-¡Obaa-chan! ¡Mira lo que me encontré!
El grito de mi nieta menor me saco de la pequeña siesta a la cual había sucumbido debido al cansancio, porque a la edad…Bueno, siendo Youkai eso no debería molestar hasta unos cuantos siglos más, como sea, mi nieta venía corriendo con una chispa en los ojos como si hubiera descubierto un tesoro escondido…Espero que no sean las galletas que su madre escondió para que no se las comieran antes de la cena.
-¡¿Obaa-chan?! ¡Mocosa malagradecida, sabes que detesto que me digan así!-Le grite entre broma y enojo.-¿Acaso me veo tan vieja?
Mi nieta lanzó una carcajada, bueno era imposible que me llamara por mi nombre, ya debía haberme hecho la idea de que ahora soy su abuela.
-Claro que no madre.-Respondió mi hija a mi pregunta mientras cruzaba el jardín con mis otros nietos, a sus 22 años (aparentes) era la viva imagen de mi marido, el cual por cierto, se encontraba trabajando.-Pero recuerda que aunque no parezcas que tengas un día más de 28 tienes 6 nietos.
Maldición es cierto, con tres hijos casados, con una única mujer que para colmo era la menor, era cuestión de tiempo el que mis nietos vengan.
En el breve intercambio de palabras con Liza, Miku, su hija (ergo mi nieta) había llegado hasta nosotras sin un solo rasguño. Debo confesar que eso era digno de admirarse dado que Miku tenía 5 años y mi jardín contaba con un estanque, plantas, piedras y ramas, así que…Ustedes háganse a la idea.
-Abuelita.-Una vena estaba comenzando a salir.- ¿Qué es esto?
Por Kami, juro que mi corazón se emociono, “esto” resultaba ser un cuaderno, más específico un diario, MI DIARIO…Uno de tantos pero este…Este era el que más recordaba, este era el que narraba la historia de amor de mis amos.
Como una película los recuerdos me fueron abordando…
-¿Mmm? ¿Abuela?
Pero yo ya no escuchaba, mi memoria viajaba muy lejos…Todo comenzó una noche de verano...Específicamente una noche en la que mataron a la mayoría de la familia Namikaze, el día en que el destino puso en marcha para que los Uchiha abandonaran su soledad….
Continuara…
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-¡Obaa-chan! ¡Mira lo que me encontré!
El grito de mi nieta menor me saco de la pequeña siesta a la cual había sucumbido debido al cansancio, porque a la edad…Bueno, siendo Youkai eso no debería molestar hasta unos cuantos siglos más, como sea, mi nieta venía corriendo con una chispa en los ojos como si hubiera descubierto un tesoro escondido…Espero que no sean las galletas que su madre escondió para que no se las comieran antes de la cena.
-¡¿Obaa-chan?! ¡Mocosa malagradecida, sabes que detesto que me digan así!-Le grite entre broma y enojo.-¿Acaso me veo tan vieja?
Mi nieta lanzó una carcajada, bueno era imposible que me llamara por mi nombre, ya debía haberme hecho la idea de que ahora soy su abuela.
-Claro que no madre.-Respondió mi hija a mi pregunta mientras cruzaba el jardín con mis otros nietos, a sus 22 años (aparentes) era la viva imagen de mi marido, el cual por cierto, se encontraba trabajando.-Pero recuerda que aunque no parezcas que tengas un día más de 28 tienes 6 nietos.
Maldición es cierto, con tres hijos casados, con una única mujer que para colmo era la menor, era cuestión de tiempo el que mis nietos vengan.
En el breve intercambio de palabras con Liza, Miku, su hija (ergo mi nieta) había llegado hasta nosotras sin un solo rasguño. Debo confesar que eso era digno de admirarse dado que Miku tenía 5 años y mi jardín contaba con un estanque, plantas, piedras y ramas, así que…Ustedes háganse a la idea.
-Abuelita.-Una vena estaba comenzando a salir.- ¿Qué es esto?
Por Kami, juro que mi corazón se emociono, “esto” resultaba ser un cuaderno, más específico un diario, MI DIARIO…Uno de tantos pero este…Este era el que más recordaba, este era el que narraba la historia de amor de mis amos.
Como una película los recuerdos me fueron abordando…
-¿Mmm? ¿Abuela?
Pero yo ya no escuchaba, mi memoria viajaba muy lejos…Todo comenzó una noche de verano...Específicamente una noche en la que mataron a la mayoría de la familia Namikaze, el día en que el destino puso en marcha para que los Uchiha abandonaran su soledad….
Continuara…