata te movía las caderas –
- Uruha no sea imprudente vámonos –
- No quiero esta no me va a venir a hablar así –
- Uru por favor vámonos – le decía tomándole la cara para mirarlo a los ojo.
- Está bien saku, amorcito te estaré esperando – fue lo último que dijo antes de que sakura se lo llevara.
- Reita yo eh perdóname por no haberte dicho nada, pero fue hace tanto que no lo considere importante – decía con la cabeza agachada.
- Ahora no importa necesitamos un plan para localizar a ruki le respondía secamente.
- Pero Reita yo…-
- Ahora no Kai, ahora no – decía en un tono demasiado triste.
- Está bien – dijo con una lagrima corriendo por su mejilla, la cual Reita limpio para después abrazarlo.
- No estoy enojado, solo un poco triste porque no confiaste en mí, pero no pasa nada, yo te amo, no debemos pelear en este momento los chicos nos necesitan, no es por justificar a Uruha pero a él nunca le ha gustado que lo llamen zorra por eso dijo eso no importándole que podría lastimarme a mí su más viejo amigo. Bueno ahora no importa, que tal si hablamos al celular de ruki – le proponía a los otros dos.
(La patobruja no pudo con el amor de kaisito-chan e iguanita-chan xD)
- Lo más seguro es que ya se lo hayan quitado mejor vamos a su casa igual y ahí los encontramos –
- Pero si ya cambio de casa – agregaba Aoi.
- Es un riesgo que tenemos que correr –
- Tienes toda la razón, a como dé lugar te voy a encontrar amor –
Se pusieron a planear todo lo necesario y después de esto cada uno fue por lo que necesitaban para este viaje.
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- Vete a tu cuanto takanori – le ordenaba su padre.
- Papá yo quisiera decirte que – era interrumpido.
- Me importa poco lo que tengas o que quieras decir, hoy no es un día para hablar, mañana que llegue Yune nos reuniremos a discutir la situación.
- Yune!! Por qué Yune él no tiene nada que ver –
- Estabas a su cargo, takanori tengo unas inmensas ganas de golpearte y no sé cuánto más pueda soportármelas, así que si no te vas a tu cuarto ahora mismo yo no respondo por lo que pueda pasar después.
- Está bien padre – decía casi llorando – perdón madre – le dijo en cuanto paso a su lado, la cual ni siquiera lo miro.
Al marcharse su padre tomo el teléfono y marco…
- Moshi moshi – se oía del otro lado.
- Yune te quiero en mi casa mañana mismo –
- Eh, tío estoy en corea, taka no se los dijo –
- Dije que te quiero en mi casa mañana mismo, no me importa si tienes que dejar algo importante, si no vienes por tu propia voluntad mandare a mis hombres por ti.
- Eh está bien tío, pero por lo menos podría saber porque –
- Te dice algo el nombre de uno de los profesores de takanori, Yoshiki –
Sintió como un frío le recorría – sí me suena dijo tartamudeando –
- Pues entonces me vas a explicar cómo demonios se enredó con tu primo –
- Tío yo –
- Cállate mañana hablaremos –
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Ruki se encontraba algo desolado en su habitación, pero aún tenía la esperanza de defender sus sentimientos, estaba dispuesto a pararse frente a sus padres y decirles:
“este soy yo, los amo pero si me aceptan o no tal cual soy es problema suyo”
Pero nunca espero lo que después vendría
“LAS PALABRAS HIEREN MÁS QUE LOS GOLPES”
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Llegaron a la que creían aún era la casa de ruki, pero al llegar pudieron notar aparte de lo que el portero de aquella casa ya no era habitada por aquella familia seguía siendo propiedad suya pero llevaban semanas de haberse mudado, su única esperanza recaía en uno de los empleados de aquel lugar quien sabía dónde se habían ido a vivir, lo malo es que este no se encontraba por el momento y no había manera de localizarlo, tendrían que esperar a que el volviera de sus diligencias y eso no sería sino hasta dentro de dos días, bajo las credenciales de somos amigos de ruki los dejaron quedarse a dormir ahí el tiempo que fuera necesario para esperar a aquel hombre. Aoi se quedó en el que algún momento fuese la recamara de ruki, todo el ambiente olía a él, ese aroma le hacía cobrar fuerzas para luchar contra la sociedad misma.
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- No va a venir ¿verdad? – le preguntaba el castaño al peliazul.
