En medio de las sombras
Oculto eternamente, en una interminable oscuridad. Sin una posible salida, sin una posible esperanza, estando como atado de pies y manos, y completamente cegado. Rodeado de soledad y solo acompañado por tu propia paranoia... Donde la vulnerabilidad es tu base, y la locura hambrienta acecha. Donde simplemente, no hay lugar para la cordura.
Donde con los ojos abiertos, nada puedes apreciar, con los oídos atentos, y ni un ruido llega lejano a tus oídos; con el olfato desarrollado, y ningún olor distingues, con los brazos agitados e incontrolables y ni un solo objeto puedes llegar a alcanzar, pues no hay nada a tu alrededor. Terminando ahogado en la impotencia. Donde los sentidos no existen, pero su recuerdo los mantiene vivos en tu interior, empujándote poco a poco hasta terminar cayendo en la locura.
Porque la suave brisa nunca llega, nunca hay frio ni calor, no hay nada a tu alrededor, ni sobre... ni debajo, sin la firmeza y seguridad del suelo, donde sientes que en cualquier momento puedes llegar a caer y nunca llegar al final. Justo como en las pesadillas ¿no? con la diferencia que esta vez, es real.
Donde los días y noches son irreconocibles, pues parece que el sol duerme eternamente en este infernal lugar. Donde el tiempo no se sabe si pasa o se detuvo ya hace mucho, porque en medio de la tanta locura, parece haber pasado años... Infinitos, incontable, irreconocibles años desde mi llegada a esta eterna oscuridad, y a veces tan solo minutos, recordando perfectamente cada aspecto de mi anterior vida. Como si aun estuviera presente.
Donde el hambre y la sed abundan desesperantes, pero por más que intentes, no puedes saciarte, el cansancio y el sueño te llaman, pero simplemente no se puede caer en ese dulce mar de inconciencia y descanso, que te rehabilita y recupera.
El dolor, en todas sus expresiones, incluso algunas no antes conocidas.... mata, pero solo figurativamente; porque ni con todo el sufrimiento y agotamiento del mundo, se puede llegar a morir en este lugar, porque tal acción no se puede repetir dos veces.... No se puedes morir, porque ya se está muerto y se es plenamente consiente de esto. Aunque en medio del desespero y las eternas divagaciones, una linda pistola o una brillante y afilada navaja pareciera la mejor compañera, sabiendo que de llegar a tenerla, seria imposible cualquier cambio.
En un lugar, donde la desesperación se apodera fácil de ti, y tarde o temprano gruesas lagrimas de sufrimiento, dolor, amargura y eterna decepción surcan tu rostro, sin llegar nunca a tocar fondo. Así como también, el cinismo y una risa sin sentido se apodera del lugar, dejándolo inundado de aún mas locura.
Donde me sentía abandonado, derrotado, burlado, mas que decepcionado y humillado, recordando una inevitable y predicha derrota que siempre presente me recordaba mi rotundo fracaso, una y otra ves, sin fin aparente.
Con tu sínica y enferma risa de victoria resonando insaciable en mis adentros, atormentándome, cuando ciertamente el silencio abundaba.
En mínimas ocasiones mi cordura volvía, y en vagos intentos de consolación pensaba "esto aun no termina, el otro camino a tu derrota, comienza con mi muerte... prometí que te daría fin, te vencería y yo siempre cumplo mis promesas" Teniendo presente la frase "perder la fe, es el peor error". Aunque creo, esta de mas decir, que mantener este pensamiento era aun mas difícil que sobrevivir a este infierno, si es que así se le puede llamar.
~ Flash Back ~
Vi el rojo sangre empezar a abundar en tus ojos de asesino y, como en tu rostro, una muy disimulada sonrisa de superioridad se empezaba a extender, mientras observabas victorioso como daba mi ultimo respiro antes que mi corazón dejara de latir definitivamente cuando se me fue arrebatada la vida de las manos, declarando mi derrota ante ti, mi supuesta derrota.
