COSAS DE FAMILIA: Cosas Tuyas y Mias.
La reunión había terminado con unos espectadores murmurantes, una Hokage queriendo reírse, un Uchiha sin sexo por casi un mes de seguro, un Uzumaki furioso y unos Kotone y Kanade anotados en la lista de participantes con un signo de interrogación al lado de sus nombres.
Naruto ni siquiera se había molestado en brincar de techo en techo o hacer un jutsu para volver rápido a casa, prefirió caminar bajo la lluvia fría para que se le bajaran los humos de la pelea que había tenido con el azabache.
- Pero mira que decir que mis hijos no valen la pena - farfullo molesto - son MIS bebes, no los suyos...bueno, si son suyos pero son mas míos que suyos. - se dijo a si mismo para darse confianza. Alzo la azulina mirada para observar como el barrio Uchiha se erguía frente a él, sombrío y oscuro, trago saliva. - Odio cuando no hay luz aquí, porque el bastardo no arregla las luces?
- Quieres que te acompañe a casa? Naruto. - el rubio dio un brinco mirando hacia las sombras donde había salido la voz - tranquilo, soy yo. - murmuro mientras salía y la poca luz le dio en la cara revelando el joven rostro de Ichiryuu
- Me...asustaste, que haces despierto? - pregunto mientras caminaba al lado de el intentando concentrarse en las pisadas del menor
- Me dijiste que Kanade y Kotone estaban bien, así que salí a caminar y te vi, que raro que padre no venga contigo. Paso algo?
El rubio le volteo su rostro con rapidez en su dirección y negó
- Claro que no, porque preguntas eso? -
- Paso algo - afirmo el bruno - que hizo padre esta vez?
Naruto bajo la vista y pateo una piedra, sus manos estaban en sus bolsillos y las retorcía con nerviosismo - fue por la junta de hoy sabes? La quinta dijo que los gemelos deberían entrar al examen chunnin de este ano, tu padre dijo que estaba bien... - murmuro - enviar a nuestros hijos a morir en esa cosa...
Ichiryuu se quedo serio como siempre, la mirada del rubio denotaba cuan triste, no enojado, triste, estaba con el Uchiha mayor, el también podía sentir algo, pero al mismo tiempo había sido educado para no hacerlo
- Padre... siempre ha sido así, y tú lo sabes, lo conoces más tiempo del que yo le conozco. - Uzumaki le miro con curiosidad - es posible que lo que dijo, fuese lo que fuese tiene un matiz de verdad, pero también... el nunca ha sido retado o puesto a error por otra persona, sus cannones de supervivencia son los que lo mantuvieron vivo todo este tiempo, el más fuerte sobrevive - termino con un murmullo y luego salto al tejado de la casa desapareciendo
- Que extraño chiquillo -
- Lo es no es cierto? -
Volteo con el ceno fruncido para encontrarse con Sasuke y luego se saco las sandalias para entrar a la casa
- Tu, no me hables. - espeto molesto.
- Vamos Naruto! no fue para tanto... - el bruno intento persuadirlo imitándolo y sacándose las sandalias también para entrar
- No fue para tanto?! no fue para... por dios, tu sí que eres increíble Uchiha, en serio, eres... - levanto las manos y luego bufo - sabes qué? olvídalo, olvídalo, hoy duerme tu solo, yo me iré con los gemelos.
Y diciendo esto el rubio se dio media vuelta y subió las escaleras esperando que con ajetreo sus hijos no se hubieran despertado, se dirigió a la habitación principal para recoger el pijama que siempre usaba y un par de almohadas. Cuando se disponía a salir el bruno le estaba tapando la puerta
- Quítate Sasuke - le pidió mirándolo fiero - anda, muévete que tengo frio.
- Entonces vamos a la cama - le pidió el otro, jalando las almohadas para quitárselas - anda.
- No. Aléjate de mi, bastardo insensible -
Esa fue la gota que derramo el vaso, Sasuke siempre se había controlado porque era el Uzumaki, el chico del que se había enamorado hacia casi 20 anos, pero no, el rubio siempre quería hacer su santa voluntad, siempre.
- Insensible dices...? insensible... acaso fui insensible al decir lo que dije en la junta? fue la verdad, lo que tú y todos saben, sean o no tus hijos son ninjas, desde que nacieron están destinados a ser ninjas y morir como tales.
- No es cierto! aun son niños, tienen que crecer y madurar y hacer todo a su tiempo, no permitiré que solo porque tienen sangre Uchiha los trates como tu padre te trato a ti!
- No metas a mi padre en esto Naruto, el no tiene nada que ver
- Claro que tiene que ver! Kanade y Kotone no se meré-
El sonido de la puerta rechinando los hizo dirigir sus miradas a estas para descubrir a los gemelos colgados del picaporte y con los ojitos llorosos
- Papi pelea? - gimoteo Kotone y luego camino torpemente, debido al sueño, a los brazos de su rubio padre quien lo cargo y salió de la habitación sin más, no le dirijo la mirada al moreno y tampoco pudo ver el gesto de suplica que este tenía. Simplemente cerró la puerta y se interno al cuarto de los pequeños.
- Tan difícil es decirle a Naruto que lo sientes? - Sasuke no tuvo que voltear para saber quién era, Ichiryuu estaba colgado de cabeza en la cornisa de la ventana y tenía un brillo de diversión en los ojos, que se acentuó cuando el azabache mayor volteo la cara enojado y se esfumo, sin decir palabra al respecto.