Capitulo 12: Corazones enamorados…
Seto bajo su mirada entristecida, tapando sus ojos con su flequillo…
Gracias Salvatore…-murmura el castaño- puede irse, mañana le deposito el dinero…
Hasta pronto Sr. Kaiba….- el señor se retira de allí, el ceo se recuesta en su silla, hecha su cabeza para atrás, discretamente bajo una lágrima por su mejilla…
Cachorro…-susurra- ¿Dónde estas?....
*************EN ALGUNA PARTE DE “NINGÚN LUGAR” XD**********
*********************NAH MENTIRA, AFUERAS DE CIUDAD DOMINO****
Un rubio de ojos color miel, estaba sentado en un bus mirando por la ventana el paisaje rural de aquel lugar, mientras el suave andar del bus la hacia dormir, un pensamiento mudo y una imagen en su mente…
Una lágrima cayó lentamente de su mejilla…
Me iré de tu vida y más nunca sabrá de mi…-murmura- seto…
********************************************************
----EGIPTO----
2 Meses más tarde…
Cansado, agotado y con una gran depresión encima, se acostó en la cama, ya hacia dos meses que había buscado a yugi, por tierra y cielo, buscando en cada rincón, en cada esquina, ya eran 100 las personas a quienes les había preguntado…
Pero nada…
En su cuello se formó un nudo, no lo aguanto, ya no aguantaba las lágrimas, era mejor dejarlas correr, que guardárselas sufriendo en silencio…
Comenzó a sollozar sobre su cama, dejando sus lágrimas correr y correr, extrañaba mucho a yugi, no podía conseguir la vida sin el, todo parecía un abismo negro sin el, su lucecita, su angelito…
Se levanto de la cama, aun con lágrimas en sus ojos, tomo el control de remoto de su TV, tal vez si veía algo, se distraería un poco, prendió su tele, cambio algunos canales, pero… al reconocer una imagen entre los canales, hizo que retrocediera bruscamente sus canales…
No…..puede ser…-susurro mientras nuevamente lágrimas caían de sus ojos, en el canal trasmitía a su pequeño detrás de un podio, que lo tapaba del pecho para abajo (haciendo que su panza no se viese) dando una conferencia de prensa, al lado de un señor, el cual parecía un profesor…
Se veía abajo, en pequeñas letras “el profesor fujiwara de la universidad central de Egipto y su mejor estudiante yugi motuo…”
Motuo-san…-llamo una reportera- ¿Qué nos puede decir sobre los últimos descubrimientos arqueológicos?...
Diría que estos últimos descubrimientos van a darnos otro punto de vista sobre la historia de Egipto señorita…-respondió tiernamente el menor…
¡¡motuo-san, para la revista de arqueológica!!...-llamo un reportero- déjeme decirle, que usted es uno de alumnos mas destacados del profesor fujiwara, puedo preguntarle…¿A dónde ira después de graduarse?...
Iré a las ruinas de los mayas, he escuchado sobre grandes descubrimientos allí…-responde igualmente con esa misma sonrisa…
El moreno cayó de rodillas y comenzó a llorar fuertemente, pero no de tristeza, sino de alegría…
Mi niño, aun tienes tu bella sonrisa, yo no te la quite…cuanto me alegro…-murmura entre sollozos- mi niño, había olvidado tu imagen…-dice mientras mira la imagen del meno que aun sonreía…
Te amo…-acerca su mano y la pone contra la pantalla justo donde estaba el menor- ¡¡te amo y no te he olvidado!!...
Te he encontrado…-murmura con una sonrisa sin dejar de llorar- espero y me perdones… mi amado niño…
**********EN OTRO LUGAR****
Hime, ¿estas segura?....-pregunta le pelinegro mientras se arregla la corbata de su traje
Muy segura…-la pelinegra le da una rosa color amatista- dale esto y de seguro se sonroja…
Y como dijo marik-kun…a yugi-kun le encantada todo lo romántico, esta cena de seguro que estará bajo tus pies…-la pelinegra le guiña un ojo
*con yugi*
El menor se estaba arreglando un poco, aunque con su gran panza de 8 meses le era un tanto difícil hacerlo, pero aun así lo intentaba, por fin se arreglo su camisa manga larga negra, se miro al espejo, el embarazo lo tenía tan atareado, que dejo que su cabello se alisara, tanto así que ahora se lo recogía en una coleta alta.
Hoy… tenía una reunión con ahti, estaba tranquilo, ahti era un buen chico después de todo…
De repente su pequeño bebe, comenzó a patear, pero ahora más fuerte que las otras veces. Tanto así que hizo preocupar a yugi…
Hijito…-murmura mientras tomaba su vientre- ¿Qué sucede?...¿ya…es hora?