Te haces la victima, el sufrido, el decepcionado... para mantener las apariencias, para continuar tu juego, y no te costó nada... pues siempre fuiste un gran actor. Me lloraste, me abrazaste como atesorándome y gruesas lagrimas de pura actuación salieron de tus ojos, engañando perfectamente al equipo entero.... Mientras yo, poco a poco me ahogaba en esta interminable oscuridad, lleno de odio y frustración; de penas y decepción, pues en mi interior gritaba que me ayudaran, que me salvaran, que siempre tuve la razón, que no debían creerte.... porque en ese momento silenciosamente me confesaste, y confirme lo que siempre solitario defendí.
Y no podía hacer mas nada que observar como en el fondo te regocijabas y tomabas mi muerte como el momento mas feliz de tu vida, cuando yo lo único que podía hacer era cerrar lentamente mis ojos, para dar una ultima mirada a este mundo que siempre llame, hogar.
~ End Flash Back ~
Agotado, desconsolado y ya resignado, nuevamente me levantaba, y a la nada preguntaba: "¿Que hice tan mal en vida, como para merecer esto?¿Acaso Ligth en verdad era una especie de Dios, y me castigaba por enfrentarle?" Y no, aun en medio de la locura... eso nunca lo llegue a aceptar
Como si por primera vez en mi indefinida soledad "algo" me hubiera escuchado, un relámpago casi invisible de luz inundo mi vista ¡No estaba ciego después de todo! o acaso era otra de tantas pasadas ilusiones? Con un sentimiento que creía olvidado, lleno de esperanza abrí los ojos de una forma poco creíble y busque atento alguna señal de luz en medio del vacío; pero la sensación de estar ciego nuevamente inundo mis sentidos... Sentí que la decepción se apoderaba de mi cuerpo de pies a cabeza, mis ojos se inundaban reteniendo lagrimas que clamaban por salir y con mis puños apretados hasta quedar blancos, luchaba contra la frustración de NO PODER HACER NADA! era un completo inútil.
Pero aun así, me atreví a levantar la vista una vez mas, y muy a la lejanía pude identificar una mínima fuente de luz, con la cual me sentía mas que satisfecho. con la adrenalina recorriendo mi cuerpo e inundando mis sentidos por primera voz en mucho tiempo, corrí como nunca antes, como si mis piernas no tuvieran limite, tan solo intentando alcanzar aquella pequeña y frágil esperanza.
No sabia si realmente avanzaba, si aquella pequeña luz se acercaba y alejaba... en ocasiones me parecía mas grande, y en otra mas pequeña. Tampoco tenia idea de cuanto tiempo llevaba corriendo. Solo estaba seguro de que mis fuerzas se agotaban, mi condición de humano estaba intacta, y mi golpe de adrenalina se acababa.
Caí de rodillas exhausto, sin aire y con un inmenso dolor en el pecho, mi respiración agitada, entrecortada y dificultosa me molestaba, y mucho. Cerré fuertemente los ojos, a pesar de mis esfuerzos por evitarlo, pues mi mayor temor en aquel momento era que, al abrirlos, todo se hubiera desvanecido. Pero en medio de un acto de valor levante la vista... y sentí como mi corazón se comprimida, para luego dar un vuelco en mi pecho... siendo lo único que lograba percibir, pensando que en cualquier momento, simplemente explotaría.
Un niño! un joven mas bien, con rasgo infantil... se encontraba frente a muchas pantallas, fuente de inimaginable información sentado en un muy curiosa y particular forma, que me recordaba increíblemente a mi, a excepción de que, eso de ver la vida ante tus ojos es antes de morir, y que... este chico tenia todo el cabello completamente blanco y en lugar de estar rodeado de deliciosos y apetecibles dulces eran una diversa y muy variable cantidad de juguetes, todos los que se pudieran imaginar y mas...
