Cap. 22: Eres un idiota.
POV SungMin
Estaba teniendo una de las peores citas de mi vida, KyuHyun y yo íbamos perfectamente caminando por la vereda, ambos con gafas y algún sombrero, yóquey o gorro que ayudara a ocultar nuestra tan famosa identidad, me gusta que Super junior sea popular y que cada miembro tenga su grupito de Fans, pero que acaso no pueden pensar que si nos cubrimos el rostro con todas estas porquerías es porque no queremos que nos vean.
-¡Oppa!- gritaban las chicas alrededor de MI Kyu.
-¡Oppa saranghae!- como que saranghae, yo soy el único que de verdad lo quiere, que se cree esa chica.
-¡KyuHyun-Oppa!- comenzaron a juntarse más chicas, por suerte nadie había notado quien era yo, aun así que antes de que eso ocurra debo tomar cartas en el asunto.
-Oppa- dije algo avergonzado tirando de su camiseta –Oppa, vamos- por su expresión sé que se sorprendió al oírme decir eso.
-si- no puedo creer que haya caído con eso, los hombres son tan manipulables.
-¿Quién es?- se preguntaban las chicas de rostros pálidos entre ellas, se supone que las asiáticas son algo tímidas pero esas eran bastante salvajes.
Tome a Kyu del brazo, el solo me seguía la corriente, yo veía de reojo hacia atrás, las fans nos seguían, de seguro era por la curiosidad de saber con quién estaba su amado Kyu, como si el las quisiera, el solo me ama a mí y a nadie más que a mí, así que váyanse, les saque la lengua y en un movimiento rápido tome la mano de Kyu y comencé a correr, con mi otra mano sujetaba mi sombrero, si esas chicas se enteran de que era yo, la internet, la radio, la prensa y todo el mundo estaría hablando de ello.
Sentí un Flash, de seguro están sacando fotografías, intente ir un poco más rápido, ya no me importaba si Kyu iba corriendo con migo o iba arrastrándose contra el pavimento, no dejare que arruinen mi cita, aunque debo decir que esto es un poco divertido.
-Por aquí- escuche a Kyu y luego comencé a ver como se me adelantaba ahora el tirándome a mí, seguimos corriendo hasta que en menos de un segundo KyuHyun nos lanzó hacia un lado, quedándonos en un callejón oscuro mientras veíamos como las chicas pasaban corriendo sin darse cuenta de nuestra presencia.
Solté su mano y me apoye en mis rodillas dejando caer junto al sudor que corría por mi rostro el gorro y los lentes que cubrían mi identidad, intente calmar mi respiración al igual que lo hacia Kyu apoyando su rostro contra la fría pared, que de seguro debe estar llena de polvo, como no le da asco.
-vamos- dijo quitando su mejilla de allí, yo solo me atreví a sacar un pañuelo de mi bolsillo y a pasárselo por el rostro.
-Listo- exclame luego de limpiarlo, estaba a punto de quitar el pañuelo cuando Kyu tomo mi mano, su rostro se acercaba lentamente, hasta llegar a mis labios, correspondí su beso, por dios de verdad lo amo.
“Flash” sentí de nuevo ese sonido, mire hacia un lado, una chica con una cámara. Mire a KyuHyun tenía la misma expresión que yo, solo que en un segundo puso una sonrisa, soltó mi mano y llamo a la chica.
Ella se acercó lentamente, como si tuviera miedo, Kyu le pidió amablemente que borrara la fotografía dándole a conocer que si alguien se entera de esto Super junior podría ya no existir, la chica estaba nerviosa e indecisa, Kyu le ofreció una foto de nosotros dos junto a ella y un autógrafo de cada uno, la chica acepto feliz.
Yo le pedí que guardara el secreto, ella acepto y con una sonrisa en el rostro se fue luego de que nos mostrara como borraba la evidencia de nuestros pecaminosos actos, la vimos irse feliz junto con una cámara en la mano, su mochila con el cuaderno que contenía los autógrafos y mi gorro.
--eso fue intenso- suspire.
-sí, pero fue una suerte que fuera una fan buena y no una mala o anti fan-
-cierto-
el día concurrió normal, como ya no tenía mi gorrito no podía actuar cute con Kyu, fuimos hasta el centro comercial, como amigos, ahora pienso que fue un estúpido error haberle dado ese gorro a la chica.
El único momento hasta ahora en donde puedo estar a solas con él es en una de esas cabinas en donde uno se saca fotografías, antes de meter el dinero bese a KyuHyun, lo bese una y mil veces, no sabía si tendría otra oportunidad en nuestra cita para besarlo de esta forma, aunque podría comprar otro gorro pero que importa ahora si puedo estar besándolo en este mismo momento.
