Suzuno Fuusuke abrió los ojos de golpe. Miró alrededor y se dió cuenta de que estába desnudo. Se aferró a las sabanas de la cama y se cubrió. Pero qué coño ocurrió anoche? se preguntó mientras examinaba con la mirada toda la desordenada abitación. No tenía mucho que digamos. Solo había un armario, un tocador, la gigantesca cama en la que estába acostado, y un montón de ropa tirada por toda la abitación. Suzuno se levantó y buscó sus boxers. Cuando los encontró, continuó caminando por la abitación. Luego salió hacía la sala y la examinó mientras intentaba recordar que había pasado la noche anterior. Tenía que admitir que erá un apartamento bastante decente. Los sillones erán blancos y parecían de marca cara. Había cuadros y estatuas por el pasillo qué parecían de valor alto.
Suzuno continuó astá una pequeña cocina. Ahí encontró unos huevos fritos y un café sobre una charola negra sobre la mesa del comedor. Lo examinó con curiosidad, pero no probo nada. Erá muy desconfiado. No vaya ser que tenga veneno.
- Dónde está mi mochila? - se preguntó así mismo mientras buscaba por la sala. La encontró junto sus pantalones bajo la mesita de centro de sala. Buscó su movil (celular) y justo cuando lo encontró empezó a sonar.
- Diga? - contestó con voz debíl.
- Dónde te metiste, Fuusuke!!?? - interrogó una voz dulce y juguetona al otro lado de la linea.
- Midorikawa? Eres tú, Mido? - interrogó Suzuno sorprendido.
- No, soy Michael Jackson. Claro que soy Midorikawa, idiota! - resognó Mido.
Suzuno se sentó en el sillón de la sala sin dejar de ver alrededor nerviosamente.
- Dónde te metiste, gillipollas? -
- Pues la verdad..... nose - contestó Suzuno un poco asustado.
- Como que no sabes? - preguntó confudido Midorikawa.
- Porfavor, Mido! Dime que ocurrió anoche?!! - dijó Suzuno desesperado y apuntó de un ataque de nervios.
Midorikawa rió en la otra linea. - De verdad no te acuerdas, verdad? -
- Deja de darle vueltas al asunto y dime, estupido! -
-Bueno, estábamos en el antro con Hiroto, Ulvida, Osamu,..... ect - comenzó Mido.
- Y? -
- Y había una chica totalmente loca por tí. Se te echaba encíma y creo qué te besó - explicó Midorikawa.
Suzuno apolló su cabeza en su mano libre. - No puede ser..... - suspiró mientras deceaba qué no hubiera echó nada con ella.
Se escuchó un grito de emocion proveniente de su movil. - Estás en su apartamento, pendejo!! - gritó Midorikawa entre carcajadas.
Suzuno miró alrededor una vez más y se dió cuenta de qué erá un apartamento con un toque femenino. Cuadros, statuas, tocador en la abitación, desayuno preparado..... Erá obvio que vivia una mujer ahí. - Supongo qué tienes razón - dijó con resignación.
- Busca una foto! Busca una foto! -
Suzuno corrió a la abitación y buscó entre las cosas del tocador. Solo había productos para el cabello, un cepillo, y gel. Se inclinó para ver debajo de la cama, pero no había nada. Solo una caja de zapatos de mujer y un suéter sucio. - No hay nada - dijó mientras se sentaba al borde de la cama y abria el cajón de un pequeño mueble a lado de esta.
- Sigue buscando! - insistió Midorikawa.
- Espera, ya encontré algo - Suzuno sacó una fotografía del cajón y la examinó. Erá la foto de una chica muy bonita con pelo largo de color crema con mechones rosas y ojos color verde claro; casi cristalino. - Es muy bonita. -
- Quién? - preguntó Midorikawa aún en la linea.
- La chica dueña del apartamento - aclaró Suzuno sin dejar de mirar la foto.
Mido gritó de la emoción otra vez. - Entonces, lo hicieron? Tuvieron sexo toda la noche??!! - interrogó con emoción.
Suzuno rió y miró la cama. - Creo qué sí - dijó mientras recordaba que había despertado desnudo. Si lo había echo con esa chica, entonces no le importaba no poder recordar lo que pasó anoche. Parecía una chica linda y decente. Bueno, de acuerdo con lo que había dicho Midorikawa, esa chica se le lanzó la noche anterior. Parece qué las apariencías engañan.
- Oye, Fuusuke..... usaste condon, verdad? - interrumpió Midorikawa al escuchar el silencio de su amigo.
