2.vagas respuestas
Era un día realmente lindo, podía sentir el aire en su rostro, por fin había abandonado aquel hospital, no soportaba estar sin hacer nada y mucho menos dentro de un lugar así.
-vamos hermano- El mencionado simplemente asintió. Al había sido el responsable de ir por él, puesto que apenas y lograba recordar su nombre.
Llegaron a una casa de dos pisos, blanca con varios arbustos alrededor, se podía sentir un ambiente un tanto familiar, Ed quedo asombrado al observar aquel lugar, ¿ese era su hogar? Se lo imaginaba un poco más pequeño, puesto que le habían dicho que solo vivía con su hermano.
-bueno hermano, hemos llegado-Al decía al momento en que tomaba a Ed del brazo para adentrarse a la casa.
“Bienvenido” era lo que decía un cartel colgado en la sala sorprendiéndolo al ver que además de la pancarta estaban Roy, Riza, Maes y Havoc esperando a que el chico reaccionara.
-bueno Ed di algo- Bromeaba Maes recibiendo un pequeño codazo de Riza.
“Gracias”- fue todo lo que escribió en su libreta, sinceramente no sabia como hablar con esas personas. Técnicamente apenas las conocía.
-si bueno, para eso estamos los amigos-Riza decía mientras que le daba un abrazo a Edward, sentía extraño el no poder escuchar la voz del chico, pero tenían que esperar.
-pero vamos por que todo en silencio, al menos un poco de música ¿no creen?- Maes daba una gran opción que Al decidió apoyar.
-me parece una gran idea, mi hermano ha regresado, y no quiero que esto este silencioso-
Se podía escuchar una tonada algo ligera pero no aburrida que le daba un buen ambiente al lugar. Ed había decidido acercarse un poco a Roy, para tratar de recordar un poco, Roy se encontraba sentado en un sillón, cerca de la ventana pensando solo él sabrá que.
-“hola”- Ed estaba frente a Roy quien miraba sin mucha atención lo que le chico había escrito.
-hola- Roy volvió su mirada a la ventana, se le veía algo deprimido. El rubio de igual forma dirigió su mirada a la ventana para tratar de ver que era lo que tenia tan entretenido al pelinegro.
-“¿qué es lo que ves?”- Ed en verdad tenía curiosidad por saber que entrenía tanto a Roy.
-¿hum?... nada simplemente pienso-no tenia muchas ganas de hablar y mucho menos con él, pero el rubio era insistente.
-“y ¿en que piensas?”- quería entablar una conversación con él pero el pelinegro parecía no querer cooperar.
-específicamente en nada-
-“si no estuvieras pensando en nada, no estarías tan ausente”-
El chico tenia un punto, pero ¿qué podría decirle? que se sentía decepcionado de él, por haber olvidado todo.
-no piensas darte por vencido ¿cierto?- el menor negó, en verdad tenia muchas ganas de hablar con el pelinegro, quería que lo ayudara a recordar un poco.
-entonces ¿por qué mejor no te sientas?- Edward se sentó a un lado de Roy, perfecto había dado un paso pero ahora ¿de qué hablaría con él?
“¿Con qué empezar? ¿Qué podría preguntarle?, Genial Edward vienes a hablar con él y ahora resulta que no sabes que decir” Ed se recriminaba mentalmente.
-“¿cuánto tiene que me conoces?”- bien después de tanto batallar, una pregunta coherente había logrado formarse en medio de tanto caos.
-es gracioso decirle eso a una persona que te conoce desde hace mucho tiempo- decía Roy sin mostrar ninguna emoción a la pregunta del rubio -o ¿no lo crees así Ed?- la mirada del mayor estaba sobre la del rubio. ¿Habría logrado su objetivo? ¿Habría ayudado a Ed a recordar algo?
“Tiene una forma de contestar tan seria, pero siento esa respuesta tan familiar, Roy ¿qué relación tenia contigo?”. Tanta confusión, tantas preguntas ¿cómo era posible que una sola persona soportara eso?