- No lo creo, ya no lo esperes más – le respondía.
- ¿por qué no puede amarme como lo ama a él? – decía con los ojos a punto de estallar en lágrimas.
- Porque su corazón no puede ver lo que el mío sí.
- Y que es lo que puede ver el tuyo –
- Todo, puede ver al verdadero Uruha, ese que siempre ha dado amor sin recibir prácticamente nada a cambio, ese que necesita ser amado y no utilizado, el de corazón puro que se oculta bajo alguien frio, yo sé que no eres un frívolo por eso te amo, porque yo puedo ver más allá de tu exterior.
- Estas mintiendo, yo no tengo ninguna de las cualidades que mencionaste –
- Las tienes pero no las dejas salir, déjame ayudarte, déjame amarte –
- Si te dejo y yo no llego a olvidar a Aoi, te voy a lastimar y aun que sea difícil creerlo me dolería mucho lastimarte, eres una persona muy especial para mí.
- Tu no amas a Aoi, y ahora mismo lo acabo de confirmar –
- Eh que dices –
- Te dolería lastimarme a mí pero jamás te ha dolido lastimarlo a él –
- Eh, es que yo eh – no pudo pronunciar más palabras los labios de sakura se habían posado sobre los suyos, y el no hizo nada por apartarlos, desde el primer beso que recibió del peliazul, sintió algo que lo asusto mucho, era algo que nunca había sentido ni siquiera con Aoi, por eso fue que le dio miedo, pero al parecer era más que obvio que sakura en este momento era alguien más especial en su vida que el propio Aoi, la pregunta era ¿seguiría con aquella venganza absurda o se arrepentiría algún día del daño que había hecho?
La tarde del día siguiente había llegado, ruki paso toda la mañana encerrado en su cuarto sin más compañía que la de su propia sombra, en cuanto a Aoi y los otros dos, movían cielo, mar y tierra para localizar al hombre que les diría donde encontrar a ruki, Yune llegaba a casa de su tío iba acompañado de su novio que a pesar de pedirle que él se quedara no quiso abandonarlo en ningún momento.
- Tadaima – decía en un tono de voz alta para que notaran su presencia.
- Yune, ve por takanori la llave de su cuarto está en la mesa del comedor los quiero aquí de inmediato ya eh decidido lo que debe hacerse – le decía la ronca y recia voz de su tío.
- Si tío traigo visitas, podrían venir a recibirlo –
- No estamos para esas cosas, muéstrale el cuarto de takanori y que te espere ahí –
- Está bien tío – fue por la llaves y después siendo seguido por su pareja se dirigió al cuarto de ruki.
Estaba completamente todo en silencio cuando oyó que una llave intentaba abrir la cerradura de la puerta que lo aprisionaba dentro de aquel cuarto. – Papá – dijo al ver que la puerta se abría.
- No, soy Yune, tu padre nos espera vamos – dijo algo molesto.
- Perdóname Yune, no quería meterte en todos estos líos –
- Perdóname tu por no haber cuidado bien de ti, todo esto es mi culpa – si estaba molesto pero consigo mismo, pensaba que si tal vez le hubiera hablado a ruki sobre lo que le había pasado con Yoshiki su primo no hubiera terminado en las garras de aquel hombre.
- Gracias, por estar conmigo, tenemos que hablar no todo lo que parece sucedió, hay muchas cosas que pasaron recientemente que ellos no saben y necesito que me escuches – le pedía dándole un abrazo.
- Claro que hablaremos pero ahora debemos bajar antes de que tu padre se enoje -
- Sip – fue su simple respuesta.
- Amor espéranos aquí, ojala no tardemos –
- Claro y chicos suerte –
- Gracias – contestaban al unisonó.
Llegaron al lugar donde ya los esperaban ambos padres de ruki, el ambiente se sentía por demás tenso, pero aun así tenía la esperanza de salir si no bien por lo menos si con la frente en alto de toda esta situación.
- Siéntense – les ordenaba el padre de ruki al verlos llegar, a lo que obedecieron inmediatamente. – en primer lugar Yune estoy muy decepcionado, esperaba que después de acogerte en mi familia luego del abandono en el que te tenían tus padre, tu por lo menos supieras cuidar a tu primo, pero no, poco te ha importado lo que hemos hecho por ti.