La curiosa imagen duro poco, dejándome nada para siquiera reaccionar y salir de mi ensimismamiento, ya que en menos de un pestañeo apareció ante mi un conocido chico rubio con una deliciosa barra de chocolate colgando de sus finos labios, mirando a la nada, concentrado, pensando y con la Death Note en su mano... ¡¿Con la Death Note en su mano!? Que se supone que hace Mello con la Death Note en su mano? Como la habrá conseguido, y que pasó con light?
Justo en ese momento todo se sumió nuevamente entre las profundas sombras que todo lo inundaban, como si nada hubiera pasado, como si todo hubiera sido el resultado de la paranoia de un joven desesperado y sin mas pruebas que el acelerado y constante golpeteo en mi pecho, garganta y oídos, inundándome los sentidos y trayendo consigo la sensación de sentirme... vivo. Algo que creí haber olvidado hace tanto ya... era increíble, una sensación única, que me recorría de pies a cabezas llenándome de una calma y tranquilidad indescriptibles. El color... tan nítido, tan brillante, tan mejor que mis innumerables alucinaciones, que parecía que estuviera ahí presente, ante ellos... lo sentí tan real, que hasta podría jurar, que llegar a sentir el dulce-amargo adictivo olor de esa deliciosa golosina marrón.
No! esto definitivamente era mas que una alucinación cualquiera, era mucho mas que eso... "algo" estaba por pasar, lo presentía, desde el fondo de mi decrepito ser.
Escuchaba atentamente lo que Mello decía, las falsas reglas de la Death Note... la verdad, debo admitir que nunca imagine que supondría hacer tal osadía. Maldito Kira.
Como ya era de costumbre, todo paso realmente rápido, Near y Mello terminaron peleando, y este ultimo salió rabioso del lugar dejando al peliblanco con mucho que pensar. No muy diferente a mí, que quede nuevamente rodeado de oscuridad.
Estas visiones se hicieron con el tiempo, mucho más seguidas y vivas... siempre con una secuencia y según imagino, manteniéndome al tanto de todo pero sin claras explicaciones, ese era mi trabajo. Sí, aparentemente el plan funciono a la perfección. Los chicos eran realmente los indicados para esto, pues entendía su plan, y lo que planeaban hacer... así que ahora solo me quedaba esperar y confiar en ellos mientras esperaba ansioso que llegara el día en que terminara mi sentencia y fuera mi turno de "reírme".
Mello ha muerto, junto con matt... sabia que planeaba hacer esto, pero en el fondo, me había negado a aceptarlo, aquellos pequeños chicos que cuide como si fueran de mi familia, aquellas únicas personas a las que me permití tomar cariño, junto con watari.
Ellos sabían, igual que yo, lo que les tocaba afrontar, y aun así... lo realizaron con valentía y exitosamente. Ahora solo quedaba que Near terminara el trabajo. Esto cada vez se vuelve mas personal, Kira.
Las visiones se hacen menos constantes, menos explicitas, mas lejanas... Lo ultimo que recuerdo es a Near solicitando un encuentro con Light y su equipo. Ya no se cuanto a pasado desde esa vez; pues todo se ha vuelto a tornar oscuro, muerto, inexistente. Ya no siento el latir de mi corazón, ni la constante respiración. En verdad todo fue tan solo una locura mas? Me negaba a creerlo, pero ya me encontraba en un estado en el que podría confiar en cualquier cosa, menos en mi mismo.
La depresión nuevamente me inundaba, las silenciosas lagrimas que caían repetitivas por mis pálidas mejillas eran mis únicas compañeras y cualquier rastro de esperanza o fuerza que en algún momento pudo haberme invadido, hace mucho que habían abandonado mi espíritu. De mi no quedaba mas que un recuerdo.
Sintiéndome fracasado y derrotado una vez mas, una conocida luz invadió mis sentidos. Una luz sin explicación, ni motivos. Pero esta era diferente, no era igual que con las visiones, pues no sentía la típica desesperación por llegar a ella... Una extraña sensación de esperanza, calma y felicidad inundo mis sentidos, haciéndome sentir llenos, pleno, feliz, completo.