-Ed, ¿estas bien?-El rubio tenia sus dos manos en la cabeza, vaya que escuchar al pelinegro le había afectado, con una sola respuesta y ya había provocado que su mente se volviera loca -¿Ed?- Roy comenzaba a mostrar preocupación, Ed no hacia ninguna muestra, seña o algo que le dijera que estaba bien o al menos lo escuchaba.
“¡¡ED!!¡¡ ¿TE ENCUENTRAS BIEN?!!¡¡VAMOS DIME ALGO!! ¡¡REACCIONA POR FAVOR!!”-el sonido sé hacia vago, el grito poco a poco fue desapareciendo.
“-dime ¿te encuentras bien?... ese tipo de preguntas sobran Edward”- ¿preguntas? ¿Qué preguntas? ¿Por qué recordaba eso justo en ese momento?
“seria gracioso contestarte puesto que me conoces desde hace tiempo”-
Todo quedo silencioso poco a poco volvió a su “realidad”, comenzó a diferenciar la música y la voz de sus invitados enfocando su sentido en una sola voz.
-Ed, dime ¿te encuentras bien?-Roy tenía agarrado al chico de los brazos como muestra de que lo había movido un poco.
Ed lentamente abrió sus ojos tratando de reconocer donde estaba, por alguna razón había recordado todo eso con la simple respuesta de Roy.
-¿estas bien?-dirigió su mirada al mayor asintiendo lentamente. -Vaya, no me des esos sustos-Roy se recargaba en el sillón con alivio -recuerda que acabas de salir del hospital, y en cualquier momento puedes tener una recaída.
-“tranquilo, estoy bien”- Ed le mostraba la libreta a Roy, el pelinegro realmente odiaba esa libreta, esperaba con ansias el día en que pudiera arrojarla a la basura, pero sabia que para eso tenia que esperar.
Ya llevaban bastante tiempo en aquella casa ya era hora de partir, el cielo comenzaba a tomar tonos rojizos cada vez más notables avisando que la noche pronto llegaría.
-bien, ya es tiempo de que me vaya- riza decía estando en la puerta junto con Maes y Havoc.
-si ya es tarde, tengo que ir con Gracia y Elysa-decía Maes con mucha emoción, por alguna razón ese sujeto se emocionaba cuando hablaba de su hija.
-bien vamos Maes- ambos salieron de aquel lugar después de despedirse.
-bien, parece que también tengo que irme-Havoc el único que había quedado ahí aparte de Roy y ambos rubios, decía sin interés.
-¿nos vamos Al?-“¿qué? ¿Al también se iba?” Ed miro con sorpresa al rubio menor ¿Por qué se iba?, ¿Qué no se suponía que su hermano menor vivía con él?
-si-el menor asintió mientras veía como Ed escribía algo en su libreta bastante apresurado.
-“significa ¿Qué me voy a quedar solo?”- Tenía una gran curiosidad para que negarlo ¿acaso se quedaría solo en aquella casa, sin recordar nada? Al si que estaba loco.
-no hermano, tú no te quedaras solo- ¿no lo haría?, entonces ¿con quién se quedaría?
-yo me voy a quedar contigo- Roy mostraba un ligero sonrojo en sus mejillas, vaya que ahora le sería muy complicado vivir con Ed.
“¿Roy?” su oportunidad se había presentado, si lo tenía cerca posiblemente le sacaría mas información.
-bueno hermano me voy- Al le decía a su hermano mayor mientras se ponía a lado de Havoc.
-“¿ustedes son pareja?”- Ed era curioso y aquel trio lo sabía, pero a veces era muy directo.
-¿qué?, no hermano estas mal-
-Al vive en el departamento siguiente al mío-En el rostro de Ed se mostraba ahora alivio y ya aclarada la situación ambos rubio se marcharon dejando a Roy y Ed solos.
-ya es tarde Ed, deberíamos dormir- El menor negó, tenía muchas preguntas y quería respuestas.
-Ed sé que quieres respuestas, pero tienes que ser paciente mañana hablaremos ¿de acuerdo?- Roy se veía deprimido y cansado, aunque un poco feliz al estar junto al chico y a solas.