En segundos, Suzuno ya estába en la pequeña cocina y buscaba en el bote de basura algun condon usado. En otra ocasión le hubiera dado asco tocar la basura de un extraño, pero en ese momento estába realmente desesperado por saber si se había protegido. - CARAJO!!! PUTA MADRE!!! - gritó.
- Qué cojones pasa, Suzuno??!! - preguntó Midorikawa désde el movíl qué estába en alta voz sobre estante de la cocina.
Suzuno dejó el bote de la basura en el suelo y agarró el movíl. - Creo que no usé condon. No encuentró ninguno! - dijó desesperado mientras caminaba por la cocina.
- Ayyy no.... Ojalá qué la chica no tenga ninguna enfermedad - dijó Mido.
Suzuno continuó paseandose por la cocina intentando bloquear pensamientos malos y malas noticias. Se detuvó frente el refrigerador y miró una fotografía qué estába pegada con un híman. Erá la misma chica con la que se había acostado y estába abrazando a un chico bastante apuesto. Tenía pelo rojo y desordenado, ojos ambarinos, y una apariencía bastante intimidante. - Esa puta..... - susurró.
- Qué pasa, Suzuno? Vamos, dime! - apresuró Midorikawa.
- Es casada! La chica con la que me acosté tiene esposo! - gritó Suzuno sintiendose traicionado.
- Qué?!! Pero qué puta zorra rastrera! -
Antes de que Suzuno pudíera decir algo más, escuchó que alguien abría la puerta de la entrada. Se asomó por el pasillo y miró al chico pelirrojo de la fotografía que había visto antes. - Mierda! -
- Que pasa? - preguntó Midorikawa.
- Ssshhh! Es el esposo! Llegó el puto marido de la chica! - susurró aterradó.
- No jodas! Escondete, Suzu!! - gritó el chico en la otra linea.
- Callate, Mido! - Suzuno cortó la llamada y aprovechó que el muchacho pelirrojo estába distraido cerrando la puerta para juntar sus cosas que estában tiradas en la sala y salir corriendo hacía la abitación. Buscó dónde esconderse y decidió hacerlo en el armario. Se metió en el armario y se mantuvó quieto y callado para no llamar la atención.
En la sala, el chico pelirrojo examinó la sala detenidamente. No encontró nada sospechoso. Continuó por la cocina mirando la basura regada y las fotografías del refrigerador tiradas por el suelo. Se acercó a la mesa del comedor y notó que había un desayuno intancto. Algo no íba bien.
Por otro lado, Suzuno rezaba por que el chico pelirrojo no se enterara que se había acostadó con su esposa. Se mantuvó callado astá que su movíl volvió a sonar. - Mierda, Mido! Qué quiéres?!! - susurró Suzuno a regañadientes.
- Porque me colgaste?! Qué está pasando??!! - preguntó Midorikawa desesperado.
- Mido, yo..... - no pudó terminar la frase. A Suzuno casí se le salió el corazón por la boca cuando las puertas del armario se abrieron y se encontró con el pelirrojo de ojos ambarinos.
- Suzuno? Suzuno? Suzuno, contesta!! -
Suzuno cortó la llamada y se quedó petrificado mirando al ojiambarino.
- Hola.....? Soy Nagumo Haruya - dijo el pelirrojo mirandolo un poco extrañado por razones misteriosas.
Suzuno se quedó callado y temblaba del miedo.
Nagumo le sonrió traviesamente y con un poco de prepotencia. - Que haces ahí? - preguntó ladeando la cabeza con curiosidad. - Te preparé el desayuno. Porque no lo comiste? -
Suzuno parpadeó dos veces confundido. - T-tú? ......tú preparaste el desayuno? -
Nagumo fué acercandose poco a poco a él. - Así es, cariño - le constestó con tono seductivo. - Sábes, te ves super sexy désde aquí - Acorraló al pobre Suzuno contra la pared y le dió un beso en los labios.
Suzuno se sobresaltó por el repentino contacto. Debía admitir qué no le disgustaba del todo esa acción. Cerró los ojos y se concentró en sentir cada sensación que le causaba ese beso. Se separaron para tomar aire y Nagumo le dedicó una sonrisa burlona. Suzuno se dió cuenta que esa erá su modo de sonreír, por lo que debía tener en mente que no se estába burlando de él.
- Hoy me desperté muy ``hot`` - le susurró seductivamente Nagumo.
Suzuno retrocedió un poco asustado. Respiró profundo y se lanzó sobre Nagumo mientras lo besaba apasionadamente. Cerraron las puertas del armario y comenzó la diverción con acción y gemidos.