Camine muy despacio hacia ella y con cada paso mas me iluminaba... era una luz cálida. Sin miedos o inseguridades avance lento y conforme, hasta sentirme abrazado de pies a cabeza por todas estas sensaciones multiplicadas por mil. Era simplemente hermosa.
Cerré mis ojos seguro, llenándome de tan maravillosa sensación y disfrutando del momento, pero poco a poco desapareció. Y cuando logre reaccionar, no me encontraba en el cielo, pero tampoco seguía en mi desolado infierno. Estaba parado en medio de una estación de tren abandonada.
Me encontraba aturdido, no entendía absolutamente nada de lo que ocurría. No recuerdo haber estado en este lugar en toda mi vida así que... me gire en medio de un brusco ruido que corto mis cavilaciones, para encontrarme con un paisaje único y maravilloso, un cielo que parecía cubierto de llamas, mezcladas entre rojo y naranja, dando un espectáculo único de unos pocos segundos donde el sol ya cansado se ocultaba detrás de alguna de las enormes nubes, viéndose opacado ante tal belleza.
Pero esto no fue lo único que capto mi atención, ya que a unos pocos metros de mi se encontraba el cuerpo ensangrentado y deteriorado de lo que alguna vez fue un realmente hermoso castaño portador de la propia definición de belleza, pero no solo eso, ese deteriorado cuerpo era Light! y se encontraba notablemente en sus ultimas horas.
Quede asombrado ante tan sádica imagen, aunque no lo expresara abiertamente. Me tomo tan solo unos segundos reconocer lo que habría pasado... con Near, con Light, con la Death Note, hasta el porqué de su abaleado estado... Un enorme sentimiento de pena se apodero de mi llegándome hasta el alma, si, una enorme pena por aquella única persona capaz de ser un digno oponente, capaz de llegar a vencerme, vencer al gran "L" el mejor detective del mundo. La única persona que logro generar en mi un único e increíble odio, que me consumió sin piedad por quien sabe cuanto tiempo, y que crecía sin control.
Pero no solo eso, sino también la única persona que logro ganarse mi afecto, y aun mas... mi amor. Un amor que me hizo experimentar las "mejores" sensaciones de la vida, pero también las peores. La angustia, inseguridad, la rabia conmigo mismo y sobre todo el temor. Temor a que todo lo que sospechaba fuera cierto, a que todo fuera una farsa tuya en la cual había caído como un niño, un temor que a diario y sin compasión me robaba el sueño irreparablemente aun mas de lo normal, un temor que simplemente no podía ignorar...
Por esto, cree mi segundo y ahora victorioso plan, pidiendo a watari que se comunicara con los niños de Wammy's House, mis niños del wammy's... tenia que decirles que se prepararan, y que estuvieran atentos ante cualquier cambio de planes, o cualquier caso que requiriera de su presencia, pues Light era un gran oponente y no se puede saber exactamente que esperar de él.
Les prepare un documento, con el historial de la operación, un documento que todo el tiempo mantuve en secreto del resto del equipo. Aquí expresaba todas mis sospechas y sus motivos, notas y avances con lujo de detalle, y ordene a watari que fueran enviados al nombrado orfanato con las restricciones de que solamente Mello y Near pudieran tener libre acceso a este. Para luego ser eliminados de todo el sistema en caso de emergencia. Nunca erigiría un sucesor, pues, que mello y Near trabajaran juntos era la mejor opción, se complementaban, y juntos lograrían una victoria segura.