De mala gana Ed termino accediendo, más al subir a la habitación se sorprendió de cierta manera, había una cama matrimonial y 2 hombres en casa, tenía que ser una broma. Roy no sabia exactamente que hacer, quería compartir la cama con Ed como lo había hecho 3 meses atrás pero Ed todo eso lo había olvidado.
-dormiré en el sofá y tú te quedaras en la cama- decía mientras comenzaba a buscar cobijas, el rubio se sentía culpable Roy estaba dispuesto a dormir en el sillón a pesar de que era su cama.
Sin pensarlo tomo el brazo del mayor captando la atención de este -¿Qué sucede?- Roy estaba a punto de salir del cuarto cuando el menor lo detuvo.
-“tendría que ser yo el que durmiera abajo”- ¿Cuando había escrito eso?, ni él lo sabia pero ahora se lo mostraba al pelinegro. Roy sonrió ante esto y acaricio la cabeza del rubio.
-nada de eso, acabas de salir del hospital, estaré bien tú solo descansa- el pelinegro cerro la puerta tras de sí, después de despedirse de Edward.
Algunas veces le gustaba la soledad pero en ese momento no le parecía tan agradable, mas no podía hacer nada, esperaría hasta mañana. Necesitaba respuestas y con mucha urgencia y necesitaba aun mas de su voz, pero solo le tocaba esperar a que ambas cosas llegaran.
8:00 a.m. era lo que marcaba el reloj que se encontraba en el buró a un lado de la cama. ¿Sería buena idea quedarse o sería mejor bajar? Ed tenía una batalla interna, los nervios lo mataban por dentro pero ¿Qué debería hacer exactamente?
¿Si bajaba y Roy aun estaba dormido? No quería despertarlo, pero tampoco podía permanecer en la cama más tiempo, le desesperaba el hecho de no hacer nada.
5 minutos, era lo más que podía soportar, esperaría 5 minutos si Roy no subía el bajaría al menos para encontrar con que entretenerse.
8:02 AM. ¿El reloj tenía algo en su contra o que pasaba?, el tiempo iba muy lento y eso lo desesperaba, se quedo atento observando aquellos números mientras el 2 era substituido por un 3, ¿realmente podía soportar 5 minutos?, ya comenzaba a dudarlo.
8:05 AM. Al fin, los 5 minutos había pasado, lo había logrado. “bien, bajare estoy aburrido”, un sonido que provenía de su estomago lo hizo sonrojarse un poco “aparte estoy hambriento”.
Lentamente bajaba las escaleras, se dirigió a la sala, para poder visualizar mejor a un Roy que aun seguía dormido, sin claras intenciones de despertar.
“no es tan temprano, pero aun así tampoco es tan tarde como para ya despertar”, se decía Ed más el ruido de su estomago le hizo recordar su siguiente objetivo, la cocina.
Al entrar al lugar pudo observar que estaba bastante limpia, si bien recordaba el día anterior había quedado hecha un desastre, comenzó a buscar algo para poder desayunar. Decidió preparar huevos estrellados, tratando de no hacer mucho ruido para no despertar a Roy.
Se encontraba arriba tendiendo la cama, “sería mala educación, que aparte de que me dejo dormir en ella deje un desastre”, pensaba Edward. Roy comenzó a despertar, tenía hambre y por eso no pudo dormir más, se dirigió a la cocina, se sorprendió al ver el desayuno ya servido, por así decirlo al parecer Ed había preparado más del que se podía comer y decidió dejarle el suyo a en la mesa, ya preparado.
-siempre ha sido lo mismo contigo- sonreía mientras se dirigía al baño, antes de desayunar debía al menos arreglarse un poco.
Ed se dirigía a las escaleras justo en el momento en que Roy salía del baño, solo con el pantalón que tenia puesto ayer.
-a Ed ¿dormiste bien?- Decía sosteniendo una toalla en su cabeza.
Ed asintió mientras un ligero sonrojo amenazaba con salir a flote, después de contestar comenzó a bajar las escaleras, no quería quedarse ahí y demostrar el color rozado que sus mejillas habían adoptado.