- Si tío tiene toda la razón, todo es culpa mía yo tomare la responsabilidad de todo –
- Eso no es necesario, simplemente te quiero lejos de la familia por algún tiempo, siendo mayor de edad no puedo imponerte nada más – le respondía fríamente – en cuanto a ti takanori, tu no solo me has decepcionado, me das vergüenza, dime en que te falle como padre –
- Papá es que yo –
- Cállate, dime porque con un hombre mayor, solo lo justificaría si no tuvieras padres o dime acaso eres un enfermo – (un enfermo) jamás espero que lo llamaran así, aparte de la manera en que lo miraba era como si mirara algo realmente asqueroso y no a él – solo déjame decirte que eso no es amor es una monstruosidad, takanori como te lo dije ayer quisiera golpearte, pero óyeme bien, vas a sacarte cualquier sentimiento que tengas asía ese tipo, y agradece que no lo haya acusado en el colegio, aunque sé que él tuvo la culpa de todo. Ya no volveré a confiar en ti nunca más, todo lo que representabas se ha ido a la basura.
- Papá pero yo, es que –
- No pienso oírte takanori, ya Uruha nos ha contado a detalle los sucesos y como tus estúpidos amigos te han ayudado pero esto se acabó, ya tome una decisión, te vas del país mañana mismo, donde? Lo sabrás cuando llegues, no soy tan tonto como para decirte y que le digas a tus amiguitos. –
Todas las fuerzas que lo acompañaban lo habían abandonado, por qué? Las personas que dicen amarlo no lo entienden, no dejan que siquiera les explique, lo llaman enfermo, y sobre todo están decepcionados de él cuando siempre ha tenido que sacrificar todo por ellos, ruki recordaba las tantas veces que fue reprimido por sus padres *mamá me invitaron a una fiesta – una fiesta estás loco no, no puedes* *takanori porque aún no llegas a casa – eh acabo de salir ya voy* *taka vamos por un helado – no uru gracias me esperan en casa – pero aún es temprano – perdón no quiero hacerlos enojar* podría decirse que tales cosas no eran tan graves por parte de sus padres pero con el tiempo sus amigos dejaban de pedirle salir para que si siempre diría que no, ni a la esquina salía, se fue quedando solo, a sus padres no les gustaba ni que tuviera amistad con los vecinos, cuando se dio cuenta ya casi no le quedaban amigos solo Yune lo visitaba, ya conocía a Uruha pero este se fue a Tokio mucho antes que él. Se sentía miserable hasta que un buen día Yune convenció a sus padres de que lo mejor para su educación sería viajar a Tokio y ni aun así se libró de ellos, aunque los demás no lo supieran ruki siempre se iba corriendo a su casa porque tenía que reportarles a sus papás su hora de llegada en las noches los llamaba para que supieran que no estaba fuera, y si sus calificaciones bajaban aunque fuera una décima lo regañaban horriblemente, sus miedo se volvieron en ese instante en que le dijeron estar decepcionados y avergonzados que acaso nunca valoraron todo lo que ha hecho todos los amigos perdidos, las experiencias saltadas, todo lo que pensaba decir se le había ido de la cabeza, aparte sabía que siendo menor de edad sus padres lo mandarían donde ellos quisieran, su último esfuerzo sería pedir que lo dejaran en Japón por el momento no podía mencionar más y ni pensar en mencionar a Aoi no quería meterlo en problemas.
- Papá prometo hacer todo lo que me digas pero no me saques de Japón –
- No te estoy consultando ya está decidido, no estarás solo iras con tu hermana – (mi hermana) pensó –
- Pero ella ya iba a volver en unos días, estaba muy emocionada por su regreso, mamá tu dijiste que ella deseaba tanto regresar –
- Pues tú le explicaras porque es que ya no podrá volver – dijo antes de levantarse para marcharse –
- Papá por favor –
- Esta dicho –
- Mamá –
- Esta vez no puedo hacer nada takanori, estoy cansada de apoyar tus estupideces, esto me rebasa, una cosa fue la banda, otra tus constantes cambios de imagen, pero ahora has hecho algo que va completamente en contra hasta con la naturaleza misma, mejor ve a preparar tus maletas, tu vuelo es a medio día –
- Por cuanto tiempo estaré allá –
- El necesario, no más no menos, ya date prima, y tu Yune puedes dormir esta noche aquí pero mañana tienes que irte, lo de que te alejes de la familia por un tiempo va enserio – dijo por último la madre de ruki, aquella mujer que en algún momento fue la única que llego a inspirarle confianza.