Pero a pesar de todo el plan, los respaldos y el "problema resuelto" como le llamo watari, mi debilidad estaba presente y clara como agua cristalina, la cual no desaprovechaste y como si de un juguete viejo se tratara, me desechaste ante la mínima amenaza que creíste no superar, o no, mejor dicho, siempre planeaste matarme en ese momento, no querido Light? Así tendrías la victoria asegurada, sin mi en tu camino, creíste vencerme y aunque por mucho tiempo así lo sentí, tu nunca supiste que yo tenia una carta bajo la manga, hasta que llego el momento exacto. Pues la verdadera meta aquí, era demostrarte que solo eras un infantil humano con excesivo egocentrismo, una brillante inteligencia y mentalidad de Dios. Pero tu fin llegaría, y estoy seguro, eso ya lo tenias bien claro.
En ese momento logre reaccionar, y me di cuenta que me encontraba justo frente a ti, y notaste mi presencia, sabias que me encontraba allí, en frente de ti, porque me viste, allí en tus últimos alientos... Y lo supe por tu mirada, por ese único brillo particular de inacabable competencia. Aunque sabias perfectamente que ahora si, habías perdido.
Las palabras se amontonaban en mi garganta, atropellándose unas encima de otras provocando un enorme nudo en mi garganta, uno que no había sentido nunca antes, y no dejaba salir mi voz. Las palabras de una eternidad se apresuraban por salir, para liberarse, para liberarme. Respire profundamente con los ojos cerrados, sintiendo como aquella fresca brisa perfumada de lirios inundaba mis sentidos, y me encanto; me encanto como aquella deliciosa sensación volvía a mi, como mas que una simple alucinación. Y eso, precisamente, fue lo que me ayudo a calmarme. Abrí los ojos lentamente y una a una, con mi característica calma y parsimonia, las palabras empezaron a salir fluidamente de mis labios.
- Supongo que no hay nada que explicar, Light-kun. Ya debes saber perfectamente toda la historia.... has perdido, lo que debo admitir ha sido la batalla de nuestras vidas. Hasta alguien como "tu" puede cometer errores, sabes? dicen que cada persona tiene un propósito en la vida, único, especial, adaptado a cada ser creado en este perturbado mundo... Batallando constantemente con las innumerables adversidades que te enfrentan o interponen ante ti evitándote llegar a la meta. ¿Cuáles son estos inconvenientes? las personas las toman como algún accidente, falta de dinero, alguna perdida o incluso alguna persona. Gastando su vida obsesionados con llegar a tan afanada meta, ¿No es así, Light-kun?- Pregunte, mientras enseguida asentías débilmente, pues se podría decir que eras la persona mas experta en el tema.
- Pero de lo que no se dan cuenta, es que hay otro "propósito" mucho mas fuerte y mucho mas importante. Uno común, que todas las personas están destinadas a cumplir, y que muy sutilmente se nos menciona y recuerda con constancia, pero por lo mismo es el mas difícil de identificar. Porque consiste en el equilibrio entre el bien propio y el de los demás... Son pocas las personas que lo cumplen, pues la mayoría se concentra en el bien propio y otras en el "bien" de los demás... como tú ¿no? - Dije mientras botaba veneno al hablar, sobre todo en la ultima frase, y lo comprobé, al ver tu resentida mirada.
- Pero hay varios motivos que impulsan a las personas a seguir cada camino... hay pocos, muy pocos, que son movidos únicamente por el verdadero sentimiento de ayuda incondicional, de desinterés, de humildad... que sacrifican todo por ayudar al prójimo, pero en el buen sentido... En cambio hay otros, que simplemente lo hacen por ganar fama, otros... poder. Ambos movidos por un fuerte sentimiento en común. El egocentrismo, el hambre de poder... ¿Conoces bien esos sentimientos, no es así? - Te observe fijamente, y un brillo de enojo atravesó tu mirada rápidamente, dándome a entender, que estabas consiente de lo que hablaba.
