-Yuuri-Dijo con felicidad el rubio, su voz retumbo en la habitación.
-¿Qué sucede, Wolf?- pregunto con inocencia el moreno.
-¿Quieres a Greta? ¿Etto… A la gente de Shin Makoku? ¿A…mi?- hizo una excepción en la última pregunta… No quería ir demasiado rápido y asustar a su prometido…
El moreno sin captar la indirecta contestó: -Claro, yo amo a Greta… Y quiero a los demas por igual… Bueno a unos más que otros, pero a todos de la misma manera.
-¿Y Saralegui, Konrad y Daikenja?- Pregunto lentamente el mazoku.
-Sara es un buen amigo, aprecio mucho a Konrad después de todo es mi padrino y bueno Murata es un idiota.
-¿Y Gwendal, Günter y Anissina?
-Gwendal a veces da miedo pero es una buena persona. Günter es demasiado intenso pero es bueno saber que se preocupa por mí y Anissina-san es muy… Etto… Me aterra… Pero es inteligente y te salvo a sí que la quiero. Y le debo una grande.- Dijo sonriéndole al rubio.
-¿y tú quieres a… "mi"? Yuuri… ¡Eres genial! Quieres a tantas personas y se te hace imposible odiar a alguien por más daño que te cause, me gustaría ser capaz de eso…
-¿Por qué dices eso? ¿Acaso no quieres a todos?
-No a todos, solo algunos.- Respondió apenado el rubio.
-¿Y quiénes son?- pregunto sin mostrar de lujuria o celos.
-Greta, Hahaue, Gwendal, a mi tío, a Konrad… Aunque odie admitirlo a Günter, lo veo como a un padre… Y una persona muy especial que entro dentro de mí y no logro que salga…
-¿Quién?
-No te lo diré, primero dime tú si alguien te gusta como a mí esa persona- Reclamo el rubio.
-Bueno… una chica de mi salón, se llama Minami, es extremadamente linda y sincera… Me gusta mucho.
El corazón del mazoku de fuego se fragmentó en miles de pedazos al oír esas palabras salir de la boca del pelinegro.
-¿Y te confesaste?- Dijo tratando de ocultar sus verdaderos sentimientos.
-Claro que no! ¿Como podría hacer eso? "que extraño, Wolf no está molesto…Debería empezar a gritar ¡Traidor! O algo así…"
-Pues deberías hacerlo no debes quedarte con la duda. Vamos Yuuri, iras a decírselo ahora mismo.
-¿Qué?
-No te preocupes, eres un chico apuesto así que no te rechazara y si lo hace sabrás que no era la chica correcta.
-"Wolf… ¿Estas sufriendo?"- pensó al ver una lagrima traicionera bajar por la mejilla del rubio…- Esta bien, vayamos. ¿Pero que le diremos a Gwendal?
-No te preocupes yo me encargo después. "Haciendo algo que a él le encantara".
-Wólfram…
-¿Si, aniue?
-Quiero que rompas tu compromiso con maou heika.
-¿Por qué?
-Porque él no te quiere, y yo no quiero verte sufrir.
-Lo pensare.
-Ok. Vamos, entonces.
Cuando llegaron a la casa del moreno, los dos estaban empapados y la madre de Yuuri se emociono por el hecho de que su futuro yerno fuera de visita.
-¿Y qué hacen por aquí?- Pregunto totalmente feliz la madre.
-Yuuri vino a charlar con una chica- Dijo con extrema felicidad, pero en sus orbes esmeraldas se notaba toda la melancolía que no quería reflejar.
-Wolf-chan ¿podemos hablar?- pregunto la madre del maou.
-Si, Miko-san.
Los dos se alejaron un poco y ya lo bastante lejos.
-¿Por qué haces esto?
-¿Qué cosa?
-Lo de Yuu-chan!
-Miko-san. Yuuri está enamorado de esa chica, y yo no quiero, no quiero que sea infeliz por mi culpa… por muy doloroso que sea para mi, se que a él no le gustan los chicos, y si me quedo con él, los dos sufriremos. Yo no quiero ser tan egoísta y hacer que Yuuri sufra.
-No sé si esto es lindo o es realmente estúpido.
-Compréndame, llevo tres años esperando respuesta y no la obtengo… Así que si el está enamorado y le gusta esa chica… Y es correspondido yo seré feliz, porque él es feliz.
-Qué lindo… Aun así es estúpido.
Volvió a la sala, y miro a su prometido.- Yuuri vámonos ya.
-"Wolf, estas triste… Soy tan idiota". Si… ¿Wolf estás seguro?
-¿Por qué preguntas eso? Tú eres el que se va a confesar no yo.
-No por nada.
El recorrido hacia la casa de la chica transcurrió en silencio, el rubio solo se enterró en sus pensamientos.
-"Yuuri, dejare que alcances tu felicidad, por favor no lo eches a perder".
-"Wolf, ¿estás muy triste? Todo es por mi culpa… Perdóname."
Llegaron a la casa de la chica, y el moreno se arrepintió.
-Yuuri, ¿eres capaz de comerciar con uno de los más malvados reyes pero no puedes hablar con una chica? Solo ve y toca la puerta.- Dijo un poco irritado, porque estaba entregándole la libertad a su amado en bandeja de oro y el la rechazaba.
-No puedo.
-Está bien. –Dijo el rubio acercándose a la puerta y dando suaves y delicados golpes tal y como su amigo lo haría- Suerte, Yuuri.- dijo antes de correr a esconderse detrás de un árbol.
-Hola. Emm… ¿Se encuentra Minami?
-Si ¿Quién la busca?
-Yuuri, Shibuya Yuuri.
-Ya vuelvo.
A los poco minutos, llego una chica alta, no estaba completamente desarrollada pero se podía distinguir su pecho, pelirroja y con unos hermosos ojos verdes.
-"Ella tiene unos ojos hermosos, es tan linda!"- Pensaba en moreno.
-Shibuya-kun. ¿Paso algo malo?
-No, solo pasaba por aquí y me preguntaba si querías pasear un rato conmigo.
-Ah, claro deja que vaya y me cambie. ¿Podrías esperar, Shibuya-kun?
-Claro.
Cuando la chica entro el rubio salió de su escondite, se dirigió al moreno y le dijo que iría a su casa, es que él no quería ver eso.
-Tu puedes hacerlo, Yuuri.
-Wolf, con todo esto olvide que tú no me dijiste quien te gusta.
-Ah! Si, Etto… me gusta un amigo. Si Yuuri solo eres eso, un amigo…
-¿El tal Joshua?- por alguna razón el maou se sentía totalmente celoso...
-Otro amigo. Luego te digo, adiós- Dijo y se escondió tras el árbol.
La chica salió, miro al moreno un rato y se acomodo a su lado.
-Shibuya-kun.
-Solo dime Yuuri, Minami.
-Está bien. Yuuri- Dijo mirando detrás del árbol los rizos dorados del rubio.
-Yo quiero decirte algo, bueno… A mi… Me gu…
El joven rey se encontró interrumpido por la chica que le planto un beso lujurioso en los labios.
-Me gustas. – Le dijo fácilmente…