- Yune podrías acompañarme a empacar – le pedía lloroso ruki.
- Si claro vamos –
Subieron lo más rápido que pudieron a aquel cuarto y sin siquiera cerrar la puerta ruki se soltó a llorar, sin importarle el que ambos chicos en su cuarto lo observaran, la única reacción de Yune fue correr a abrazarlo.
- Yune puedo contarte todo ¿verdad? –
- Sabes que si enano, siempre estaré de tu lado así como lo has estado del mío –
- Gracias, recuerdas que me preguntaste por mi hombre del pasado –
- Si lo recuerdo –
- Ese hombre es Aoi, y por fin me había dado cuenta que jamás dejo de ser el amor de mi vida, Yune yo no amo a Yoshiki yo amo a…- volvía a llorar desconsoladamente.
- Ru él también te ama –
- Lo sé, y ahora ya nunca estaremos juntos, Yune siento que muero –
- Espera no seas tan pesimista – decía sacando algo de su bolsillo del pantalón – háblales pero se rápido porque aparte de que te pueden cachar me queda muy poco crédito.
- Gracias Yune – dijo abrazándolo.
- Anda rápido – decía al momento que ruki marcaba.
………………………………………………
Estaban completamente desconsolados, nerviosos y sus rostros mostraban gran evidencia de no haber dormido, cuando sorpresivamente el celular de Kai sonó. Al no haber convivido mucho con Yune el no reconoció el numero pero aun así contesto inmediatamente.
- Moshi moshi –
- Kai soy ruki –
- Ru eres tú, estamos muy preocupados, estas bien, no te ha pasado nada malo ¿verdad? –
- Estoy bien no se preocupen, Yoshiki eh mi padre lo golpeo demasiado? –
- No, está bien algo afectado pero está bien –
- Qué bien, Kai, Aoi está ahí –
- Si quieres que te lo pase – Aoi estaba ansioso de hablar con ruki desde que supo que era el quien hablaba.
- Si por favor – decía y al momento Kai le entregaba el teléfono a Aoi.
- Mi niño estas bien –
- Si –
- Ruki, prometo que estaremos juntos, te lo prometo de algún modo lo lograremos porque te amo –
- Aoi yo confió en ti, porque también te… - la llamada se había cortado a falta de crédito en el celular
- Ru, amor nooo – decía al notar lo sucedido.
…………………………………………………..
- Te… (ti ti ti ti) – amo – termino la frase en su cabeza –
- Lo lamento ruki – decía Yune sabía lo que había pasado.
- No, gracias por lo menos saben que estoy bien –
Fue lo último que se dijeron, después de esto ruki comenzó a empacar sus cosas, intentando mantener la esperanza en que Aoi lograría encontrarlo.
…………………………………………….
- Y bueno les dijo donde esta – preguntaba el rubio.
- A mí no – respondía Kai.
- No, maldita sea – se reclamaba Aoi.
- Son un par de idiotas – les gritaba.
………………………………………….
- Moshi moshi –
- Tu hermano llegara mañana a tu casa, recíbelo y espera mis instrucciones para con él –
- Takanori, aquí y quien se hará cargo de él –
- Tu quien más –
- Pero, yo regresaba en dos días ya tengo mi boleto, ya organice todo para mi partida, no puedes hacerme esto –
- Yo no te lo hago, takanori tiene la culpa, cuando llegue pregúntale por que no podrás regresar –
- Papá no por favor no –
- Nada, te mandare a tu correo toda la información con respecto a la llegada del vuelo de takanori para que vayas a recibirlo, adiós. – no espero respuesta y colgó.
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Al día siguiente todos estaban esperando la llegada del empleado que les diría donde encontrar a ruki, el cual desde que lo vieron cruzar la puerta corrieron hacía el.
- Buenos días jóvenes, el cuidador me dijo que necesitaban saber donde residen ahora los matsumoto – les decía la verlos acercarse.
- Si, por favor nos urge es algo de vida o muerte – le decía Kai.
- Está bien –
Después de darles la dirección y la manera en que podían llegar, no lo pensaron ni medio segundo y se pusieron en marcha.
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- Ya todo está listo, takanori sube tus maletas al auto – le ordenaba su madre.