-SungMin…- susurro sobre mis labios, apego mi cuerpo al suyo, por dios no puedo creer que estemos así aquí, que clase de pareja somos, primero en la casita y ahora aquí.
-Kyu, no… aquí…- porque su lengua se siente tan bien sobre mi cuello.
-debes guardar silencio- susurro contra mi oído, mordí mi labio para poder omitir ese gemido que quería salir al sentir su mano bajando por mi pecho. Se coló en mi pantalón, moviendo su mano, masajeando mi miembro cada vez más rápido, la tela del bóxer comenzaba a molestarme cada vez más. Aun intentando no gritar moví mi rostro a su cuello, comencé a besarlo llegando a sus labios, Kyu me sentó sobre una pequeña banca que se encontraba en ese pequeño lugar, KyuHyun bajo hasta mis pantalones, ¡así quiere que no grite!, por dios su maldita lengua está pasando por todo mi miembro, el sonido que producía su boca era tan excitante, me quite la camisa y la mordí, no podía aguantar más tenía que gritar.
-a...- antes de emitir un sonido que se pudiese escuchar fuera de este pequeño lugar Kyu puso su mano sobre mi boca, para luego besarme con el sabor de mi semen, de cierta forma es hasta un poco asqueroso pero en este momento y en esta situación no puedo pensar en algo así.
-Min…- Me levanto y poniéndome contra la cámara se puso tras de mí, bajo con cuidado mi pantalón junto con mi bóxer, ya sabía que venía en este momento, abrí mi boca esperando sus dedos, pero no sentí nada, solo algo colándose en mi entrada, mire lo más que pude hacia atrás, ¡era su lengua! Separaba mis pompis con sus manos y luego metía su lengua –tienes el trasero muy grande- comento con una sonrisa lujuriosa –pero me gusta- luego de meter sus dedos Kyu se levantó y bajando levemente su jeans negro junto con su bóxer apretado del mismo color saco su enorme cosa y la comenzó a meter lentamente, tomo mi rostro y lo beso, impidiendo que yo gimiera con cada estocada, de pronto llevo una de sus manos hasta su bolsillo, le costó un poco encontrarlo pero cuando pudo, del saco cierta cantidad de dinero, comenzó a meter el dinero en la máquina, aun embistiéndome, apretó un botón y esa cosa comenzó a sacar fotografías, KyuHyun puso una cara de maldad mientras con una mano tapo mi boca y con la otra sujetaba mi cadera, yo solo podía poner mi expresión de placer, después de todo eso era lo que en ese momento sentía, Kyu es un pervertido.
Después de todo lo que paso, salimos del lugar, obviamente ordenamos e intentamos limpiar todo, Kyu saco las fotografías.
-quieres verlas- pregunto poniendo una sonrisa.
-no- dije avergonzado.
-te ves bien, mira- me puso las fotografías frente a mí, no quería verlas pero por dios parecíamos sacados de película porno.
-eres un pervertido-
-las guardare por siempre- vi como sacaba su billetera y las guardaba allí, es un pervertido.
POV Hyukjae
-¿estás de broma?- pregunte, mi respiración empezaba a agitarse.
-no, Hyukjae… Eunhyuk, tú ya no te me acerques mas-
-¿pero…-
-te digo que no- intente acercarme a el- ¡no me toques!- comencé a llorar.
-¿Hae?- me dio la espalda.
-vete-
-¡pero DongHae!-
-pero nada, entiende que no te amo- dijo con voz firme, podía sentir como aquellas palabras atravesaban mi corazón. No dije nada más, solo me apresure a salir corriendo del lugar, ya no quería seguir ahí, al abrir la puerta estaba Yesung junto con RyeoWook, yo solo los ignore.
-¿Qué paso aquí?- escuche que dijo Yesung, antes de seguir escuchando salí del apartamento, corrí por los pasillos aun cuando la ajuma me dijo que no lo hiciera, seguí y seguí corriendo, bajando las escaleras, mientras secaba mis lágrimas con la el cuello de mi camisa, al soltarla podía sentir ese cálido liquido apegándose a mi piel.
Salí por la puerta principal, sin importarme quien me viera seguí corriendo, algunas fans me veían, de seguro preguntándose el porqué de mi estado. Pero que importaba, ya no importa nada, nada.
Seguí corriendo por Seúl, seguí hasta que mis piernas no pudieron mas, dejándome caer de rodillas sobre el pavimento, dándome a entender que sin el yo no odia hacer nada, siquiera podía llegar hasta un lugar digno para descansar.
Intente levantarme, lo intente pero no pude, mis lágrimas no cesaban, caían como si de lluvia se tratara, mire el pavimento, aquellos rastros de lágrimas que se habían infiltrado hasta quedar solo una pequeña, húmeda y salada mancha.