- No siempre comienza así, pero el cuerpo es débil y se deja llevar por la satisfactoria sensación de poder, auto justificándose con la idea de que es por el bien de los demás... Pero lo que muy pocas personas aprenden en vida, es que este verdadero y mas difícil "motivo de vida" es el reto de aprender y poner en practica los actos de humildad, sencillez, ayuda, entendimiento, comprensión, pureza... que te preparan para tan afanada vida futura. Y los conocemos bien, pero no les damos la importancia que merecen - Seguías en silencio... eras incapaz de pronunciar una sola palabra, pero no estaba seguro si era por tu deteriorado estado o porque simplemente no tenias absolutamente nada con lo que objetar mi discurso. Hubo un largo minuto de silencio, en el que ninguno de los dos se movió, hasta que continué...
- Aquí, Light, no encontramos tantos inconvenientes... solo uno. Y ese único inconveniente, es uno mismo. Porque uno se niega a ver lo obvio, para poder tomar el camino fácil e ignorar el difícil sin problemas ni remordimientos. O en su mayoría, se escoge lo que mayor satisfacción te produce, y uno no se da cuenta, pues terco se antoja de ignorarlos - Termine, en medio de una larga pausa, a pesar que sabia que esto aun no terminaba.
-Entonces dime, Ryuuzaki ¿Por qué sigues aquí? ¿Para humillarme aún más? -Preguntaste sin perder ese arrogante aire de autoridad.
- No - respondí secamente - Sigo aquí porque todo en la vida es un equilibrio perfecto... y uno debe cumplir todas sus metas. yo no había cumplido ninguno de mis propósitos, hasta ahora. No podía, como dicen, "descansar en paz" hasta verte derrotado - Vi como tu rostro se desfiguro en una clara expresión de enojo - Y haberte demostrado que no puedes creerte un Dios, porque de esos solo hay uno. Y que no puedes jugar con la vida de las personas como si de juguetes se trataran, porque eres solo un humano, que puede cometer errores, no eres nadie para juzgarlas con el precio de su vida, que aquí, light, es lo mas valioso - Vi como aquel brillo escapaba lentamente de tus ojos y tu expresión se suavizaba notoriamente, volviéndose tal vez, de arrepentimiento... esperando el momento perfecto para finalizar con tal despedida.
- Pero no solo por esto me encuentro aquí, sino también para decir... gracias, Light-kun - Tu pálido rostro se inundo de completa sorpresa, y antes que pudieras mencionar algo... yo termine mi explicación.
- Gracias, porque como dije, no todas las personas logran cumplir el propósito de cada humano en la tierra... o tan siquiera descubrirlo en vida, y yo no soy la excepción. Pero en todo este tiempo de exilio, de extrema soledad, tortura y desesperación... en resumen, mi peor castigo, por el cual solo tu eres responsable, también tuve la oportunidad de reflexionar sobre todo en la vida... Y poder descubrir esto que ahora te estoy confesando. ¡Quien sabe a donde habría ido si no hubiera sido así! Por esto, debo darte las gracias... por liberarme - Selle mi confesión y nuestra guerra con un dulce y corto beso, un beso que miles de veces había imaginado, mientras tomaba tu pálido rostro en mi manos, que cada vez perdía mas esa luz de vida.
- De nada, Ryuuzaki - Fue lo ultimo que dijiste, pues en ese instante una enorme y cálida luz apareció detrás de mi, la misma que me había trasladado a este lugar. Y a tus espaldas se extendía una fría y profunda sombra inquebrantable que arrastraba consigo una sensación de absoluta desolación.
-Hasta nuestra siguiente vida... Light-kun - me despedí antes de adelantarme un poco y dejar que tan curiosa luz me envolviera por completo, en medio de sus miles de sensaciones de calma, alivio, y sobre todo... la tan esperada paz. Pero no sin antes poder darme tiempo de presenciar como la sombra te cubría, llevándose esa parte de ti que ya no pertenecía a este mundo, desapareciendo al instante y dejando detrás de si, una terrorífica calma en la abandonada habitación donde ni el susurro del viento se percibía.
Y es ahora que puedo decir que "morí en paz".
FIN
BB~