- Si madre – decía al momento de subirlas.
- Puedo despedirme de ruki – les preguntaba a sus tíos Yune –
- Sí, no se verán por mucho tiempo – le respondía su tío –
- Gracias – decía al momento de abrazar a su amado primo, para decirle algo que los demás no oyeran – ru no te preocupes buscare a los chicos y de alguna manera daremos contigo te lo juro, siempre contaras conmigo, cuando llegues habla con mise (no me maten O_O) estoy seguro que ella te entenderá y también ayudara.
- Eso espero, gracias, nos veremos pronto –
- Dense prisa o llegaremos tarde, espero que cuando regrese ya no estés aquí Yune –
- Si tío, por favor vayan con cuidado –
- Adiós Yune – le decía ruki al subirse al auto.
- Hasta pronto –
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Estaban bastante cerca, Aoi no podía con las ganas que tenía de volver a ruki, conducían de una manera descontrolada, en esos momentos pedir calma era algo casi imposible, sorprendentemente no chocaron, al ver a solo unas casas más la de ruki una enorme felicidad los embargaba.
- Baja rápido – decía Kai al momento de estacionarse frente la residencia –
- Muévanse – les gritaba Aoi –
- Yune? – decía el rubio sorprendido al ver salir de aquel lugar a su viejo amigo.
- Chicos, están aquí, como llegaron, eso no importa vayan al aeropuerto, el vuelo de ruki sale en media hora, yo no puedo ir mi tío ya no quiere verme, pero ustedes corran, espero que aún lo alcancen.
- Vuelo, adonde se va –
- No sé, ni siquiera él lo sabe, lo único es que lo mandaron con mise (reitero no maten), así que ya no pregunten y váyanse.
- Si entendido – volvían a subirse al auto el cual pusieron inmediatamente en marcha.
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Ya había abordado el avión solo esperaba a que el capitán les indicara que estaban listos para despegar, trato de imaginar que no estaba ahí, intento pensar que Aoi llegaría por él, pero la realidad se veía tan distinta a lo que él quería ver. A estas alturas ya sabía a donde iría, al abordar pregunto el destino del vuelo, pero de que le valía saberlo si no tenía como decírselo a los demás.
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Como pudieron llegaron al aeropuerto, pero para su mala suerte vieron como los padres de ruki ya subían a su auto para marcharse. Corrió hasta la recepción, para ver si alguien podía informarle el destino del vuelo en el que saldría ruki, con lo que no contaban era que el padre ruki había dejado una buena propina para que nadie informara nada sobre su hijo.
- Podría informarme el destino del vuelo de Matsumoto Takanori – preguntaba agitado.
- Joven no estamos autorizados para brindarle esa información. – le decía la recepcionista.
- Por favor es algo urgente –
- Ya le dije que no podemos – al ver tan tajante a la mujer entendió que por medio de ella no sabría nada. –
- Gracias – dijo al momento que una joven lo halaba así otro lado – pero que te pasa –
- Ese es el único vuelo que va a salir en un buen rato, el chico al que buscas está ahí, no conozco el destino del vuelo, pero será más fácil sabiendo a qué hora salió, hasta luego – decía marchándose. Corrió a la puerta de abordaje pero obviamente no lo dejaron pasar.
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- Buenos días pasajeros estamos a punto de despegar, esperamos que el vuelo sea de su agrado, bueno abróchense los cinturones y disfruten el vuelo.
- Disfrutar, que estúpido – decía poniéndose el cinturón – Kai se te olvido un tipo de te amo, el de los imbéciles, ese que nunca dices, el que estúpidamente callas.
*flash back*
Estaban a punto de salir de la sauna.
- Ruki te amo –
- Aoi yo, eh podrías esperar un poco para que yo te pueda decir lo mismo, es que quiero que sea cuando ya estemos juntos –
- Claro no necesito que lo digas aun – dijo al momento de besarlo.
- Gracias –
*fin flash back*
- Debí decírtelo en ese momento Aoi te amo – dijo en un sollozo.
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Estaba forcejeando con los encargados de la puerta de abordaje, pero al notar que no podía contra ellos cayó al suelo.
- Ruki TE AMO – grito lo más fuerte que pudo.
b34;Sayonara mata ne genki de ite ne
Zutto zutto wasurenai kara
Sayonara kitto mata aeru yo ne
Yakusoku da yo yubikiri genmanb34;