Podía ver como varias personas se detenían para mirarme, nadie me tocaba, ni hablaba solo miraban y sacaban fotografías, pueden tener una imagen de esto pero sé que esa cámara nunca captaría los verdaderos sentimientos, el verdadero dolor que en este maldito momento estoy sintiendo.
Ya recuperadas mis fuerzas, o al menos las suficientes para mantenerme en pie, comencé a levantarme, las personas me miraban, las jóvenes iban a acercarse a mí, pero al ver mi rostro lloroso muchas comenzaron a llorar, otras solo retrocedieron mirando con caras tristes. Seguí caminando ignorando las miradas, crucé la calle hasta llegar a un pequeño parque, me senté en una pileta de agua, que importaba si algunas gotas caían sobre mí, que importaba.
Apoye mis manos sobre mi rostro, tapando mi rostro, dejando que aquellas gotas se deslizaran por ellas y ahora venía lo único que faltaba en mi situación, lluvia, ¿Cómo era posible que el cielo comenzara a llorar conmigo de esa forma? ¿Acaso quería tapar mis lágrimas con las suyas? Mire el cielo, recordé aquella canción, “A Short Journey”
-“mientras estoy en el frio, el sentimiento de tus cálidas manos sigue en mi”- comencé a cantar en un hilo de voz –“todos los rastros de ti se convierten en lágrimas que permanecen en mis mejillas”- No podía creer el parecido que tenía esa canción en este momento, aquellas pequeñas frases que me hacían recordar aquel dolor.
Sobre todo por una- “mientras la lluvia me moja tratare de ocultar las lágrimas que caen”-
Baje nuevamente mi rostro, pensando en aquel momento de felicidad, ese que solo había sido ayer, si ayer era la persona más feliz del mundo ¿Por qué hoy soy la más triste?
Mis manos temblaban, al igual que todo mi cuerpo, busque mi teléfono celular para ver la hora pero como soy, lo olvide en casa, el cielo aun, a pesar de las nubes que lo cubrían, estaba claro. La lluvia de verdad disimulaba mis lágrimas, mire a mi alrededor cuando un chico con gorro celeste se acercó empapado luego se fue a no sé dónde así que no me importo, seguí mirando y vi a dos chicos, hombres, uno protegiendo a otro de la lluvia, sonriendo mientras lo hacía, quitándose la chaqueta y poniéndosela al otro, a pesar de estar congelándose su sonrisa seguía en él, solo por ver a la persona que quiere estar bien, estar cómoda.
Seguí observando había una chica y un chico, ambos bastante jóvenes, la chica acababa de llegar con un paraguas mientras que el chico estaba empapado. De seguro la estuvo esperando bastante tiempo, pero no se enojó, al contrario, al verla su sonrisa se hizo más que clara.
-me alegro de que estés bien- escuche, estaban bastante cerca de mí.
“la única regla en el amor es que tu amado sea feliz”
Recordé esa frase, de una película, ¿significaba eso que si DongHae era feliz, yo debía ser feliz, que si él estaba bien yo también podría estar bien?...
Mis pensamientos me hacían creer que comenzaba a rendirme ¿Hyukjae rindiéndose? Para mi suena algo imposible pero en este momento el amor por DongHae comenzaba a ganar, no, él siempre había ganado, siempre, en cada momento, siempre pensaba en él, en su sonrisa, en su infantil personalidad, en esos ojos, en todo su ser, siempre.
¿Qué tanto puede una persona estar enamorada de otra? Siempre me he preguntado eso, y siempre he llegado a la misma conclusión, no hay límites, cada momento que pasaba con el me hacía adorarlo, quererlo y desearlo aún más, cada segundo mi vida cambiaba aún más, solo por él, solo por DongHae.
Sin darme cuenta había parado de llorar, el cielo no pero yo sí, eso me daba a entender que era una señal de que mis pensamientos eran correctos.
Debía dejar a DongHae, debía… enterrar aquel amor aunque se me partiera el alma de dolor, debía dejarlo ser feliz alado de la persona que el… de verdad ama más que a nada en el mundo, como yo a él.
POV DongHae
Me fui de la habitación, me dolía ver a Hyuk así, pero luego de pensarlo muy cuidadosamente comprendí que aquello que sentía por Hyukjae no era nada más ni nada menos que admiración, amor de amigos, de hermanos y más que nada una tonta ilusión que termino revolviendo mi cabeza poco a poco.
Comencé a llorar cuando lo vi a él, después de todo, el de verdad me amaba, me ama y yo solo le ice ilusiones, le dije que lo quería, que lo amaba falsamente, me sentía como un idiota, como un maldito estúpido, era una basura por haberle hecho eso.