Roy bajo poco después de aquel encuentro, se dirigió a la cocina a “devorar” el platillo que Ed había dejado para después dirigirse a la sala donde se encontraba el rubio leyendo un libro que le había llamado al atención.
-¿te entretienes?- Roy provoco en Ed un pequeño susto, no quería tomar aquel libro pero le había llamado mucho la atención, trataba mas que nada de química, un tema que al rubio le apasionaba.
Ed aun con el “corazón en mano” asintió, dejando el libro en el sofá.
-me alegro. De hecho ese libro siempre ha sido tu favorito.
“¿siempre?” al parecer Roy estaba dispuesto a ayudarlo a recordar y sin avisarle al rubio que ya había comenzado.
-bien Ed ¿querías respuestas no?, lo que no se es exactamente como comenzar-Roy se había sentado en el sillón que estaba frente a Edward, al parecer dejaría que el chico preguntara y el solo se limitaría a contestar.
-“¿Cuánto hace que me conoces?”-Ed había comprendido el mensaje y decidió ser el que en parte comenzara.
-difícil pregunta Ed, sinceramente no recuerdo cuanto tiene que te conozco pero si se desde cuando vives conmigo.
¿Vivir con él?, esa respuesta lo había dejado sorprendido, él estaba viviendo con Roy y no con Al cómo le habían dicho?
-“¿vivir contigo?”-
-Si, llevas viviendo conmigo 3 meses-Una sonrisa algo picara salió de los labios de Mustang, Ed comenzó a escribir con velocidad en la libreta vaya que se había puesto nervioso.
-“¿qué tipo de relación teníamos?”-hasta la pregunta sobraba y el rubio lo sabia pero quería o esperaba que se equivocara.
-pues creo que es algo obvio- una gota bajaba por la cabeza de Roy. -pero bueno, no sé qué término usar – decía mientras se rascaba la mejilla y tenía una risa nerviosa, es que como tenía que decirlo. ¿Éramos ó somos?
No sabía que decir, vamos solo tenía que decir cuál era la relación que tenían “¿Qué tenemos? ¿O que teníamos?”, Ed pudo comprender a que se refería Roy, pero técnicamente había pasado y él no había terminado con nada.
-“¿qué tipo de relación tenemos Roy?”-Ed había tachado la palabra teníamos y había puesto tenemos, al parecer no quería terminar con algo que Roy aun quería mantener, y para que mentir ,la curiosidad flotaba en el aire y quería vivir aún como si hubiera algo más entre él y Roy.
El mayor sonrió, le agradaba la idea de que Ed no quería romper la relación.
-una relación amorosa, somos amantes- tranquilidad, era lo que reflejaba al poder decirle a Ed que sentía por él no literalmente pero ya no se sentía con tanto peso.
“¿amantes?”. De nuevo su cabeza comenzó a doler y escenas un poco más visibles que las 2 anteriores llegaban a su mente.
“Ed voy a estar contigo todo lo que el tiempo me permita” “Roy, te necesito a mi lado, te quiero a mi lado”, la escena de un beso, fue lo que llego a sus recuerdos.
No pudo evitar ponerse completamente rojo ante esas imágenes.
-¿lo recordaste?- Roy había visto la acción de Ed, lo mismo había hecho ayer, al parecer el llevarse las manos a la cabeza era señal de que comenzaba a recordar algo.
Ed asintió. -¿y bien?, ¿estás de acuerdo en continuar con nuestra relación?-
¿Que si estaba de acuerdo?, estaba confuso, como podía contestarle algo a si a Roy.
-perfecto, entonces no se hará tan complicado el vivir juntos.
¿Cuándo había dicho que si?, eso era mala señal, su cuerpo actuaba por si solo, pero ya no había marcha atrás, tenía que seguir con las preguntas. Al menos pudo sacarle algo a Roy, ahora lo que quería saber era la causa de su hospitalización, ya tenía más confianza por parte del pelinegro, así que no había problema.