Salí del apartamento luego de haber limpiado mi rostro, aun se veía algo rojo pero logre tapar la mayor parte con un poco de maquillaje. No supe cuánto tiempo estuve caminando por ahí, por suerte tape mi rostro con un gorro y unas gafas, así nadie me molestaría. El frio comenzaba a notarse cada vez más, las nubes de pronto nublaron el día y comenzaron a dejar caer gotas de lluvia, seguí caminando hasta llegar a un pequeño parque, no había mucha gente, un chico que se encontraba solo y miraba su reloj cada segundo, dos chicos que charlaban mientras se tapaban de la lluvia y uno sentado en la pileta de agua con la cabeza agachada, ciertamente no me importo nadie, me puse al otro lado de la pileta, algunas gotas de agua caían sobre mí pero se mezclaban con las de la lluvia así que casi no las notaba.
-qué lindo último día- me dije a mi mismo en un susurro. Mire los árboles, una hoja cayo en mi frente quedándose hay, quieta, la deje estar, por alguna extraña razón izo que me concentrara mas en ella que en todo lo demás, como si con ella misma hubiese tapado temporalmente mis preocupaciones, la deje hay hasta que una pequeña brisa se la llevó hasta caer al piso.
Sentí que alguien corría y mire a mi alrededor, una chica de rostro pálido, cabello negro y con un paraguas se acercaba a lo que más le daban sus piernas a aquel chico que antes vi mirando su reloj, podía ver claramente como la chica se inclinaba pidiéndole disculpas hasta que el chico la abrazo –me alegro de que estés bien- dijo el, seguramente estaba preocupado… al igual que Hyuk en aquella vez que me perdí y el llamo a Leeteuk llorando porque estaba preocupado por mí.
Me quite el gorro, ya estaba muy mojado y había empapado mi cabello, así que no importaba. De que las gotas fueran cayendo por mi cabello a medida que se juntaban con otras, eso era todo lo que veía en el momento. Recordé el aroma de Hyuk, para mí, aún sigue siendo el mejor del mundo, deberían hacer un perfume con él, aunque los chicos digan lo contrario.
Sentí que mi celular vibraba, para luego comenzar a escuchar la pegajosa melodía de Sorry sorry, mire mi celular y era Teuk-Hyung
-“¿Dónde estás?”- me pregunto con tono preocupado.
-en el parque- dije.
-“¿ocurrió algo?”-
-¿Qué te dijo Yesung?- pregunte, era obvio que ya sabía.
-“luego hablaremos de eso”- suspiro –“¿sabes la hora que es?”- cambio su tono de voz por uno más serio, quizá hasta aun poco enojado.
-no-
-“pues en unas horas el vuelo de Henry y de Zhoumi se ira así que ven a casa ahora, si estas con Hyu…”-
-no estoy con el- dije secamente interrumpiéndolo.
-“ya veo, ven ahora mismo”- finalizo y corto, sé que ese ya veo es porque sabe que la cosa es con Hyukjae.
POV Hyukjae
sentí un tipo de música, me di la vuelta para ver de qué o de quien se trataba, por alguna razón los humanos somos así, cuando algo ocurre, o algo suena arruinando la paz, nuestra curiosidad nos impulsa antes de que podamos pensar, nos movemos instintivamente hacia ese lugar, vemos lo que ocurre aunque en el fondo no nos interese realmente. Pero por alguna razón el destino a veces nos manda señales como esas para que veamos ciertas cosas que están lejos de cierta manera pero a la vez tan cerca. En este momento era el, era DongHae, se encontraba sentado de espaldas en la misma pileta que yo, los chorros de agua nos separaban el uno del otro y la posición en la que ambos estábamos nos impedía ver nuestros rostros, tomo su celular y contesto.
Por lo que pude escuchar hablaba con Teuk-Hyung, en unas horas tendríamos que ir a dejar a Zhoumi y a Henry al aeropuerto.
-no estoy con el- escuche, se oía serio ¿de quién estará hablando?... ¿será de mí? Significa que aún no nota que estoy aquí.
De reojo con mucho miedo a que me viera vi cómo se levantaba y comenzaba a caminar, gira mi rostro hacia un lado para que no me viera, luego de ver que ya estaba lo suficientemente lejos me levante y aun con los chorros de agua que caían de la pileta vi como algo se posaba sobre el otro lado, me acerqué al lugar viendo el gorro de DongHae, estaba muy mojado, la lluvia que aun caía se filtraba en él, lo tome con delicadeza y lo puse cerca de mi rostro.
-este…- exclame para mí mismo – no es de DongHae… es mío- era mi olor, aun después de lo que me dijo, sabiendo que me lastimo utiliza mis cosas así nada más… y luego las deja tiradas como si no le importara.
Es un idiota…
Continuara…
